Teresa Del Real Español 11 10/7/07 Mi esposa ¿la muñeca? En la historia, La muñeca menor, la autora Rosario Ferré utiliza el simbolismo para representar el tema central del cuento que es como mujeres son tratadas por los hombres. Para poder entender este tema del cuento, se necesita enfocar en el simbolismo que presenta Ferré a lo largo de la historia. Estos símbolos, tal vez ambiguos, se encuentran desde el principio del cuento hasta el final y describen la manera en que mujeres eran tratadas y vistas. Los símbolos principales vienen siendo la chágara de la tía, el balcón de la tía, las primeras muñecas, la última muñeca y el matrimonio entre la sobrina y el médico. El título de la historia en sí, también es representante del tema. El significado e importancia de este título no se sabe hasta el final, después de un giro inesperado que toma la historia. Pero antes de poder entender nada más, el lector tiene que enfocarse en la tía y la chágara que le cambió la vida. La relación que se desarrolla ente la tía y la chágara es una extraña e inesperada. El lector muy pronto se da cuenta de que el papel de la chágara en la historia es uno de esposo y papá. Desde aquel día en que se metió en la piel de la tía, le cambió la vida y “se resignó a vivir para siempre con la chágara enroscada dentro de la gruta de su pantorrilla.” La relación que salió de esta unión fue una en que la tía perdió su identidad anterior y fue “Despojad[a] a toda vanidad” (Ferré 10). Ya nadie venía a cortejar a la tía, porque por el lado simbólico, ya estaba casada y comprometida a pasar toda su vida con la chágara. Vemos como esta relación refleja los matrimonios de esos tiempos. Los hombres veían a las mujeres como objetos y cuando se casaban les quitaban la vida que anteriormente tenían. También, fue por esta relación que la tía empezó a hacer las muñecas. Podemos decir que las muñecas fueron un resultado de la unión de la tía y la chágara. La indicación más grande de que la chágara es representante de un marido y papá de las muñecas es cuando dice: “El joven levantó el volante de la falda almidonada y se quedó mirando aquella inmensa vejiga abotagada que manaba una esperma perfumada por la punta de sus escamas verdes” (Ferré 13). Esta oración confirma la masculinidad de la chágara y asegura que el nacimiento de las muñecas es hecho posible por los dos. El balcón en la casa de la tía fue algo muy simbólico en la creación de las muñecas y la vida de la tía después de tener la chágara. Era en este balcón en donde la tía “daba luz” a cada una de sus muñecas. Dice que “Se balconeaba días enteros” hasta terminar cada muñeca. En este sentido, el balcón representa el cuarto de un hospital en donde mamás dan luz ha sus hijos. Aquí es donde uno se da cuenta que el autor hizo a la tía en imagen de una mamá. Como mamá de las muñecas, la tía tenía que despedirse de ellas cuando se las daba a las sobrinas en su boda: “Desde lo alto del balcón la tía observaba a las niñas bajar por última ves las escaleras de la casa sosteniendo en una mano la modesta maleta a cuadros de cartón y pasando el otro brazo alrededor de la cintura de aquella exuberante muñeca hecha a su imagen y semejanza…” (Ferré 12). En este orto sentido, el balcón representa el refugio de la tía. Una ves más regresamos al tema de mujeres en la sociedad y vemos como la chágara no deja salir a la tía. Como ella ya no puede salir por culpa del “esposo” dominante, el balcón sirve como su única vista de la vida que está pasando afuera de su casa. Las muñecas que hace la tía para las sobrinas reflejan a las niñas en edad y tamaño. Cada cumpleaños se las regalaba a cada una de sus sobrinas con la promesa de que nunca las vendieran. Estas primeras muñecas eran muy simples y cada una fue echa con los mismos materiales: “La porcelana de las manos era siempre translúcida; tenía un ligero tinte marfileño que contrastaba con la blancura granulada de las caras de biscuit” (Ferré 11). El cuidado y tiempo que dedicaba haciendo cada muñeca enseña una maternidad que tenía la tía por las muñecas. Cada una que creaba era como una nueva hija para ella. No solo les daba tiempo y cuidado cuando las hacía pero también cuando las terminaba. Su relación con las muñecas se hizo todavía más real porque les tenía un cuarto solo para ellas. Cuando entraba al cuarto no era para maravillar en sus creaciones. La tía entraba al cuarto por otra razón: “Iba levantando amorosamente cada una de las muñecas canturreándolas mientras las mecía” (Ferré 11). Esto significa la relación de madre e hija que tenía la tía con sus