COMPETENCIA. LEY DE LEALTAD COMERCIAL. INF. LEY 22.802. INCOMPETENCIA FEDERAL. EL CASO: recurso de apelación interpuesto contra Disposición de la Dirección Provincial de Comercio de la Provincia de Buenos Aires, que impuso al articulante multa por haber infringido lo establecido en el Artículo 14° de la Resolución Nacional n° 7/02 de la Secretaría de la Competencia, la Desregulación y la Defensa del Consumidor, reglamentaria de la Ley Nacional 22.802, artículo 12, inciso “i”.El Tribunal declaro la incompetencia del fuero federal y devolucion de actuaciones a la dependencia de origen. “propongo al Acuerdo: DECLARAR LA INCOMPETENCIA de este fuero federal para entender en las presentes actuaciones y DEVOLVERLAS a la dependencia de origen para que canalice la impugnación deducida de acuerdo a las normas que regulan la competencia de los tribunales locales.”(del voto del Dr. PACILIO con adhesión del Dr. NOGUEIRA) “Las razones expuestas en los puntos precedentes, me persuaden de que la competencia atribuida por el Congreso a esta Cámara Federal de Apelaciones, al sancionar el art. 22 de la ley 22.802, en la redacción que le confirió el art. 35 de la ley 26.361, no puede ser objetada y que corresponde decidir el recurso interpuesto.”(del voto en DISIDENCIA del Dr. VALLEFÌN). Poder Judicial de la Nación La Plata, 10 de octubre de 2013. AUTOS Y VISTOS: Este expediente n° 262/2013 “Ou Yangbo - Acta nro. 17721, 16591, 17281 - La Plata - Infracción 22802”; Y CONSIDERANDO: El juez Pacilio dijo: 1. Que llegan estas actuaciones a estudio del Tribunal en virtud del recurso de apelación interpuesto por Ou Yangbo a fs. 12 contra la Disposición n° 1982 de la Dirección Provincial de Comercio de la Provincia de Buenos Aires, obrante a fs. 7/9, a través de la cual se le impuso al nombrado la multa de dos mil pesos ($ 2.000) por haber infringido lo establecido en el Artículo 14° de la Resolución Nacional n° 7/02 de la Secretaría de la Competencia, la Desregulación y la Defensa del Consumidor, reglamentaria de la Ley Nacional 22.802, artículo 12, inciso “i”. 2. Liminarmente, cabe recordar que la incompetencia de la justicia federal puede y debe ser declarada –aun de oficio- en cualquier estado de la causa (cfr. Fallos 210:802, 227:352, 312:1625 y 315:157, entre otros), pauta que, a su vez, se vincula con la reiterada jurisprudencia “que establece que la justicia federal es un fuero de excepción y no dándose causal específica que lo haga surgir en el caso, su conocimiento corresponde a la jurisdicción local (Fallos 296:432)” (in re “Espejo, José Miguel c/ Caja de Seguros de Vida S.A. s/ sumario” sentencia del 10 de abril de 2001, E.183.XXXVI.REX, entre otras). Sobre esa base, debe traerse a colación el pronunciamiento al que arribó la Corte Suprema de Justicia de la Nación in re “D.C.I. c/ Libertad S.A. s/ presunta infracción a la ley 24.240 de defensa del consumidor” donde se expidió con respecto a los Tribunales que deben intervenir en los recursos presentados contra las sanciones administrativas impuestas por las autoridades nacionales y provinciales frente a la verificación de incumplimientos a la ley de Lealtad Comercial –Ley 22.802- y sus normas reglamentarias (cfr. Competencia n° 592. XLVII., fallo del 6 de diciembre de 2011). El caso de referencia había llegado a instancia judicial con el fin de obtener la revocatoria de una sanción impuesta por la Dirección de Comercio Interior de la provincia de Misiones frente a una infracción a dicha ley, y luego de suscitarse una contienda negativa de competencia entre la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de Posadas y la Cámara Federal de Apelaciones de dicha dicha ciudad, el Máximo Tribunal, con remisión a lo dictaminado por la Procuración General, declaró que era competente para conocer en las actuaciones la justicia provincial. En los fundamentos de su dictamen, la representante del Ministerio Público Fiscal comenzó señalando que al caso que se debatía eran aplicables los criterios surgentes de Fallos 324:4349 “Flores Automotores”, explicando, luego, lo siguiente: “(…) la ley 22.802 de Lealtad Comercial fue sancionada por el Congreso de la Nación, dentro de las facultades que