Consejo de la Magistratura - Poder Judicial de la Nación

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Consejo de la Magistratura
RESOLUCION N° 593/09
En
Buenos
Aires,
a
los
26
días
del
mes
de
noviembre del año dos mil nueve, sesionando en la Sala de
Plenario
del
Judicial
de
Consejo
la
de
Nación
Presidencia del Dr.
la
“Dr.
Magistratura
Lino
E.
del
Palacio”,
Poder
con
la
Luis María Bunge Campos, los señores
consejeros presentes, y
VISTO:
El
Diana
expediente
(Consejera)
N°
c/titular
156/2009,
del
caratulado
Juzg.
Fed.
“Conti
N°
3
de
Córdoba, Dra. Garzón de Lascano” del que
RESULTA:
I. La denuncia formulada por la Dra, Diana B.
Conti a la Dra. Cristina Garzón de Lascano, titular del
Juzgado Federal N° 3 de Córdoba (fs. 1/38).
El objeto de la denuncia adjudica a la
Jueza
mencionada permitir que “personas procesadas por delitos
de lesa humanidad cometidos durante la dictadura militar,
(desaparición forzada de personas, torturas, homicidios),
fueran
alojados
en
cuarteles
del
Tercer
Cuerpo
de
Ejercito”. Esta situación derivó en diversos pedidos del
Fiscal
de
la
causa,
del
Ministerio
de
Defensa
y
organismos de Derechos Humanos para que los detenidos en
la unidad militar aludida fueran trasladados a cárceles
comunes dependientes del Servicio Penitenciario (fs. 38).
La
jueza
Garzón
de
Lascano,
ante
quien
tramitaba la investigación de dichos delitos, accedió a
lo solicitado cuando así lo dispuso la Cámara Federal de
Apelaciones de Córdoba en resolución dictada el 20 de
mayo de
2009.
Agrega
documentación
consistente
en
el
acta
labrada el 28 de abril de 2009 por el Fiscal Federal
Jorge
Auat,
Seguimiento
titular
de
de
Causas
Humanos
durante
el
Federal
Graciela
López
la
por
Unidad
Violaciones
Terrorismo
de
de
de
Filoñuk
Coordinación
a
los
Estado,
y
la
la
y
Derechos
Fiscal
Directora
de
1
Derechos
Humanos
del
Ministerio
de
Defensa
Ileana
Arduino, en la que se constató que las condiciones de
detención de quienes estaban sometidos a proceso eran
desiguales
privadas
comparadas
de
sus
con
el
libertad.
resto
Así
se
de
las
personas
constató
que
las
habitaciones de los detenidos tenían televisión y baño en
suite, acceso a internet gratuito, servicio de comida y
de atención médica a cargo del personal adscripto a la
unidad militar. Asimismo, expuso que las puertas de las
habitaciones donde se alojaban los detenidos se cerraban
desde adentro y que el régimen de visita permitía que
éstas pernoctaran con los detenidos y no eran requisadas.
A más la custodia de los detenidos estaba a cargo de
personal militar lo cual contrariaba lo dispuesto por la
ley
de
Defensa
Nacional
y
de
Ejecución
Penal
(ley
24.660).
Refiere que es así que la Ministra de Defensa
Dra. Nilda Garré manifestó que las unidades militares no
estaban
diseñadas
personal
para
militar
no
servir
estaba
personas privadas de su
Agrega
que,
de
cárceles
capacitado
y
para
que
el
controlar
libertad.
según
resoluciones
y
notas
que
acompaña a su presentación, cuando la Ministra de Defensa
ordenó a las unidades militares que no se acataran las
nuevas
órdenes
magistrada
judiciales
concedió
de
recibir
arrestos
detenidos,
la
domiciliarios
y
excarcelaciones.
Por
último,
puntualiza
que
la
magistrada
no
trasladó a unidades penitenciarias a siete ex-policías
del Departamento de Información que están alojados en la
Guardia
de
Infantería
de
la
Policía
de
Córdoba
y
al
Coronel Gustavo Diedrich que se encontraba al momento de
la
denuncia
detenido
en
la
Brigada
de
Infantería
de
Montaña VII de Mendoza.
II.
La
presentó
ante
este
términos
del
Acusación
Dra.
art.
(fs.
Cristina
Consejo
11
del
46/56),
de
Garzón
la
de
Lascano
Magistratura
Reglamento
efectuando
de
un
en
se
los
Disciplina
y
permonerizado
descargo a cada una de los hechos motivos de la denuncia.
