Gobernanza de la información y bibliotecarios: vínculos y desafíos DrCs.Gloria Ponjuan Dante Dpto. Ciencias de la Información Facultad de Comunicación Universidad de La Habana Introducción La Sociedad de la Información va imponiendo paulatinamente nuevas miradas a un conjunto de enfoques que deben estar presentes en la misma. Uno de estos conceptos es el de gobernanza, que parece provenir remotamente del griego κυβερνάω kybernan (dirigir, conducir una nave o un carro) utilizado por Platón, metafóricamente, para denominar el modo de gobernar a los ciudadanos, de donde también deriva gobierno (a través del latín gubernatio). A finales de la Edad Media se registra su uso en las lenguas modernas, más bien a partir del latín que del griego, con el francés gouvernance desde el siglo XIV, designando el arte o manera de gobernar; del que pasa al inglés governance, con usos registrados desde 1380. En portugués, governança, y en español, gobernanza, parecen también derivar del francés. (Gobernanza, 2014) Así gobernabilidad, gobernanza y gestión pública están emparentados dentro de la misma línea: la dirección de la sociedad (Aguilar, 2008). Es de pensar que en el marco de la llamada Sociedad de la Información puedan recibir mayor atención determinados enfoques, muchos ya existentes pero que al ser investigados, reconsiderados e insertados en nuevos contextos, son objeto de nuevos alcances y lecturas. El contexto Información de la Sociedad de la La Sociedad de la Información es el resultado de un proceso evolutivo. No es un fenómeno que ocurre por igual en todos los escenarios, sino que es en cada lugar, en función de sus condiciones y nivel de desarrollo, van identificándose gradualmente con manifestaciones diferentes, que tienen como denominador común el hecho de que la información juega un papel importante en la vida económica, social, cultural y política de los países. (Moore, 199798). Según Moore (1997-1998) las sociedades de la información tienen tres características: la información se emplea como recurso económico, es posible identificar un mayor consumo público de la información y se va generando un sector de la economía dedicado a facilitar determinados servicios y facilidades de carácter informacional. Martin (2004) hace énfasis en que el éxito de esos enfoques radicará siempre en el campo social y particularmente en el grado en que sus enfoques impacten e involucren a todos los componentes de la comunidad. La CEPAL (2003) expone: “El concepto de sociedad de la información hace referencia a un paradigma que está produciendo profundos cambios en nuestro mundo al comienzo de este nuevo milenio. Esta transformación está impulsada principalmente por los nuevos medios disponibles para crear y divulgar información mediante tecnologías digitales. Los flujos de información, las comunicaciones y los mecanismos de coordinación se están digitalizando en muchos sectores de la sociedad, proceso que se traduce en la aparición progresiva de nuevas formas de organización social y productiva”. De este informe se pueden tomar determinadas otras ideas centrales: • El concepto es muy complejo y su nivel de • • • desarrollo es aún incipiente. es una consecuencia directa del desarrollo en el campo de la información y las comunicaciones. ni la mera producción de tecnología (ya sea hardware o software) ni la existencia de una infraestructura tecnológica conducen automáticamente a la creación de una sociedad de la información. El proceso de digitalización debe apoyarse en elementos pertenecientes a otros campos interrelacionados. Entre ellos están el establecimiento de marcos regulatorios que consolidan y determinan el ámbito de estas nuevas formas de comportamiento, los mecanismos de financiamiento que sustentan Artículo Principal Pág. 07 • • • la difusión de estas tecnologías y su aplicación, y el capital humano, fuerza motriz de la tecnología. se perfila una nueva forma de exclusión, denominada "brecha digital", capaz de ampliar el abismo que separa a las regiones y a los países (la brecha digital internacional) y a los grupos de ciudadanos de una sociedad (la brecha digital doméstica). La existencia, tanto de amenazas como de oportunidades, en la transición a una sociedad de la información subraya la necesidad de crear políticas públicas que guíen el proceso hacia el resultado previsto. Este resultado habrá de surgir, finalmente, del juego político de toma de decisiones. La tecnología y su implementación son meras herramientas para alcanzar ese objetivo. los elementos clave para el desarrollo de una sociedad de la información deben ser el individuo y la comunidad. Las prioridades que se establezcan para alcanzar esos objetivos influirán de forma evidente