Cada vez hay más gente mendigando en las calles

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Interés general
Interés general
La Plata, jueves 16 de noviembre de 2000
Piden la colocación de semáforos en la avenida 7 de 66 a 72
El concejal platense del radicalismo, Marcelo
Viñes, a través de un proyecto presentado en el
Concejo Deliberante local impulsa la colocación
de semáforos en la venida 7 de 66 a 72.
El edil aseguró que de este modo “buscamos
limitar las altas velocidades que se despliegan en
este tramo, donde los vecinos están cansados de
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sufrir accidentes de tránsitos y ruidos molestos”.
De acuerdo a diversos anuncios oficiales, este
sector de la zona sur platense iba a ser remodelado a mediados de año, con la colocación de ramblas y los reclamados semáforos. Pero al parecer,
las obras recién se llevarían a cabo en el 2001,
según informó el intendente Julio Alak.
POR
DIA, LA
Alumnos de la Escuela Nº 89 fueron premiados en Córdoba
Los alumnos de la Escuela Nº 89, que la semana
pasada participaron del “Encuentro nacional infantil de folklore” en Córdoba, resultaron ganadores
de varias de las actividades.
Los 13 chicos que participaron corresponden de 5º y
6º año del colegio, ubicado en 520 entre 5 y 5 bis.
Agata Cosmel obtuvo el tercer puesto en solista
CRUZ ROJA
ASISTE A
40
instrumental; Mauro Pérez, tercer puesto en
Malambo sureño; Yésica Arias, el primer lugar en
recitado gauchesco y Amparo Romero, Federico
Monoscalco, Florencia Cruz, Ailén López Osornio,
Belén Clavijo, Julián Martirena, Mailén Prol, Ezequiel
González, Maximiliano Quinteros y Emilio García,
obtuvieron el primer premio conjunto de danzas
Mañana se elige la Reina de La Plata y el Turismo
Mañana se realizará la elección de la Reina
de la ciudad de La Plata y el Turismo, declarada de interés cultural y turístico, organizada por la Federación de Instituciones Culturales y Deportivas. El evento se llevará a cabo en el Salón Auditorium del Pasaje Dardo
Rocha a partir de las 22. Según se informó,
habrá sorteos para todos los presentes mientras estos presencian el show.
El acto también cuenta con el auspicio de
la Secretaría de Cultura y de la Municipalidad y el Consejo Municipal del Turismo.
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Se realiza una jornada tradicionalista en Villa Elvira
El próximo sábado la Comisión Cultural
Tradicionalista, que nuclea a más de 12 de
instituciones de La Plata, Berisso, Ensenada y
Magdalena, desarrollará una jornada en la
Plazoleta jubileo del año 200 (ubicada en 7 y
90). El evento, que comenzará a las 15.30,
consistirá en la presentación del Teatro
crudo, de espectáculos de folklore, tango,
danzas tradicionalistas y hasta la presentación
del Ballet Ucraniano y la Sociedad Ucraniana
de Berisso. Por tal motivo, se invita a toda la
comunidad a participar de esta jornada.
FAMILIAS INDIGENTES
Cada vez hay más gente mendigando en las calles
Desbordados. En la Cruz Roja no dan abasto
Los niños son los que más sufren
El aumento de la indigencia en la
región se refleja en distintas situaciones. Una de ellas, y quizá clave,
radica en las solicitudes que recibe
la Cruz Roja, el organismo que hace
actos de beneficiencia para personas
carenciadas. Según los testimonios
de directivos de la entidad antes “la
gente venía y pedía colchones, ropa
y frazadas”. Ahora “piden leche y
comida para los lactantes”.
Un dato importante: los hogares
que se emplazan en el 20 por ciento
más pobre de la población contienen bajo sus techos a más de tres ni-
ños. Eso revela que los que más sufren la indigencia son los pequeños.
