REGIMEN ALIMENTICIO D E TYTO ALBA E N LAS PROVINCIAS D E SALAMANCA Y ZAMORA Francisco CAMPOS ,Actualmente, la gran mayoría de los trabajos publicados acerca del régimen alimenticio de la Lechuza Común en España están dirigidos a las regiones meridionales, centro y septentrión del pais, quedando una amplia franja por estudiar, correspondiente a la zona centro-oeste española. Con este trabajo se quiere dar a conocer someramente la alimentación de Tyto albd en las provincias de Salamanca y Zamora, como exponentes de la mencionada región. El material sobre el cual se ha basado este estudio está constituido exclusivamente por egagrópilas recogidas en cinco localidades de las dos provincias anteriores (mapa núm. l),cuyas características se expresan en la tabla 1. La recolección se hizo localizando posaderos y nidos, ocupados o abandonados. Estos han sido elegidos al azar, puesto que lo que se pretende no es dar una relación exhaustiva de presas o estudiar la influencia de los diversos biotopos en la composición de la dieta, sino más bien saber cuáles son las especies capturadas con mayor frecuencia y sus posibles variaciones. El número total de presas encontradas es I . W , de las cuales la gran mayoría son vertebrados. Con el fin de tener una visión más real del régimen alimenticio, se ha hallado la biomasa e n peso seco aportada por cada especie o grupo de ellas. Por último, se ha considerado. en cuanto al género P<tymys, que las dos especies presentes en la zona estudiada son P. duodecimcostatus y P . Iusita~iicas,siendo esta Última equivalente a P. nanriae, pero cuyo nombre válido, por ser el más antiguo. es frtsitanicus. 106 hRDEOLh VOL. 84, 1977 (1978) Una vez efectuado el análisis de las egagrópilas y la clasificación de los restos, los resultados obtenidos se han agrupado en l a tabla 11, Ia cual recoge Únicamente el número de individuos de ~ a d aespecie (o grupo taxonómico) capturados. A partir de ésta se ha elaborado la tabla 111, en la que se expresan los porcentajes numéricos con relación al total de presas de cada localidad. Por último, en la tabla IV quedan expuestos los porcentajes en biomasa en peso seco, también en relación al total obtenido en cada una de las localidades. Características de las cinco localiddes de recogida de egagrdpilar NPm. 1 2 8 4 6 Localidad Biotopo .. Sin Esteban (Salamanca). Robledil: prados y cultivos. La Maya (Sdnmanca). Encinar adehesado; cultivos 2 km. S do Alba de Tormes (Salamanca). Arboledas (hpulus spp.); prados y huertas.. PresnedodaSayago(Zamon) Cultivos; mnnls bajo (Cirtus sp .) 2 km. S do Toro (Zamora) .. Huerias y cullivos ..... ........... ...... .................. ........ Altura s. n. m. 4OD m. 850 m. 820 m 800 m. 660 m. Roedores A la vista de las tablas 1 y 11, se observa que lo$ roedores constituyen el grupo fundamental sobre el que se basa la alimentación de la Lechuza. En efecto, su proporción numérica varía entre un mínimo de G2,90 y un máximo de 77,39 por 100 (localidades 3 y 2, respectivamente). En el primer caso se explicará más adelante ese porcentaje un poco más bajo. Los demás están dentro de los valores obtenidos en trabajos realizados en otras partes de la Peninsula Ibérica. Sin embargo, a pesar de .que la proporción global de roedores es semejante en las cinco localidades estudiadas, no ocurre así con los porcentajes de cada -especie en particular (ver gráfico núm. l), los cuales varían no2ablemente de unos lugares a otros. mm Apcdernus spp i? lusitanicus 0 F! duodccimcostatus BBI Mus rnusculus Gr5fico 1.-Porcentaje de consumo de Roedores en las chco localidades estudiadas. h'iniero de cap«ms de Iur disti*ilas presas r n br cinco lordidodes iiiuestrcadas Localidades iIfusmnwscuius .................. P. duoderinirosfahu ............ P. lusiranicus Pitymys sp. Apoden~ussp. .................... Murinae indet. Eliomys purrrinru Rottus n o n>e g'rriu ............... Rafhrs sp. ArJicola rp. 1ILroiur cabr~roe.............. ~'qctolagusncnirulus Crocidura russula Sorex arm~eur .................. Mustela n i d k .................. 