en la agenda del desarrollo. Acerca del Información concepto Gobernanza de la El concepto de Gobernanza de la información es uno de los que en los últimos años ha sido incorporado como un nuevo enfoque que asumen las Ciencias de la Información. Se encuentra en el momento en que se manejan diferentes definiciones, miradas y alcances, pero como se intentará analizar, reviste especial interés para los profesionales de la información, sean bibliotecarios, archivólogos, gestores documentales, de información, consultores u otros. García-Morales (2011) valora que es un concepto que se va a consolidar y adoptar rápidamente por varios factores: • Responde a una necesidad real, y cada vez • • Pág. 08 más acuciante, de empresas y organizaciones que ven como la multitud de datos, documentos, registros, canales, medios y procesos en los que se contiene y fluye la información, se multiplican de forma imparable y crecen sin control. Se hace cada día más evidente que hay que poner reglas, orden, organización y gobierno. El concepto implica una ruptura decisiva con la corriente que ha prevalecido durante años – las herramientas tecnológicas- frente a los contenidos. Su importancia radica en que incide de forma decisiva en la consideración de la información en sí misma como un recurso que es necesario gobernar. Presenta una relación semántica con conceptos tan presentes en nuestra actualidad como el “buen gobierno” la “gobernanza Artículo Principal global” la “gobernanza económica”, la “gobernanza corporativa” “gobernanza, gestión de riesgos y cumplimiento”, que han calado con éxito en la empresa y en muchos ámbitos de la sociedad. Ello facilita situar la información donde siempre debía estar: en el contexto estratégico de las organizaciones, y en los ámbitos directivos de control y decisión. Otros autores tienen sus propias definiciones, en ocasiones sesgadas por la propia mirada de su especialidad: “La gobernanza de la información tiene que ver con el establecimiento de un ambiente y oportunidades, reglas y el derecho a la toma de decisión en lo relativo a la evaluación, creación, recopilación, análisis, distribución, almacenamiento, uso y control de la información; responde a la pregunta “Qué información necesitamos, cómo la utilizamos y quien es responsable de ella?” Al investigar las prácticas actuales, se evidencia que muchas organizaciones, carecen de una política para la gobernanza de la información.” (Kooper, 2011) “La gobernanza de la información es la especificación de los derechos de decisión y de una estructura de responsabilidades y control, con objeto de fomentar la cultura deseada para la valoración, captura, almacenamiento, uso, archivo y eliminación de la información. Ello incluye procesos, roles, estándares y medidas que aseguren el uso efectivo y eficiente de la información que permitan a una organización conseguir sus objetivos de negocio”. (Gartner Group, 2012) “Definiría la gobernanza de información como los principios básicos acerca de la información y la gestión de información, siendo la gestión documental uno de sus dominios y una disciplina bajo el paraguas de Gobernanza de la información…Los objetivos supremos de una buena gobernanza son mejorar la velocidad y eficacia de las decisiones y procesos (eficiencia), para hacer un uso máximo de la información en términos de creación de valor, y reducir los costos y riesgos para el negocio o la organización. La gobernanza de información es un subconjunto de la Gobernanza Corporativa.” (Hagmann, 2013) “La gobernanza de información persigue elevar el estándar de manejo de información personal sobre salud y brindarle a las organizaciones las herramientas que necesitan para alcanzar tal nivel. Una buena gobernanza de información permite a las organizaciones e individuos asegurarse que la información personal, tal como la que se recoge en los registros de salud se maneja legalmente, en forma segura, con eficacia y eficiencia para que las personas que usan los servicios de salud puedan recibir la mejor atención”. (Health Information and Quality Authority, Irlanda, 2011) Hagmann (2013) considera que el elemento clave en este enfoque es preguntarse por cuánto tiempo necesitamos la información que es relevante, por qué la necesitamos y cuanto podemos utilizarla, y lo que podemos hacer con ella mientras la tengamos activa o la preservemos. Esto obliga a hacer un nuevo análisis de la gestión del ciclo de vida de la información. En forma categórica valora que es importante olvidarnos de términos resbaladizos como documento, registro, contexto, contenido y respaldar el concepto de Gestión de información como noción general. En la versión en inglés de la Wikipedia, se le define como conjunto