42 LA VANGUARDIA C U L T U R A JUEVES, 23 MARZO 2006 Emili Teixidor actualiza en la novela ‘Laura Sants’ la figura mítica creada por Miquel Llor n El escritor vuelve a los escenarios de su celebrada obra Pa negre en este nuevo relato que es, en cierto modo, continuación de aquél y que habla de la corrupción del poder y de la del amor ROSA MARIA PIÑOL BARCELONA. – Con su celebrada novela Pa negre aún felizmente viva en las librerías, Emili Teixidor (Roda de Ter, 1933) presentó ayer en Barcelona su nueva narración, Laura Sants (editada, como la anterior, por Columna), que en varios aspectos enlaza con aquélla. Los escenarios de ambas son los de la Plana EL DATO ‘Pa negre’, un clásico moderno n Acertó ayer Ester Pujol, la editora de Columna, al calificar la novela Pa negre de “clásico moderno”. La obra, publicada en el 2003, fue aplaudida por la crítica y se ha convertido merecidamente en un long seller. Su traducción castellana (Seix Barral) lleva tres ediciones, están en marcha la griega y la alemana, y hay otras muchas en proyecto. de Vic, en la autobiográfica Pa negre ambientados en los primeros años de posguerra, y en Laura Sants situados en la actualidad. Además, esta nueva novela puede ser leída como “la tercera parte de Pa negre, en la que el narrador, Andreu, sería el hijo de aquel niño, también Andreu, que evocaba sus vivencias de los años 40”, dijo ayer Teixidor. Pero Laura Sants es una novela independiente de su predecesora. Su título alude diáfanamente al personaje que inmortalizó Miquel Llor en su relato Laura a la ciutat dels sants, una figura mítica de la que ahora Teixidor propone una relectura. Y lo hace comparándola con otras heroínas de novelas que tratan del adulterio y el fracaso del matrimonio como Ana Karenina, Madame Bovary o La Regenta. Aclaremos enseguida que Teixidor no hace ningún ensayo literario, sino que se plantea estos temas a través de su narrador protagonista, un guionista de televisión que ha de escribir una historia inspirada en una obra clásica centrada en la infidelidad matrimonial en una ciudad provinciana. Como hizo Clarín al crear la ciudad de Vetusta inspirada en Oviedo, Teixidor ha rebautizado Vic, la ciudad de Laura, como Comarquinal, una forma de mitificarla. “Vic es una ciudad mítica y muy literaria, y he querido rendir homenaje a mi ilustre predecesor Miquel Llor, que contribuyó a inmortalizarla; si hubiera sido de Valls, lo habría hecho con Pilar Prim, de Narcís Oller, otro libro notable”, señaló. En su investigación, el protagonista de Laura Sants se verá envuelto en una trama de luchas políticas e intereses económicos que le mostrará que la corrupción del poder y la del amor tienen mucho en común. “Quería evidenciar cómo la corrupción del poder político, económico y social afecta a las relaciones senti- mentales”, dijo el escritor. Y ejemplificó esta “simbiosis” recordando que “muchas chicas que no tienen dinero acaban dedicándose a la prostitución” y que la precarización laboral “puede llevar a una precarización sentimental”. La búsqueda de una Laura actual, la hipótesis de cómo reaccionaría hoy el personaje en circunstancias similares, da pie al autor a desarrollar el tema del adulterio y las actuales relaciones de pareja. “Es paradójico que, en este momento en que las relaciones de pareja se están rompiendo por todos los lados, siguen en cambio vivos los ideales de fidelidad y permanencia”, dijo Teixidor. Al valorar a la protagonista de Miquel Llor, el escritor reconoció que la encuentra “un poco pánfila, provinciana, poco atrevida y víctima en realidad de un amor platónico”, pero añadió que “la obra es un buen reflejo de las prevenciones sociales de la época”. “En realidad, Sagarra El autor mitifica Vic al convertirla en Comarquinal, el escenario donde se desarrolla la acción de su novela JORDI BELVER Emili Teixidor, fotografiado ayer en Barcelona se atrevió mucho más en Vida privada”, añadió. Como heroína, Teixidor prefiere sin duda a Ana Karenina, “la más divertida y fascinante, una mujer que se atreve a dejar a su familia para irse con el conde Vronski”. En cuanto a la Ana Ozores de Clarín, lo que le atrae de ella es “el hecho de que en realidad esté fascinada por el poder eclesiástico”. Teixidor admitió ayer que después del éxito de Pa negre –de la que se han vendido más de 50.000 ejemplares– se ha sentido presionado por las dudas de cómo será recibida su nueva obra. “Pero esta presión la experimento ante cada libro mío. La recepción crítica puede ser diversa y unas obras pueden gustar más que otras, pero yo las trabajo todas con la misma dedicación”.c