13 de septiembre de 2005 VISTO: La actuación nº 8449/03, iniciada por la señora Mariana López, quien denuncia que en el Parque Deportivo “Martín Fierro”, dependiente de la Dirección General de Deportes del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, se cobra una suma de dinero por el uso del natatorio. Y CONSIDERANDO QUE: Manifiesta la señora Mariana López que en el Parque Deportivo “Martín Fierro”, dependiente de la Dirección General de Deportes del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, se le exigía la suma de $12.- mensuales por el uso del natatorio. Denuncia, asimismo, que el profesor que dictaba las clases de natación le indicaba actividades sólo a algunos de los concurrentes y no les dirigía explicación alguna a ella y a otras personas. En respuesta a un requerimiento de informes que le fuera oportunamente cursado al Director General de Deportes, el Administrador a cargo del Parque Deportivo “Martín Fierro” informó que la presentante no se encontraba registrada en el listado de alumnos del Plan de Natación y, por lo tanto, solicitó que se indicaran los días y horarios en los que concurría al natatorio. Cabe aclarar que la señora Mariana López dejó de concurrir al Parque Deportivo por estar disconforme con las clases de natación que allí se dictan así como también por la exigencia del pago mensual de una suma de dinero. Sin embargo, solicitó que se continuara con el trámite de la actuación por ella iniciada. A tal efecto, indicó que cuando todavía concurría lo hacía los días miércoles y viernes de 11 a 11:50 horas. Así, esta Defensoría del Pueblo volvió a solicitar información al Director General de Deportes, informando el Administrador a cargo del Parque Deportivo “Martín Fierro” (C. Reg. nº 2902-MGEYA-2004) que “...En el caso del Programa de Enseñanza de Natación, cuya organización, inscripción y desarrollo económico está a 1 cargo de la Asociación Cooperadora de este Parque Deportivo, la situación es diferente, dado que el sueldo de los contratos del personal docente que realiza la enseñanza de natación y el de un guardavidas (que son pagados por la Asoc. Cooperadora), y el costo de gran parte de los elementos químicos que se compran para el correcto funcionamiento del natatorio, tiene que ser financiados por los inscriptos a dicho Plan de Natación, a través de la Asociación Cooperadora. Se deja constancia que dicho Plan contaba con la autorización del Director General de Deportes...” y que “...d) Las clases de natación tenían un costo durante el año 2003 de $1,25 por clase, suma que la Asociación Cooperadora estaba autorizada a cobrar para el desarrollo del Plan de Natación, de acuerdo a la autorización otorgada por la Dirección General de Deportes al ser solicitado el permiso correspondiente...” (fs. 18/19). En atención a lo expuesto, el día 19 de mayo de 2004 esta Defensoría del Pueblo solicitó a la Dirección General de Deportes mediante oficio, copia del acto administrativo que autorizaba a la Asociación Cooperadora del Parque Deportivo “Martín Fierro” a arancelar las clases de natación que allí se dictaran en el marco del Programa de Enseñanza de Natación. Dicho pedido de informes, dirigido al señor Director General de Deportes, fue girado al Administrador a cargo del Parque Deportivo “Martín Fierro” quien, en respuesta, informó que “...esta dependencia registra la salida de la Nota Nº 8.006-DGD-03, en la cual se solicitaba la autorización de la realización del Plan de Natación 2.003...” y que “...Con respecto a la manifestación de que el Plan 2.003 estaba autorizado por la Dirección Gral. de Deportes, dicha apreciación surge del hecho de que el Plan de referencia se desarrolló durante todo el año sin haber puesto en conocimiento del suscripto observaciones u obstáculos, por parte de la Superioridad para la implementación del mismo...”