Redacción y fldmlnlstracrfim Calle de Larra, Q. í^adrid. Diario independiente de la noche flñolll.—Núm. S47 26 de julio de 1922 Noticias de todas partes Precio: 10 céntií^osu^ .'•3?Sff3!«S!i!*!p!WE PERSPECTIVAS NOTAS GRÁFICAS DEL EXTRANJERO EL ^^SIMON" CON MOTOR VIAJANDO MAURICIO M/ETERUNCK ^_i-iSe ha fijado usted—me de- su construcción era sennejante, se Los beTgas comen bien y beben co a la familia intekctual de los cía en la calle <ie Alcalá uii aani- distinguían por las banderitas que mejor. Su situación geográfica y fra.nceses. go — en iiuiestros automóviles de ponen en marcha el taxímetro. Sesu raaa, .les coloca de todo punto De ahí, de su vago geiinanismo plaza? No me negará usted que gún que ésta fuera blanca, roja o de vista, entre los latinos y los mental, el que Maeteiiinck no 60TI estupendos y que no tienen azu'l, la tarifa era abusiva, módigermanos; entre Francia, por ima ejerza toda la influencia que su ta-, nada de común con los taxis da ca o increíblemente barata. Los parte, y Alemania, por la otra. lento debía granjear.se. Y eso qua, París, tan desmedrados y tan bai?- más abundantes eran, y sigTjen Tienen el apego a la buena mesa, él se amdlda, en lo pcsible, a Patos... siendo, los fajnosos taxis rouges, come los franceses, y a ila awuicha rís. —A mí rae gustaría que se pa- que han substituido casi por enbebida, como los germanos. Son reciesen, en vina, cosa a ios de Pa- tero al fiacre: al fiacre de París, glotones. La sensualidad y la Srula, Francia tampoco anm la exagecon su auriga de chistera de hurís, de Londres y de Berlín. pecados frailunas, se transparenración, ni siquiera en las pasiole y su cwrriok a la moda de la —^¿Pues qué les falta? tan en sus caras conges'tionada.s-. nes; ni la, ama ni la comprendo» Revolución... •—El taxímetro. Las mujeres de Rubans, de carnes Por eso no existo un sok> graa Hoy, Flaubert, redivivo, poaidría —En Madrid no es costumbre. papandujas, coloradas.y abundandrama en tan rica literatura coLos coches, desde illo támpore, se la faimosa escena del fia,<yi-e de Mates, gritan de dónde son. ¿Quién, mo la francesa. Me e-xtraña qua alquilan por carreras y por ho- daiTie Bovary en un taxi rojo. Por que sepa ver, les preguntaría de nadie haya hecho hasta hoy ¡íatnasu parte, Prévost desenvuelve uno ras. dónde provienen? jante observación. En Francia no —Pero Madrid ha crecido y co- de los episodios más patéticos de Mauricio Maeterlánck, el g r a .1 podía nacer Shakespeare. .Auiiqua Laa Don Juanes (título ambiguo mienza a tener distancias que hapoeta idealista, tampoco puedo ne- la political y la alianza ínwcorrucen conveniente el taxímetro. Sin que la novela se encarga de justigar su procedencia: come, y bebe, sa tendieron a hacer f ratcrniadr ;, ficar) en un pobre taxi. Y es eso: , este aparatito mensurador, el auy fuma, con el placer sensual, ani- con el e5p,í;ritu francés a,los escri- ' tomóvil de alquiler resulta caro. que el automóvil de alquiler es lo mal, de vm genuino belga. tores moscovitas; aunque se puso Cuatro o cinco pesetas cualquier que. viene en Francia a continuaAquel día ha almorzado a con- empeño en traducirlos y divulgarción del tranvía. Es el automóvil carrera es un disparate, y puede ciencia; y en la sala donde pasa los, Francia TÍO los aceptó si'fto a eer un abuso. También ocho o die2 de todos, el que nos lleva a la via tomar café se arrellana en la regañadientes. En el fondo, los tilsita urgente o a la compra aprepesetas por hora es un precio exmás confortable poltrona entre da de bárbaios. cesivo, un precio para los que se surada, el que nos pone en breves una caja de cristal, llena de ciga¿I'or qué? Porque lo son, por minutos en cualquier estación o a divierten y no para los que trabarrillos turcos, y una caja de gor- fortun.a. Porque no portcnecíiii a jan. Eai Madrid, los pequeños pro- la puerta del farmacéutico o el médos, auténticos, magníficos puros