de estructuras multidisciplinarias, políticas, procedimientos, procesos y controles que se implementan para manejar información a nivel de la empresa, a p o ya n d o los requerimientos organizacionales de carácter legal, de riesgos, ambientales y operacionales inmediatos y futuros. (Information governance, 2015). Lajara y Maçada (2013) la representan, como aparece en la siguiente figura. Figura 1. Marco para la gobernanza de la información (Lajara y Maçada, 2013) La gobernanza de la información es un desarrollo lógico y necesario para que las organizaciones se beneficien de la Sociedad de la Información (Beijer, 2010). Después de este breve recorrido, se le pudiera definir como: campo de estudio multidisciplinario que surge en la Sociedad de la Información a fin de poder conducir, valorar y perfeccionar la importancia de la información como componente estratégico de las organizaciones de todo tipo. Abarca los contextos de todo tipo, que se despliegan de múltiples formas y variantes, donde se requiere la participación decisiva e integrada de profesionales formados para participar en el gobierno de toda información, en todo tipo de portador, que responda a las necesidades de todo consumidor o usuario y que contribuya al desarrollo social, económico y profesional de países y regiones. NUEVAS MIRADAS PROFESIONALES A LOS ESPACIOS Para Beijer (2010) la gobernanza de información es un enfoque que trasciende la prevención de riesgos y los enfoques de privacidad, y seguridad. La digitalización de la sociedad ha conducido a nuevas plataformas para proveerle a las organizaciones nuevas vías para compartir información, construir conocimiento y mejorar las decisiones. Analiza Beijer, que en la medida en que la información se reproduzca con mayor facilidad, las organizaciones enfrentarán una explosión de información (digital) con muchas variantes de presentación y uso. Considera que aunque aún no se tiene toda la experiencia para proyectar estos esfuerzos, las organizaciones aumentan sus ecosistemas e intercambian información con consumidores externos y este tipo de estructuras sustituirá el puesto de trabajo tradicional orientado hacia determinados procesos. Como la gobernanza de la información contempla la interacción entre las personas y los sistemas, tiene una alta responsabilidad en la transferencia de información entre estos. Para la gestión documental, Hagmann (2013) enuncia que con nuevas miradas es importante modificar determinados enfoques de esta especialidad y reconsiderar todos los requerimiento de la visión clásica de la gestión del ciclo de vida de la información en forma más holística, interrelacionada con segmentos de otras disciplinas en un campo mayor como la Gestión de Información Empresarial Artículo Principal Pág. 09 (Enterprise Information Management). En su opinión el mayor reto radica en que ni un departamento ni una disciplina en solitario pueden alcanzar los resultados esperados. Solo pueden obtenerse éxitos en un escenario orquestado con proposiciones concretas para funciones específicas. El propio autor enuncia algunas actividades profesionales a partir de Kahn y Blair (2009) y enriquece con nuevas miradas. Dentro de estas actividades profesionales se incluyen la gestión documental, la gestión de documentos, la gestión de riesgos informativos, la gestión de contenidos empresariales, la gestión del conocimiento, la seguridad de la información, y los servicios bibliotecarios. Estos conceptos, que tienen que ver con la gobernanza, el riesgo y la conformidad de la información y su gestión, ahora equivalen a la Gobernanza de la información. En el marco de la cadena de valor, significa preservar los valores de los activos tangibles e intangibles y las tareas legales a los activos de información, a fin de que mediante la tecnología se puedan manejar los datos y que la organización pueda tomar decisiones a partir de recursos y sistemas de información optimizados. Al igual que en otras profesiones, los bibliotecarios desde hace años enfrentan grandes cambios en sus funciones, contextos y modalidades de trabajo y muchos tienen la enorme responsabilidad de recopilar, procesar y suministrar datos e informaciones a partir de informaciones patrimoniales que no solo se emiten en papel sino que los documentos en formato digital, las multimedia, y muchos otros tipos de documentos cada vez proliferan más y complejizan mucho el tratamiento y protección de los mismos. Cawkell (2002) afirma que el evento que hasta el momento tuvo mayor relevancia para una futura sociedad de la Información fue la invención de la imprenta por Gutenberg en 1450. En su artículo hace un recorrido por determinados momentos históricos de gran relevancia y