2
Consejo de la Magistratura
Resumiendo lo expuesto por la magistrada, cabe
resaltar que, a partir de septiembre de 2003, ordenó la
detención de imputados en causas donde se investigaban
graves violaciones de Derechos Humanos y ordenó que la
privación
de
libertad
de
los
imputados,
militares
retirados del Ejercito Argentino y civiles pertenecientes
a los Servicios de Inteligencia de la misma fuerza se
cumpliera
en
dependencias
militares
destinadas
a
la
detención del personal militar en actividad.
Que
en
mayo
de
2009
se
encontraban
en
esa
situación solo ocho detenidos en distintas causas por los
delitos señalados.
Que ella no impartió al Ejercito la orden de
alojar a los encausados en dependencias distintas de las
que
utiliza
la
fuerza
para
alojar
al
personal
que
mantiene detenidos.
Manifiesta
autorizada
preventiva
la
doctrina
tiene
y
como
magistrada
que
jurisprudencia
único
objetivo
conforme
la
prisión
neutralizar
toda
posibilidad de riesgo procesal y responder a la necesidad
de asegurar el éxito de la investigación y que no se
frustre
la
ejecución
de
la
eventual
condena
por
la
incomparecencia del reo.
Que las órdenes de alojamiento en dependencias
militares a los detenidos por delitos de lesa humanidad
no constituyeron una novedad o un procedimiento distinto
al que se siguió en casi todos los casos en que se trató
el juzgamiento de estos delitos.
habitual
de
personas
detenidas
Esto fue una práctica
cuya
causa
o
trámite
procesal se encontraban ante el ámbito jurisdiccional ya
sea en la Primera Instancia, como ante las Cámaras de
Apelaciones
Orales,
o
o
los
durante
el
recursos
proceso
ante
la
ante
los
Cámara
Tribunales
Nacional
de
Casación como ante la misma Corte Suprema de Justicia;
acompañó un listado de causas a título de ejemplo.
Esto
Ministerio
de
fue
así
Defensa,
hasta
se
que,
ante
fueron
el
pedido
pronunciando
del
los
distintos Tribunales respecto de esta situación.
3
Consta a fojas 41 de las copias certificadas
que obran en el anexo acompañado por la Jueza en su
descargo, que con fecha 20 de mayo del corriente año,
ante un pedido concreto efectuado al Juzgado por el Jefe
del Estado Mayor del Ejercito, comunicándole lo dispuesto
por la Ministra de Defensa la Magistrada dispuso el 21 de
mayo
el
traslado
de
los
ocho
detenidos
bajo
su
jurisdicción a una unidad del Servicio Penitenciario de
la Provincia de Córdoba (fs. 42). Por lo que en la misma
fecha en que la Cámara Federal de Apelaciones de Córdoba,
por Acuerdo Extraordinario 69/09, ordenó el alojamiento
de todos los detenidos por hechos vinculados a delitos de
lesa
humanidad
penitenciarias,
sean
esta
trasladados
orden
ya
estaba
a
unidades
vigente
en
su
Juzgado.
Explica
luego
en
detalle
que
mientras
los
detenidos estaban alojados en unidades militares no se
dio ningún caso de intento de fuga o que pudiera dar
lugar a un entorpecimiento del proceso u adulteración de
las pruebas.
Hubo detenidos que permanecieron, aún después
que la causa fue elevada a juicio, como se dio en el
caso que tramitó ante el Tribunal Oral en lo Federal N° 1
de Córdoba donde, entre otros, los imputados eran Luciano
Benjamín Menéndez, Hermes Oscar Rodríguez, Jorge Acosta,
Luis Manzanelli y otros, quienes permanecieron detenidos
en dependencias militares hasta su sentencia.
El hecho que la mayor cantidad de detenidos
hubiere
correspondido
a
quienes
se
hallaban
bajo
su
jurisdicción se debió a que fue la jueza que mayor número
de imputados por estos delitos logró involucrar luego de
ardua investigación sobre estos hechos.
Niega
en
su
descargo
que
sean
ciertos
los
hechos relatados, en ocasión de una inspección efectuada
a la unidad por el Fiscal Federal Jorge Eduardo Auat
junto con la Fiscal Federal nro. 3 de Córdoba
Graciela
López Filoñuk, con relación a una serie de privilegios de
la que disfrutarían los detenidos. En tal sentido destaca
la orden que ella impartió fue alojar a los detenidos en
4
Consejo de la Magistratura
los lugares que la unidad militar tenía destinada a la
detención de personal en actividad.
Afirma que no autorizó que hubiera televisiones
en las habitaciones, sí autorizó a ver televisión a los
detenidos en uno de los salones del área de detención.
