La economía argentina durante 2005 y evolución reciente INFORME ECONOMICO Año 2005 y avances del I trimestre de 2006 Cuadro Titulo de cuadro Sub-titulo del cuadro La Economía Argentina durante 2005 y evolución reciente 2 Textos y contenidos del grafico o cuadro textos Titulos 1. Sub-titulos 2. Sub-titulos 3. Sub-titulos Cuadro Titulo de cuadro Sub-titulo del cuadro Textos y contenidos del grafico o cuadro textos textos Cuadro Titulo de cuadro Sub-titulo del cuadro Textos y contenidos del grafico o cuadro (1) Notas al pie (2) Notas al pie (3) Notas al pie 1. Performance Macroeconómica y Desarrollo Económico La economía argentina está consolidando una recuperación que ha sido de mucho mayor magnitud y duración de lo que muchos preveían hasta hace tan sólo dos años. Una vez más, todos los pronósticos quedaron por debajo del crecimiento efectivo de 9,2% que terminó exhibiendo la economía, repitiendo así la performance de 2003 y 2004, dos años excepcionales en materia de actividad económica. Las expectativas privadas prevén que durante 2006 seguirá el crecimiento, aunque éste comenzaría a mostrar una lenta y saludable convergencia a una tasa más acorde con la sostenibilidad a largo plazo de la estrategia en marcha. 3 El nuevo contexto ha permitido una mejora de la situación social a un ritmo impensado al momento de iniciarse los primeros síntomas de la recuperación. Pese a la magnitud del deterioro social provocado por la experiencia de la Convertibilidad y su colapso, los indicadores sociales experimentaron una recuperación sostenida. El desempleo urbano ya acumula una reducción de casi 14 puntos porcentuales desde el máximo histórico de 23,5% observado en mayo de 2002. Los salarios reales se siguen recuperando a un ritmo notable: el último año, los asalariados registrados aumentaron su poder adquisitivo en casi un 9%. El crecimiento de 2005 también se reflejó en una menor marginación social: comparando los últimos semestres de 2004 y 2005, 2,4 millones de argentinos abandonaron la pobreza y otros 1,3 millones dejaron de ser indigentes. El buen desempeño macro no se limita a cuatro años de crecimiento ininterrumpido y la recuperación social asociada al mismo. La disciplina fiscal, con superávit primarios y financieros récord desde hace décadas; la reducción sistemática de la carga de la deuda más allá de la reestructuración alcanzada a principios de año; el superávit externo sostenido tanto en la cuenta comercial como en la cuenta corriente; la prudencia monetaria en un contexto de acumulación prudencial de reservas internacionales; el vigoroso crecimiento y diversificación de las exportaciones; el aumento continuado de la inversión productiva; la reversión del proceso de fuga de capitales; son otros de los rasgos característicos de un proceso de genuino desarrollo que permitirá ir dejando atrás años de declinación persistente. Consolidar los favorables desarrollos recientes es sólo el punto de partida para comenzar a revertir esta situación y volver a instalar la noción de progreso y cohesión social, un componente esencial de la sostenibilidad de cualquier modelo de crecimiento. Hoy, el principal desafío del gobierno, además de preservar los equilibrios macroeconómicos y la estabilidad, es cimentar los pilares que terminen de configurar una estrategia de crecimiento sostenido con equidad e inclusión social. El desarrollo económico requiere en primer término una reinserción exitosa, aunque no ingenua, de Argentina en el mundo. Las experiencias de fines de los 70s y de la década de los 90s enseñan que las relaciones internacionales no deben estar centradas exclusivamente en el plano financiero. Por el contrario, se deben aprovechar las oportunidades comerciales y de inversión brindadas por el proceso de globalización, pero minimizando al mismo tiempo sus riesgos. En el plano comercial, es necesario profundizar los procesos de integración regional en marcha, asegurando ganancias recíprocas para todos los socios y aprovechando al máximo la complementación productiva entre estos países. En segundo lugar, se debe continuar promoviendo la inversión y el aumento continuo de la productividad a través de una densa red de innovación que permita incorporar al proceso productivo mano de obra calificada e innovaciones basadas en la investigación y el desarrollo. En tercer término, hay que continuar en la senda de la mayúscula tarea de reconstrucción institucional que, al tiempo que permita delinear mecanismos para aprender de los errores pasados y erigir una burocracia pública de alta calificación y plena vocación de servicio, asegure la estabilidad de las reglas de juego para todos y la posibilidad efectiva