Casi una cuarta parte del total de
chicos pobres habita en el Gran
Buenos Aires, donde cuatro de cada
diez menores viven sin los ingresos
que les aseguren satisfacer sus necesidades mínimas. Entre octubre de
1998 y el mismo mes de 1999, la
proporción de hogares pobres con
niños en el Gran Buenos Aires aumentó del 31,4 al 32,3 por ciento.
La población de menores de 15 años
en situación de pobreza pasó del
41,3 al 42 por ciento.
“Hace dos días vino un chico acá a
la sede de la Cruz Roja. Me explicó
que hacía tres días que no probaba
bocado. Y aclaró que era estudiante, y
que estaba viviendo en una pensión.
Le preparamos comida y le regalamos
una bolsa con alimentos. Cuando
caen acá es porque ya no tienen dónde pedir”. El testimonio, de Roberto
Canosa -tesorero de la entidad solidaria- saca a la luz un problema que
crece: cada vez hay más gente que
mendiga en las calles platenses. Y los
números refuerzan esa triste realidad:
en el casco urbano y la periferia (según estudios oficiales) hay más de
100 mil personas consideradas pobres
y cerca de la mitad de esos individuos
son niños. De hecho, se estima que
-pese a que se registran en las estadísticas sólo 300- más de 1.000 chicos
sobreviven a diario en las calles platenses limpiando vidrios o mendigando dinero para adquirir alimentos.
Dos meses atrás, a la sede de 47 entre 9 y 10 asistían, en busca de ayuda,
entre 10 y 15 familias por día. En el
transcurso de noviembre esa cifra se
duplicó y en algunos casos triplicó. Es
que, según el relato de Canosa, en lo
que va del corriente se registró un
promedio de entre 30 y 40 familias
que por día, se acercan a la calle 47
para pedir alimentos. “Es casi lo único que nos solicitan”, aclara el tesore-
ro de la institución. Que al mismo
tiempo se lamenta: “lo peor es que
disminuyeron las donaciones, porque
la gente ya no tiene nada más para
dar”. Los fines de semana la cantidad
de familias que acuden a la Cruz Roja
para pedir comida se incrementa. Y
los voluntarios de la entidad solidaria
no dan abasto, básicamente porque
“no hay nada más para darles”.
Los más pobres
Según los datos de la Cruz Roja,
las familias carenciadas que
asisten en busca de comida
provienen en su mayoría de
“Villa Elvira, Los Hornos y El
Peligro”. La institución apeló
hace un mes “a la solidaridad
de los vecinos platenses”
Canosa cuenta que cuando se le
presentan situaciones en las que no
puede otorgar ninguna donación a
una familia carenciada “me quedo
muy triste. Es un problema jodido,
porque además, no podés encontrar
soluciones”.
En una primera escena se puede ver
a un pequeño, Andrés, y su madre,
Ramona. Están parados sobre calle 8
(a la altura de 50) con un cartel que
reza: “somos refugiados de Kosovo,
no tenemos dinero”. Al costado, una
pareja discute acerca de la veracidad
Un programa para asistir a los pequeños
Crisis. Debaten alternativas para los chicos
Con el objetivo de alcanzar en los próximos
dos años la asistencia de unos cien mil niños y
adolescentes en situación de riesgo social, funcionarios de la Nación, las provincias y el Banco Interamericano de Desarrollo debaten sobre
el futuro de un programa oficial que funciona
desde hace cuatro años.
Así, en el marco de las Jornadas de Infancia y
Adolescencia del Programa de Atención a Niños y Adolescentes en Riesgo (Proame), los
funcionarios pasan revista a una de las iniciativas que, por su enfoque orientado a la participación de los gobiernos provinciales y organización civiles, es considerado de los más exitosos en materia de asistencia social.
“El Eje del Proame es trabajar con la familia,
porque la idea es que los chicos tienen que
reinsertarse en sus hogares y volver a la escuela. Tienen que volver a los lugares naturales de
socialización”, explicó la Coordinadora del
programa, Laura Golbert.
