AL JUZGADO CENTRAL DE INSTRUCCIÓN Nº 5 DE LA AUDIENCIA NACIONAL EL FISCAL, en las D.P. nº 112/2011 de este Juzgado, evacuando el trámite acordado en el Auto de 12 de mayo de 2011 para informe sobre competencia, admisión a trámite de querella, práctica de diligencias y adopción de medidas cautelares, por medio del presente escrito comparece y DICE: 1º.- Las presentes diligencias se incoaron por Auto de 12/5/2011 en virtud de denuncia y querella presentadas en fecha 9/5/2011 por dos denunciantes y 63 querellantes, si bien dicha querella, según el tenor literal de aquella resolución, se encuentra pendiente de admitir a trámite de resultas del presente informe. Ambas acciones se dirigen, según los casos, contra José María RuizMateos y Jiménez de Tejada, María Teresa Rivero Sánchez-Romate, Zoilo Ruiz-Mateos Rivero, Pablo Ruiz-Mateos Rivero, Álvaro Ruiz-Mateos Rivero, Francisco Javier Ruiz-Mateos Rivero, José María Ruiz-Mateos Rivero, Alfonso Ruiz-Mateos Rivero y Zoilo Pazos Jiménez, y las entidades INVERSIONES RUIZ MATEOS SA, NUEVA RUMASA SA, JOSÉ MARÍA RUIZ-MATEOS SA, RUMANOVA SA, MASPALOMAS HOTELES SA, CARNES Y CONSERVAS ESPAÑOLAS SA (CARCESA), GRUPO DHUL SL y CLESA SL en las que aquéllos aparecen, según proceda, como administradores o apoderados. 2º.- En síntesis, los hechos puestos en conocimiento de este Juzgado indican que durante los años 2009 y 2010 los denunciantes y querellantes, en respuesta a una campaña publicitaria organizada a tal efecto por los querellados, entregaron en préstamo a algunas de las sociedades citadas diversas cantidades de dinero, pactando su devolución en uno o dos años junto con unos intereses del 8, 10 ó 12 %, para lo cual recibieron en el momento de los desembolsos diversos pagarés por el importe del principal y los intereses que debían hacerse efectivos en las fechas de sus vencimientos, pagándose los intereses trimestralmente. Los pagarés –cuyas copias testimoniadas se han aportado– fueron emitidos por las sociedades CARCESA, INVERSIONES RUIZ MATEOS SA, JOSÉ MARÍA RUIZ-MATEOS SA y MASPALOMAS HOTELES SA, siendo avalados en la mayoría de los casos por GRUPO DHUL SL y CLESA SL. Junto a éstas hay que incluir a HIBRAMER SA, que también emitió pagarés, aunque no es objeto de la denuncia ni de la querella. Todas esas empresas forman parte de un conglomerado societario que merced a su propia publicidad –en este punto equívoca– viene siendo conocido en la opinión pública como Grupo NUEVA RUMASA, si bien no forma ni contable ni jurídicamente un verdadero grupo empresarial encabezado por una matriz. Dentro de ese conjunto de sociedades se encuentra también RUMANOVA SA, a la que alguno de los querellantes afirma haber entregado cantidades, sin que al día de la fecha la misma le haya entregado los pagarés ofrecidos. Los denunciantes y querellantes realizaron diferentes aportaciones que van desde 50.000 € a 3.600.000 €, alcanzando una suma total de 9.444.768,16 € y afirman que ni las empresas emisoras de los pagarés ni sus avalistas están en condiciones de devolver esos importes al encontrarse en situación de insolvencia, situación que entienden preexistía y les fue ocultada al tiempo de entregar esos fondos. Se alega, además, que algunas de esas sociedades han sido objeto de maniobras de despatrimonialización. Hasta donde ha podido averiguar este Ministerio Fiscal, de las sociedades citadas se encuentran declaradas en concurso al día de la fecha GRUPO DHUL SL, HIBRAMER SA, CARCESA y CLESA SL. También se encuentran en concurso otras sociedades no referidas en la querella que aparentemente forman parte del aludido conglomerado empresarial. Según los querellantes, tales hechos podrían ser constitutivos de delitos de estafa (art. 248 CP), insolvencia punible (art. 257.1 CP), contra el mercado y los consumidores (arts. 282,284.2 CP) y administración desleal (art. 295 CP). 