1 2 3 4 5 ----- .................. ..................... .................. 1 a 94 20 ua 18 :ji n 3 1 J 2 MI 4 MI 5 ............... C ..................... 1 ..................... 2 ............ ............... i 3 - - - - -1 1 aP 1 1 ........................... 1 29 Rana nilibunda .................. - Pelobates culfripes ............... 1 Grylloidpa grylloialpa ............ G 1 Gqllus rp. ..................... 2 1 19 Tmtbrio moll<tor ............... 1 Lucanw cenms .................. Scarabeidae indet. ............... $7 1 Tenebrionidae indet. ............ - 3 1 Ortoptera indct. ............... -----TOTAL PRESAS ............ 3jl 312 Aves 14 7 28 11 4 25 28 81 69 m ! 0. 42 8 - 1 2 - 13 18. - 10 1 - - - - 16 2 - - 1 2 i - 16 9 1 - - 82 111 292 4 - 8 Son cuatro las especies de roedores que aparecen con una f r e cuencia lo suficientemente alta como para poder decir que en ellas se basa el régimen alimenticio : Mus musculus, P. duodecimcostatus, P. Iusitonicw y Apodemus sp. En cuanto a la primera, hay una gran diferencia entre las localidades 1 y 4, por un lado. y las 2, 3 y 5, por otro. Fijándonos en el biotopo que rodea a estos lugares de recogida de egagrópilas, el número 2 es campo abierto, sin construcciones humanas cercanas, mientras que l a muestra número 1 se recogió en una casa semiabandonada. Por otra parte, es sabida la preferencia de M. mwcnlils hacia aquellos lugares habitados y construidos por el hombre. No puede deberse, por tanto, sólo a esta causa la diferencia tan grande observada en estos dos sitios. Además, en la localidad número 4 las egagrópilas fueron recolectadas en plena vivienda humana y, sin embargo, la proporción niimerica de Mas es la más baja de todas (0,30 por 100). Localidades .................. M~~s~nimi~lur í.90 P. clr<oderimroslou~s............. 28,B .P. lwitmiicus .................. 1O.G ...................... 1 , 4 t Apodemus sp.................. 1S.M iihrinaenidet. .................. 1 . E .Elioin$*.+ pu~rciniu ............... 1,4l Rotitrr tiorvcginu ............ a,% R a t t w sp. ..................... .Pitymyssp Arvirola sp. ..................... Mirrotns cabrerae ................ 0 . rurir>ilw ..................... C'roridtrm rrirnihr ............... Sorr* orm~xs 0.3 - ?O.&' .................. - .................. ........................... ridibxnda .................. 84~r.stelaaizalir Aves Rma ............... .................. Pelobalrr r«ltripes ti. gryltooin: 0.28 - 0.28 1.6 ..................... O..X G.20 i'cnebrio i~collitor ............... L u r < o i ~ s r e n n u.................. 0 , s Scarabeidae indet. ............... 141, 'Tenehrionidae indet. ............ Gryf~nsrp. .Ortoptera iiidet. ............... O,% 30.12 15,38 0,ia 0.04 21,iS 1.00 - 32.25 1.83 l.Rl !U,?& 1.61 - 6 . 3 0 28,12 9,W 3.M 2.62 2,i0 0.W 2.73 - - 1,SO - - 11.71 - 9.29 %.80 9,MI - 0.a2 - 1 . 8.22 - - 0.32 0,dá l,Gl 0,82 - - 1.02 14.38 0.34 - - 884 - 0.82 0 s 10.59 0.32 0.32 - Z,í3 - 0,W 430 - - 0.08 8.90 23% 5.4; 3,08 - 2.73 - - 110 ARDEOU, VOL. 24. 3977 (1978) T A B L . +I V Porctlitajes do bioniasa (pesr~ SCCO),C O I relnci6n al total, en cado uiia d r las loea'idndes emdiadns Localidades 1 Mus mrrscriius ................. 6,üS P. duodrcimcos~6ur ............ 33.54 p.?uri!ai~icus ................. 5.76 Apodemw sp................... a5,52 bliomys gr,ercInus ............. RaTlns ,,owegicw ............... Rnttiis sp. ........................ 2,W ANicolasp ...................... 2,94 Microius ra6rerne ............... O . c u n c ................. Crocidum ruisuln 6,81 Sores waneus ................. Mwlela nivalis. ................ Aves ....................... 0,BO Rana ridibundo .................. Pelobares culnipes ............... 0,45 6. gr~liotdpa .................. 0 , s GryUus sp. ..................... 0,02 Tenebria niollitm ............... 0,OS Lucnn%s c r m s .................. 0,Oi Scarabridae indet. ............... 