menciona a Wilson (1987) cuando expresó: “La información es un recurso de gran valor social y económico”. Expresa su preocupación por el poco reconocimiento existente en torno a los problemas potenciales de carácter social y económico que las nuevas tecnologías puedan exacerbar. Valora también que el papel futuro de las nuevas tecnologías y su potencial para reducir la pobreza debe medirse mediante la comprensión acerca de los sujetos sociales que generan, y no mediante el examen de las tecnologías per se. Sin que esto represente una ruptura con los enfoques tradicionales, un gran salto se produjo al generarse los documentos digitales. Se modificó el enfoque tradicional de desarrollo de colecciones, y de servicios bibliotecarios, así como el propio préstamo de documentos. El surgimiento de bibliotecas virtuales rompió con el clásico mito que los bibliotecarios han dependido totalmente de un espacio físico para el desarrollo de sus actividades. Por el contrario las colecciones de documentos en papel se van digitalizando e integrando a estas bibliotecas virtuales. Esto es un ejemplo de cómo la esencia de una profesión se sostiene y se logran asimilar enfoques novedosos. Los servicios se brindan con el apoyo de telefonía móvil, tablets, y otras vías más dinámicas. Tziahanas (2012) valora que los contenidos informacionales de las empresas crecen en forma exponencial y en forma no estructurada como en el caso de los medios sociales, correo electrónico, video, audio, texto y páginas Web. La prevalencia de este tipo de contenidos está produciendo un cambio de un modelo de cumplimiento basado en documentos, descubrimiento y gestión de información hacia modelos que se basan en interacciones. Como resultado, considera que los profesionales de la información deben incrementar su visibilidad. Debe tenerse presente que las bases de datos relacionales que operan con datos estructurados constituyen en la actualidad el 15% de la información. Sin embargo, ignoran otras manifestaciones no estructuradas, que ahora representan el 85% restante, por lo que se requiere un sistema que considere a todo tipo de contenido, independientemente de su formato y que pueda aplicar políticas para ello en tiempo real. Todo esto requerirá un plan para realizar la gobernanza de los medios sociales. Aporta algunos indicadores (correspondientes al año 2012) que son muy significativos: Figura 2. Indicadores del em pleo de los medios sociales por parte de grandes em presas en el 2012 (Fuente, Tziahanas (2012) • • • • • Pág. 10 El 65% de las mejores compañías del mundo tienen un perfil en Twitter El 23% de las 500 mejores compañías según Fortune, tienen un blog corporativo público. El 58% de las 500 mejores compañías según Fortune tienen una cuenta en Facebook. Facebook tiene 901 millones de usuarios activos al mes. Twitter tiene ahora más de 140 millones de usuarios activos, enviando 34 millones de tweets al día. Artículo Principal Estos indicadores, deben tener en la actualidad un comportamiento similar o mayor por cuanto no ha disminuido el papel de las redes sociales. Por el contrario, figuras destacadas de la dirección de países e instituciones, utilizan sistemáticamente estos espacios para establecer contactos, dar a conocer sus puntos de vista, exponer políticas y consideraciones y a la larga exponer sus informaciones a la luz pública. VÍNCULOS Y FORTALEZAS BIBLIOTECARIOS: DESAFÍOS DE LOS Desde la antigüedad, vincularse a los espacios de poder y al conocimiento tuvo que haber sido un espacio, para los bibliotecarios, lleno de retos y de oportunidades que en cada época hubo que enfrentar. Ejemplos de ello han sido manejados con realismo y ficción por el cine y por la literatura. Enfrentar cambios de paradigma, como el relativo a los portadores, desde las tabletas de arcilla, los rollos de papiro, los libros elaborados por copistas y religiosos, la imprenta y el reto de la difusión del pensamiento, las persecuciones de la Inquisición, el nazismo; en fin, ejemplos que no faltan en diferentes momentos con diferentes matices pero que marcan etapas donde ha sido necesario enfrentar enfoques sociales y tecnológicos, y desplegar esfuerzos en pos de defender espacios, cultura y desarrollo. La brecha digital es otro de los retos actuales, como lo sigue siendo el analfabetismo. Algunas de sus fortalezas pudieran ser: • la voluntad de conocer las necesidades de sus • • • • • • • • usuarios y entregarles una respuesta documental o informativa que se ajuste a sus intereses. Su identificación con los intereses de los usuarios y el aseguramiento reiterado de sus demandas independientemente de que hayan sido respondidas. Asegurar la privacidad de estas necesidades con un alto sentido