. En atención a la contradictoria e imprecisa información brindada por el Administrador a cargo del Parque Deportivo “Martín Fierro” se cursó un nuevo oficio a la Dirección General de Deportes a fin que se informara a esta Defensoría del Pueblo si el Plan de Natación 2003 se encontraba o no autorizado por la Dirección General de Deportes y si la Asociación Cooperadora del Parque Deportivo “Martín Fierro” se encontraba autorizada a arancelar las clases de natación que allí se dictaran en el marco del Plan de Natación 2003. Para el caso de que la mencionada Asociación Cooperadora se encontrara autorizada, se solicitó la remisión de la copia del acto administrativo por el cual se otorgara dicha autorización, del acto administrativo por el cual se autorizó la emisión de los bonos contribución con determinado monto y un informe sobre la recaudación generada por la venta de los bonos en cuestión. El señor Daniel Bravo, Director General de Deportes, en respuesta, informó (Nota nº 1642-DGD-04 del día 26 de 2 agosto de 2004) que: “...por nota Nº 8.006-DGD-03 tramitó la solicitud efectuada por la Asociación Cooperadora del Parque Deportivo “Martín Fierro” a fin de requerir la aprobación del Plan de natación correspondiente al año 2003...” y que “...las actuaciones de marras se encuentran desde el 6-03-2003 bajo informe Nº 351 DGD-03, en la Dirección General Técnica, Administrativa y legal de la ex Secretaría de Medio Ambiente y Planeamiento Urbano, actualmente Secretaría de Producción, Turismo y Desarrollo Sustentable...” (fs. 39/40). En atención a lo expuesto y dado que la Comisión Fiscalizadora y Supervisora de las Cooperadoras de los Polideportivos funciona bajo la órbita de la Dirección General de Coordinación Técnica, Administrativa y Legal de la Secretaría de Producción, Turismo y Desarrollo Sustentable, por oficio fechado el día 3 de septiembre de 2004, se solicitó a la doctora Olga S. Cáceres, a cargo de dicha dependencia, que informara a esta Defensoría del Pueblo si el Plan de Natación 2003 fue o no autorizado y si la Asociación Cooperadora del Parque Deportivo “Martín Fierro” fue autorizada a arancelar las clases de natación que allí se dictaran en el marco del Plan de Natación 2003. En respuesta, se remitió un informe elaborado por el Presidente de la Asociación Cooperadora del Parque Deportivo “Martín Fierro” relativo al Plan de Natación 2004. Nada se contestó respecto de los puntos contenidos en el requerimiento de informes que fuera oportunamente cursado. En atención a lo expuesto, por oficio fechado el día 22 de noviembre de 2004 se solicitó a la Dirección General de Coordinación Técnica, Administrativa y Legal de la Secretaría de Producción, Turismo y Desarrollo Sustentable que dispusiera lo necesario para que se diera adecuada respuesta al mismo. Al día de la fecha no se ha recibido respuesta alguna de la instancia requerida, pese a encontrarse vencido el plazo que se fijara al efecto. Corresponde, en consecuencia, que esta Defensoría del Pueblo se expida sobre la cuestión planteada en la presente actuación sobre la base de los elementos colectados durante el trámite de la misma atento el silencio en que incurriera la administración. Se ha constatado en la investigación practicada, la existencia de un arancel para las clases de natación que se dictaran en el marco del Plan de Natación 2003. En efecto, las autoridades de la Dirección General de Deportes han admitido el cobro a los usuarios de bonos, pero no informaron si los mismos fueron o no autorizados por alguna norma. Exactamente lo contrario afirmó el señor Administrador a cargo del Parque Deportivo “Martín Fierro” cuando dijo que el Plan de Natación 2003 “...contaba con la autorización del Director General de Deportes...” y cuando indicó que “...la Asociación Cooperadora estaba autorizada a cobrar para el 3 desarrollo del Plan de Natación, de acuerdo a la autorización otorgada por la Dirección General de Deportes al ser solicitado el permiso correspondiente...” (fs. 18/19). Esta Defensoría del Pueblo no pudo constatar si, efectivamente, el Plan de Natación 2003 fue autorizado o no por la Dirección General de Deportes. Tampoco se pudo constatar si la Asociación Cooperadora del Parque Deportivo “Martín Fierro” se encontraba autorizada a arancelar las clases de natación que allí se dictaran en el marco de dicho Plan de Natación 2003 y, menos aún, si fue debidamente fiscalizada la recaudación generada por la venta de los bonos en cuestión. La Dirección General de Deportes