REv. DE PSICOANÁLlSIS. LVI. 3 Angustia de castración generacional y sentimiento de intrascendencia • Osvaldo Bodni introducción: El plasma germinatlvo Este trabajo se sustenta en observaciones clínicas. muchas de ellas con pacientes de edad avanzada. que involucraban un sentimiento doloroso de balance negativo. con particulares referencias a lo "intrascendente" de su pasaje por la vida. de la que no quedaría testimonio en sucesor alguno. Estas expresiones no parecían variaciones del duelo por envejecer. sino la presentación clínica de desarrollos de afecto más definidos. que implicaban una angustia de castración generacional. frente a la inminente necesidad del traspaso de legados ídentífícatoríos a sujetos designados como sucesores. Constatar este fuerte impulso a la transmisión de legados transubjetívos fue la base de nuestras ideas. En Más allá del principio de placer. Freud (1920) afirmó que la tesis que _s~_~~entabaera un "corolario dinámico" de la 'teoría de August VVeisman. Esta hipótesis biológica de un plasmagerminaUvo no degradable, como fragmento inmortal de la vida. tuvo para Freud un doble valor. no sólo fue una base para el desarrollo teórico de la teoría pulsíonal de 1920. sino también un concepto consistente para pensar una trascendencia no religiosa. de base biológica. como continuación del tiempo singular del hombre. En El porvenir de una ilusión. Freud (1927) habría de denunciar como sustrato de las ideas religiosas la necesidad de proyectar siempre un futuro. ilusión inevitablemente atacada por el racionalismo científico. Weisman fue uno d~lºsf~--º~es Q~ la genét1ca-y_eJmiis írnporErnte bíólogo darwínísta de fin~s del siglo XIX.Afirmaba que las células germinales de los animales contenían "algo esencial para las espe- • Dirección: Laftnur 3090, P.B. "D", (1425) Ciudad de Buenos Aires, R Argentina. E-mail: [email protected] 606 Osvaldo Bodni cíes, algo que debe ser cuidadosamente preservado y pasado de una generación a otra". Una concepción que en su momento tanto él como Freud sólo podían suponer de naturaleza química, sin anticipación posible de su status actual de lenguaje cromosómico. Freud dedica varias páginas de Más allá... a sus acuerdos y discusiones con el biólogo, estas últimas, en especial, sobre el tema de la muerte. que para él no debía producirse por causas biológicas internas sino por una pulsíón de retomo a lo inanimado. La primera mención de Freud (1914) sobre la teoría se encuentra en "Introducción del narcisismo". donde dice: "(...] consideraciones biológicas abogan en su favor. El individuo lleva realmente una existencia doble, en cuanto es fin para sí mismo y eslabón dentro de una cadena de la cual es tributario contra su voluntad o. al menos. sin que medie ésta". , El tiene a la sexualidad por uno de sus propósitos. mientras que otra consideración lo muestra como mero apéndice de su plasma germinal. a cuya disposición pone sus fuerzas a cambio de un premio de placer; es el portador mortal de una sustancia -quízás- inmortal, como un mayorazgo no es sino el derecho habiente temporario de una institución que lo sobrevive. Y agrega: "(...] quiero confesar en este lugar de manera expresa que la hipótesis de unas pulsiones sexuales y yoícas separadas. y por lo tanto la teoría de la libido. descansa mínimamente en bases psicológicas. y en lo esencial tiene apoyo biológico". En realidad el pensamiento freudíano .tíenejníluencías lamarckianas en cuanto a la perduración de los cambios vtvenciales en el ínconcíéñte fllogenétíco, y su búsqueda del grano de verdad histórica se orienta hacia una raíz de realidad material acontecida. Llama la atención el interés de Freud por Weísman, un biólogo antílamarckíano, fuertemente partidario de las teorías de la selección. quien precisamente orientó sus investigaciones para demostrar que no era posible una paulatina alteración genética morfológica o comportamental. En una posición darw1niana como la de este biólogo. la transmisión de la cultura está más bien en relación directa con la capacidad de adaptación de las especies. en función de la selección de la más apta para reproducirse. Así. para la selección natural de un grupo. es más útil el acrecentamiento de sus destrezas por un fuerte impulso a su transmisión. que dejar librada a la suerte su invención en la generación siguiente; y la capacidad ecológica y etológíca de supervivencia del más apto está muy involucrada con su potencial. mayor o menor. de transferir lo aprendido a los sucesores. En la obra de Freud, desde los escritos sociales hasta Moisés y la religión monoteísta. también la teo- Angustia de castración generacional {...