3º.- A las anteriores consideraciones –particulares de los querellantes y denunciantes en su elaboración de la notitia criminis– deben añadirse las que derivan también de lo actuado hasta el presente por esta Fiscalía Especial en el curso de sus Diligencias de Investigación nº 2/2010. Tales diligencias se incoaron en virtud de denuncia presentada por la AEAT en fecha 8/3/2010 por presuntos delitos contra la Hacienda Pública imputables a un número no determinado de empresas conocido como NUEVA 2 RUMASA y sus administradores en relación con el IRPF, el Impuesto de Sociedades y el IVA de los ejercicios 2004 a 2008, así como por blanqueo de capitales. Ha de señalarse que la delimitación del grupo de empresas conocido en los medios de comunicación como NUEVA RUMASA –117 según su propia publicidad– resulta muy difícil, si no imposible, dado que las mismas no forman un grupo consolidado cuya estructura de propiedad permita identificar una matriz común. La AEAT considera que ese grupo de sociedades, entre las que destaca “Nueva Rumasa SA”, podría alcanzar un mínimo de 147 empresas que funcionan conforme a un principio de caja única y actúan bajo una unidad de decisión atribuible a la familia Ruiz-Mateos y singularmente a sus miembros varones. La AEAT caracteriza a este grupo de empresas por su total opacidad, ya que su titularidad formal corresponde a otras sociedades residentes en paraísos fiscales, jurisdicciones no cooperantes u otros territorios de riesgo –27 sociedades de Belice, 2 de Panamá y 4 de Holanda– cuyo representante suele ser uno de los que considera sus testaferros habituales. El Fiscal, por las razones expuestas en su Resolución de 13/10/2010 –en síntesis, la impracticabilidad de una nueva actuación aglutinadora de decenas de procedimientos judiciales ya en curso, la inviabilidad de una intervención general sobre un grupo indeterminado de empresas y el grado de inconcreción de algunos términos de la denuncia–, acordó el archivo de tales diligencias en relación con los presuntos delitos fiscales y resolvió dirigir la investigación al análisis de las operaciones de captación de ahorro del público realizadas por parte de, al menos, cuatro empresas de ese grupo empresarial. Estos hechos, aunque con información todavía fragmentaria, también eran apuntados en la denuncia de la AEAT. De lo actuado al respecto por esta Fiscalía Especial cabe concluir que a lo largo del año 2009 las sociedades CARCESA, HIBRAMER SA, MASPALOMAS HOTELES SA y JOSÉ MARÍA RUIZ MATEOS SA, previas las oportunas campañas en los medios de comunicación, procedieron a emitir sucesivamente unos denominados “pagarés corporativos” o “pagarés de empresa” no a la orden con vencimientos a 1, 2, 3, 4 ó 5 años, según los casos, con el fin de garantizar a sus inversores la devolución de préstamos retribuidos con un interés entre el 6 % y el 10 %, siendo la aportación mínima en cada 3 emisión de 50.000 €. Con los datos disponibles hasta diciembre de 2009 y solo en relación con las emisiones de las tres primeras empresas se han podido identificar 1017 inversores por un total de 90.496.357 €. Se desconoce el número de inversores posteriores aparte de los querellantes y denunciantes. De las emisiones de pagarés publicitadas por CARCESA, HIBRAMER SA y MASPALOMAS HOTELES SA existen folletos fechados respectivamente en los meses de febrero, septiembre y octubre de 2009 en los que se anuncia al público que las inversiones irán destinadas a la adquisición de nuevas empresas, activos y hoteles. En tales folletos se asegura, según los casos, que la inversión cuenta con la garantía de la empresa emisora o de otra empresa del Grupo Nueva