Synopsis : INMERSIÓN EN UN CAMPAMENTO DE GITANOS Reportaje Fotográfico de Yann MERLIN Francia - 2013 En el municipio de La Courneuve en las afueras de Paris, en una parcela de 5.000 m2 situada a lo largo de la vía del ferocarril, viven 70 familias. Todo comenzó allí hace casi 5 años, cuando Titel, el jefe del asentamiento construyó su casa. Luego, construyó la iglesia " con mis propias manos ", dice orgulloso con su amplia sonrisa y su cuerpo de boxeador peso pesado. Los otros lo siguieron después. Esos otros, esos migrantes tan menospreciados vienen casi todos de Bihor, una región al este de Rumanía. Después de 12 años de estadía en Francia, Titel tuvo una revelación y se volvió creyente. " Estaba enfermo, había perdido mucho peso, como ves en la foto y los médicos decían que me iba a morir. Dios es el que me salvó ". Y continúa: " Hay un proverbio nuestro que dice que somos como los dedos de una mano, todos diferentes, buenos y malos ". Y me muestra la caravana en la que viviré como ellos, durante tres semanas. Debora, su hija, será mi traductora y su esposa me hará de comer. Umberto, el presidente de Rromeuropa, convenció a Titel de tenerme confianza. A la semana siguiente, ya estoy instalado en mi remolque a la entrada del campamento. Titel tiene aquí las mismas funciones que el alcalde de un pueblo. Gestiona disputas dentro y fuera de la comunidad. Es la autoridad y nadie contesta su legitimidad. Parte de su familia vive aquí, una hermana, un hermano y un primo. Son los dueños de los camiones que recogen chatarra, los generadores que proporcionan la electricidad y las neveras que mantienen las bebidas frías. Titel se encarga de la seguridad y todas las noches está de guardia con sus perros, vigilando los incendios domésticos, a los intrusos y delincuentes. Un miembro de su familia lo releva a las tres de la mañana. Los recogedores de chatarra salen a las 4:00 de la madrugada. Un sistema de solidaridad está bien organizado. En la calle, los alimentos son recuperados de los contenedores de basura y de las panaderías, los panes sin vender. Las familias parten completas. El padre se ocupa de la basura, mientras que la madre y los niños piden limosna. Para la electricidad y la seguridad, cada familia debe pagar 1 € por día. Estos son los ingresos de Titel que no se avergüenza, asegurandome que no existe ninguna organización de mendicidad o de prostitución. La mayoría de las personas son evangelistas, practicantes y muy religiosos. Las misas se celebran los martes y jueves por la tarde, los domingos todo el día. Ese día, los evangelistas de otros campos vienen a rezar. Los gitanos, no tienen la costumbre de ser fotografiados, lo cual no genera reacciones espontáneas. Posan y posan, una y otra vez. Para que me olviden, necesito tiempo. Pero una vez eso logrado, soy casi invisible, como el viento que pasa y así puedo mezclar los retratos posados y las instantáneas. Viviendo con esta gente, caigo bajo el encanto natural de estos migrantes que vienen aquí en busca de una vida mejor. ¡Pero, cuanta riqueza y cuanta humanidad ! La ingenuidad de esos niños, sus risas y el sonido de su lengua. El ritmo de tiempo me recuerda todo lo que quizás hemos perdido. Y los sanitarios secos, la falta de agua corriente o la presencia de ratas en la noche, no impiden a esos hombres y mujeres a permanecer dignos. A lavarse en palanganas o en los baños públicos. Las mujeres lavan la ropa todos los días y a las 7 de la mañana barren las callejuelas del campamento. Los niños tienen acceso a una atención médica, lo cual sería imposible en Rumania, donde todo es caro. "¿Cómo quieres que vivamos allá, con 2€ por litro de gasolina ? Todo cuesta como aquí y lo mejor que podemos esperar es un sueldo de 150€ al mes. Nosotros lamentamos el comunismo porque en esa época había un lugar para nosotros en la sociedad ", dice Sebastián, informático, en Francia desde hace tres meses. " Estoy aquí para hacer curar à mi hija Estera. En Rumania me piden 5.000€ para operarla ". Con las elecciones municipales al horizonte, el alcalde comunista de La Courneuve ha lanzado un juicio urgente de expulsión. El tribunal falló y a partir de la recepción de la orden de desalojo deben salir de la parcela en un mes. En Septiembre 2013, se conocerá cuál será el futuro del campamento. Titel no sabe a dónde ir y teme por la desintegración de las familias. Su hija también deberá cambiar de escuela, pero quizás que como Anina Ciucu, la primera gitana egresada de la Sorbona, algún día ella también frecuentará los bancos de una universidad.