muñecas. También uno pudiera decir que el simple hecho de haber escojido muñecas para darle a sus sobrinas, enseña que las mujeres heran percibidas como objetos o muñecas. Era tradición que al casarse las sobrinas, la tía les regalaba la última muñeca. Por eso, cuando la sobrina menor se iba a casar con el médico la tía una ves más se sentó para “dar luz” a una última muñeca. La tía hizo esta muñeca muy diferente que las demás que había hecho. Ha esta muñeca la había llenado de miel y le había dado manos de porcelana. También la sobrina menor, “Se sorprendió al coger la muñeca por la cintura y encontrarla tibia” (Ferré 14). Todas estas características que poseaba la muñeca, la hacían parecer más real que todas las otras que había hecho. Pero lo que más enseñaba su humanidad era la emoción que parecía expresar: “[La sobrina] Reconoció en la sonrisa entreabierta y un poco triste la colección completa de sus dientes de leche” (Ferré 14). La emoción que evoca la sonrisa de la muñeca, simboliza la emoción que empezó a sentir la sobrina menor después de casarse con el médico. En un sentido más general, esa misma sonrisa de la muñeca simboliza los sentimientos de las mujeres que al casarse, eran sujetadas al poder y a la dominancia del hombre. El matrimonio entre la sobrina y el médico era un error desde el principio. Cuando el médico le pide que se case con ella, solo lo acepta “Porque le intrigaba su perfil dormido, y porque ya tenía ganas de saber como era por dentro la carne del delfín” (Ferré 14). La razón por la cual el médico le pidió la mano a la sobrina era también por motivos no relacionados con el amor. En fin, su matrimonio era halgo superficial y el papel de la sobrina como esposa del médico cambió a papel de “muñeca” del médico. Esto se da a entender cuando la sobrina es, “Obliga[da] todos los días a sentarse en el balcón, para los que pasaban por la calle supiesen que él se había casado en sociedad” (Ferré 14). Este acto representa como los hombres veían a las mujeres y como eran exijidas actuar. Uno ves más regresamos al punto que las mujeres eran percibidas como solamente objetos. El médico se casó con ella solo por su propia ventaja y para mejorar su imagen y posición social. El impacto que tuvo en la sobrina es que el balcón se convirtió en una prisión. Por culpa del médico, solo podía ver el mundo pasar desde sus balcón, igual que como la tía. Esto enseña que hombres, al casarse, cambian a las mujeres y las convierten en muñecas; solo objetos que pueden manipular. Al principio el titulo La muñeca menor puede percibido de distintas maneras. No es hasta el final cuando la historia toma un giro inesperado, que le lector aprende el significado de este título. El giro que ocurre es que la mujer que el médico pensaba que era su esposa, resulta ser la ultima muñeca que le había hecho la tía. El médico primero se da cuenta de que halgo no estás bien cuando dice: “Notaba que mientras él se iba poniendo viejo, la menor guardaba la misma piel aporcelanada y dura que tenía cuando la iba a visitar a la casa del cañaveral” (Ferré 15). También ocurre halgo más extraño cuando el médico va a observar a la sobrina mientras que duerme: “Notó que su pecho no se movía. Colocó delicadamente si estetoscopio sobre su corazón y oyó un lejano rumor de agua. Entonces la muñeca levantó los párpados y por las cuencas vacías de los ojos comenzaron a salir las antenas furibundas de las chágaras” (Ferré 15). Este pasaje del cuento representa la conversión total de la sobrina menor a la muñeca menor, que coincide con el título del cuento. Quiere decir que a un punto, la sobrina se escapó y dejó a la muñeca en su lugar. El médico nunca se dio cuenta porque desde el principio trató a la sobrina como una muñeca que solo la usaba cuando la necesitaba. Por otro lado, el autor puede ver como las chágaras que salieron de los ojos de la muñeca, representan la venganza no solo de la tía pero de la sobrina. La muñeca menor fue una historia con significado muy importante. El tema central que es, como mujeres son tratadas por los hombres, se desarrolla a lo largo del cuento por el uso del simbolismo. Estos simbolismos fueron la chágara de la tía, el balcón de la tía, las primeras muñecas, la última muñeca y el matrimonio de la sobrina y el médico. El título en si, une los símbolos y refleja el tema; que los hombres trataban a las mujeres como objetos y las percibían como muñecas. Al final la tía y la sobrina menor pudieron tener su venganza con el médico pero tal vez la idea de cómo hombres deben tratar a las mujeres no a cambiado.