una civilización relamida, ni a una gresos urbanos parecen realizarse dico, y el que se toma a la salida de La Habana. raza encaJitadora, pero frivola, del restaurante o del teatro sin ne¿asi exclusivamente en obsequio de Su cuerpo gigantón se incorpo- que ha llegado a Watteau, entro los ociosos y los libeitinos. H a y cesidad de aviso telefónico. ra; su noble cabeza leonina avan- los pintores, y entre los comedióPorque esa es otra... Además de autobuses para llevar a los jugaza y nos reparte pitillos y tabacos, grafos, a Marivaux. Porque son dores, ios bailarines y las horizon- caro, el auto de alquiler madi'iley nos sirve, en vasos hondos, no las fuertes j | , rudos, como los uso,? da tales a los parques y restaurantes ño es difícil. Se está en su paratres gotas rituales, smo un claro sus ptvraixtos. Porque saben oliar, TSL GENE-RAL MAISTBE (SEN TADO), QITE FALLECIÓ AYE R EN, PARÍS. (Foto Ginestal.) nocturnos; pero no los hay pai-a da esperando al cliente y obstruraudal de topacio: el más rico co- porque f':it.'on .jmar porque s'i.vO'i, que los niños puedan salir al cann- yendo—¿en virí'ud de qué gratuita ñac que se fabrica en tierra de sufrir hasta el paroxismo, sin copo. El automóvil de alquiler, oom licencia? — algunas de las plazas Francia. medimiento, sin treno, sin antifa6u pr^tancia de auto particulat, más céntricas y congestionadas de 1Y qué naturalidad encantadora ces ds conveniencia, sin pcn.?ar cu ánivita al paseo por los .alrededo- la oorte. La del Callao parece un y sin simulación la de este gran el odioso téi'raino medio que ;i» res de Madrid, a la prodijjalidad y feudo de chauffeúra y de esos gapoeta! ¡Qué diferencia con lo* conviene traspassu. a la oi-gla. Ese auto sugiere la napanes qué abren las portezuelas A tíd punto BO,ri Jos ru.'vo.si sinfranceses, tan llenos de amaneraa los señoritos o acarrean agua y idea del jerea y la guitarra, o de¡ miento, aun cuando fingen "sains ceros y fuertes artistas, que pueda champaña y el fox-trot. No s o n , esencia para el motor. Aquello es fagon"! Aquí todo es verdad de aseg-ux-arsc de firme, .sin titubeo, como los taxis parisienses, "simo- un zoco árabe con automóviles. buena ley, que poseerán a.lgún día un teatro Mi amigo parece convencido. Es nes que andají solos", sino soberPAKIS 25 (9 m.).—-Ante el Tri- de origen turco y griego que se al bello sexo. Desdé ahora será l^rohibición de un preciso abandonar la imagen del Amigos y parientes, en medio da que será Ja gloria de Rugía y la fcias máquinas para ilusionar con .verdad: a Madrid le convendría bunal de las Bocas del Ródano se dedicaban al tráfico do oro; pero adjetivo la sensación efímera del lujo a loa mucho que circulasen por sus ca- ha verificado la vista'del proceso que cufuido el barco estaba en capolicía como encarna-ción de la la mayor familiaridad, le rodean desesperEK'ión de lo.s demás pueblos. Ya logranla novela má.s inque no tienen todavía el suspira- lles mil o dos mil taxi-autos; -pci-o instruido a los famosos piratas mino para Trc-bisonda, Divany le jGloria al yenial gacetillero que fuerza inteligente, y habrá, que de una atmósfera casi impercepdo automóvil propio. No me pare- ¿y los side-cars, tan ligeros, tan que asaltaron en el mar Negro el propuso robar el baque. El pro- un día inspirado escribió la frase imaginársele ta.mbién do otro mo- tible, pero evidente, de agasajo, teresante de Europa. Y, en teiTtí« ce Tíi'iX que los haya, ni que la simpáticos?... No habíamos pensa- vapor francés "Souírah" y des- cesado te limitó a! papel de. vigi- famosa: "El etitiiaiasmo fuá muy do: co>mo personificación, de la x^cspeto y prevenciones mimosas. no menos artístico, ki vcvo'ución a pojaron a los 400 pasajeros del di. lante -micntoas los otrbs despoja- ¡jralmlc, peíó no i)idcKr.rÍ2^Mkle" ¡ fjv<ícim<yit^r<rií»miMifs'dtíM:ri qiw, Aquello ittéiyoría de JÍU.