ENERGIAS RENOVABLES Y LA CALIDAD ELECTRICA indirectamente por medio de una fuente que, en principio es inagotable. Por: John Claverley, Bovis Lend Lease SA, Asesor Técnico del Centro Español de Información del Cobre (CEDIC) Las tecnologías renovables han estado en uso desde los principios de la electrificación – la hidro-eléctrica es un ejemplo (aunque muchas veces no considerado así) Las energías renovables son cada día más demandadas y necesarias pero con ellas puede llegar más contaminación a nuestras redes. Es imprescindible que aprendamos a vivir con estas fuentes dado que serán la solución del futuro. No obstante, en los últimos 40 años se ha llegado a considerar “renovables” tecnologías como la eólica, energía solar, bio-masa, derivado de las olas del mar o sistemas parecidos. De todos los sistemas, hoy el más obvio, dado su impacto visual, es el eólico. Según el World Energy Assessment publicado por el Consejo Mundial de Energía en 2000, la energía eólica puede llegar a contribuir entre 231 y 640x1018J al consumo global aunque entonces habría menos de 0,1% de esta cantidad derivados de esta fuente. El reto global antes del 2.020 es 11x1018J, es decir aproximadamente 5% del total posible disponible. foto: www.infoeolico.com En numerosas ocasiones es planteada la misma cuestión ¿van a ser las fuentes renovables el futuro para la demanda global de energía?. La respuesta es clara, no hay otra posibilidad. Aparte del problema del futuro agotamiento, el crecimiento del coste de fuentes basadas en carbón propicia cada día más el uso de fuentes alternativas. ¿De que fuentes podemos estar hablando? En términos eléctricos, una fuente renovable es la que deriva su potencial para generar electricidad, directamente o Como referencia, otras fuentes tienen, en principio, mayor potencial – como por ejemplo energía solar – directamente mediante células fotovoltaicas o indirectamente mediante el efecto térmico del sol (potencial de hasta 50.000x1018J aunque para el año 2.020 el objetivo es sólo tener 1,3x1018J aprovechado. Hoy en día la red eléctrica española puede derivar aproximadamente 3% de su demanda desde fuentes eólicas, aunque hay más de 8.000MW (casi el 20%) de potencia instalada. Sin embargo, Red Eléctrica Española informa que “La producción de energía eólica presenta algunas singularidades, derivadas fundamentalmente de su carácter no gestionable, que obliga a disponer en el sistema de reservas de potencia suficientes en todo momento, procedentes de otras fuentes de energía. Esta particularidad exige la optimización de las funciones de previsión, monitorización y control de este tipo de generación...” Según el Instituto para el Desarrollo del Ahorro de la Energía (IDAE) aunque en España, todavía sólo el 3% de la energía consumida proviene de parques eólicos hay zonas – como ejemplo estrella, Navarra, donde el 20% del consumo procede del viento. Una vez entendido que la disponibilidad de energía eléctrica derivada de fuentes eólicas va a seguir creciendo en nuestro mercado, y cada vez se va a ver más estos Parques adornando nuestro paisaje, hace falta entender y analizar los posibles problemas que estos pueden imponer a la red. Aunque un generador eólico puede existir en vacio, sin conexión a la red, lo habitual es considerar una instalación donde haya mas de un generador conectado a la red pública – es decir, el clásico Parque Eólico. En estos casos, es habitual que el Parque incorpore interconexiones entre generadores y transformación a, habitualmente, 20kV como parte de la instalación. Los generadores individuales normalmente funcionan a voltajes inferiores a 1.000V. El generador puede ser tanto síncrono como asíncrono y ambas soluciones están contempladas por la Normativa que rige la conexión de dichos generadores a la red eléctrica. Sin embargo, los más habituales son generadores asíncronos por su eficacia y relación coste/ rendimiento. El RD 2818/ 1998 y el Orden del 5 de septiembre de 1985 especifican las condiciones bajo los cuales se puede pedir autorización para conectar un generador a la red. Se establece unos limites de tamaño, y criterios de generación. Por ejemplo la variación en voltaje no puede exceder 5% y la potencia de cada generador no puede ser superior al 5% de la potencia de corto circuito en el punto de conexión común para evitar fluctuaciones en voltaje. Además, la conexión no puede ser realizada hasta que la velocidad no esté dentro de ciertos límites. No obstante, y aunque se respeta esta Normativa, la fuente eólica es intrínsecamente inestable y puede ser el origen de perturbaciones importantes en la red. Estas perturbaciones son más notables en las cercanías del punto de conexión y en zonas donde hay una mayor acumulación de inyecciones de potencia derivada de estas fuentes se aprecia todavía más. En la mayoría de los casos, las instalaciones donde más se aprecian estas perturbaciones son donde el Parque se conecta a un parte “débil” de la red. Un parte débil existe donde hay una baja capacidad de transporte en la red, situaciones que tradicionalmente ocurren en zonas remotas y/ o poco habitadas – y situaciones que desafortunadamente son algunas de los más habituales para instalaciones de este tipo. Las perturbaciones más habituales se derivan de aerogeneradores asíncronos que provocan distorsiones en voltaje, frecuencia dada su inyección de armónicos en la salida del generador. Así mismo, como la velocidad de rotación es, por defecto, inestable, el grado de perturbación tampoco es estable, por lo que es más difícil de atenuar. En estos casos, la red puede exhibir variaciones intermitentes como el “flicker” (parpadeo). Las medidas necesarias para resolver estos fenómenos incluyen refuerzo de la red de transporte, y mejoras en los equipos de control incorporando técnicas de electrónica de potencia y asegurando unas conexiones “suaves” a la red mediante tiristores. Sin embargo el desarrollo continuo de la tecnología ayuda a mejorar la situación. Innovaciones en la electrónica, la existencia de palas de mayor diámetro de rotor que permitan una mayor área de barrido y torres más altas para aprovechar mejor el viento sin fluctuaciones entre palas ayudan a la calidad de la energía saliente. Además mejoras en la predicción de vientos ayuda al operador conocer con mucha más certeza cuánto y cómo se va a inyectar potencia de origen eólico. Para más información sobre energías renovables y soluciones a la calidad eléctrica se puede acudir a la “Guía de Calidad de la Energía Eléctrica” distribuida por el Centro Español de Información del Cobre (CEDIC) bajo la Iniciativa Leonardo de la Comunidad Europea (LPQI) y su página web: www.lpqi.org www.leonardo-energy.org Referencias y agradecimientos adicionales: Instituto para la Desarrollo del Ahorro de la Energía (IDAE) www.idae.es Red Eléctrica Española www.ree.es Danish Wind Industry Association www.windpower.org/es Portal de Información sobre Energía www.infoenergia.com Portal de Información sobre Energía Eólica www.infeolica.com Portal de Información sobre Energía Solar www.solarweb.net Gamesa Eólica S.A. www.gamesa.es