otorga el art. 75 inc. 12) de la Constitución Nacional y, según se desprende de los antecedentes parlamentarios, tuvo por fin proteger a la parte más débil en las relaciones comerciales –los consumidores- y, a su vez, establecer normas de procedimiento para el juzgamiento de las presuntas infracciones a la ley y delegar en las autoridades locales el control, vigilancia y juzgamiento de las mismas. En consecuencia, estimo que dicha norma integra el derecho común, toda vez que resulta complementaria de los preceptos contenidos en los códigos Civil y de Comercio, por lo que, tal como lo establece el art. 75 inc. 12 ‘…no altera las jurisdicciones locales, correspondiendo su aplicación a los tribunales federales o provinciales, según los casos o las personas cayeran bajo sus respecivas jurisdicciones…’”. “En virtud de ello la mencionada ley prevé que la Secretaría de Comercio o el organismo que en lo sucesivo pudiera reemplazarla en materia de Comercio Interior será la autoridad nacional de aplicación (art. 11 y 12), pero también tienen ese carácter los gobiernos provinciales (art. 13) los que ejercerán el control y vigilancia sobre el cumplimiento de aquella ley y sus normas reglamentarias con respecto a los hechos contenidos en su jurisdicción y que afecten exclusivamente al comercio local (art. citado en último término)”. “Por lo expuesto, las sanciones administrativas impuestas por la autoridad nacional de aplicación serán apelables ante la Cámara Nacional de Apelaciones en Contencioso Administrativo Federal de la Capital o ante las Cámaras Federales de apelaciones con asiento en las provincias, según corresponda de acuerdo al lugar de comisión del hecho (conf. art. 22 de la ley 22.802, texto sustituido por el art. 35 de la ley 26.361), mientras las sanciones administrativas que emanen de las autoridades provinciales deberán ser recurridas ante la justicia provincial” (el subrayado no pertenece al original). Entendiendo, por tanto “(…) que la Provincia de Misiones se excedió en sus facultades cuando dispuso, en el art. 7° de la ley III 6, que las sanciones administrativas definitivas impuestas por la autoridad local serán apelables ante la Cámara Federal de Apelaciones en razón del lugar de asiento de la autoridad que dictó la condena, puesto que una ley provincial no puede ampliar ni restringir la competencia del fuero federal sin violar lo dispuesto por los arts. 116 y 117 de la Constitución Nacional”. 3. Por otra parte, debe recordarse que lo resuelto por la Corte Suprema de Justicia de la Nación en toda cuestión regida por la Constitución Nacional o las normas federales, debe inspirar decisivamente los pronunciamientos del resto de los tribunales. En otros términos, razones fundadas en la previsibilidad, estabilidad y orden aconsejan la adhesión a sus precedentes. Al respecto, el Alto Tribunal ha señalado in re “Cerámica San Lorenzo” que “no obstante que la Corte Suprema sólo decide en los procesos concretos que le son sometidos, y su fallo no resulta obligatorio para casos análogos, los jueces inferiores tienen el deber de conformar sus decisiones a aquéllas (confr. doc. De Fallos 25:364). De esta doctrina y de la de Fallos: 212:51 y 160, emana la consecuencia de que carecen de fundamento las sentencias de los tribunales inferiores que se apartan de los precedentes de la Corte sin aportar nuevos argumentos que justifiquen modificar la posición sentada por el Tribunal, en su carácter de intérprete supremo de la Constitución Nacional y de las leyes dictadas en consecuencia (confr. causa ‘Balbuena, César Aníbal s/extorsión’ resuelta el 17 de noviembre 1981)” (Fallos 307:1094 y, también, de Néstor Pedro Sagües “Derecho procesal constitucional. Recurso extraordinario”, 2° edición, Buenos Aires, Astrea, 1989, tomo I, p. 177 y siguientes). 