} 607 ría de la memoria colectiva parece basarse en un discurso transmitido por el empuje de un fuerte impulso a perdurar, y no sólo circulante por comunicación sincrónica entre los miembros del conjunto. Metap.icologfa de la tran.mtsión Freud distinguió entre los conceptos de Trieb e Instinkt, este último es el inconciente ftlogenético e instintivo que él señaló "semejante al que se encuentra en los animales", y que debe relacionarse con una matriz biológica de las pulsiones. Es reservorío, primero. de las protofantasías que generan desenlaces psíquicos como los complejos nucleares y. en segundo lugar. de patrones comportamentales -srmples. como las emociones, o de mayor complejidad. como el impulso a la transmisión de la cultura-o Con la teoría del plasma germínatívo inmortal Freud reubica al sujeto como eslabón de una cadena generacional. con un impulso también "instintivo" a la conservación de la especie. Con estas consideraciones insistimos en nuestra investigación sobre una pulsíón parcial de transmisión de la cultura. que integrando Eros es el complemento de la pulsíón de conservación de la especie que Freud (1938) desarrolla en el Esquema del pstcoaná1isis. _ Para mayor precisión. entre los conceptos de :~~~_~~3:.~iºIl# transmisión existe una diferencia. El primero designa un conjunto de prácticas destinadas a vincular entre si espacios, reales o virtuales. como los mentales. tendiendo a permitir la circulación fluida de contenidos. Es una categoría en la que el tiempo está poco implicado. suponiendo más bien una simultaneidad. Las redes culturales sincrónicas remiten de modo directo a la comunicación entre los sujetos; el tráfico fácil de la información disminuye las distancias y modifica dinámicamente los espacios en la construcción del entramado social. Entre los sujetos. la información se organiza en narraciones que se nutren de lo nuevo; se crean cuando lo imprevisible fractura las creencias. pues no hace falta comunicar aquello que es como se espera. _ En cambio, se habla de '~~~~ \cuando se pone en juego un objeto transportador entre 'os elementos de un sistema. como en el .ejemplo mecánico de una cadena de transmisión. En la cultura estos objetos. que por supuesto también comunican. pueden ser un monumento. un pictograma o una carta. un libro o un tótem. una vieja fotografía o un testamento: no se definen por su lenguaje sino por su función de producir temporalidad. En la especie. la réplica viva terminada es un cuerpo designado sucesor. que debe ser hablante. y la reproducción del conjunto hu- 608 Osvaldo Bodni mano presupone el transporte de la cultura a través de las generaciones. creando diacronías. Y éstas no pueden depender del grado de diferencia entre 10 esperable y 10 acontecido. porque la especie se reproduce transmitiendo siempre las reglas formales recibidas. Éste es el punto en el que el modelo requiere una metapsicología de la transmisión: el transporte de derechos. prohibiciones y destrezas se apuntala en el pasaje de reglas de diferenciación de los sujetos. fundamentalmente la transmisión de identificaciones. y pasa por un relato canónico. repetido y necesario. que implica una exigencia de trabajo para el aparato psíquico. En su libro TIusmtsión de la lJida psíquica entre generaciones. René Kaes (1996) hace una investigación del concepto de transmisión en los textos de Freud, que clasifica en cuatro tipos: Vererbung. que remite a lo que se ha legado; EruJerbung. que es lo recibido por transmisión; Erblichkeit, que designa aquello que ha heredado. y Übertragung. que es el único término activo. que corresponde a transmitir y a transferir. El autor atribuye un fuerte carácter pulsional a la transmisión de los legados culturales. en cuya red