Í clicnte.s se haga do en ellos. es el homenaje tácito de más radicalban a los panajerós. Luego se dismás de 'policías varones, habrá ñero y las alhajas que «llevaban, Pero, voh'icn,i,io a i<'ranci,!i, Ésta frase, Que ha dado tanto conducir por ellos a los lugares da los que comprenden. El parece no —A nadie se le ocurre que el así como de pioles valiosas y otros tribuyeron el botín en un bosque qiui reír, es, en .suma, el mejor policías hembras. ¿quién es ,el poeta que jíiojor la placer; pero lamento que no exis- side-car sea un vehículo serio. Es objetos,. darae cuenta. Es el más amable . :- i ': ••_.]• cercano a l lugar donde dosembár- compendio de periodismo: si un Esta gracia enérgica no tendrá do todos. simboliza? Racine. So dirá que Victa una categoría inferior do au- un, juguete rápido y para la gente onron. Añadió que uno de los poLas autoridades detuviei'on por licías turcos que le detuvieron le ¡leriodifita oree que con llamar in- que abandonar los atracLivoa del to Hugo e.s también poeta de I'ran» tomóviles de plaza especialmente moza. ¿Que dama se atrevería a Hablamos de España. Recuerda a las COBOS ya estátraje femenino. Al contrario, ¿qué cia, el poeta de Francia. Sí; pero fabricados con este objeto y que salir de' compras en un side-car? aquel entonces a siete sujetos .sos- aconsejó que se hiciese pasar por descriptibles su viaje, como uno de los buono.s dicho todo, huelgan estas hojas vo- cñmiwd, -por muy descortés y popechosos de haber tomado parte en 'pudieran ser utiüzadcs por todo el Hace falta el taxi, el auto sin pre- el hecho, y los pu.sieron a dispo- bolchevique, para que Kemal Bajá lantes, creadas para satisfacer el co galante que sea, no se entre- momentos de su vida, a pesar do el t«mu!tüo.«o Víctor Hw^o ha si" do un hombre, un poeta antitétile pu.siei-a en libertad. m u n d o gracias a su tarifa mó- tensiones, el auto pai'a todos. En sición de la justicia francesa. ansia natural con que los hombres gará para que le ate da pies y la época en que lo realizó. Cuenta, i-esuimidaa cuentas: el simón con manos, si es preciso, una rubiales sonreído, que un joVen poeta le co al carácter francfe. A nadia Los demás procesados refirieron tratan de saber evxinto pasa en el Los presos tenían aspecto más o U1W. moracha de tus que muy mundo. propuso que le tradujera en fran- se le combatió y se le zahirió coa En París, en Londres y en las motor... lo.=i hechos en forma idéntica. Tode honrados burgueses que de homás furia en su propio paí.s. Puepronto han do dar al Cuerpo de De aquí en adelante, sin embarcés. demás grandes capitales de Europa rribles piratas. Algunos de ellos do.^ ellos tomaron pasaje en •?! AiaBBTO INSUA Policía las curvas que hoy le fal—Yo le decía que no conozco el de decirse quo este poeta nacional existen magníficos automóviles de ni siquiera se dieron cuenta... üe barco por indicación do Divany. El go, un periodista no podrá e>m- tan? por qué asaltaron el barco, pues estudiante pianife.stó que había plear, gracias al Sr. Millán de castellano suficientemente. No le os el nienos nacional de los poealquiler sin taxímetro. Suelen enPriego, cierto adjetivo muy proaceptadlo las proposiciones del jefe Acudan, pues, las jóvenes que, sólo se les dijo que había necesiimpoi-taba. II voulait a tcut prix... tas." Lo nacional en Francia ea contrarse en la proximidad de los pio cuando intente describir el éxidad de ver lo que llevaban varios de los bandidos porque necesitaba to de un WMUula)' de toros. Ya no habiendo) cumplido los diez y nue'—¿Cómo iüe llama ese joveíi más bien oti'a cosa: Andrés Che» grandes patacos. Pero el auto do 4.000 rublos con objeto da termive de sa edcul, no lleguen a loa poeta? .nier, pongo por poeta comedido y traficantes en oro y piedras prealquiler propiamente dicho es un podrá calificar el entusiamno de exqui.sito. ciosas que viajaban en e! buque. nar sus estudios, y Divany se los loa espectadores de "entusiasmo