se limitó a trasladar los requerimientos de informes que esta Defensoría del Pueblo le cursara al Parque Deportivo “Martín Fierro” y cuando expresamente se le requirió que se expidiera sobre el particular, no pudo afirmar si el Plan de Natación 2003 fue o no autorizado y sólo se limitó a informar, en el mes de agosto de 2004, que la solicitud de autorización efectuada por la Asociación Cooperadora había sido girada a la Dirección General Técnica, Administrativa y Legal de la ex Secretaría de Medio Ambiente y Planeamiento Urbano, actualmente Secretaría de Producción, Turismo y Desarrollo Sustentable. Por su parte, la Dirección General de Coordinación Técnica, Administrativa y Legal de la Secretaría de Producción, Turismo y Desarrollo Sustentable nada contestó respecto de los puntos contenidos en el requerimiento de informes que fuera oportunamente cursado, pese a la reiteración que se cursara. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el marco normativo que regula la creación y funcionamiento de las asociaciones cooperadoras de establecimientos municipales fue establecido por la Ordenanza nº 35.514 (B.M. nº 16.208, publ. 06/02/1980) y sus modificatorias. Del análisis de la ordenanza, puede observarse que, en líneas generales, se reconocen los principales criterios sobre los que se estructuran la mayoría de las organizaciones no gubernamentales. Así, se fijan ciertos requisitos formales para su constitución y reconocimiento oficial como persona jurídica; se establece la necesidad de aprobar un Estatuto organizativo que rija la vida interna de la asociación, y en el cual conste su objeto social, un conjunto de derechos y obligaciones, tanto para la entidad como para los miembros que la componen; una organización interna democrática; mecanismos de administración, contabilidad y fiscalización; y por último, medidas de contralor, supervisión y/o fiscalización. Uno de los aspectos más importantes en el funcionamiento de cualquier entidad sin fines de lucro está dado por los mecanismos de control y fiscalización respecto a la marcha y desenvolvimiento de la entidad y a los gastos y operaciones que 4 realiza. El manejo de fondos y recursos que están destinados a tareas de bien público merece una adecuada supervisión a fin de evitar la desviación de los objetivos fijados y el indebido aprovechamiento de quienes pueden disponer de ellos. La normativa en análisis no le impone a las cooperadoras la creación de un órgano de fiscalización propio o interno, sino que descarga tal responsabilidad en el Departamento Ejecutivo1. No debe perderse de vista que las asociaciones cooperadoras fueron concebidas como agrupaciones voluntarias de vecinos que se organizan para prestar colaboración a determinados organismos públicos que tienen a su cargo la prestación de servicios básicos para la población, con el objeto de coadyuvar al mejor funcionamiento de los mismos y a una mejor calidad de los servicios que se brindan a la comunidad. En consecuencia, resulta imperioso instar a los organismos competentes para que adopten las medidas dirigidas a erradicar prácticas como la detectada, así como sancionar a quienes resulten responsables de tales irregularidades. POR TODO ELLO: LA DEFENSORIA DEL PUEBLO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES RESUELVE: 1) Recomendar al señor Director General de Deportes que emita las directivas pertinentes y efectúe controles periódicos a fin de evitar que se arancelen ilegalmente las actividades programadas bajo la órbita de Ordenanza nº 35.514. Art. 21º.- “Corresponde al Departamento Ejecutivo con relación a las Asociaciones Cooperadoras a que se refiere esta ordenanza: a) Aprobar el contrato constitutivo y otorgarles reconocimiento oficial; b) Fiscalizar permanentemente su funcionamiento, disolución y liquidación; c) Dictar normas sobre administración, fiscalización, documentación y contabilidad y régimen de contrataciones a que deberán ajustarse las entidades”. Art. 22.