0.23 Tenebrionidae indet. ............ 0,s Orioptera indet. .................. - ............... - - 2 3 4 5 Bg,W l6,W 16,18 4,lT 0,110 25.613 3.44 %,lo 4,- 20,01 81.22 3,s 54,30 282887 a,% 36,S - - 0 3 2.85 3,lS 0.17 O,@ 11,S - - 3,W - 8;TT 3,ll - 49,52 16,E 3,M - - - 0.44 0.E 0.10 0.04 - 0,14 0.W - 0.01 - 2,iS - -2,58 - 02.3 6,R - a , ~ - 0,W 0.15 - - 0,48 En cuanto a Pitynyts, cabe destacar, observando el gráficrr número 1, que su proporción es alta cuando disminuye la de M u r (38,70 por 100 frente a 7,90 por 100 en la localidad número 1, y 8,45 por 100 frente a 32,25 por 100 en la número 3). Esto puede deberse a varias causas, entre ellas que la escasez y/o abundancia de Pitywzys esté determinada por la diferencia de biotopos en l o s que se han llevado a cabo las distintas muestras, de tal manera q u e éste sea un factor condicionante de su densidad, o bien que la amplitud del cazadero de la Lechuza (unos 2 Kma por término medio) haga que ésta puede capturar sus presas en una zona bastante alejada del sitio donde se encuentra el nido o posadero e n el que se acumulan las egagrópilas, pudiendo estar aquélla cercana a coustrucíones humanas (lo que explicaría la abundancia de Miu mrcsculi&s),o bien alejada de viviendas, explicándose así la escasez en capturas de esta especie. En cuanto a la diferencia de biotopos, no se aprecia que ésta sea la causa de las variaciones de porcentajes. En efecto, en la localidad número 1 el biotopo está compuesto por robledal y algunos prados, mientras que en la número 4 predominan los cultivos y monte bajo. Por otra parte, las muestras en las que han aparecido una mayor abundancia de Mur (números 2, 3 y 5) tienen en común que en dos de ellas (3 y 5) hay cultivos de huerta cercanos a los lugares de recogida de egagrópilas, pero no así en la número 2, donde el biotopo está compuesto por encinar adehesado. y amplias zonas de prados. En resumen, si la mayor o menor abundacia de Mus y Pi-ynayr se debe a la influencia del biotopo, en las localidades estudiadas no. se aprecia. En lo referente a Apode+nur, su importancia numérica en la dieta de la Lechuza es cons;derahle, manteniéndose más o menos constante en todas las localidades prospectadas, con descensos poco notables en las 1 y 5. Puede deducirse, por tanto, que su captura es independiente de la abundancia de las demás presas, y. servirá como especie amortiguadora en el régimen alimenticio.. En cuanto a los otros roedores (Eliomys quercinur, Rattw norvegicus, Amicola sp. y Microli<s cabrerae), se los puede coiisiderar como accidentales en la captura por parte de Tyto alba, si bien algunos de ellos pueden alcanzar cierta importancia en el' aporte de peso seco. Los roedores constituyen el grupo de presas qiie mayor cantidad de biomasa aporta, excepto en la localidad número 3, como s e explicará más adelante. Analizando los valores de las distintas especies (tabla III y gráfico núm. 2), se observa que Apodemus e s el que aporta una cantidad de biomasa más elevada, confirmando. así lo dicho anteriormente de que se trata de un género amortiguador de las fluctuaciones de Mus y P i t y t y s . P. lttsitnnicus tiene poca importancia en cuanto al peso seco, aunque su porcentaje numérico en ocasiones sea apreciable. ?e trata, por tanto, de una especie de significación secundaria. Rodentia Insectivora Aves E l Otros Griiico 2.-Porcentaje en número dc presas (orribs) y en biomasa @bajo) eri la alimentacióo de la Lcchuza en las cinco localidades estudiadas. S610 son dos las especies pertenecientes a este orden encontradas en el presente trabajo: Crocidura russula y Sorex aranelcs. Numéricamente, la primera tiene un porcentaje elevado (20.82) en la localidad número 1, si se le compara con el de otras partes de España. Los demás lugares están dentro de los valores normales para esta especie. Se puede decir, pues, que en el conjunto de la alimentación de Tyto alba esta musaraña, junto con las otras cuatro especies de roedores