veinticinco. Eto se tes exige, y Se queda recordfuido. Luego de coche pequeño, do carrocería ple• no es mucho. ¿Qué mujer, por maUno do los procesados falleció entregó. Sí; io ruso tiene que ser aborredcsborda/nte", imesto que nuestra su lab¿riosa recordación, dice: g'able y con cuatixD asientos ,e:i el. —¿Y quién era ese Divany? celosa autoridad le prohibe salirse dura que parezca, no tiene, lo más, durante la' substanciación del procido en Francia. Y, a pesar de la —Creo que se llama Coi, interior: el niisimo en invierno que veinticviffo años? ceso. Los que han comparecido •—preguntó uno do lo.s defensores. de los -muros de Ui, plaza: no más Revolución francesa, .Fi-iuiria com—¿Coi...? .en verano. Es una máquina mo—Comerciante da camiifos—oon- desbordamientos como los del doY, aparte la edad, se les piden son: Alejaiidi'o Kiznadze, de treinEstas noches está pasando por ta años, propietario; Sergio Mti- tesitó uno da los pre.sps. desta y hasta molesta, pues el mo—^Sí — salta la mujercita do' prenderá difícilaicnt" ¡a .iievcJuamplios conocimientos de gimnamingo último. tor suele descomponerse pronto, Madrid una verdadera nube de naradze, de veintinueve años, jorsia y de tiro de pistola. Esto es Maeterlinck, una joven actriz, ción rusa. ¿Cómo hit de. giiíííar elOtro declaró que iba en el barco Si un matadc^ lleva a cabo, aunporo indiscutiblemente útil y al al- iwlillas que caen en los patios y nalero ; Serafín Tohanoúkvadr.e, para realizar un negocio en Tre- que sea en ios • más indubitaitles indispensable. Sin gimnasia no se 8ub.stituta de Geoi-gette I^cblanc en país que produjo al paiacicgo efticance de todas las fortunas. Ade- .'^obrc las buliardillas en cantida- de treinta y siete años, jornalsi'o; bisonda, cuajido se lo acercó Di- condiciones de heroicidad, estupen- entra. No hasta que una aspiran- el corazón del poeta—. Sí; es un pelucado de Luis XIV, a aquel emmás de que el ta-xi marca el pre- des extraordinarias. Anoche pene- Nikiford, de die?; y seis años", vany y le propuso tomar parte en das hazañas, tendráí que confor- te haya visto hacer planchas sin joven poetíi de la aristocracia: polvorado Racíne, cuyos amantea tró una enorme cantidad de ellas no conversan, sino di.sj;uri-e:n e,n tocio del recorrido y pennite calcu- en un esitablecimiento de la calle Koutia, e s t u d i a n t e _ ; Procopío un robo a un per,5a y a Un turco. marse con las orejas y los rabos cuento en derredor, suyo a seres Coi de... viajero se negó, y entoiices el de los conmpetos; no sueñe con del otro sexo que le buscaban la no pulcro y eortesanesco, cuyos sul a r el gasto, las compañías explo- de Alcalá, y a poco caían al sue- Glonty, do treinta y cuatro años, ICl Se queda buscando: no aeici-ta. conversación, Y sin tirar bien a bandido lo amenazó con Ratarle. frimientos CKcémco.s no de.pcompotadoras suelen establecer las ta- lo agitándose en extrañas con- labrador; Hintibzokaiamr, de cua- Su intervención, so limitó a guar- los ho¡m,bros de los espectadores pistola, tompoco. Ningún otro pro- Nadie acierta. rifas en consonancia con la como- vulsiones, hasta quedar niiuertas. renta y siete años, y Valacan dar una maleta que le habían con- enloquecidos de admiración. Los cedimiento de aeomeiividad femeHabla también del editor Satur- nen apenas Jas líneas del pcrablante, mortales que vieron el otro día pa- nina, ni el vitriolo siquiera, podrá no. Ya üe este "editor Saturne" he cuyaü pasiones f;oii tan retórica»»? didad y la fuerza de locomoción Lo raro del caso es que en I^on- Glonty, de treinta año.s, comer- fiado. sar en triunfo por el centro de ¿Cómo' ha de gu.st-ar, por ejemplo, ; dres y París .se está dando el mis- ciante y guardián del Consulado del vehículo. Alejandro Kiknadze es un an- Madrid a Emilio Méndez guarden reeimplazar al hábil manejo de kc oído hablar en casa de Plon. de ese bravio, despeluznante y coló-» mo fenómejio, según