de discursos. fantasías e historias contadas está siempre inserta la existencia del sujeto. Define un conjunto de "(...) exigencias pulsíonales inconscientes. en las que prevalecen a veces las exigencias narcisistas de conservación y continuidad de la vida psíquica. a veces las del ideal del yo y del superyó, más precisamente la trasmisión de las prohibiciones fundamentales. (... ) siempre aparece la necesidad de transferir-trasmitir en otro aparato psíquico [... r. Cita en su apoyo a Legendre (1996). que dice: "[...) una trasmisión no se funda en un contenido. sino ante todo en el acto de trasmitir". El depositario de la duración trascendente del sujeto es el grupo conservador de la memoria. Aunque Freud no realizó una referencia taxativa a una pulsíón de transmitir. la ley general de inclusión del sujeto humano en la cultura que lo precede convalida su conceptualización dentro de las pulsiones de vida. en el contexto de las pulsiones de conservación de la especie. Para el psíquísmo del hombre adulto la responsab1l1dad por transferir la cultura constituye una exigencia de trabajo cada vez mayor. apuntalada en la necesidad narcisista de asegurarse un lugar en los mitos del futuro. Para Freud la pulsíón de conservación de la especie está integrada en Eros y tiene su meta en la transmisión de la genética y la cultura al sucesor. El pasaje activo de saberes es la condición necesaria para completar la insuficiencia esencial de la memoria genética humana. Así como en las primeras etapas de la vida la erogenídad está esencialmente vinculada a la receptividad y a la construcción del sujeto singular. Angustia de castración generacional [...] 609 en el adulto mayor la pulsíón de transmitir toma el comando. y la erogenidad se organiza en función de la sucesión. El deseo de historiar y encontrar un sucesor se constituye evolutivamente. a partir del aparato psíquico que al principio de la vida fue puramente receptividad y aprendizaje. Los más viejos de la especie se van convirtiendo en casi antepasados. y con la misión de preservar la cultura preparan cuidadosamente su admisión en la historia. En las pulsíones se produce una escisión entre la autoconservación del sujeto individual y la supervivencia del conjunto cultural. que paulatinamente adquiere un plus de investidura. La tendencia a transportar los emblemas identiftcatorios. las tradiciones. las estrategias de comportamiento. las destrezas instrumentales y los productos de la creatividad. en la vejez puede llegar a convertirse en un impulso reiterativo a relatar. En cuanto a los alcances de la hipótesis para la teoría general de la pulsíón, una pulsión de transmitir comparte el carácter de concepto limite entre lo biológico y lo mental. su fuente erógena puede relacionarse con el plasma germínatívo, se manifiesta en necesidades perentorias de descarga, su meta es transmitir un tipo de identificaciones que hemos llamado de transporte, y su objeto es el sucesor generacional. En trabajos anteriores hemos especulado también con que las limitaciones en esta descarga pulsíonal pueden producir procesos de estancamiento. de orden tóxico actual, con manifestaciones psícosomátícas en adultos mayores. Pero si aceptamos esta energía potencial de perduración cabe una vuelta de tuerca en la teoría de la castración. castraci6n generacional Si la transmisión. tanto genética como cultural. es la forma de reproducción del sujeto de la especie humana, la angustia por quedar fuera de la memoria, por no producir un sucesor, o por no poder transferir emblemas tdentíñcatortos, debe considerarse un contenido esencial de la angustia de castración. En este caso toma la forma de un doloroso sentimiento de intrascendencia, en el que la vida se representa para el sujeto como una meta mal terminada. Un singular desarrollo de afecto relacionado con la sobreínvestídura de la transmisión generacional como tarea inconclusa. Como diría Bleger, un efecto Zeigamik aplicado al balance de la vida. La amenaza de castración presupone aquí una catástrofe transmisional: una amenaza de olvido y de intrascendencia generacional, una imposibilidad de transmisión de los emblemas ídentíñcatoríos al otro más joven