HISTORIA JAIME I EN LAS CORTES DE CATALUNA. MINIATURA DE LAS CONSTlTUClONS DE CATALUNYA SOLO EN 1960 U N GRUPO DE JURISTAS CONSIGUIÓ LA PROMULGACIÓN DE LA u C ~ DEL DERECHO ~ ~ ~ CIVIL DE CATALUÑA" EN LA QUE SE RECOGEN LAS INSTITUCIONES JURÍDICAS CATALANAS. HOY,SIN LEGISLA CON NORMALIDAD Y EMBARGO, EL PARLAMENTO SE INCORPORAN NUEVAS LEYES PARA ACTUALIZAR EL DERECHO CATALÁN Y, ASÍ, PODER MANTENER SU VIGENCIA. JOSEP M. MAS I SOLENCH A B O G A D O ~ ~ ~ ~ HISTORIA PALACIO DE JUSTICIA. BARCELONA os elementos básicos constituyen la personalidad de Cataluña: la lengua y el derecho. Una y otra han desarrollado un pensamiento y un modo de ser propios de la comunidad catalana. La lengua es el signo diferenciador más evidente, porque se manifiesta en la comunicación del pueblo. El derecho, por su lado, los distingue por la forma de regir su conducta. El derecho catalán sigue la evolución histórica de la vida política de Cataluña y las etapas de su porvenir caminan en paralelo. Así, la época de esplendor de nuestra historia coincide con la mayor pujanza del derecho, del mismo modo que ambos comparten los períodos de decadencia. Cataluña cuenta ya con mil años de existencia histórica diferenciada. Los diversos condados que un día constituyeron la marca hispánica, creada bajo el impulso carolingio, fueron liberándose de la soberanía francesa y se aglutinaron al amparo de la hegemonía del conde de Barcelona. El derecho visigodo que regía el país antes de la invasión sarracena pervivió en las tierras reconquistadas y su vigencia proseguiría aún durante siglos. Los preceptos de los re- yes francos para regular la condición de los hispanos constituyen las primeras manifestaciones del derecho público. Pronto, la reunión de nobles, jerarcas eclesiásticos y jueces destacados en torno a la figura del conde se transformó en el primer núcleo de corte condal, con la finalidad de colaborar en las tareas de gobierno y en la administración de justicia. Es el antecedente de las futuras cortes catalanas. El derecho visigodo, poco a poco, perdía su vigencia mientras iban surgiendo nuevas costumbres, leyes y constituciones por exigencia de las necesidades que imponían los tiempos, y hacia la mitad del siglo XII eran recogidas en una compilación conocida como "Usatges de Barcelona". Esta compilación fue completada, más tarde, con preceptos de Alfonso 1 el Casto, Pedro 1 el Católico y Jaime 1 el Conquistador. En el siglo XIII, con un conjunto de 174 capítulos, pasaba a constituir un cuerpo legislativo considerado, modernamente, como "el elemento primordial y básico del Derecho de los catalanes". Al mismo tiempo se introducía en Cataluña el llamado Dret comú (derecho común) es decir, el derecho romano- canónico-feudal de la recepción, derivado de la escuela de Bolonia. Además, surgían nuevas colecciones jurídicas como las "Costums de Catalunya" y las "Commemoracions" de Pere Albert, que fueron sancionadas en las Cortes celebradas en Monzón, en 1470, y pasaron a formar parte de las "Constitucions de Catalunya". Otras compilaciones barcelonesas fueron el "Recognoverunt proceres", que reúne normas civiles, mercantiles y procesales de carácter consuetudinario, y las "Ordinacions de Santacilia", que contienen disposiciones sobre servidumbres. Ambos se incorporaron también a las compilaciones oficiales. Nuestras cortes, que se distinguían por sus particularidades de las instituciones similares de su tiempo, llegaban a su plenitud en los siglos XIII y XIV. No sólo eran un órgano político sino, principalmente, un órgano legislativo, compartido con el rey y basado en el pactismo, una de las características del ordenamiento legal y político de Cataluña, que los tratadistas estudiaron más tarde y que Lluís de Peguera, en 1609, explica: "En Cataluña el rey no puede legislar por sí mismo; el rey y el HISTORIA PALACIO DE pueblo legislan conjuntamente y las leyes obligan tanto al rey como los demás". Las cortes estaban formadas por la representación de los tres brazos: el eclesiástico, el militar y el popular. En las que se celebraron en Barcelona, Vilafranca y Cervera, los años 13 58 y 13 59, en tiempos de Pedro 111 el Ceremonioso, nació una institución, de carácter fiscal primero pero que, \con el tiempo, adquiriría competencias políticas y, con el nombre de Generalitat, se convertiría en el primer organismo de gobierno de Cataluña. En la época de la expansión catalana por el Mediterráneo, de los siglos XII al XV, el derecho de Cataluña se introduce también en Valencia, Mallorca, Cerdeña, Sicilia e, incluso, en los ducados de Grecia. En aquel tiempo, unos núcleos de costumbres de hombres de mar de la Ribera barcelonesa son el inicio del "Llibre del Consolat de Mar", que recoge los usos y normas marítimas y mercantiles del Mediterráneo. Este Libro constituye la fuente más importante del derecho marítimo moderno y fue traducido a diversas lenguas. Su vigencia perduró ICIA. hasta la promulgación del Código de Comercio de 1824. De todos modos, con Martín 1 el Humano desaparece el último soberano de la Casa Condal catalana. Su sucesor fue elegido en una reunión de compromisarios que tuvo lugar en Caspe y de la que salió designado Fernando 1 de Antequera, que inició el reinado de la dinastía Trastámara. Durante el gobierno de este rey "por pactos elegido", se manifestó la necesidad de reunir el derecho catalán, disperso en diversos ordenamientos, en un sólo cuerpo legal. Así, de la tarea de los principales juristas de la época, surgen las "Constitucions de Catalunya" que, traducidas al catalán, se publican por primera vez en 1495. Después, para ponerlas al día, se ordenaron otras compilaciones en los años 1588-1589 y 1702, que fueron publicadas con el nombre de "Constitucions i altres drets de Catalunya ". Desgraciadamente, poco después de la compilación de 1702, el pleito sucesorio provocado a la muerte del rey Carlos 11, último de la casa de Austria, desembocó en la guerra de Sucesión en la que Cataluña, derrotada, perdió su autonomía y el llamado "Decreto de Nueva Planta" suprimió el derecho público aunque dejó subsistir el derecho privado. La lengua catalana sería apartada de la administración de justicia al disponer que las causas "se substanciarb en lengua castellana". El derecho catalán, por lo tanto, como la propia lengua de Cataluña, pasaría por etapas de decadencia y de represión, hasta el despertar de la Renaixenca. En los últimos decenios del siglo pasado comienzan a levantarse voces reivindicativas, pero s610 en 1960, pese a las adversas circunstancias, un grupo de esforzados juristas consigue la promulgación de la "Compilación del Derecho Civil de Cataluña", en la que se recogen las instituciones jurídicas catalanas consiguiendo, así, reactivar el interés por nuestro derecho. Por ello, al recuperarse la autonomía de Cataluña y, con ella, la capacidad legislativa del Parlamento de Cataluña, éste refundió y adecuó el texto de la Compilación, promulgándola nuevamente en catalán, en 1984. Actualmente, el Parlamento legisla con normalidad y nuevas leyes modifican y actualizan el derecho catalán para mantener su vigencia. M