Boletín • N° 5 Dr. Gabriel García Moreno. Al finalizar el período garciano, los militares marcistas volvieron a probar fortuna. En algunos lugares del país, los urbinistas proclamaron a su antiguo caudillo como jefe supremo, y éste, que no esperaba otra señal, se aprestó a dirigirse con barcos y hombres reclutados en el Perú, al puerto de Guayaquil. Pero ahora llegaba con Robles y Franco y más militares marcistas, con quienes pensaba resucitar el antiguo régimen después de derrocar al gobierno constitucional. El gobierno se adelantó, pues había designado a Flores para ponerse al frente de la defensa, y éste, apoyado en decretos y órdenes terminantes emanados del gobierno, movilizó hombres y elementos bélicos, mientras los invasores subían por las aguas del golfo cometiendo toda suerte de atropellos. Flores arremetió bravamente en todos los sitios donde se presentaban los urbinistas y, tras sangrientos combates, los rechazó. Flores, a causa de una vieja enfermedad, agravada por el esfuerzo de esta campaña, falleció antes de terminarla. • 2013 179