leemos en los de Georgia en Batum. pistola. —¿Saturno...? tiguo agente de la Policía slcreta Antes de la guerra, el taxi-auto periódicos de aquellas capitale.s. sal Dostoiewsky, el único hijo qxii&, Este declaró que había sido in- de Batum. Su padre era noble, y bien osa imagen dentro ele su me—Satuj'no o Saturnia... AñOiS, bíceps y 2>istola smi tres moria. Es como si hubieran visto era una de las comodidades de la después de seis centurias, ha roei*Las i>alillas invaden ¡incluso la.5 vitado por un tal Divany a tomar su niadre, princesa. La revolución el último triunfo de un Empera- asignaturas relativam,ente fáciles. —¡Ah! Saturnin, Saturnino, edivida de París. Existían ta.xis de habitaciones en donde no hay ro- pasaje en el "Souírah" con objenocido «1 Dante? rusa confiscó su.? bienes, y esta Tendremos policio. fem,enina. Y tor; ¡ya caigo! tres clases, de tres precios, y como pas de ninguna clase. to de de.'ívalijar a tre-s individuos circunstancia le obligó a trabajar dor romano el dia antes de que lod quizá, Recuerdo que años atiás vi .recon el tiempo, veamos la. bárbaros se adueñarffn, del ImpeLa mujercita de Maeterlinck decon repugnancia. Había ido al rio. Y cojiste que los bárbaros, en poltrona de D. Millán, esto es, la sea realizar una tournée artística px-esentar en • París Los hermanos "Souírah" porque se le indicó que ocasiones, sabían hacer muy bien Direcoión de Seguridad, ocupada por .España. Maeterlinck da las ra- Karamazoff, recién arreglados paen él viajaban personas so.specho- las cosas. por una. noble matrow.1, que ahora i-a la escena al gusto pari.sino, hassas. En el momento del robo, los estará preparándose para el ingre- zones por que ahoi-a no conven- ta donde fué posible, por Jacqua» dría. Son razones de hombre do Policía femenina so con el ejercicio de sus músculos bandidos le intimaron que no se Coppeau, director ahora del Vteim negocios. moviese si no quería perecer. Si; la Policía abre sus puertas y ti tiro al blanco. Cuando le desembarcaron je ofrePorque este poeta idealistu es, Colmnbier. Yo asistía con un airtigo, .Eoi*ciei'on parte del botín, que él se w ^ s ^ v ^ ^ \ ^ v s » s ^ ^ » ^ ^ ^ ^ > ^ ^ ^ i w « ^ ^ ^ ^ ^ > i ^ ^ w < ^ > ^ w ^ w » < > ^ w w al mismo tiempo, un basiness man zier-Dorct-re-s, ¡i quien despué.s denegó a aceptara y se administra a maravilla. Los pasajeros que han compaPienso en Galdós, escritor realis- voró la ,:íunrr:i. Mi amigo se fíi'i» recido refieren el asalto de los pita, que benefició tan mediocremen- crespaba, se rebelaba contra aqUB* ratas en el momento en que estate su opulenta mina de oro. Pien- lia humanidad que .se martiriz.ii a ban más descuidados. La ti-ipulaso también en Valle-Inclán, idea- «í propia, con delectación enfermición del barco se componía de 63 lista como Maeterlinck, que, como za. .En los entreactos?, el público hombres. Todos fueron inmoviliMaeterlinck, se administra a con- más inteligente, tascaba el freno, zados por los bandido^ Después de hablar el fiscal y las ciencia. Está visto: no hay cQ;mo protestaba, se sentí.-i. ho-idíí en .•!« defensas, el Tribunal condenó a ser poeta idealista par;i resul^ir tradición, en su sen,;;ib¡rLdad, en, la educación chisica de su g.usto. Tolos dos Glonty, Mtinaradzc y a hombro práctico. do el pilblico, aquella noche, saliüi Tchanoukvadze a diez años de reclusión y diez de prohibición de pésimamente itnpresiomido. LISBOA 25 (8 m.).—El históri- da por ü . Alfonso Enriquez, dan estancia en el pefs, y los otros Y yo me lO explicó. Aquella Iru» Dinís y D. Juan I. co castillo de fían Jorge, que cofueron absueltos. Mauricio Mficterlinck.que es nói*manjdad de Dost-oiowsky e.