Rumasa o de una prenda sin desplazamiento de los brandies propiedad de BODEGAS VALDIVIA DE CÁDIZ SL, sociedad que ha sido declarada en concurso de acreedores en fecha 15/4/2011. De la declaración prestada por algunos inversores ante la Policía Judicial a instancia de esta Fiscalía parece deducirse que era una práctica habitual que los tenedores de pagarés, una vez reintegrados de su inicial inversión en el año 2010, reinvirtieran esas cantidades en nuevos préstamos garantizados con pagarés emitidos por las sociedades INVERSIONES RUIZ MATEOS SA y JOSÉ MARÍA RUIZ MATEOS SA con vencimiento a 1 ó 2 años e intereses del 10 ó 12 %, sociedades éstas en las que invirtieron precisamente los denunciantes y la mayoría de los querellantes. Se conoce igualmente que en el mes de enero de 2011 la entidad RUMANOVA SA ofreció nuevos pagarés con vencimiento a 1 ó 2 años e interés del 10 ó 12 % a un número no determinado de personas –al menos 53 recibieron la oferta mediante correo electrónico– de las cuales 13 realizaron desembolsos por importes entre 50.000 € y 1.350.000 € que, una vez ingresados en la cuenta designada, fueron inmediatamente transferidos a la cuenta nº 00310028-94-1010001878 (Banco Etcheverria) de BARDAJERA SL. Se desconoce si hubo otros inversores, pues el querellante Francisco José Acero Gómez, que afirma haber realizado su inversión el 14/2/2011 –después de la advertencia dirigida por la CNMV a RUMANOVA SA el 1/2/2011–, ni siquiera aparece en la relación de inversores proporcionada a la CNMV por dicha entidad. 4 Este Ministerio Fiscal desconoce qué importe exacto de todas las inversiones vencidas ha sido reintegrado y cuál no, así como los motivos que han impedido o puedan impedir en el futuro, en su caso, la devolución de las mismas. Los denunciantes afirman no haber recibido cantidad alguna más allá del primer pago de los intereses. Los querellantes no detallan este punto, aunque aportan testimonios notariales de numerosos pagarés vencidos que obran en su poder –por tanto, aparentemente no reintegrados– y de otros que habrán de vencer a lo largo de 2011 y 2012. Según información a disposición de esta Fiscalía existen incluso pagarés que vencerán en 2014. En todo caso, a fin de resolver motivadamente sobre el ejercicio de acciones penales en relación con estos hechos, esta Fiscalía Especial ha dirigido su investigación a conocer en la medida de lo posible el destino último dado a las cantidades desembolsadas por los inversores. En el curso de esa investigación –todavía embrionaria– se ha podido averiguar que a los adquirentes de pagarés se les comunicó que debían realizar sus ingresos en, al menos, las siguientes cuentas bancarias: Entidad Banco de Valencia Banco Popular La Caixa La Caixa La Caixa La Caixa Banesto Banesto Banesto BBVA Banco Etcheverria Cuenta 0093-0411-99-0066334633 0075-0080-19-0601720177 2100-1898-96-0200190335 2100-1898-95-0200184724 2100-8656-66-0200014070 2100-8656-68-0200014535 0030-1775-85-0000886271 0030-1775-85-0000945271 0030-1775-81-0000898271 0182-2325-06-0204017639 0031-0028-97-1010001488 A esas entidades se han dirigido requerimientos para la obtención de información sobre los movimientos de las referidas cuentas y las personas autorizadas a operar con las mismas. Hasta la fecha sólo se ha obtenido respuesta respecto de 4 de esas cuentas, estando pendiente de realizarse análisis de dicha información por parte de la Unidad de Apoyo de la AEAT adscrita a esta Fiscalía Especial sin que en este momento pueda avanzarse ninguna conclusión. 5 4º.