que en más habrá de ser su portador. El lugar teórico 610 Osvaldo Bodni del falo como marca del completam1ento remite aquí a la procreación y la transmisión del plasma germínatívo como actos de inmortalidad. La teoría del complejo de castración implica la amenaza que recae sobre un emblema de perfección. y la renuncia al objeto edípíco es la consecuencia del crédito otorgado a aquélla. tras una primera etapa de descreimiento. La amenaza de la infancia adquiere su poder sólo a partir de ser creída. a través de una resígníñcacíón producida por la aceptación de una percepción: la diferencia sexual anatómica. El genital masculino es el único accesible a ser una marca y desempeñar este papel simbólico. es un órgano externo. telescópico, por fuera de la economía volitiva de la motrícídad general que en muchos pacientes se manifiesta sin orden, sin sometimiento motriz, respondiendo de pronto a la excitación por el tocamiento o la imaginación. Es imprevisible en su erogenidad y su atención está exacerbada por la autonomía de las erecciones, con un extraño status de "otro" erógeno en el cuerpo. El falo es en teoría: 1) emblema narcisista; 2) marca de la diferencia sexual anatómica; 3) marca de la diferencia con la motricidad general; 4) remanente imaginario de la íncoordínacíón muscular; 5) marca de la diferencia con la coordinación motriz total atribuida al modelo: 6) en el caso Juanito, también es marca de la diferencia entre lo vivo y lo inerte, y 7) cabe también, un lugar teórico como emblema de la potencia reproductora. La relación entre el falo y la reproducción es tardía, y -como lo señala Freud en Moisés ...- requiere un acto de pensamiento deductivo, un acto que puede entenderse como una segunda restgníñcacíón. Para Freud, el ello no puede tener noticia alguna de la muerte, es claro que tampoco puede tenerla de una intrascendencia del plasma genn1nativo. Para la teoría del ínconcíente ftlogenético no cabe regreso ni registro, ni de la muerte ni de la ester1l1dad. Sin embargo algunos desarrollos clínicos de Freud presuponen la angustia insoportable de la desaparición del linaje. Schreber, que enfermó al ser nombrado juez, tenía un matrimonio estéril. Freud señala: "Su raza corría el riesgo de extinguirse, y parece que estaba bastante orgulloso de su linaje y su familia". También se trata el tema en Macbeth y Rosmerholm, casos ejemplares de caracteres que fracasan al triunfar. El primero sabe por la profecía que no va a fundar dinastía: hay corte de la cadena generacional y cataclismo de la transmisión, "l...) no se conforma con satisfacer su propia ambición. quiere ser el fundador de una dinastía y no haber asesinado para beneficio de unos extraños". En el segundo ejemplo, la esposa. enfermiza y sin hijos, es fácilmente inducida al suicidio. Es poco frecuente relacionar el complejo de castración y la ímposib1l1dadreal de la procreación. pero Freud parece elegir con Weisman una perspectiva más concreta que simbólica. En su composición Angustia de castración generacional r... ] 611 química el plasma germinativo es universal. pero la doble hélice de ADN sostiene con el ordenamiento molecular el lenguaje de los códigos particulares. de cuya transmisión depende la supervivencia de cada especie. La carga económica de la castración biológica. como amenaza de no cumplir la imperiosa ley de supervivencia de la especie. es claramente contradictoria de una gran intensidad pulstonal, invistiendo también al mismo nivel la transmisión cultural estructurante de la especie humana. Testar es testimoniar. y con ello preparar la sucesión generacional. dar testimonio de la historia de los proyectos identifica torios que se deben transmitir a las generaciones. El sujeto ha sido siempre fin para sí mismo, pero además eslabón de una cadena de cronistas. En este último sentido ha sido primero receptor, se ha apropiado de los estandartes transportados en la esencia de su identidad. y cuando le queda menos tiempo debe asegurar el destino del "mayorazgo". La información circula y se descarga, se modifica y enriquece en la red formada por el modelo, el rival, el ayudante y el objeto. entre los cuales se produce un proceso de transformación