de la ética. El manejo del ciclo de vida de la información y del documento, que le permite conocer y evaluar la calidad de la información para aportar una respuesta más útil, actual y específica a estas necesidades. El conocimiento acerca del valor de la información y sus portadores. El manejo de portadores informativos, tradicionales y digitales La seguridad de poder entregar una información que ha sido localizada. La transparencia en la entrega de información sin que medien intereses comerciales ni otros enfoques de carácter lucrativo. Su capacidad para recopilar, procesar y almacenar informaciones de interés de • • • • • acuerdo con determinadas políticas y normas establecidas. Su voluntad de conservar y preservar el patrimonio documental e informacional de organizaciones, comunidades, países, y regiones com el objetivo supremo de que no se pierda información alguna de importancia para el dominio que se trate. El empleo de los recursos tecnológicos en función de procesos y servicios informativos. El nivel de experticia en el manejo de Internet y la WWW. La participación en la creación de portales, sitios, publicaciones electrónicas, bibliotecas virtuales y muchos otros recursos digitales. Capacidad para filtrar informaciones en función de su calidad y relevancia para enfrentar demandas de diferente nivel de complejidad y para entregarlas a usuarios con diferentes condiciones físicas e intelectuales. Su capacidad de elevar la cultura informacional en sus contextos laborales y sociales, y elevar las competencias informacionales de su comunidad usuaria. De hecho muchos bibliotecarios en sus funciones diarias manejan muchos documentos que no necesariamente son libros. También muchos trabajan sirviendo los intereses de empresas y grandes organizaciones. De acuerdo con sus funciones han demostrado sus fortalezas en el manejo de diferentes documentos y medios. Su presencia en las organizaciones es amplia aunque no siempre alcanzan responsabilidades en el trabajo informacional de las mismas. Rigurosidad, laboriosidad, cuidado y muchas otras virtudes los acompañan pero deben asumir mayores responsabilidades estratégicas y proyectarse hacia el manejo de recursos informacionales y no solo en los espacios de servicios. De hecho estos espacios van haciéndose menores en la medida que las ofertas se sirvan en bibliotecas virtuales y plataformas para el libre consumo de sus usuarios. Si se intentara presentar algunos de los desafíos que ya se vislumbran, se pudieran mencionar: • La mediación mediante dispositivos móviles y ligeros • La interacción mediante nuevos canales • • • • informales El redimensionamiento del ciclo de vida de la información La inserción en grupos de proyectos, y grupos estratégicos en las organizaciones, incrementando su presencia en equipos interdisciplinarios. La presencia de nuevos canales de comunicación y de interacción profesional La defensa, respeto y actuación respaldando y Artículo Principal Pág. 11 creando políticas de información apoyando la toma de decisión en cualquier instancia organizacional, sean empresas, comunidades, o grupos de actuación. • El incremento de niveles de alfabetización de la ciudadanía, y la elevación de la cultura y las competencias informacionales en organizaciones y comunidades a todo nivel. • La masificación del trabajo informacional en diferentes escenarios, localidades y condiciones infraestructurales, incluidas las redes sociales. Una buena gobernanza de la información, tiene que contar con el conocimiento, respaldo y participación de los profesionales que han sido formados para trabajar con este recurso. Conocimiento, capacidad y disposición no faltan a todos los niveles. En unos años podrá evidenciarse los avances alcanzados y en ellos no faltarán muchísimos bibliotecarios a la vanguardia de estos proyectos. Referencias Aguilar, L. F. (2008). Gobernanza y gestión pública, México, Fondo de Cultura Económica, p. 38. México. Instituto de Investigaciones Jurídicas. Capitulo segundo. El concepto de gobernanza. Consultado en http://www. juridicas.unam.mx Beijer, P. (2010). Information governance: beyond risk and compliance. Amsterdam, Universiteit van Amsterdam. (PrimaVera Working Paper 2010-05). Cawkell, T. (2002). The information society: history and futures. Journal of Information Science, 28, 5; 433-435 CEPAL (2003). Los caminos hacia una sociedad de la información en América Latina y el Caribe. Santiago de Chile, CEPAL. Libros de la CEPAL 72. Garcia-Morales, E. (2011). Gobernanza de la información. Notas ThinkEPI2012 Disponible en: http://www.thinkepi.net/gobernanza-de-lainformacion Gartner Group (2012). Information Governance. 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