de dar cumplimiento a los compromisos contractuales asumidos. Finalmente, y por sobre todas las cosas, el desarrollo económico debe venir unido a un concepto de equidad en el reparto de los frutos del crecimiento económico a través de la creación sostenida de oportunidades de empleo genuino y de mejora continua de los ingresos, no como resultado de un siempre elusivo “derrame” de dichos frutos, sino como prerrequisito indispensable para la materialización y puesta en marcha de ese mismo crecimiento. Estos son los ejes que guían el esquema de mediano y largo plazo del programa en marcha. La Economía Argentina durante 2005 y evolución reciente Los datos disponibles confirman que el nuevo contexto macroeconómico ofrece excelentes perspectivas, no sólo de crecimiento en el corto plazo sino que sienta las bases para un cambio definido en el modo de funcionamiento de la economía en el mediano y largo plazo, dejando por detrás décadas de inestabilidad y recuperaciones efímeras. La Economía Argentina durante 2005 y evolución reciente 4 La situación macroeconómica global, y en especial de la región, ha sido muy favorable en términos de una mayor demanda externa de las exportaciones del país y de los términos de intercambio resultantes. En este contexto, la orientación macroeconómica vigente ha permitido aprovechar al máximo estos beneficios, sin incurrir en riesgos innecesarios, en particular de endeudamiento externo a tasas internacionales bajas en un contexto de alta liquidez internacional, que hubieran puesto en peligro la sostenibilidad del proceso de crecimiento. De esta manera, las políticas preventivas de superávit fiscal, de reestructuración de la deuda y desendeudamiento paulatino posterior y de estímulo a la inversión privada y pública permitirán afrontar sin mayores riesgos los eventuales cambios en la coyuntura internacional, y minimizar sus consecuencias sobre la economía nacional. 2. El Desempeño Macroeconómico durante 2005 Actividad El año 2005 culminó con una notable tasa de crecimiento del PIB de 9,2%, completando así 15 trimestres consecutivos de aumento del producto, que acumula un 35,2% en términos desestacionalizados desde el mínimo de la crisis, correspondiente al primer trimestre de 2002. Esta serie de crecimiento, que de acuerdo a la mayoría de la previsiones se sostendría durante 2006, es sin lugar a dudas una de las más extensas en la historia económica contemporánea del país. De esta manera, el PIB per cápita ya se halla en los mismos valores que experimentaba la economía en los máximos de 1998 (ver Gráfico 1). Todo indica que el primer trimestre de 2006 seguirá exhibiendo tasas de crecimiento semejantes en términos interanuales, aunque se espera una ligera desaceleración del crecimiento del PIB, en sintonía con la convergencia de la producción hacia sus tasas sostenibles en el largo plazo. Gráfico 1 PIB per cápita Base II Trim. 1998 = 100 105 100 II 98 100,0 IV 05 99,7 Del lado de la oferta, el año que pasó consolidó la tendencia a la generalización del creci95 miento, comportamiento que se observaba ya hacia mediados de 2004, lo que implica que los 90 servicios han comenzado a acompañar a los sectores productores de bienes en cuanto a su 85 aporte al aumento del PIB. De esta manera, se confirma la tendencia hacia una composición 80 de la oferta más equilibrada entre los distintos sectores económicos, en oposición a lo ocurrido 75 durante los años noventa, cuando se observaba 70 una estructura sesgada en favor de los servicios I III I III I III I III I III I III I III I III I III I III I III I III I III y el sistema financiero. En efecto, mientras que 93 94 95 96 97 98 99 00 01 02 03 04 05 durante los años 1996-1998 la contribución al crecimiento (variación ponderada por su participación) por parte de los servicios era de dos tercios del total, en 2003-2005 se observa una proporción prácticamente idéntica en el aporte de bienes y servicios al crecimiento del valor agregado. Los sectores productores de bienes mostraron durante 2005 un alza de 9,6%, en tanto que los productores de servicios exhibieron un crecimiento de 8,4%. En términos de contribución relativa al crecimiento, y dada su mayor ponderación, se destaca el aporte de los servicios, que explicaron un 61,6% del crecimiento del producto agregado. Dentro de los bienes, todos los sectores exhibieron crecimiento. Se destacaron, aunque con una ponderación menor a la de 2004, la industria y la construcción. El sector industrial mostró en 2005 un alza de 7,7%, y aportó 1,4 puntos de los 9,2 que creció el PIB. La construcción contribuyó al crecimiento con 1,2 puntos, exhibiendo un crecimiento interanual de 20,4%. El agro también tuvo un aporte sustancial (0,7 puntos) debido a la cosecha récord obtenida en el ejercicio anterior, que registró un crecimiento de 11,9%. Aunque entre los servicios sobresalieron aquellos más relacionados con la producción de bienes, tales como el comercio (creció 9,9%) y transporte y comunicaciones (lo hizo en 14,8%, siendo el sector que más contribuyó al crecimiento del producto, con 1,5 puntos), vale la pena destacar también la rápida recuperación de la intermediación financiera, que después de 4 años consecutivos de contracción exhibió un crecimiento anual del 17,4%. 