constante y dinámica que se continúa en la transmisión generacional. Transmisión y narcisismo Una característica de la omnipotencia narcisista es la alienación del sucesor como un doble, a través de una transmisión alienante destinada a sostener una desmentida de la muerte. Es la misma defensa, escisión del preconciente, que actúa sobre la castración como instrumento del completamiento narcisista, en este caso para pasar objetos ídentíñcatoríos fetichizados que permiten sostener la ilusión de una transmisión monolítica, de saberes absolutos. La aceptación de la amenaza de castración obliga también a resignar los límites de la transmisión. El sucesor no será el doble asegurador de la inmortalidad, sino un semejante que sostendrá la permanencia de las identificaciones suficientes para el sentimiento de dejar un registro. Al contrario de la seguridad omnisciente del narcisista, el transmisor generacional aquí se interroga. resígntftca su historia desde un balance y propone su experiencia como un conjunto de saberes que los sucesores pueden cuestionar y recrear. Piera Aulagníer (1975) sostiene que el contrato narcisista está constituido por el conjunto de los discursos sobre las instituciones. Los sujetos adquieren enunciados que deben repetir, creen en ellos. se apropian de la historia y confían en una futuración. El grupo social. que está integrado por sujetos viejos que deben desaparecer, asegura su permanencia colectiva preparando la sustitución de los elemen- 612 Osvaldo Bodni tos muertos por los sujetos nuevos que van a repetir el mismo fragmento de discurso. Las pulsíones narcisistas del sujeto desaparecido nutren el narcisismo de los sujetos que advienen "gracias a la precatectlzación por parte del conjunto del infans como voz futura que ocupará el lugar que se le designa [... J. En la catectlzación del modelo ideal se nota la presencia primitiva de un deseo de inmortalidad ante el cual esta catectización se ofrece como sustituto" (Aulagnter, 1975). Desde el lugar de los viejos se escuchan las voces que quieren terminar la tarea exigida: "[...J la ilusión de que una nueva voz volverá a dar vida a la mismidad de su propio discurso. que de esta manera podría escapar al irreversible veredicto del tiempo [... )" (Aulagníer, 1975). Para esta autora el hijo del hijo le brinda a éste una posición simbólica respecto del parentesco. comprendiendo su ocupación coyuntural de una función que pertenece a la especie. y que tiene la misión de transmitir. Conclusiones Consideramos que el abordaje psicoanalítico de las crisis de la edad madura debe acentuar el rol de transmisor de identificaciones asumido por quienes preparan su testimonio. En última instancia piden garantías de ser reconocidos como enuncian tes de fundamentos identificatorios. La dolorosa sensación de intrascendencia. de transmisión inconclusa y de castración generacional requiere en la clínica psicoanalítica una cuidadosa elaboración. La aceptación de la castración presupone aceptar que ningún enunciado podrá transportar la totalidad de los emblemas. Deberá trabajarse la pérdida inevitable de matrices ídentíñcatortas grupales en la trama de las crónicas mal contadas. Pero aun aceptados los límites de la transmisión. el conjunto siempre demostrará al viejo que no lo puede escuchar en todo lo que éste puede decir. provocando estados espontáneos de desidentif1cación como los descriptos por Baranger, Goldstein y Zack de Goldstein (1989). En esta línea de investigación clínica la propuesta es considerar en el adulto mayor el impulso a la transmisión. interpretando el testamento como un testimonio ídentífícatorío, atendiendo al balance de la vida y al efecto de tarea inconclusa. La patética amenaza de ser un último cronista dará cuenta no sólo de la angustia de castración. sino de la reactivación de arcaicas fantasías parricidas. vueltas contra sí mismo en la etapa final de la vida. El tratamiento procurará transformar la patología en una crisis vital. con una ganancia de serenidad apoyada Angustia de castración generacional [...J 613 en el balance. en la elaboración de sus sentimientos de trascendencia. en la búsqueda de un sentido para su tiempo de vida y. sobre