POR: FIONA GREEN • FINANZAS Se acabó la felicidad y viene la realidad. Guadalupe-Reyes nos ha dejado enfiestados pero gastados y no sabemos por donde comenzar. Si siente que la cuesta de enero está muy empinada y que se va a tardar unos tres meses en superarla, le sugiero que se encomiende a "San presupuesto" el que todo lo puede. Ilustración: Carlos Rodríguez City Life • Enero no le cueste E nero es probablemente el mes más difícil para el presupuesto familiar o personal. Y es que a partir del 12 de diciembre la emoción de las fiestas de fin de año y lo que conllevan, motivan al gasto sin ton ni son, regalitos por aquí y por allá, cenas, compromisos, ropa nueva, pagos rezagados y después... la cruda realidad. La cuesta de enero más que un mito es una realidad que se genera desde un año atrás. Además, es de efecto duradero porque no se acaba en enero, se mantiene uno o dos meses más. ¿Y por qué existe? Técnicamente se genera por factores inflacionarios de fin de año. El pago de aguinaldos y premios de fin de año aumenta la FINANZAS • capacidad de compra y el circulante, lo que se traduce en un aumento para la demanda de bienes y servicios. Históricamente, el aumento promedio de los precios es mayor al aumento promedio de los sueldos y salarios. Y por último, los tres primeros meses del año, hay que pagar algunos impuestos: servicios, tenencias, predial, entre otros. Esto aumenta el presupuestos de gastos. Hay quienes, para colmo de males, tienen que pagar pólizas de seguro o las reinscripciones a colegios particulares para el año escolar 2006-2007. Lo más difícil es subir Su nombre lo dice, es una cuesta. Lo empinada que esté depende de cada familia, ya que pueden tomar medidas preventivas para tener una subida más suave. Lo primero que se debe tomar en cuenta para saber si podrá sobrevivir a la cuesta, es el ahorro previo. El segundo elemento es el presupuesto anual de gastos. Si no dispone de tiempo, elabore un presupuesto considerando los 10 conceptos más influyentes en el gasto mensual. Considera el pago de obligaciones fiscales: impuesto predial, agua, declaración trimestral y anual, tenencia de automóviles. Si para estas fechas ya perdió el control de lo que ha firmado con tarjetas de crédito, organice los comprobantes de pago y sume lo que debe. Es probable que el resultado sea perturbador, al comprobar que todas sus quincenas están ya comprometidas. Para que la cruda aminore, es buen tiempo para tomar medidas preventivas. No se trata de aplicar una “economía de guerra”, sino de conocer los gastos y prescindir de los menos urgentes. Hay algunos rubros importantes e indispensables: básicos, alimentación, transporte, créditos y deudas, seguros, educación, gastos médicos, impuestos, sueldos y otros. Por otro lado, hay un punto importante en la tabla: el ahorro. Para que funcione debe considerarse como un gasto o una deuda. Es preciso considerar que las metas establecidas en el presupuesto deben ser realistas y adecuadas a la situación de la familia. De los rubros mencionados, y que se sugieren enlistar por escrito (papel y lápiz o en computadora), hay algunos gastos que no tienen por qué hacerse, y en la medida de las posibilidades se pueden eliminar. Por ejemplo, si no tiene un seguro de gastos médicos, es preciso considerar gastos en medicinas y enfermedades, más aún cuando hay niños pequeños, prever de 3 a 4 consultas con el doctor al año. Muchas veces los gastos diarios no se controlan, y se gasta la quincena en salidas a comer, transporte, mantenimiento del auto o de la casa, ropa de temporada, recreaciones, regalos, viajes o medicinas, entre otros. Para saber cuánto se tiene disponible para el gasto diario, se hace una operación muy sencilla que es la resta del ingreso mensual y los gastos fijos. Sin privarse de nada No es necesario eliminar el presupuesto para diversiones. En lugar de salir o rentar películas todos los fines de semana, puede reducir este gasto a la mitad. Existen ahorros domésticos que no se consideran relevantes y por lo mismo se omiten. Un ejemplo, es encender todas las luces en casa, aun cuando no es necesario. Un cambio de hábitos puede generar un ahorro en el pago bimestral entre 15% y 25%. Por último, si prefiere llevar el control de gastos en su computadora y de una manera dirigida, hay softwares de administración personal: Money y Quicken, son los más usuales. También puede elaborar una hoja de cálculo para que le realice las sumas y restas de forma automática. Sugerencias 1. Elabore el presupuesto de gastos e ingresos. 2. Guarde las tarjetas bajo llave, para no usar financiamiento por lo menos durante los primeros dos meses del año. 3. Considere el uso de las tarjetas de crédito para casos particulares y no para gastos extraordinarios que no estén contemplados en el presupuesto. 4. Anote en una libreta o expediente de computadora los gastos, ya sea por día o semana. 5. Mida su capacidad de pago para hacer frente a los saldos pendientes de diciembre. 6. Gaste de acuerdo a los ingresos, sin considerar las líneas de crédito disponibles. 7. Piense en el costo de oportunidad. Antes de realizar un gasto extraordinario, evalúe qué otros destinos podrían tener su dinero, lo que está dejando de hacer o adquirir con el dinero que va a utilizar. 8. Cuide la liquidez. Mantenga una cantidad de dinero disponible para oportunidades. 9. Al invertir el dinero diversifique las opciones, así podrá comparar rendimientos y ajustar el portafolio después del segundo trimestre. • Enero • City Life