71% 25% 70% 20% 69% 15% 68% 67% Consumo 10% 66% Exportaciones Netas (eje der.) 5% 65% IBIF (eje der.) 64% Dentro de la inversión se observó un marcado dinamismo en sus componentes. La inversión en 63% equipo durable creció 26,5% durante 2005, en -5% 62% tanto que la construcción lo hizo en un 20,5%. I III I III I III I III I III I III I III I III I III Dentro de equipo durable, la participación del 97 97 98 98 99 99 00 00 01 01 02 02 03 03 04 04 05 05 componente importado aumentó 3,7 p.p., y ya representa un 55% del total (excluyendo bienes durables tales como celulares o computadoras destinados a consumo de las familias), lo que sugiere que los precios relativos actuales no han probado ser un desincentivo para las esenciales importaciones de bienes de capital que requiere el país. 0% Las exportaciones de bienes y servicios crecieron 13,8% en términos reales en todo 2005. La participación de las exportaciones en la demanda agregada, que promedió un 9,1% entre 1993 y 1998, ascendió a 13,8% en el período 2003-2005, y hacia fines de 2005 dicha proporción había alcanzado el 14,1%. Las importaciones, mientras tanto, impulsadas fundamentalmente por la compra de bienes de capital e insumos intermedios, experimentaron en 2005 un alza de 20,3%, de modo que la elasticidad de las importaciones respecto al ingreso tiende a converger a un valor compatible con el crecimiento sostenido. De esta manera se aprecia una consolidación de un nuevo patrón de crecimiento, a partir del cual cobran más importancia la inversión y las exportaciones en detrimento del consumo (público y privado) y las importaciones. Esto es lo que se observa en el Gráfico 2, que provee una clara muestra de la evolución de la participación relativa de los componentes del producto. Empleo e Ingresos La recuperación macroeconómica profundizó durante 2005 su sesgo a favor de la creación de empleos genuinos. La tasa a la cual la economía produce oportunidades de trabajo no se detuvo pese a la importante magnitud en la caída del desempleo. La tasa de empleo creció de 39,7% promedio en 2004 a 40,5% en 2005, y 41,3% en el último trimestre de dicho año. Como resultado, se generaron 412 mil puestos genuinos de trabajo (promedio 2005 contra promedio 2004), 200 mil de los cuales correspondieron a una reducción de los planes de empleo. Más aún, se crearon 850 mil empleos a tiempo completo (más de 35 horas semanales), lo que significó una sensible mejora en la calidad de los puestos originados. Como resultado, la desocupa- La Economía Argentina durante 2005 y evolución reciente Gráfico 2 Demanda agregada como % del PIB Series desestacionalizadas Precisamente, la inversión mostró otro año de elevado crecimiento que, aunque algo menos acelerado que en 2003 y 2004, sigue siendo muy destacado. Su alza en 2005 fue de 22,7%, lo que hizo posible que la proporción de la IBIF en el producto alcance, a precios constantes, un 19,8% para el promedio de 2005 (21,2% en el último trimestre del año). Esta participación se halla 2,2 puntos porcentuales por encima de la de 2004 y 8,6 puntos por sobre la de 2002. La recuperación de la inversión, que ya lleva 13 trimestres consecutivos, acumula un crecimiento de más del 160% desde el tercer trimestre de 2002, y alcanza hoy niveles per cápita levemente superiores a los del pico de 1998 (+0,2%). 5 El componente de la demanda doméstica de mejor performance durante el año pasado fue la absorción interna, mientras que las exportaciones netas tuvieron un crecimiento levemente negativo. La recuperación del empleo y los salarios reales dieron lugar a un crecimiento del 8% en el consumo privado, finalizando 2005 con una tasa de variación trimestral anualizada de 7,1%. De este modo, la participación del consumo en el producto sigue mostrando una saludable reducción (ver Gráfico 2), lo que significa mayor disponibilidad de ahorro local para financiar inversión productiva. ción se redujo en 330 mil personas, lo que implicó una tasa promedio de 11,6% en 2005, 2 puntos porcentuales menos que el promedio de 2004, y una tasa de desempleo al cuarto trimestre