vistas anteriormente, es la base de capm a s de la Lechuza, pero sin llegar a ser, en general, abundante. En lo que se refiere a los demás insectivoros, es de destacar en las egagrópilas recolectadas. la ausencia de .Sumcus y ~Vco~nys Aunque ninguno de estos dos géneros debe ser abundante en la zona de estudio (a juzgar por el escaso número de citas para d~cha región), es llamatiro que ambos estén ausentes, lo cual es señal de la escasa importancia alimenticia que tienen en esta zona. Los insectivoros se muestran como muy poco importantes en el aporte en peso seco, puesto que su biomasa generalmente es inferior a 3,5 por 100, salvo en la localidad número 1, donde alcan. zan el 6,s por 100, debido al elevado numero de capturas. Aunque numéricamente C. rtissirla constituye un aporte importante, en cuanto a su biomasa esto no es cierto, como acabamos de ver. Quizás lo más significativo de este apartado sea el hallazgo de un ejemplar de Sorex nlawrts en una zona en la que hasta ahora no había sido citado; con ello, su área de distribución se amplía considerablemeiite. La proporción de aves capturadas por la Lechuza en la zona Be estudio varía entre O,:?? y 23,80 por 100, valores ambos extremos, que no coincidcn con la media de los trabajos llevados a cabo en otras partes de España. EII las otras tres localidades estndiadas, el porcent;ije está dentro de lo normal. La máxima abimdanci;i ol)servada corresponde a la localidtid nUmero S (5.80 por 100), Iiastante superior a la media. Se trata. pues, de una pareja con una cierta especialización en la captura de aves. Si tenemos en cuenta el biotopo que rodea a este lugar (extensas arboledos de Popirl~ts spp.) vemos que esta proporcií>ii está justificada, pctes eii mas niasas forestales Iiay domideros de aves con concentracio~~es elevadns. ciiya captiirn no presenta especiales dificultades para T y l o nlh~r. De esta manera es explicable que el porcentaje de micromamíferos obtenido en esta localidad sea el más bajo de todos, puesto que los roedores son sustituidos, hasta cierto punto, por las ares. Sin embargo, la total ausencia de insectívoros no parece estar justificada por este mismo fenómeno, ya que, aunque lógicamente su proporción debiera ser muy pequeña en este caso, sí deberían estar presentes. Ello quizás sea debido a la poca amplitud de la muestra (62 presas). D e todas formas, este hecho nos demuestra que la importancia de los Soriridae en la localidad número 3 es casi nula. Además de esta localidad, en las número 2 y 4 se pone de manifiesto que, si bien su porcentaje numérico no es alto (9,O por 100). su porcentaje en peso seco si lo es (17 por 100). De esta manera se aprecia que las aves, aunque no son nnmerosas, constituyen e1 segundo grupo de importancia en la alimentación, salvo aquellos casos en los que la proporción de micromamiferos es muy alta, como ocurre en los lugares 1 y 6, pasando, entonces, a ocupar un plano menos principal, en unión con anfibios e insectos. En las agagrópilas analizadas han aparecido muy pocos ejemplares de este grupo, pertenecientes sólo a dos especies: K m ridibuada y Pelobates cdtnpes. Tanto una como otra apenas tienen imporiancia, ya que su porcentaje numérico en relación al total de presas capturadas (tabla 11) es inferior el 1 por 100 excepto para la localidad número 4, donde alcanza el valor de 5,40 por 100. En cuanto a la biomasa aportada, su porcentaje tampoco es elevado aunque, curiosamente, sea mayor que el de insectivoros. a pesar de que el número de estos capturados es bastante más considerable. Insectos Han aparecido insectos en cuatro de las cinco localidades estudiadzs (tabla 11) ; su proporción, salvo en la número 2, es numéricamente elevada, variando entre el 10 y 11 por 100. El hecho de que en la número 4 no se haya encontrado ninguno carece de significación, puesto que la Lechuza siempre consume especies de este grupo. sea el lugar uno u otro. Quizás la pequeña extensión de la muestra sea la explicación de