- “En el ejercicio de sus atribuciones el Departamento Ejecutivo está facultado por sí o por intermedio de los organismos correspondientes del área de cada Secretaría para: a) Requerir de las Asociaciones la documentación que estime necesaria para el ejercicio de las funciones de fiscalización que le atribuye esta ordenanza. b) Realizar investigaciones e inspecciones en los entes a que se refiere el artículo anterior, a cuyo efecto podrá examinar sus libros y documentos, pedir informaciones a sus autoridades, sus responsables, su personal y a terceros; c) Asistir a las Asambleas y reuniones de la Comisión directiva de las asociaciones; d) Convocar a Asamblea cuando lo soliciten diez asociados, si los estatutos no requiriesen una representación menor y la Comisión Directiva no hubiese resuelto su pedido dentro de los diez días de presentado o lo hubiere negado infundadamente a juicio de la autoridad municipal. Convocar de oficio las asambleas cuando constatare irregularidades graves y estimare la medida imprescindible en resguardo del interés público; e) Impedir el funcionamiento de las asociaciones a que se refiere esta ordenanza, que desarrollen sus actividades sin sujetarse a los requisitos establecidos en ella o disposiciones complementarias, disponiendo en su caso la revocación del reconocimiento oficial; f) Formular denuncias ante las autoridades judiciales, administrativas y policiales, cuando las mismas puedan dar al ejercicio de la acción pública; g) Declarar irregulares e ineficaces a los efectos administrativos y dentro de lo que es de su competencia, los actos sometidos a su fiscalización, cuando sean contrarios a esta ordenanza, al estatuto o disposiciones complementarias; h) Intervenir las asociaciones cuando comprobare actos u omisiones graves que las pongan en peligro o que importen violaciones a esta ordenanza, al estatuto o disposiciones complementarias, o la medida resultare necesaria para protección del interés público; i) Podrá disponer la disolución y liquidación de las asociaciones en los casos de cumplimiento de la condición a que se subordinó su existencia o de consecución del objeto para el cual se formó o imposibilidad de lograrlo, cuando las graves irregularidades comprobadas no fueren subsanables; j) Considerar su acción con la Inspección General de Personas Jurídicas, con relación a aquellas asociaciones constituidas en el carácter de persona jurídica”. 1 5 su repartición y para que el Parque Deportivo “Martín Fierro” brinde sus instalaciones a la comunidad en forma gratuita. 2) Recomendar al señor Secretario de Producción, Turismo y Desarrollo Sustentable arbitre las medidas adecuadas para instruir al organismo de control dependiente de su área a realizar una auditoría general de la asociación cooperadora que funciona en el Parque Deportivo “Martín Fierro”, en cumplimiento de las facultades de control, fiscalización y supervisión que le otorgan las normas vigentes, informando a esta Defensoría del Pueblo las acciones encaradas. 3) Recomendar a la señora Procuradora General de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires evalúe la factibilidad de instruir un sumario administrativo a los efectos de deslindar o atribuir responsabilidades en razón de las irregularidades constatadas. 4) Fijar en 30 días el plazo previsto en el art. 36 de la Ley nº 3 de la Ciudad de Buenos Aires.2 5) Notificar, registrar, reservar en el Area para su seguimiento y oportunamente, archivar. Código 403 sb/CC gv/D/LDS RESOLUCION Nº 2879/05 2 Ley nº 3, art. 36º: Con motivo de sus investigaciones, el Defensor o Defensora del Pueblo puede formular advertencias, recomendaciones, recordatorios de los deberes de los funcionarios, y propuestas para la adopción de nuevas medidas. Las recomendaciones no son vinculantes, pero si dentro del plazo fijado la autoridad administrativa afectada no produce una medida adecuada, o no informa de las razones que estime para no adoptarla, el Defensor o Defensora del Pueblo puede poner en conocimiento del ministro o secretario del área, o de la máxima autoridad de la entidad involucrada, los antecedentes del asunto y las recomendaciones propuestas. Si tampoco así obtiene una justificación adecuada, debe incluir tal asunto en su informe anual o especial a la Legislatura, con mención de los nombres de las autoridades o funcionarios que hayan adoptado tal actitud. 6