del año que perforó por primera vez en varios años la barrera del diez por ciento (9,7%) para el total urbano. La mejora en el empleo vino de la mano de una sistemática recuperación de los ingresos. El ingreso per cápita familiar creció en promedio un 21% en términos nominales durante el año pasado, lo que significa una mejora real de 9% para todo 2005. Los salarios privados registrados mostraron en 2005 una mejora en términos reales de entre un 6% y 9% (dependiendo de la fuente utilizada). Esta tendencia se ha acelerado a lo largo del año, puesto que en el último trimestre de 2005 la recuperación interanual de los salarios reales había sido de un 11,2%. La mayor actividad económica intensiva en la creación de empleo y la mejora de los ingresos, en especial de los salarios, se cristalizaron en una reducción notable de la pobreza y la indigencia durante el año que pasó: tomando los promedios de los dos semestres de cada año, la comparación entre 2005 y 2004 arroja como resultado que durante el año pasado fueron 1.870.000 las personas que dejaron de ser pobres, y que 973.000 abandonaron su condición de indigentes. Al segundo semestre de 2005, la proporción de pobres fue de 33,8%, casi 10 puntos por debajo del promedio de los dos semestres de 2004. El porcentaje de indigentes, mientras tanto, cayó de 16% a 12,2% en idéntico lapso. La consecuencia natural de estas cifras es la notoria reducción en la desigualdad del ingreso. El Coeficiente de Gini del ingreso per cápita familiar terminó el año en 48,9. Esto significa una caída de 2,4 p.p. respecto del promedio de 2004. Esta es una mejora notable si se tiene en cuenta que este indicador refleja una característica estructural de la economía, y que por ello sus movimientos suelen ser lentos y sus cambios se observan a menudo sólo en el mediano plazo. Precios Los precios minoristas mostraron durante 2005 un crecimiento de 12,3% punta a punta, y 11,1% promedio contra promedio. De esta manera, la inflación se aceleró con relación al 6,1% (punta a punta) registrado durante 2004. La inflación subyacente medida como Resto IPC, mientras tanto, terminó el año con un aumento punta a punta de 14,2%. A este resultado contribuyeron especialmente los aumentos de la core ocurridos en marzo (2,2%), y noviembre y diciembre (1,4% cada uno). Las causas de este fenómeno son variadas, siendo la mayor parte de ellas de naturaleza transitoria. La raíz principal del mayor ritmo de crecimiento de los precios del año pasado tiene que ver con una recuperación de precios relativos de los servicios respecto de los bienes, corrección transitoria que se esperaba ocurriera anteriormente, en los ejercicios 2003 y 2004. Al respecto, cabe recordar que las previsiones oficiales para estos dos años superaron ampliamente la inflación efectivamente verificada, lo que sugería la posibilidad, que se confirmó después en la práctica, de que el año 2005 debía dar comienzo a un esperado aumento transitorio del precio de los servicios por encima del precio de los bienes (ver Gráfico 3). La recuperación del precio relativo de los servicios respecto de los bienes continuó en 2005, en especial en el IPC Resto, en el que esta relación mostró un aumento de 6 p.p. desde diciembre de 2004. En los primeros meses de 2006 este proceso continuó, y ya suma una recuperación de más de 15% desde diciembre de 2002. Gráfico 3 Precio Relativo Servicios/Bienes Diciembre 2002 = 100 117 116 115 114 113 112 111 110 109 108 107 106 105 104 103 102 101 100 99 IPC IPC Resto Mar-03 Abr-03 May-03 Jun-03 Jul-03 Ago-03 Sep-03 Oct-03 Nov-03 Dic-03 Ene-04 Feb-04 Mar-04 Abr-04 May-04 Jun-04 Jul-04 Ago-04 Sep-04 Oct-04 Nov-04 Dic-04 Ene-05 Feb-05 Mar-05 Abr-05 May-05 Jun-05 Jul-05 Ago-05 Sep-05 Oct-05 Nov-05 Dic-05 Ene-06 Feb-06 Mar-06 Abr-06 La Economía Argentina durante 2005 y evolución reciente 6 El primer trimestre de 2006 mostró una nueva aceleración en la tasa de crecimiento del empleo, que registró un 9,6% interanual en el primer trimestre, un número mayor incluso al promedio de 2005. Cuando se observa la evolución de los capítulos, Alimentos y Bebidas evidenció un incremento acumulado de 15,7% en 2005, y acumula 102,9% desde la devaluación, creando una brecha respecto del Nivel General de 28,6 p.p. Indumentaria, mientras tanto, creció desde 2001 por encima del acumulado del IPC general. El rubro “Esparcimiento”, que contiene rubros transables como es el caso del Turismo, observa un acumulado mayor que el IPC desde 2001, diferencia que tendió a disminuir a lo largo de 2005. De esta manera, se advierte que algunos precios, en especial los servicios tales como la educación y la salud, han quedado desfasados respecto de las subas acumuladas respecto de diciembre de 2001, lo que induce una tendencia natural a una paulatina recuperación de dichos precios respecto de los de los bienes transables, como Alimentos y Bebidas, o Indumentaria. 