este hecho. En el conjunto de Ias localidades sóEo dos órdenes son capturados: Ortóptera y Coleóptera. Entre los primeros, Gryllotalpa y Gryllus son los que predominan, junto con los Acrididae. De los Coleópteros, Tenel~rioniüae y Scarabeidae son los Únicos encontrados. A pesar de que su frecuericia de capturas es alta, sin embargo la biomasa que aportan es muy poca (0,64 por 100 de media, y sólo en un caso es superior al 1 por 100), de lo cual se deduce !a importancia que tiene considerar el régimen alimenticio en fi~ncióndel peso seco aportado por las distintas especies, para tener una visión más objetiva de lo que realmente ocurre. En una localidad (nítmero 2) se han recogido egagrópilas en otras tres fechas distintas (febrero, abril y mayo) con el fin de observar las posibles variaciones que pueda sufrir la dieta de Tyfo niha a lo largo de la época. Con ello se abarca un periodo comprendido entre mediados de iilvierno y de primavera. Consideraremos, por un lado, a los mamíferos en conjunto y, por otro, a los demás grupos de presa. La tabla V expresa la variación de porcentajes con respecto al total de presas a lo largo del tiempo considerado, y el gráfico nú- Variadda lc»ipral dc los porrr~iiaj~.sdr riniiiifcros. mes c insectos e,, la localidad ~ttittrrro2 ........................... ............................... Insectos ........................... Mamifmos Aves Febrero Abril Mayo 86-20 14.80 08.84 10.98 1,28 8998 7,47 S,46 - mero 3 el porcentaje de micromamiferos en relación, solamente, al conjunto de estos, no incluyéndose ni los Muridae indeterminados, ni los P;tyn?s indeterminados. 100 a b c Crocidura russula Apdemus spp 1 F! lusitanicus C] F! duodecimcostatus Mus musculus Grifico 3.-VariaciOn del porcentaje de mieromatuíferos en febrero (a), abril (b) Y mayo (4. Puede apreciarse: a) un aumento de la subfamilia Murinae (Mus y Apode~tztrs, principalmente) durante el período comprendido entre los meses de febrero y abril, al mismo tiempo que la subfaniilia Microtiuae (Pitywys y Microtrts) desciende bruscamente. b) D e abril a mayo el porcentaje de Murinae desciende, mientras que el de Microtinae aumenta, si bien en poca cantidad. c) E n cusnto a la familia Soricidae, su Único representante con significación numérica en la dieta (Crocidura russula) sufre el mismo proceso que Pitynzys: descenso del porcentaje de febrero a abril y aumento de abril a mayo. De todas formas, su variación nunca e s tan acusada como la de los anteriores grupos, manteniéndose sus valores entre un mínimo de 7 , s por 100 y un máximo de 15,03 por 100. Como vemos, en el conjunto de todas las localidades muestreadas y en la variación temporal, ocurre el mismo fenómeno : Mas y Pilymys parecen estar en oposición a la hora de ser capturados por la Lechuza, pues cuando uno es abundante, el otro escasea. Podría decirse que se trata de dos especies de mutuo reemplazamiento. La explicación de este hecho puede estar, además de lo expuesto anteriormente, en que se dé realmente una fluctuación en la densidad de estas especies en esa época, en cuyo caso el anilisis de las egagrópilas seria un buen reflejo de lo que ocurre en el lugar de estudio, tal como, según Saint Girons & Martin (1974), sucede en Francia con las variaciones cíclicas de Microlus crgrestis. En lo referente a las aves, hay una clara disminución conforme avanza la primnvera (tabla V), mientras que los insectos van incre mentaiido su iiíimero, sin ser nunca alnindantes. 