El canon del NT - El Camino, Iglesia Evangélica, Asambleas de Dios

Anuncio
Los rabinos entendieron que después
del regreso del exilio la revelación había
terminado.
A partir de Esdras se cerró el canon,
exceptuando a Daniel, que se incluyó
entre los 'Ketubim' y no en los 'Nebiim'.
Inician 400 años de silencio profético
canónico.
Pero no todo estaba terminado, Dios
habló otra vez, tan inefablemente como
nunca antes lo había hecho.
El proceso de
formación del canon
del NT se lleva a
cabo a lo largo de
350 años.
La iglesia apostólica recurría a la
Septuaginta para fundamentar
su doctrina.
Desde un principio entendieron
que el evangelio no era una
ruptura sino una continuación.
Lo dijo el Maestro en Marcos 1:2.
Lo aseveró Pedro en Hechos
2:16-36.
Los dichos del Señor
Jesucristo eran autoritarios:
1. Tradición oral
2. Tradición escrita
1 Corintios 9:9,13-14;
11:23-25; 1 Tesalonicenses
4:15.
El Señor fundó la Iglesia y el apóstol
Pablo sistematizó su doctrina y
gobierno, dando instrucciones por
medio de sus epístolas que tenían
autoridad apostólica (1 Co. 7:25,40; 2
Co. 12:2).
Pedro reconoció el carácter
fundacional o apostólico de Pablo,
según lo expresa en 2 Pedro 3:15-16.
La muerte de los apóstoles y
la expansión de la Iglesia hizo
necesaria una lista de escritos
sagrados para continuar
testificando y establecer a los
nuevos creyentes en la fe y
práctica del evangelio.
La patrística, o la era de los
padres de la Iglesia (herederos
inmediatos y de primera mano
de las enseñanzas
apostólicas), a través de sus
escritos empezaron a
reconocer el carácter
inspirado de ciertos libros.
El temprano surgimiento
de las herejías y la fuerte
confrontación contra el
legalismo y el
gnosticismo, de nueva
cuenta, hizo necesario un
canon del NT.
El heresiarca de Marción publicó
una lista de tendencia gnóstica
donde repudiaba ciertos libros,
incluso algunos del AT.
La Iglesia contestó formando un
primer e inconcluso canon hacia
el año 170, llamado el canon
muratoriano (fue descubierto en
1740 por Ludovico Antonio
Muratori).
En un inicio los siguientes
libros no tenían respaldo
unánime para ser canonizados,
ya sea por no estar asegurada
su autoría apostólica o por no
tener una circulación universal:
Hebreos, Santiago, 2 Pedro, 2 y
3 de Juan, Judas y Apocalipsis.
Otro grupo de escritos de los
padres apostólicos fueron
aceptados por algunas iglesias
pero rechazados por la mayoría:
1 y 2 de Clemente; Ignacio;
Policarpo a los Filipenses; la
Didajé; Bernabé; el Pastor de
Hermas y la de Diogneto.
Un tercer y amplio grupo
fueron catalogados como
los apócrifos del Nuevo
Testamento.
Eran escritos de historias
que no estaban confirmadas
por los canónicos.
Fue hasta el Concilio de
Cartago, en el 397, que la
Iglesia legisló sobre el
canon, resultando los
actuales 27 libros del NT.
1. Decretó que sólo los libros canónicos
fueran leídos en las iglesias.
2. Presentó la lista de libros considerados
canónicos.
3. La formación del canon fue un proceso,
no un evento.
4. El canon lo determinó la historia, no la
jerarquía.
5. La Iglesia no formó el canon, lo
reconoció.
6. El Espíritu Santo inspiró la redacción y
guió a su aceptación.
Los criterio para la
canonización:
1. Paternidad o autoridad
apostólica.
2. Contenido doctrinal
cristocéntrico.
3. Su lectura transmite vida
espiritual al lector.
El canon ya está cerrado
Apocalipsis 22:18-19
"La Iglesia de Cristo no
precisa reveladores sino
predicadores e intérpretes
de la Palabra ya
entregada."
"La tarea de la Iglesia en
este tiempo y mientras
Cristo no regrese no es
suspirar deseosa de
nuevas revelaciones, sino
testificar de la salvación ya
claramente revelada."
Descargar