7 Cuadro 1 IPC - Evolución por capítulo Variaciones acumuladas hasta marzo 2006 Nivel General Acumu- Acumu- Acumu- Acumu- lado lado lado lado Año 2006 Año 2005 Año 2004 Año 2003 2,9% 12,3% 6,1% 3,7% Acumula- Acumu- Acumu- Acumu- dos lado lado lado lado Dic 01 a Dic 01 a Dic 01 a Dic 01 a Dic 01 a Mar 06 Dic 05 Dic 04 Dic 03 Dic 02 79,2% 74,1% 55,0% 46,1% Acumu- 40,9% Alimentos y Bebidas 3,4% 15,7% 6,1% 4,7% 109,8% 102,9% 75,3% 65,3% 57,9% Indumentaria 1,4% 13,3% 9,7% 7,4% 114,9% 111,9% 87,1% 70,5% 58,7% 1,8% 14,9% 5,3% 4,6% 45,6% 43,0% 24,5% 18,2% 13,1% 2,3% 9,1% 5,8% 0,2% 82,4% 78,3% 63,4% 54,5% 54,2% 3,4% 11,3% 5,5% 3,1% 60,0% 54,7% 39,0% 31,8% 27,9% 2,1% 7,5% 2,8% 0,8% 49,2% 46,2% 36,0% 32,3% 31,3% 2,8% 9,4% 8,1% 4,3% 95,4% 90,0% 73,7% 60,7% 54,0% 10,0% 15,7% 7,3% 2,1% 48,9% 35,4% 17,0% 9,1% 6,8% 1,2% 7,1% 11,7% 6,2% 80,6% 78,5% 66,7% 49,2% 40,5% Vivienda y Servicios Básicos Equipamiento y Mantenimiento del Hogar Atención Médica y Gastos Para la Salud Transporte y comunicaciones Esparcimiento Educación Otros Bienes y Servicios Adicionalmente, las mayores ventas externas coincidieron en 2005 con precios internacionales en niveles altos, lo que indujo una traslación parcial de estos incrementos al mercado local. Esto se observa principalmente en el caso de los commodities, y en particular en el precio del petróleo, que si bien no ha impactado de manera directa sobre el precio del combustible afrontado por el consumidor, sí ha afectado de forma indirecta sobre el IPC a través de los aumentos que experimentó el índice mayorista. Así, la “inflación importada” tuvo como resultado un aumento importante en los costos, que se reflejó en aumentos en diversos rubros. Por último, la continua recuperación del empleo, de los salarios de los trabajadores y de los beneficios de las firmas ha repercutido positivamente sobre la demanda agregada, lo que permitió observar que en algunos sectores puntuales el mayor gasto no ha sido atendido por un aumento de la oferta suficientemente veloz. Cabe enfatizar que los precios habían mostrado una mayor aceleración hacia el final del año pasado, especialmente la inflación subyacente, que alcanzó el 1,4% en noviembre y diciembre. Si bien el componente principal de este fenómeno puede ser entendido como puramente transitorio, el Gobierno decidió llevar a cabo un conjunto de medidas a fin de evitar que estos resul- La Economía Argentina durante 2005 y evolución reciente Una segunda causa está relacionada con los estímulos a la exportación brindados por el contexto macroeconómico, que han permitido a muchos sectores colocar una mayor proporción de su producción en los mercados externos. La creciente “transabilidad” de ciertos bienes tuvo como consecuencia coyuntural una retracción parcial en algunos sectores productivos de la oferta dirigida al mercado interno, lo que provocó que algunos productos con fuerte ponderación en la canasta del IPC presentaran alzas puntuales. Este ha sido el caso de rubros tales como carnes y lácteos. Durante el primer trimestre de 2006 la estrategia oficial de desaceleración de las expectativas de inflación comenzó a dar sus frutos. Desde enero de 2006 se percibió una caída sostenida de la tasa interanual, y el primer trimestre de 2006 exhibió un aumento acumulado (punta a punta) de 2,9% (equivalente a 12,1% anualizado), frente al 4% observado en el mismo período de 2005 (17% en términos anualizados). Como respuesta de más largo plazo, el Gobierno continúa con su política de estímulo a la oferta en sectores en donde la demanda ha tenido mayor impacto. En este frente, se destacan las iniciativas dirigidas a reducir el costo empresario de las inversiones a través de estímulos fiscales, el mayor gasto público para mejorar la infraestructura, y la batería de medidas monetarias destinadas a extender la oferta y los plazos crediticios, en especial para las Pymes. Evolución Fiscal Durante 2005 el sector público nacional siguió mostrando elevados superávits tanto primario (3,7% del PIB) como financiero (1,7% del PIB). A este resultado positivo debe sumarse el esfuerzo de Provincias y Municipios, cuya contribución implicó un superávit consolidado primario de aproximadamente 4,6% del PIB, y uno financiero de casi 2% del producto. En términos del PIB el superávit primario se mantiene en valores similares a los de 2004, mientras que el resultado financiero ha tenido una baja esperable, derivada de la reanudación de los pagos de intereses