todo. en el descubrimiento de algo de su discurso en los herederos de sus identificaciones. Aceptar a éstos como semejantes en 10 diferente. le permitirá renunciar a la empresa imposible de producir un doble. Resumen Este trabajo se basa en la observación clínica de fenómenos que involucran la transmisión generacional en pacientes de edad avanzada. quienes presentan manifestaciones depresivas frente a la imposibilidad de pasar sus legados a un sucesor. Se considera la presentación de un particular afecto de intrascendencia. que es conceptualízado como expresión de la angustia de castración. que provoca la desídentíflcacíón de roles de liderazgo generacional. a lo que se agrega el duelo por identificaciones perdidas en su proceso de transporte. Se relaciona la normalidad de la vejez con la posibilidad de procesamiento de la transmisión. y la patogenízacíón con la dificultad para el traspaso de la historia al sucesor que la preservará del olvido. El autor se propone una metapsícología de la transmisión desde la teoría del plasma gerrrunatívo.que sirvió a Freud como sustrato para el impulso a una trascendencia biológica y cultural del sujeto. DucRlPl'Ous: TRANSMISIÓN TRANSGENERACIONAL / TERCERAEDAD/ ANGUSTIA DE CASTRACIÓN Summary TRANSGENERATIONAL CASTRATION ANXIE7Y AND THE FEELlNG OF INSIGNIFlCANCE This paper ís based on the clínícal observation of phenomena ínvolvíng transgenerattonal communicatton in elderly pattents. who present depressive manifestations when faced with the tmposstbíltty of passing their legactes on to an hetr. The author discusses the presentation of a specíftc affect of msígniñcance. conceptualized as an expression of castratton anxiety. which provokes the disidentlficatlon of roles of generational leadership. with an aggregate of mourning for idenUficaUons lost in the process of passage. The author relates the normal1ty of old age to the possibility of processing transmísston, and pathogenízatíon when passíng a history on to the heír who will preserve it from being forgotten ís obstaculized. The author proposes a metapsychology of transmission from the theory of the germinal plasma. which Freud took as a substrate of the indtvidual's impulse for btologícal and cultural transcendence. 614 Osvaldo Bodni Bibliografía Aulagníer, P.: La violencia de la interpretación. Amorrortu, Buenos Aires. 1975. Baranes. J.-J.: "Devenir sí-mismo: avatares y estatuto de lo transgeneracíonal", En Trasmisión de la vida psíquica entre generaciones. Amorrortu. Buenos Aires. 1996. Baranger, W.; Goldstetn, N.. y Zak de Goldstein, R. (I989): "Acerca de la destdentíflcacíón". REv. DE PSICOANÁLISIS, XLVI. 6. Bodní. O.: Psicopatologia general. Psícoteca, Buenos Aires. 1992. Bíon, W.: Memorias delfuturo. Yébenes, Madrid. 1991. Bleger, J.: Psicología de la conducta. CEAL, Buenos Aires, 1969. Faimberg, H.: "El telescopa]e de las generactones". En Trasmisión de la vida psíquica entre generaciones. Amorrortu, Buenos Aires, 1996. Freud, S. (1909): "Análisis de la fobia de un niño de cinco años", A. E .. X. -(1911): "Puntuahzacíones psicoanalíticas sobre un caso de paranoia (Dementia paranoídes) descrito autobíográñcamente", A. E., XII. -(1912-13): Tótem y tabú. A. E .• XIII. -(1914): "Introducción del narcisismo". A. E., XIV. -(1916): "Algunos tipos de carácter dilucidados por el trabajo pstcoanalítíco". A. E., XIV. -(1920): Más allá del principio de placer. A. E., XVIII. -(1921): Psicología de las masas y análisis del yo. A. E., XVIII. -(1926): Inhibición. síntoma y angustia. A. E., XXVI. -(1927): El poroenir de una ilusión. A. E., XXI. -(1927): "Fetichismo". A. E., XXI. -(1938): Esquema del psicoanálisis. A. E., XXIII. -(1939): Moisés y la religión monoteísta. A. E., XXIII. Kaés, R.: Trasmisión de la vida psíquica entre generaciones. Amorrortu, Buenos Aires, 1996. Kancyper, L.: La confrontación generacional. Buenos Aires, Paídós, 1996. Kohut, H.: Análisis del se/f. Amorrortu, Buenos Aires. 1992. Legendre, P.: El inestímable objeto de la transmisión. Siglo XXI. México. 1996. Maldavsky. D.: Teoría y clínica de los procesos tóxicos. Amorrortu, Buenos Aires, 1992. Weísman, A.: The germ-plasm. a theory oJ heredity. Londres, 1893.