Niega
asimismo
el
servicio
de
suite
de
que
gozarían los imputados pues las suites son propias de
construcciones
de
lujo
de
las
que
se
carece
en
los
lugares de detención de las unidades militares.
También
relata
que
el
incidente
que
habría
sucedido entre dos detenidos -Herrera y Padovan-, por lo
que se los separó y se alojó al último, en el Casino de
Oficiales fue una medida interna tomada por la autoridad
militar y por un hecho que había ocurrido cuatro años
antes
de
la
visita,
por
lo
que
al
momento
inspección ninguna de las dos personas
de
la
se encontraba
detenida en la unidad militar señalada.
El régimen militar al que estaban sometidos los
detenidos emanaba de una ordenanza que en el año 2008
había
expedido
el
Comandante
del
Tercer
Cuerpo
de
Ejército.
La magistrada expresa que cumplió estrictamente
con el régimen legal vigente aplicable a los caso de
detención
de
personas
y
privación
de
su
libertad
ambulatoria. En estos casos su criterio fue restrictivo,
y si hizo lugar al pedido de arrestos domiciliarios lo
fue
por
razones
de
edad
o
estado
de
salud
y
en
cumplimiento estricto de lo dispuesto por el artículo 33
de la ley 24.660.
Destaca
Lascano
todos
que
los
casos
de
cumpliendo
especialmente
casos
expuestos
personas
pena
la
Jueza
en
esta
procesadas,
privativa
de
Garzón
de
denuncia
son
que
la
no
estaban
libertad
como
consecuencia del cumplimiento de una condena dictada en
ese sentido.
CONSIDERANDO:
1°)
actuaciones,
Que,
sólo
de
se
lo
expuesto
advierte
la
en
las
presentes
disconformidad
de
5
quienes
no
concuerdan
con
el
régimen
de
detención
otorgado a los imputados de delitos por violación de los
derechos humanos.
El criterio que tuvo la Jueza cuando ordenó
que
se
alojen
en
unidades
militares
lo
plasmo
en
resoluciones fundadas en normas jurídicas vigentes y en
jurisprudencia aplicadas a dichos casos, equivocadas o no
tales resoluciones fueron dictadas dentro del ámbito de
discreción jurisdiccional que las leyes le otorgan a los
jueces.
2°)
Que,
no
obstante
ello
y
a
mayor
abundamiento cabe destacar que, es cierto que los jueces
pueden equivocarse ya que en definitiva, se trata de una
justicia humana. Pero para ello los Códigos Procesales
establecen remedios.
Por otra parte, también se debe recordar que en
muchas
ocasiones
la
ley
es
susceptible
de
diversas
interpretaciones, pero en definitiva, cualquiera sea la
interpretación, aún la menos aceptable para el común de
la gente, ella no puede justificar la aplicación de una
sanción pues resulta evidente que en el caso concreto lo
que está en juego es la evidente disconformidad de la
denunciante con el criterio sustentado.
3°)
“nuestra
Que,
en
ese
organización
sentido
judiciaria,
sostiene
humana
y
Parry
que
previsora,
reposa sobre la base del posible error judicial”, y a
ello obedecen los recursos que consagra la ley contra las
decisiones que
(...);
el
se
error
independiente de la
estiman equivocadas
no
puede
por las partes
incriminarse
porque
es
voluntad humana”, y por ello “la
sociedad y la ley no podrán exigir un juez infalible”
(“Facultades
Disciplinarias
del
Poder
Judicial”,
Editorial Jurídica Argentina, Buenos Aires, 1939, página
337 y siguientes).
4°)
Que,
en
virtud
de
las
consideraciones
efectuadas precedentemente, y atento a que no se observa
ninguna irregularidad en la actuación de la magistrada
denunciada
que
configure
alguna
de
las
causales
de
remoción previstas en el artículo 53 de la Constitución
6
Consejo de la Magistratura
Nacional, ni alguna falta disciplinaria establecida en el
artículo
14
de
la
Ley
N°
24.937
y
modificatorias,
corresponde desestimar las presentes actuaciones.
5°) Que ha tomado intervención la Comisión de
Disciplina y Acusación –mediante dictamen 305/09-.
Por ello,
SE RESUELVE:
1º) Desestimar la denuncia formulada contra la
Dra.
Cristina
Garzón
de
Lascano,
titular
del
Juzgado
Federal de Córdoba N° 3.
2º)
Notificar
a
la
magistrada
denunciada
y
archivar las actuaciones.
Regístrese.
Firmado por ante mí, que doy fe.
Fdo: Luís María Bunge Campos - Hernán L. Ordiales
(Secretario General)
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