de la deuda pública. La excelente performance fiscal halla su origen en una continua mejora de la recaudación, más una evolución del gasto consistente tanto con el objetivo macroeconómico de superávit como con las necesidades de inversión pública y de ayuda social. La recaudación total creció en 2005 un 25,7%, lo que se explica no sólo por un mayor nivel de PIB corriente (creció 18,9%), sino también por una sensible mejora en la efectividad del organismo recaudador. En el Gráfico 4, por ejemplo, se percibe que para el caso del IVA la recaudación ha crecido muy claramente por encima del consumo corriente desde el comienzo de la recuperación. De esta Gráfico 4 manera, la presión tributaria alcanzó durante el Evolución del IVA y del Consumo año que pasó el 22,9% del PIB, 0,5 puntos porIndices base II Trim. 2002 = 100 centuales mayor a la del año anterior. 260 Los mayores ingresos se obtuvieron gracias a un fuerte crecimiento en los aportes y contribuciones patronales a la seguridad social (+27,5%), lo que se deriva del importante aumento del empleo registrado y de los salarios. La recaudación de Ganancias creció un 25,8%, y mantiene una participación mayor al 5% del PIB desde 2003, una cifra que supera ampliamente los promedios de la década de los 90s (ver Gráfico 5). Este rubro contribuye en un 23,2% al total recaudado por la Nación. 240 220 IVA Consumo 200 180 160 140 120 100 2005:4 2005:3 2005:2 2005:1 2004:4 2004:3 2004:2 2004:1 2003:4 2003:3 2003:2 2003:1 2002:4 2002:3 El IVA creció 19%, en línea con el aumento del 80 PIB nominal, por lo que su participación en el PIB se mantiene alrededor del 7%. Este tributo aportó en 2005 aproximadamente el 30% de los recursos tributarios. Mientras tanto, los impuestos “no tradicionales” también han mostrado una buena performance: el sostenido crecimiento de las cantidades exportadas permitió mejorar en un 20% la recolección de Derechos de Exportación. La mejora en la situación del sistema bancario, aproximada por la mayor cantidad de transacciones en cuenta corriente, produjo un incremento en la recaudación del Impuesto a los Débitos y Créditos de 22,8%. 2002:2 La Economía Argentina durante 2005 y evolución reciente 8 tados fueran interpretados erróneamente por el sector privado como de naturaleza permanente. De esta manera, la respuesta oficial procuró operar directamente sobre las expectativas privadas, y de esta manera evitar eventuales efectos de segunda vuelta que dieran lugar a la aparición de cierta inercia inflacionaria. Es en este diagnóstico que se enmarcó la decisión de llevar a cabo acuerdos voluntarios de precios entre algunos sectores y el Gobierno. Gráfico 5 Evolución de Bienes Personales y Ganancias En % del PIB 0,5% 0,43% 5,3% 5,5% 5,0% Ganancias (eje der.) 0,36% 0,34% 4,5% 0,37% 3,8% 0,3% 0,26% 3,3% 3,9% 2,9% 3,2% 0,2% 3,5% 3,7% 0,29% 2,4% 2,5% 0,19% 2,5% 0,17% 2,3% 0,1% 0,17% 0,12% 1,8% 1,5% Durante el primer trimestre de 2006, los ingresos totales de la Nación crecieron a un ritmo 0,0% 0,5% de 26% interanual, mientras que los gastos to1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 tales lo hicieron a razón de un 30%. La razón principal del mayor gasto, una vez más, fue el aumento de casi 55% en términos interanuales en las obligaciones financieras reanudadas en 2005. De esta manera, se observó en los primeros tres meses de 2006 un crecimiento interanual del superávit primario del 15%, lo que mantiene prácticamente inalterada la participación del mismo en el PIB. El superávit financiero, mientras tanto, si bien continúa siendo claramente positivo (representa aproximadamente un punto y medio del PIB), cayó 12% si se lo compara con el obtenido en el primer trimestre de 2005. 0,06% 0,06% Situación Monetaria y Financiera Los resultados fiscales superavitarios de 2005 permitieron al Tesoro Nacional ser otra vez un factor de contracción de la base monetaria. Esta situación contribuyó con los objetivos en materia de provisión de liquidez a la economía llevados a cabo por el BCRA a partir de comienzos del año pasado, que procuran una reducción pausada de las tasas de expansión de la cantidad de dinero. Sin embargo, los resultados positivos de la balanza de pagos provocados por el sector privado siguieron operando como factor claramente expansivo de la cantidad de circulante. Tanto el superávit en cuenta corriente como la incipiente entrada de capitales provocaron un importante aumento en la oferta de divisas. Gráfico 6 Factores de explicación de la Base Monetaria En millones de $ 35.000 30.000 2003 2004 2005 Trim I-06 25.000 20.000 BMA 15.000 10.000 Pases 5.000 Sector Público Otros 0 Sector Externo Privado -5.000 -10.000 -15.000 