CÁMARA NACIONAL DE APELACIONES DEL TRABAJO

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Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional
Poder Judicial de la Nación
CÁMARA NACIONAL DE APELACIONES DEL TRABAJO - SALA VII
Causa N°: 40621/2012
SENTENCIA DEFINITIVA Nº 48800
CAUSA Nº 40.621/2.012 - SALA VII - JUZGADO Nº 4
En la Ciudad de Buenos Aires, a los 26 días del mes de abril de 2.016, para dictar sentencia
en estos autos: "Gómez, Juan Manuel c/ Guía Laboral Empresa de Servicios Eventuales
S.R.L. s/ Despido", se procede a votar en el siguiente orden:
LA DOCTORA ESTELA MILAGROS FERREIROS DIJO:
I) Del fallo que acogió las pretensiones salariales e indemnizatorias del
actor, apela la demandada a fs. 229/232, lo que mereciera la réplica de fs. 237/238.
La perito contadora apela la regulación de sus honorarios, por considerarlos
bajos (fs. 228).
II) El actor demandó a Guía Laboral Empresa de Servicios Eventuales S.R.L.
en procura del pago de indemnización por despido y salarios adeudados. Refirió haberse
desempeñado para la misma desde el 23/01/12, con turnos rotativos de 8 horas diarias y una
remuneración que al mes de marzo de 2.012 era de $ 6.795.-, que cumplió sus tareas en la
destilería de YPF en la localidad de La Plata, Pcia. de Bs.As., hasta el 20/04/2.021 que dejó
de prestar servicios en dicha usuaria y no se le otorgó nuevo destino. Adujo que se le
adeudarían 90 horas nocturnas. Transcribió el intercambio telegráfico habido a partir del
02/05/12. Refirió que la empleadora lo intimó a presentarse, que lo hizo con dos testigos y
ante una nueva negativa el 28/05/12 se consideró despedido (arts. 242 y 246 LCT).
La demandada contestó a fs. 33/39vta. y negó los hechos denunciados. Indicó
que es una empresa de servicios eventuales habilitada por el Ministerio de Trabajo conforme
Dto. 1.694/06. Que provee personal a empresas usuarias frente a necesidades específicas.
Que el actor estuvo debidamente registrado. Que trabajó 15 días en el año 2.010. Que
ingresó nuevamente el 17/03/2.012 para distintas usuarias, entre ellas YPF. Que al finalizar la
necesidad de la misma debió haberle asignado nuevas tareas pero no concurrió a la
empresa y comenzó el 02/05/12 el intercambio telegráfico para colocarse en situación de
despido indirecto. Sostuvo que habría incurrido en abandono de trabajo pues no concurrió
ante su intimación a presentarse y que no le adeudaría suma alguna por ningún concepto.
Impugnó la liquidación practicada. Acompañó certificado de trabajo con certificación bancaria
del 31/08/12 y refirió que desde esa fecha se encontraba a disposición del actor. Solicitó el
rechazo de la acción, con costas.
La sentencia de primera instancia obra a fs. 225/227 y fue favorable al actor.
III) Como queda dicho, quien apela es la demandada, quien, en primer lugar,
se queja porque el juez la condenó al pago de las indemnizaciones previstas en los arts. 232,
233 y 245 de la LCT por considerar que “…el despido dispuesto por el trabajador el 28/05/12
ante la falta de dación de tareas deviene plenamente justificado…” y que no se configuró el
abandono de trabajo en los términos del art. 244 de la LCT invocado por la demandada.
Fecha de firma: 26/04/2016
Firmado por: ESTELA MILAGROS FERREIROS, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: ROSALIA ROMERO, SECRETARIA
Firmado por: NESTOR MIGUEL RODRÍGUEZ BRUNENGO, JUEZ DE CAMARA
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Ésta refiere que el actor se colocó en situación de despido indirecto por la falta
de pago de horas nocturnas además de la negativa de tareas por parte del apelante y arguye
que estaría a cargo del trabajador acreditar que la extinción de la relación operó por los dos
extremos descriptos en forma conjunta.
Que la juez indicó que en el telegrama rescisorio fueron esgrimidas otras
razones como fundamento de la medida rupturista, como falta de pago de horas nocturnas y
valoró que el testigo Gustavo Basualdo (fs. 128) -que no fuera impugnado- declaró que el
27/05/2.012 acompañó al actor a la sede de la accionada, donde lo atendió una recepcionista
a quien Gómez le dijo que fue a reclamar las horas nocturnas impagas y el puesto de trabajo
que tenían que darle. Que la misma tomó el teléfono, llamo a alguien del interior a quien
comunicó lo que le dijo el actor “y una vez que cuelga el teléfono le dice que no, que no se le
podían pagar las horas y no se le podía dar otro empleo”.