4. Sin perjuicio del tratamiento que esta Sala ha dado en otras ocasiones a cuestiones planteadas en la materia, de los lineamientos que emanan de los pronunciamientos de referencia y teniendo en cuenta que fue la autoridad administrativa provincial –Dirección Provincial de Comercio de la Provincia de Buenos Aires, dependiente del Ministerio de la Producción- quien aplicó la multa impugnada en autos, se impone un cambio de criterio en orden a la competencia del fuero federal en este tipo de causas, el que, por otra parte, es el que vienen aplicando otras Cámaras Federales de nuestro país (ver de la Cámara Federal de Bahía Blanca, causas n° 67.856 “Préstamo S.A. s/ apela resol. Mrio. de la Producción prov. de La Pampa (ley 24.240: 4 y ley 22802: 9)” resolución del 25/06/2013 y n° 67.405 “Transporte Automotor Plaza Sacei s/ apel. Multa ley 22.802: 9 bis y cc.” resolución del 13/11/2012; de la Cámara Federal de San Miguel de Tucumán, causa n° 51.639/2008 “Jumbo Retail Argentina S.A. s/ infracción a la ley 22.802” resolución del 22/10/2012; de la Cámara Federal de Paraná, autos “AMX Argentina S.A. c/ Dirección General de Defensa del Consumidor y Lealtad Comercial de la provincia de Entre Ríos s/ recurso directo ley 24.240” L. de E. n° 81023405/2012/CA1, registro 2013 - T°I-F°2605 del 18/06/2013; y de la Cámara Federal de General Roca, causas n° 086/08 “Líder Automotores S.A. s/ recurso de apelación – Dirección de Comercio Interior de la Pcia. de Río Negro” registro n° 158/08 PSI del 25/06/2008, n 085/08 “Centro Automotores S.A. s/ recurso de apelación – Dirección de Comercio Interior de la Pcia. de Río Negro” registro 159/08 PSI de la misma fecha y n° 199/08 “Somer S.R.L. s/ ley 22.802” registro 259/08 del 30/09/2008, entre otras). En virtud de lo expuesto, propongo al Acuerdo: DECLARAR LA INCOMPETENCIA de este fuero federal para entender en las presentes actuaciones y DEVOLVERLAS a la dependencia de origen para que canalice la impugnación deducida de acuerdo a las normas que regulan la competencia de los tribunales locales. Así lo voto. El juez Nogueira dijo: Adhiero al voto del juez Pacilio. Así lo voto. El juez Vallefín dijo: I. Antecedentes relevantes. 1. Según surge de las constancias de la causa el Director Provincial de Comercio de la Provincia de Buenos Aires –en uso de las atribuciones conferidas por la ley 22802, los decretos provinciales 1804/83 y 1805/83 y la ley provincial 11.175 con las modificaciones introducidas por las leyes 13.757 y 13.881- resolvió “imponer a Ou Yangbo una multa de pesos dos mil ($2.000) por haber infringido lo dispuesto en el art. 14 de la Resolución Nacional 7/02 SCD y DC reglamentaria de la ley nacional 22.802 (art. 12 inciso i) de acuerdo a lo prescripto en el artículo 18 de la ley nacional 22.802” (fs. 7/9). 2. Contra esta resolución el interesado dedujo recurso de apelación. Con invocación del art. 35 de la ley 26.361, el funcionario citado concedió ante esta Cámara Federal el recurso interpuesto y que ahora motiva la intervención del Tribunal. II. La competencia federal en la materia. 1. El voto precedente propicia “declarar la incompetencia de este fuero federal para entender en las presentes actuaciones y devolverlas a la dependencia de origen para que canalice la impugnación deducida de acuerdo a las normas que regulan la competencia de los tribunales locales”. En concreto afirmó que “sin perjuicio del tratamiento que esta Sala ha dado en otras ocasiones a cuestiones planteadas en la materia, de los lineamientos que emanan de los pronunciamientos de referencia y teniendo en cuenta que fue la autoridad administrativa provincial –Dirección Provincial de Comercio de la Provincia de Buenos Aires, dependiente del Ministerio de la Producción- quien aplicó la multa impugnada en autos, se impone un cambio de criterio en orden a la competencia del fuero federal en este tipo de causas”. 2. Concuerdo, por cierto, con las afirmaciones que formula en cuanto a la oportunidad del planteo de la cuestión de competencia. En efecto, con arreglo a una consolidada jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación la incompetencia de la justicia federal puede y debe ser declarada, aún de oficio, en cualquier estado de la causa (art. 352, segundo párrafo del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación; “Fallos” 324:1173). Pero disiento de la conclusión que alcanza en el caso. 3. El Congreso de la Nación le ha atribuido competencia a este Tribunal al sancionar el art. 22 de la ley 22.802, que en la redacción que le confirió el art. 35 de la ley 26.361, dice así: “Toda resolución condenatoria podrá ser recurrida solamente por vía de apelación ante la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal o ante las cámaras federales de apelaciones competentes, según el asiento de la autoridad que dictó la condena. El recurso deberá interponerse y fundarse ante la misma autoridad que impuso la sanción, dentro de los 10 (diez) días hábiles de notificada la resolución, y será concedido en relación y con efecto suspensivo excepto cuando se hubieren denegado medidas de prueba, en que será concedido libremente” (énfasis añadido). De aquí se sigue que, inhibirse de entender en la causa supone prescindir del texto claro de la ley que le atribuye a esta Cámara competencia para revisar la legitimidad de las sanciones aplicadas. 4. La intervención del órgano provincial en la aplicación de la ley 22.802 tiene fundamento en las propias previsiones de ésta. En efecto, el artículo 13 dice así: “Los gobiernos provinciales y la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires actuarán como autoridades locales de aplicación ejerciendo el control y vigilancia sobre el cumplimiento de la presente ley y sus normas reglamentarias, con respecto a los hechos cometidos en su jurisdicción y que afecten exclusivamente al comercio local, juzgando las presuntas infracciones. A ese fin determinarán los organismos que cumplirán tales funciones, pudiendo los gobiernos provinciales delegar sus atribuciones en los gobiernos municipales, excepto la de juzgamiento que sólo será delegable en el caso de exhibición de precios previsto en el inciso i) del artículo 12”. Es decir, la ley dispone que las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, serán –en los asuntos que sólo afecten al comercio local- las autoridades de aplicación, confiriéndoles facultades de control, vigilancia y juzgamiento. La norma, sin embargo, introduce una limitación: si la cuestión supera lo que en la formulación elástica de la disposición examinada es un asunto exclusivamente local, la competencia será de la autoridad nacional. Expresado, en términos más concretos, habrá competencia local y federal según los casos. Pero cuando en el capítulo VI de la ley 22.802 se consagran los recursos, no formula ninguna distinción, unificando la revisión judicial y confiándola a los tribunales federales. Tan es así que le atribuye el control de “toda resolución condenatoria”. 5. Formularé, finalmente, dos consideraciones. La primera se vincula con las virtudes o defectos del régimen normativo vigente. La ventaja, acierto o desacierto de la competencia asignada a las cámaras federales de apelación escapa al control de constitucionalidad, pues la conveniencia del criterio elegido por el legislador no está sujeta a revisión judicial, salvo que sea arbitrario o irrazonable, situación que no se configura en la causa pues, en todo caso, el punto resulta opinable. La segunda, es que esta Sala viene aplicando para juzgar la razonabilidad de las sanciones aplicadas por los organismos provinciales, el criterio que emana del precedente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación registrado en “Fallos” 329:2539, “Disco S.A.”. En dicho caso, la situación fáctica, las normas aplicables y el órgano del que derivó la sanción, son sustancialmente análogos al presente. Y la Corte Suprema, sin observaciones en cuanto a la competencia federal, se pronunció en cuanto al fondo del asunto. III. Conclusión. Las razones expuestas en los puntos precedentes, me persuaden de que la competencia atribuida por el Congreso a esta Cámara Federal de Apelaciones, al sancionar el art. 22 de la ley 22.802, en la redacción que le confirió el art. 35 de la ley 26.361, no puede ser objetada y que corresponde decidir el recurso interpuesto. Así lo voto. Por ello, por mayoría, se RESUELVE: DECLARAR LA INCOMPETENCIA de este fuero federal para entender en las presentes actuaciones y DEVOLVERLAS a la dependencia de origen para que canalice la impugnación deducida de acuerdo a las normas que regulan la competencia de los tribunales locales. Regístrese y notifíquese y devuèlvaseFdo.Jueces Sala III Dres.Antonio Pacilio.Carlos Alberto Vallefín y Carlos Alberto Nogueira.