Redescuentos Títulos BCRA Las consecuentes compras del BCRA, enmarcadas en un política prudencial de acumulación de reservas internacionales, fue en parte esterilizada, como se dijo, por las compras del Gobierno. Sin embargo, también tuvieron un rol preponderante en la reducción de la base monetaria la cancelación de redescuentos que habían sido otorgados durante la crisis de 2001, acompañado por una importante colocación de títulos por parte de la autoridad monetaria. En términos netos, la base monetaria creció en 2005 algo menos de 2500 millones de pesos, la mitad del crecimiento observado durante 2004 y un cuarto del incremento verificado durante el año 2003 (ver Gráfico 6). Luego de la cancelación total de la deuda con el FMI, que redujo transitoriamente las reservas internacionales en casi 10 mil millones de dó- La Economía Argentina durante 2005 y evolución reciente 0,24% 2,8% 9 Bs. Personales 0,4% Del lado de los gastos, en el crecimiento del 25% interanual de las erogaciones totales sobresale un aumento de casi el 80% en los pagos de intereses, que se deben a la reanudación de los pagos de la deuda pública luego de completarse la reestructuración. Las transferencias a provincias, que se ajustan automáticamente a la evolución de la recaudación, crecieron en 2005 un 23,4%. Otra parte importante del aumento está explicado por la decisión de incrementar la inversión pública, necesaria para complementar la evolución de la inversión privada y evitar cuellos de botella en la infraestructura nacional. Si bien todavía el peso de este rubro es bajo en el total de gastos, debe notarse que el mismo creció un 100% durante el año pasado. La Economía Argentina durante 2005 y evolución reciente 10 lares, a la fecha de publicación de este Informe el BCRA ya había acumulado algo más de U$S 21.550 millones de reservas, apenas U$S 6.500 millones por debajo del pico previo al pago de la deuda a este organismo. Como consecuencia de estas políticas, la tasa de referencia del Banco Central experimentó en el año 2005 un aumento de 4 puntos porcentuales, lo que indujo en parte una recuperación de las tasas nominales pasivas, promoviendo así un mayor incentivo al ahorro privado. Del lado del costo del crédito, mientras tanto, la suba en las tasas de interés se reflejó más en el aumento en las tasas de préstamos de corto plazo que en los de largo plazo, destinados a inversiones con períodos mayores de maduración. En este sentido, una de las estrategias fundamentales del BCRA en estos últimos meses consiste en procurar extender los plazos de los depósitos, a fin de mejorar las condiciones del crédito al sector productivo. A fin de propiciar una reducción de los depósitos en cuenta corriente y en cajas de ahorro, y estimular así una mayor conformación de plazos fijos, se tomaron una serie de medidas que aumentan los costos de mantenimiento de los depósitos cortos, y mejoran el rendimiento de las colocaciones a plazos mayores. Luego de cumplir a diciembre último por décimo trimestre consecutivo las metas del Progama Monetario, el BCRA ha modificado la variable objetivo para el año 2006. Se ha pasado de un target de base monetaria a uno que monitorea la evolución de M2. Este cambio de meta es consistente con la nueva situación macroeconómica-financiera, en tanto la continua recuperación del sector bancario, en particular el incremento sostenido de los depósitos, requiere prestar una mayor atención a la evolución del multiplicador monetario. Precisamente, durante 2005 se verificó una fuerte recuperación de los depósitos, lo que produjo que el agregado M2 creciera un 30% en relación a 2004. El crédito al sector privado también exhibió tasas de aumento muy elevadas, alcanzando un 35% anual respecto de 2004. Así, el stock de préstamos al sector privado representaba a fines del año pasado un 9,4% del PIB, lo cual resulta 1,3 p.p. más que el año anterior. Durante el primer trimestre del año, el BCRA volvió a cumplir con la (nueva) meta de M2 del Programa Monetario. Una vez, más, la expansión de la base monetaria originada por el ingreso de divisas fue compensada por la acción contractiva que ejercieron tanto la devolución de redescuentos como las compras de la Tesorería, mientras que la colocación de títulos del BCRA se desaceleró fuertemente respecto de 2005. En este contexto, las tasas de referencia continuaron con su tendencia levemente alcista, estimulando el alza de las tasas pasivas para todos los plazos. En cambio, no se observaron mayores variaciones en las tasas activas de corto plazo, en especial en aquellas líneas más demandadas por las Pymes. Finalmente, las tasas para préstamos de largo plazo experimentaron un