También tuvo en cuenta que la demandada ninguna prueba aportó tendiente a
demostrar la efectiva dación de tareas (nuevo destino laboral) al actor, ni antes ni después de
su emplazamiento, pues se limitó a intimarlo bajo apercibimiento de abandono de trabajo.
En consecuencia, consideró que el despido dispuesto el 28/05/12 ante la falta
de dación de tareas resultó plenamente justificado (arts. 242 y 246 RCT) y e indicó que
cuando son varias las causales invocadas en la notificación del despido, alcanzaba con la
demostración de alguna de ellas, con entidad bastante para justificar la medida para justificar
el despido (cfr. art. 242 ya cit.).
El recurrente cuestiona esta última decisión y arguye que el trabajador debería
haber demostrado en autos la existencia de los dos incumplimientos que endilgó a la
principal y que no bastaría la simple demostración de la existencia de alguna de las causales
invocadas sino que debía haber acreditado ambas (negativa de tareas y la falta de pago de
las 90 horas nocturnas) y que la sentenciante no podría apartarse en modo alguno de ello.
Que el único testigo que declaró fue el Sr. Basualdo quien estaría
comprendido en las generales de la ley. Que refirió que “…les comentó el actor que un día
antes lo habían despedido…”, por lo que lo que sabría el testigo sería por comentarios del
actor. Que no le constaría cuando ni por qué concluyó la relación laboral.
Memoro que la función del testigo es declarar respecto de hechos a los que ha
accedido a través de sus sentidos.
Este conocimiento debe ser personal y, en principio, directo, porque el testigo
indirecto solo puede acreditar la existencia de un rumor o comentario y no puede ser
considerado declarante en el sentido técnico del término.
Concretamente lo que el testigo Gustavo Elías Basualdo (fs. 128/129) declaró
fue que acompañó al actor con otra persona a la oficina de Guía Laboral, la entrada era de
vidrio. El frente era de vidrio. Entraron los tres. El actor le dijo a la recepcionista -entre 45 y
50 años, como mucho-, que iba a reclamar
Fecha de firma: 26/04/2016
Firmado por: ESTELA MILAGROS FERREIROS, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: ROSALIA ROMERO, SECRETARIA
Firmado por: NESTOR MIGUEL RODRÍGUEZ BRUNENGO, JUEZ DE CAMARA
las horas que le adeudaban y el puesto de trabajo
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que tenían que darle. Que en ese momento la recepcionista tomó el teléfono, llamó a alguien
del interior, le comunicó esto que dijo el actor y una vez que colgó el teléfono le dijo que no.
Que no se le podían pagar las horas ni dar otro empleo y que ante la negativa se retiraron los
tres (actor y testigos).
Evidentemente, de la mera lectura de tal deposición surge que el testigo
declaró respecto de hechos a los que accedió a través de sus sentidos, pues los que
presenció y en parte fue protagonista de los mismos. Mal puede predicarse que fuera por
comentarios del actor que tomó conocimiento los extremos fácticos sobre los que declaró y
no resulta menester que le constara cuándo ni por qué concluyó la relación laboral, pues lo
que el testigo probó fue la negativa de tareas por parte de la empleador (arts. 90 de la ley
18.345 y 386 del CPCCN) nada más.
Contrariamente a lo sostenido por la recurrente, cuando son varias las
causales invocadas en la notificación del autodespido, la acreditación del alguna de ellas,
que tenga bastante virtualidad o entidad como injuria, es suficiente para justificar la medida y
admitir el reclamo indemnizatorio pertinente (en igual sentido ver, de esta Sala, S.D. Nº
39.710 del 03/11/2.006, “Scarcella, Mariela Isabel c/ Casinos Buenos Aires S.A. s/ despido”).
Respecto de esto último, considero justificada la situación de despido indirecto
en que se colocó el trabajador ante la negativa de tareas, en tanto dicha injuria posee
gravedad suficiente en los términos del art. 242 LCT (en igual sentido ver, Sala IV, sent. Del
31/05/2.010, “Suarez, Natalia Soledad c/ Proseres S.R.L. y otro”).