1n: el caso de las aves es lógico que ociirra así, puesto que, como liemos visto, el régimen de la Lecliuzn se I>:isa fimdnmentnlmente en los micromarniferos, y estos son más numerosos a partir del mes de marzo, por lo que el número de capturas también será mayor. Durante los metes de invierno los factores climatológicos, principalmente, son los que condicionan la poca abnndacia de micromamíferos e insec tos, volviéndose la Lecliiiza más ornitófaga. En cuanto a los insectos, faltan por completo en la muestra efectuada en febrero y, a pmtir de abril, van aumeiitaiido progre(NKi), estudiando el régimen alimenticio de sivamente. HERRBRA Tyto alba en España sudoccidental, muestra una variación estacional en el consumo de insectos, el cual es mínimo en los primeros meses del año, para ir ascendiendo poco a poco, hasta llegar al m k i m o en los meses otoñales. Esto mismo es lo observado en el presente trabajo para la provincia de Salamanca, en la época considerada. Sin embargo, aqui también se aprecia una variación notable en el consitmo de aves (al menos de febrero a mayo), cosa que (oP. cit.). no sncede en el Sur de España, como observa HERRERA Qnizá por ser la zona, meridional española de clima más templado que la centro-oeste, el número de insectos presentes en el biotopo sea mayor y, consecuentemente. más frecuentes sus capturac. Pero en la región aquí estudiada parece plenamente justificado, por las razones expuestas, que I.?s aves constitityen parte importante de la dieta de T. albn durante el invierno, pasando a ser menos significativas en primavera. Se estudia d régihlen alimenticio de la Lccliura Coinim cn las provincias de Salamanca y Zarnora. bmindow en el nn&lisis de egagrópilas. que han aportado 1.1.11 presas. encontrándose que los micromamiferos (sobre todo Alrrs niiunrl~s.Pilymys duodecimcos~tur, Pylymys I<rn'limiclw, Apodnnus y Croddura riisswla) consiiluyen. numéricamente. la bare de su alimentación. siguiéndoles. a continuación, las aves. insectos y anfibios. AsimLmo. se obrcrrn que, en cuanto al aporte de biomasa en pego peco, son los roedores los wás importantes. junto con lar aves, destacando en este aspecto la ercasa significación de insectivoros e insectos. En una Jocdidad se recogieroii egagrópilps periódicamente durante la primera mitad del año, encontrindose una variación tempor.il en el sentido 118 mDEou, VOL. 24, 1977 (1878) de un mayor consqmo de insectos conformc ¿\.ama la primarera y una menor frecuencia dc captura? en el mismo periodo. Por Ultimo, es de destacar el Iiallargo de ejemplares de Microlus cabrerar y Sorex oro~~etts en esta ronn donde. hasta ahora, no Iiahian sido citados. ampliándoss asi su área de distribución; al mismo tiempo, se observa que las especies Mrcs inusctthir y Pilymys dirodrrl~~icoslal~ar pzirecen ser de mutuo reen~plazamiento en el rigimen alimenticio de Tyfo albo. Danr ce travail nous avons éludie le rbgime d'alimentation de I'Effrnic. Tyro alba, aux proviuces de Salamanca et Zamora. On remarque que les plus importants sont numériquement les Xongeurs filyntys duodecit~~corlalus, Pilymys Itwihiiicics, 1111sinusorlris, Apodetnus et I'lnsettivore Crocidwa msnrla, tandis que du point de vue du apport de biomasse en poids scc, les Rongeurs sont les plus importants, suivis des Oiseaux. Dans une loca!it¿ nous avons recuelli des pelotcs de réjection pendanc la premi6re & p o p e dc I'année, ilin d'Qudier la variation saisonniere du régime. A ce propo- now iwon, trouvé une aupmentiition dans le nnméro d3Tnsectes de levrier i mii, et une diminution assez important, d'oiseaux, tandis que les petits Mamniifkres restent pratiquement conslants A cette époque de I'année. Enfin. noui remarquon: que les espices M. i ~ ~ ~ i s r i et c b P. r di~odeciincoslatur paraitrent se balancer au rCgime alimentaire de 1'Effraie. Amy& C. (193). ia distinction entre Pilymys bcsito~~ic~ts (Gerbe) et P. duodech~costatw (de SElys-Longchamps) d'apr6s quelques indices craniométriques. Rrc. Biol., 9, (1-4): 207-215. BERNIS, F. (1Oi3). Algunos datos de alimentación y depredación de Falconiformes y E h g i f o r m e s ibéricas. Ardeoia, 19 (2): 22.5-247. RRARA, F. (1x4). Estudio del régimen alimenticio de 1% Lecliuza Común Tjdo albn (Scop.), en Asturias. Asturflatura, 11: 7;>-83. CABRERA.A. (1914): Fauna ibérica: Mamiferos. Inst. Nac. Cienc. Pisico-Naturales, 441 págs. C R A L ~J.; , BAUDVIN,H.; JAMMOT,D.; S B ~ T GIBONS, 51.-C. (lSi4). 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