leve descenso. Sector Externo Los resultados de la balanza de pagos en 2005 fueron mejores a los pronosticados. La convergencia a un superávit en cuenta corriente más compatible con un crecimiento macroeconómico sostenido fue mucho más moderada que lo esperado. De hecho, la cuenta corriente “caja” redujo su velocidad de reducción y se sitúa aún en el 4% del PIB. El resultado de la cuenta corriente 2005 (base caja) resultó ser 10% inferior al de 2004. Dentro de este rubro, la cuenta Mercancías registró un saldo apenas 4% inferior al de 2005. En la cuenta Rentas, se produjo un fuerte aumento del 45% en las utilidades remitidas, mientras que se pagaron un 20% menos de intereses. La tendencia a la reducción de la cuenta comercial medida como bienes y servicios reales mostró durante 2005 una importante desaceleración, y se sostiene en torno al 6% del PIB. La balanza comercial mostró un superávit de U$S 12.700 millones (FOB-FOB), reflejo de exportaciones totales récord por U$S 40.000 millones e importaciones por U$S 27,000 millones. De esta manera, la acumulación de superávits desde 2002 se mantiene, en promedio, en torno a los U$S 11 mil millones. Si se incluyen los servicios reales, el saldo positivo de la cuenta comercial en 2005 cae levemente hasta los U$S 11.000 millones. El récord de exportaciones de 2005 fue consecuencia de un crecimiento del 16% de las mismas a lo largo del año, de los cuales 11 puntos porcentuales corresponden a incrementos en las cantidades colocadas. El análisis por rubro indica que la mayor variación interanual fue la de las exportaciones de Manufacturas de Origen Industrial, con aumentos de casi el 25% en el año. Adicionalmente, el récord de cosecha permitió que los Productos Primarios crecieran algo más de 15% (ver Gráfico 7). Además, continúa la diversificación de destinos de nuestras ventas, que ya ha superado los 140 países, frente a una cantidad promedio de 110 durante los años 90s. Gráfico 7 Crecimiento de las exportaciones Tasas de incremento interanual 25% 19% Las importaciones siguen mostrando una marcada desaceleración en su tasa de crecimiento. Desde un pico de crecimiento del 80% en el 15% primer trimestre de 2004, se observa una con13% 13% vergencia hacia tasas más cercanas al 20% ha11% cia fines de 2005, un ritmo compatible con una 10% evolución sostenida del superávit comercial. De 7% esta manera, la elasticidad-producto de las im6% 6% 5% portaciones ya se ubica en 2,4, un valor menor 5% al observado en promedio durante la Convertibilidad (cercano a 3). La composición por grupo revela que se ha moderado fuertemente el au0% mento de las importaciones de bienes de con2003 2004 2005 sumo, que pasaron de una tasa de crecimiento de más del 60% en 2004 a casi 30% durante el año que pasó. Las importaciones de bienes de capital exhibieron en 2005 un ritmo de crecimiento de casi 33% anual, una tasa compatible con los requerimientos de inversión productiva. 18% La cuenta financiera, mientras tanto, registró en 2005 un saldo positivo de U$S 2.765 millones en base devengado, aproximadamente 1,5% del PIB. En “base caja”, el resultado fue algo menor: U$S 1.930 millones, ó 1,1% del PIB. Dentro de esta rubro, el ingreso de capitales del sector privado no financiero alcanzó los U$S 3.500 millones (U$S 4.100 millones si se suman Errores y Omisiones), lo que representa una proporción de casi Gráfico 8 un 2% del PIB. Intereses y Utilidades y dividendos Base Caja (últimos cuatro trimestres) En millones de U$S Cabe mencionar el comportamiento de la Inversión Extranjera Directa, que durante 2004 y 2005 exhibió un crecimiento notorio en términos del PIB, y actualmente se sostienen en torno al 2% del PIB. 12.000 8.000 Utilidades y Dividendos Intereses 6.000 4.000 2.000 Fuerte caída de pago de intereses gracias a la reestructuración 0 -2.000 IV II IV II IV II IV II IV II IV II IV II IV II IV II IV II IV II IV 94 95 95 96 96 97 97 98 98 99 99 00 00 01 01 02 02 03 03 04 04 05 05 Finalmente, las reservas internacionales exhibieron hasta fines de 2005, esto es, previo a la cancelación total de la deuda con el Fondo Monetario Internacional, un crecimiento de U$S 8.857 millones, una variación positiva que constituye un récord histórico. La Economía Argentina durante 2005 y evolución reciente En la cuenta de Rentas, destaca el menor pago de intereses observado gracias a la reestructuración de la deuda. Sin embargo, también se debe resaltar el comportamiento de la cuenta Utilidades y Dividendos que durante 2004-2005 ha acumulado 4.752 millones de dólares, cambiando claramente su comportamiento si se lo compara con los años 2002-2003 (ver Gráfico 8). 10.000 11 Valor Precio Cantidad 20%