- Como puede observarse, los hechos contenidos en la querella y en la denuncia coinciden con una parte importante de los que están siendo investigados por esta Fiscalía Especial, pudiendo ser los mismos conforme a la mera narración fáctica recogida en aquéllas –sin perjuicio del resultado de la investigación– constitutivos de un delito de estafa del art. 248 CP –al margen de las relaciones concursales con otros delitos– o de apropiación indebida del art.252 CP. No en vano, aún sin concreción del nomen iuris, así lo proclama el razonamiento jurídico del Auto de 12/5/2011 que acuerda incoar estas diligencias por poder ser los hechos constitutivos de delito. Al mismo tiempo dicho auto difiere la admisión de la querella a lo que pueda resultar del presente trámite, es de suponer que en consideración a la posible competencia o incompetencia de este órgano judicial para tramitarla (art. 272 LECr). En todo caso debe tenerse en cuenta que una vez acogida la notitia criminis es posible personarse en las actuaciones sin necesidad de formular querella (art. 761.2 CP), como así se ha resuelto respecto de los denunciantes, tenidos ya por parte mediante Providencia de 13/5/201. En este punto cabe dar por reproducidas las alegaciones contenidas en la querella en relación con la competencia objetiva de este Juzgado, toda vez que en la inicial exposición de los hechos se describe objetivamente una presunta defraudación con efectos sobre una generalidad de personas distribuidas por el territorio de varias Audiencias en el sentido indicado en el art. 65.1º c) LOPJ, considerando como tal “generalidad” al conjunto de adquirentes de pagarés ofertados y emitidos por ciertas empresas que funcionan indiciariamente bajo una dirección común. Ese conjunto de inversores alcanza a los 63 querellantes y los dos denunciantes que han decidido acudir a la jurisdicción penal, pero ese número no ha de entenderse limitado por dicha opción procesal, pues en pura lógica la apariencia de tipicidad de los hechos denunciados, por su común dinámica comisiva, debería hacerse extensiva a otros inversores –se conocen más de 1.000 de tres emisiones– con independencia de que éstos puedan percibir los hechos con la misma o distinta significación jurídica, deseen o no entablar acciones penales o personarse en esta causa. En todo caso, conforme a lo dispuesto en el art.773.2 in fine LECr esta Fiscalía Especial debe cesar en la tramitación de sus diligencias de 6 investigación, remitiéndolas a este Juzgado para su incorporación a la presente causa. POR TODO LO CUAL interesa: 1º.- Se admita a trámite la querella junto con los documentos que la acompañan, se tengan por personados a los querellantes como acusación particular y se declare la competencia de este Juzgado para el conocimiento de los hechos. En este punto cabe aclarar que en la querella no se ejercita acción penal alguna contra autoridades o funcionarios públicos, si bien los querellantes dedican un apartado entero (páginas 68-75) a proclamar categóricamente la responsabilidad civil subsidiaria del Estado por los hechos denunciados. La invocación que en esa particular digresión se hace al art.121 CP olvida que dicha responsabilidad subsidiaria exige la condena penal de algún funcionario público o autoridad y, por tanto, el ejercicio previo de una acción penal contra los mismos, lo que, dicho sea de paso, en este caso resultaría de todo punto improcedente. Por tanto, las consideraciones fácticas y jurídicas que en relación con la actuación de la CNMV o el Banco de España se recogen en la querella han de considerarse un mero excurso sin efecto procesal en este trámite. 2º.- Se incorporen a las presentes diligencias las Diligencias de Investigación nº 2/2010 de esta Fiscalía Especial, sin perjuicio de remitir en el futuro los documentos que se hayan recibido en contestación a requerimientos actualmente en curso. 3º.- Se acuerde la práctica de las siguientes diligencias: … Alejandro Luzón Juan Pavía 7