IV) Se queja asimismo porque se le condenó al pago de los haberes
correspondientes a los meses de abril y mayo de 2.012.
Respecto de los correspondientes al mes de abril, alega que los mismos
habrían sido pagados en tiempo y forma y que esto se encontraría acreditado con la prueba
contable y que desde el 20 de dicho mes no se habría presentado a trabajar.
La prueba pericial se efectuó sobre las registraciones de la recurrente.
Tales libros –aun llevados en legal forma-, no hacen plena prueba de su
contenido si existen otros elementos que los contradigan, pues los datos allí volcados son
inoponibles al trabajador, atento la unilateralidad de las registraciones, por lo que aun cuando
se adecuen a las previsiones del art. 52 RCT quedan sujetos a la valoración judicial.
Por otro lado, la alegación de que el trabajador no se presentó a trabajar debe
desecharse toda vez que -como señalé-, intentó en todo momento poner a disposición de la
principal su capacidad de trabajo y ésta lo rechazó, por es quien debe cargar con las
consecuencias de su proceder.
V) Por las razones antes señaladas, también considero correcta la condena al
pago de la indemnización prevista en el art. 2º de la ley 25.323, puesto que el trabajador la
intimó para que se le abonaran las indemnizaciones por despido y luego se vio obligado a
litigar judicialmente para perseguir
Fecha de firma: 26/04/2016
Firmado por: ESTELA MILAGROS FERREIROS, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: ROSALIA ROMERO, SECRETARIA
Firmado por: NESTOR MIGUEL RODRÍGUEZ BRUNENGO, JUEZ DE CAMARA
el cobro íntegro de las mismas debido a la conducta
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reticente del empleador a abonar dichos conceptos, sin que por tratarse de un despido
indirecto en los términos del art. 246 LCT nada pueda modificar lo resuelto en grado, pues no
surge de la normativa en análisis que cabría excepcionar de su aplicación a dicho tipo de
despidos.
VI) La juez de grado, toda vez que el certificado acompañado consigna
erróneamente la fecha de egreso del trabajador, condenó a la demandada a hacer entrega
de nuevo certificado de trabajo y aportes en los términos del art. 80 de la LCT conforme a las
constancias acreditadas en autos y aportes efectivamente realizados, bajo apercibimiento de
astreintes en caso de incumplimiento y esto también es apelado.
De manera dogmática la recurrente arguye que ya los acompañó y que la
fecha de la certificación bancaria fue el 31/08/12, pero guarda silencio respecto del defecto
indicado por la magistrada y no lo cuestiona por lo que su queja debe ser rechazada (art.
116, 2º párrafo, de la ley 18.345).
Sostiene también que sería improcedente la condena al pago de la multa
prevista en el art. 80 LCT, porque puso a disposición del trabajador los certificados previstos
en dicha norma.
Considero que en nada puede modificar lo resuelto en grado la circunstancia de que
los certificados hubieran sido puestos a disposición del Sr. Gómez, sin perjuicio de resaltar
que los mismos no se ajustarían a las condiciones acreditadas en la presente, atento lo
señalado ut supra.
Ya he señalado reiteradamente que, en rigor de verdad, el cumplimiento de esta
imposición legal, encierra, nada menos que un pago y que el instituto del pago, debía cumplir
con los requisitos del mismo, expuestos en el Código Civil (arts. 724 y sgtes.).
En el caso, el pago se produce con la entrega de la cosa pues, de lo contrario,
la deuda de un salario quedaría saldada “poniendo a disposición”, mientras se encuentra en
la cuenta bancaria del deudor.
La cancelación, requiere, en autos, la entrega de los certificados, ya que lo que
la ley quiere es que el trabajador tenga el objeto debido.
La “puesta a disposición”, es sólo, a mi modo de ver, una expresión y no un
instituto jurídico. Valga recordar a Borda cuando enseñaba: “lo que está en el cajón de mi
escritorio, no pudo haber cancelado la obligación de pago”.
El art. 80 de la L.C.T. no sólo protege al trabajador, sino que sanciona al
empleador incumplidor de un deber tan delicado como el de observar las obligaciones frente
a los organismos sindicales y de la seguridad social, y en el cuarto apartado, recalca, “si el
empleador no hiciera entrega” (el subrayado es mío), por lo que la queja de la demandada
debe rechazarse.