í: «t.ra En la ciudadela, que es una de rona una de las siete colinas de la ciudad, va a ser convertido en las más curiof>as antigüedades de dico, y on parte, por lo 'menos, de Ixuimanidadque la de Marivaiíx. La es'ta capital, se con.ssrva aún la raza germánica, como lo indica su pieza, en effx:to, produce el esc»h>« gran hotel. El ministro de Comercio presen-' puerta llamada de Martín Moniz, nombre nada latino, tiene en su frío que produce la bajada a un sótara en bi-eve al Parlamento una poi-que desde ella, el guerrero de claro talento cierta nebulosidad, tano húmedo, por donde troten ra-« proposición de ley autorizando al este nombre facilitó la entrada do muy poco francesa. Pero semejan- tas y vuelen cucarnchas. Aquella Gobierno para ceder por noventa los soldados del primer Rey do te niebla baja de lo infiaiito. I atmósfera do resquemores, aqueiloa MALAGA 26 (4,30 t.).—Anoche años a una impoi-tante Empresa Portugal. hombre.s de angustia, aqüol conísDetrás de esa nébula de perla, También es muy notable I,a iglese cclcbíó la tradicional procesión portuguesa el famoso castillo de sia que existe dentro de sus mu- rota a veces por un chispazo de tante desafío a la d-csesp<íración, marítima do la Virgen del Car-' San Jorge. fiol, se adivinan los abismos .que aquella carrera tendida de. todas men. El gran hotel que se proyecta rallas, antigua mezquita árabe, no podemos alcaazar, poro que a los personajes hacia ci cx-iraon, el consagrada al culto c-itólico desde La imagen fué embarcada en un tendi-á, como mínimo, quinientas ratos presentimos, y a cuyo borde, remordimiento y la locura; toda lanchen iluminado con bombillas habitaciones, teatro, sajas do bai- 1148. aquella obra do n^istico y de atorenti'evisto, meditara-os. eléctricas, el cual'* fué renwlcado le y salones iiara otros espectácupor un vaporcito hasta la desem- los. La Empresa se compromete a Maeterlinck, con frase poética, mentado, es co.sa de pesadilla. bocadura del puerto, y luego re~ construir un cuartel para mil plaWama a esos linderos del razonaNo. La clara y risueña Franciat gresió al muelle. zas, con su impedimenta y matemiento adonde él gusta llevarnos no amará nunca eso. Pero eso, coKl acorazado "Alfonso XIII" rial; otro edificio para internado de cuando en cuando — como sus mo la nébula maeterjirickiana, e.* proyectó sus reflectores, y algunos V reformatorio y otro en Penha de hermanos mayores desde Plotino vaho de lo infinito, de loa barcos surtos en el puerto Franga para estación telefónica y hasta Swcdemborg — los confines telegráfica militar. R, BLANCO-FOMBONA también estuvieron iluminador ' CÓRDOBA 26 (1,15 t.).—En el Desde el muelle presenciaron el También se compromete la Em- río Guadalquivir, y en el sitio del pensanniento, más allá del circuParís, juUo. acto más de 40.000 personas. presa a consex-var cuanto de his- llamado El Arenal, pereció ahoga- lo polar del espíritu. U n h i ñ o de unos doce años ca- tórico contiene el castillo, y para do el soldado del regimiento de Tales excursiones no son famiyó al agua, y fué auxiliado por los garantizar esto, hará un depósito la Reina Joaquín Baró Marín, na- liares ni gratas al espíritu franKecomenaainoa « nucstroa wiuntripulantes de uno ds los botes del de un millón de escudos. cés, ian preciso, tan geométrico, ciantes la mayor prontitud est !« tural de Sevilla. •^¿Y dice usted que este pueblo es sano? ^ servicio público. El castillo de San Jorge es de tan de líneas rectas... y cortas. Lo entrega de los origina l<?3, para no —Como que rM> hay más enfermo que el médico, aue se está murienTorntinada la procesión, se cele- construcción romana. Los moros •' ' ia expongo sin acerbidad, por cuanto vernos obligados a demoi-iW bró un baile, que estuvo muy ani- ampliaron después esta fortaleza, de hambre^ publiuación de éstos. aue más tarde volvió a i^er amplia- Tel." d<5 r-A VOZ: 22-27-J. yo mismo, en tal sentido, perlenez-' mado. LOS PIRATAS CONDENADOS LA CENA DE LAS BURLAS Plaga de poJÜlas eo Madrid, Londres y París PUNTO DE \?ERANEO DESDE LISBOA E! castillo de San Jorge, convertido en hotel Procesión marí ma Un soldado se ahoga en e! 6üada!qüi^ir