CAPITULO XXXIII.

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plato en la cabeza, y el teriiendolo con las manos.
La ofrcndi era un excelente de oro de cincuenta
excelentes. Traian junto con el dos donceles de la
Seaora Reina, ambos hermanos fijos de Martin
Alonso de Monternayor, un jarro dorado, una copa
dorada, e venian acompanando a la Señora Ama,
cuantos Grandes habia en la Cone, e otras muchas
gentes é caballeros. Venia la Duquesa de Medina
ya dicha a ser madrma, muy ricamente vestida y
adornada, y acompaliada de los mayores de la C6r Trôjola a las ancas de su mula el Conde de BeTraen la madun: porma; navente por mas honra, Ia cual traia consigo nueve
y en qud for- doncellas vestidas todas de seda, cada una de su
ma. color, de bnales, e tabardos; e ella venia vestida
de un rico brial de brocado, é chapado con mucho
alfojar grueso y perlas, una muy rica cadena a el
cuello, é un tabardo de carmesi blanco ahorrado en
damasco, el cual ese dia, acabada la fiesta, diO a
un jodio aladan del Rey que Ilamaban Alegre.
CAPITULO XXXIII.
DE COMO sALLO LA REINA A MISA, A PRESENTAR
AL PRiNCIPE A
Sevilla
Acompañamiento
Dios.
Domingo nueve dias de agosto saliO la Reina a
misa a presentar at Principe al templo, e a lo ofrecer a Dios segun Ia costumbre de la Santa Madre
Iglesia, muy triunfalmente apostada en esta manera.
Iba el Rey delante de ella muy festivamente en una
hacanea rucia, vestido de un rozagante brocado 6
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chapado de oro, é un sombrero en la cabeza chapado de hilo de ore; e la guarnicion de la hacanea
era dorada de terciopelo negro. Iba la Reina cabalgando en un troton blanco en una muy rica silia
dorada, e twa guarnicion larga muy rica de oro y
plata, é ilevaba vestido un brial muy rico de brocado con ruuchas perlas y aijofar: iba con ella la
Duquesa de Villahermosa, mujer del Duque D.
Alonso hermano del Rey, y no otra duelia ni doncelia; ibanles festivando muchos instrurnentos de
trompetas e chirimias, é otras niuchas cosas, 6 muy
acordadas müsicas que iban delante de ellos: iban
allI muchos Regidores de la ciudad a pie, los mejores: ibanies acompaliando cuantos Grandes habia
en la Corte que iban airededor de ellos iba ci
Condestabie a la mano derecha de la Reina, la mano puesta en las camas de la brida de la Reina; y
ci Conde de Benavente a la mano siniestra, dd esta
misma forma de este. Ot.ros iban a sus pies y estribe, ci Adelantado del Andalucia, y Fonseca ci Señor
de Alahejos. Iba ci ama del Principe encirna de
una mula en una albarda de terciopelo, 6 con un
repostero de brocado colorado ilevaba al Principe
en sus brazos: )ban alrededor de 61 muchos grandes de la COrtc: junto con ci ama iba ci Airnirante
de Castilla; y todos estos Grandes iban a pie. Este Se dijo Ia
dia dijeronle la misa en el altar mayor de la Igle- Pia enry
Altar
sia mayor rnuy festivalniente.
OfreciO la Reina con ci Principe dos excelentes
de oro de cada cincuenta excelentes cada tine: eve Ofrenda y
io n istribula Fabrica el uno, 6 los Capellanes de Ia Reina ci csu
otro. Oida su misa, asi ordenadaniente come haToMo I.
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bian venido se volvieron a! Alcázar.
A este tiempo ya ci Rey y la Reina teniati dos
fijas; a Doha Isabel que era la mayor, é a Doña
Juana; C despues ovieron Doña Maria, y despues a
Doha Catalina, los cuales todos vieron casados; a
Doña Isabel la mayor, con ci Principe D. Juan de
Portugal, uijo del Rey D. Juan, nieto del Rey D.
Alonso que haS entrado en Castilla a reinar segun es dicho. Esta ovo muchas desventuras que
muy presto fuC de CI viuda, que corriendo un dia
en caballo en Portugal, por no trompicar un mucha-.
cho que pasaba, cayO el caballo con Cl y luego mu1-16. Despues fué otra vez casada con ci Rey D. Manuel de Portugal, y despues de haber parido de Cl un
fijo en Zaragoza de Aragon, que liamaron D. Miguel, de la paricion muriO; ci Principe tambien C
despues de haber traido su mujer de Flandes muriO
dende en pocos dias. Dofia Maria casO con ci Rey
de Portugal D. Manuel: y Ia dicha Do2ia Catalina cas6 con el Principe de Ingiaterra y fue viuda del en
poco tiempo, y casO despues con el segundo fijo
del Rey de Inglaterra. De cada uno se dira en su
lugar alguna cosa.
CAPJTULO XXXIV.
DEL ESPANTOSO ECLIPSE QUE EL SOL. HIZO.
El dicho afio de mil e cuatrocientos y setenta y
ocho, a veinte y nuevc dias del mes de Julio dia de
Santa Marta a medio dia, fizo el sol un eclipse ci
Auiode 1478.
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