Fecha de firma: 26/04/2016
Firmado por: ESTELA MILAGROS FERREIROS, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: ROSALIA ROMERO, SECRETARIA
Firmado por: NESTOR MIGUEL RODRÍGUEZ BRUNENGO, JUEZ DE CAMARA
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VII) También cuestiona que se haya ordenado liquidar intereses sobre el
monto de condena conforme la tasa que dispone el Acta 2.601 pero no le veo razón en su
planteo.
Cabe recordar que con fecha 21 de mayo de 2.014 la Cámara Nacional de
Apelaciones del Trabajo que integro estableció un nuevo criterio (Acta 2.601, tasa nominal
anual para préstamos personales libre destino del Banco Nación para un plazo de 49 a 60
meses) que morigera los efectos del envilecimiento de la moneda y el consecuente deterioro
de los créditos laborales.
A mayor abundamiento debo señalar que, estoy de acuerdo con que sea la
prevista en el Acta 2.601, aun cuando no estaba vigente al momento del despido, puesto que
la tasa que estuvo vigente hasta el 21-05-14 evidentemente se encontraba desactualizada,
habiéndose registrado un gran incremento en el costo de vida, por lo que luce inequitativo
mantener la tasa anterior, cuando el sentido es compensar la mora y penar la demora en el
pago de los créditos laborales.
Además y sin perjuicio de todo lo expuesto corresponde señalar que no
corresponde admitir un planteo de inconstitucionalidad cuando –como en el presente caso- el
mismo resulta meramente genérico, pues no precisa el recurrente de qué manera o cómo se
vulneraría, en el caso concreto, la Constitución Nacional.
Al respecto no puedo soslayar que la declaración de inconstitucionalidad es un
acto de suma gravedad institucional que debe ser considerado ultima ratio del orden jurídico
y, en caso de duda, corresponde estarse a su constitucionalidad.
Solo corresponde acudir a ella cuando la repugnancia entre la norma
cuestionada y la Constitución Nacional sea manifiesta y la incompatibilidad inconciliable, lo
que –obviamente- no está demostrado que ocurra en el presente caso, por lo que
corresponde desestimar el pedido de inconstitucionalidad efectuado por la recurrente.
VIII) A mi juicio los honorarios regulados a las representaciones letradas de
las partes y al perito contador lucen equitativos atendiendo a la importancia y extensión de
los trabajos realizados y monto del juicio, por lo que sugiero su confirmación (ley 21.839,
Dec. Ley 16.638/57 y art. 38 de la ley 18.345).
En síntesis, sugiero confirmar el fallo de grado en todas sus partes.
IX) En caso de ser compartido mi voto propongo que las costas de alzada
sea a cargo de la recurrente (art. 68 del CPCCN) y que se regulen honorarios a su
representación letrada en el 25% y a la del actor en el 30% de lo que en definitiva y por las
tareas cumplidas en la instancia anterior en favor de sus defendidos corresponda (art. 14 de
la ley 21.839).
EL DOCTOR NÉSTOR MIGUEL RODRÍGUEZ BRUNENGO DIJO: Por compartir los
fundamentos, adhiero al voto que antecede.
EL DOCTOR HÉCTOR CÉSAR GUISADO:
Fecha de firma: 26/04/2016
Firmado por: ESTELA MILAGROS FERREIROS, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: ROSALIA ROMERO, SECRETARIA
Firmado por: NESTOR MIGUEL RODRÍGUEZ BRUNENGO, JUEZ DE CAMARA
No vota (art. 125 ley 18.345).
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Causa N°: 40621/2012
Por lo que resulta del precedente acuerdo, el Tribunal RESUELVE: 1)
Confirmar el fallo. 2) Imponer las costas de alzada a la recurrente. 3) Regular honorarios a su
representación letrada en el 25% (veinticinco por ciento) y a la del actor en el 30% (treinta
por ciento) de lo que en definitiva y por las tareas cumplidas en la instancia anterior en favor
de sus defendidos corresponda. 4) Oportunamente, cúmplase con lo dispuesto en el art. 1º
de la ley 26.856 y con la Acordada de la C.S.J.N. Nº 15/2.013.
Regístrese, notifíquese y devuélvase.
Fecha de firma: 26/04/2016
Firmado por: ESTELA MILAGROS FERREIROS, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: ROSALIA ROMERO, SECRETARIA
Firmado por: NESTOR MIGUEL RODRÍGUEZ BRUNENGO, JUEZ DE CAMARA
#20185936#151885648#20160426091448784
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