Según datos oficiales, durante la primera etapa de desarrollo del Proame, entre 1998 y
2000, se ejecutaron, en 9 provincias, 75 pro-
yectos de atención de niños y adolescentes, a
través de convenios con organizaciones civiles,
que permitieron asistir a 50 mil beneficiarios
con una inversión de 20 millones de pesos.
En tanto, en 1998 fue lanzado el Proame II
que concluirá en el 2002, con el objetivo de “asistir a cien mil niños y adolescentes”, en
acuerdo con 17 provincias que recibirán un
promedio de 252 mil pesos anuales.
“Estamos asistiendo a chicos que están quedando en los márgenes y nuestro objetivo es
tratar de igualar lo más posible sus oportunidades hacia el futuro”, señaló Golbert.
En este sentido, según la coordinadora del
Proame, la asistencia con los chicos y adolescentes en riesgo es también una forma de llegar
a los grupos familiares más expuestos, castigados por la pobreza, el desempleo y sus consecuencias indirectas, como el alcoholismo, la
droga y la violencia doméstica: “lo que vemos
es la incapacidad de las familias de contener a
los chicos en el seno del hogar. Hay ruptura del
tejido social, hay daño hecho, con el consiguiente aumento de la violencia juvenil”.
de los dichos que se vuelcan sobre el
cartel. Lo concreto es que esa madre y
ese niño “sufren, pasan hambre”, comenta el propietario de un bar que se
emplaza sobre esa arteria.
Otro dato: ningún organismo solidario puede afrontar en La Plata el reclamo diario de las personas carenciadas. La Cruz Roja, uno de los más
reconocidos, pidió ayuda a través de
todos los medios para poder brindar
elementos a todas las familias que
asisten en busca de alimentos, ropa y
colchones.
En otra calle (7 y 49), y quizá con
otra realidad, aparece Rubén, que asegura ser ex combatiente. Sobre una silla de ruedas (le falta una pierna) clama por una moneda para poder alimentarse. Rubén se da cuenta de la solidaridad de muchos platenses, que
colocan dinero en la gorra que muestra con su mano izquierda.
El Padre Carlos Cajade, titular de
muchas obras de caridad en la región,
retrata este panorama con una sola
frase: “Un país que abandona la posibilidad de que la gente pueda llevar a
sus hogares el pan ganado con las propias manos perjudica de manera muy
directa a la niñez”.
Cajade apuntó oportunamente otro
dato fundamental: en nuestra región
un chico muere por día a causa de la
desnutrición. Una situación verdade-
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La cifra se triplicó en dos meses. El casco urbano platense aloja a niños y madres desocupadas que piden limosna. Algunos se las rebuscan con “changas”. La entidad solidaria atendía en septiembre a diez familias por día. En noviembre
los registros arrojan realidades escalofriantes. Y para colmo, “la gente ya no hace donaciones porque no tiene nada más para dar”. Mientras tanto, los comedores comunitarios que tratan de combatir la pobreza no reciben ayuda del Gobierno
Sin respuestas. De acuerdo a diversos informes oficiales, la mitad de los pequeños
del Gran La Plata viven en condiciones precarias. Muchos de ellos trabajan todos los días en la calle
ramente alarmante. Las cifras oficiales
confirman un mapa de la pobreza que
cada vez es peor en la Argentina. El último informe arrojado por un organismo estatal marcó que en el territorio
casi la mitad de los chicos son pobres.
En efecto, el 45,5 por ciento de los niños que habitan el país viven con sus
Curvas de crecimiento
Más de 10 mil niños representantes de
diversas regiones del mundo son estudiados actualmente con el fin de elaborar por primera vez curvas de crecimiento infantil mundiales, que permitirán
comparar las poblaciones de cada nación del planeta y evaluar su nivel de
desarrollo.
En oportunidad de visitar Argentina para participar del XII Congreso Latinoamericano de Nutrición, que se realiza en
Capital Federal, Mercedes de Onis, oficial médico de la OMS, anticipó que “se
está trabajando en la elaboración de
curvas de crecimiento infantil mundiales
que, una vez terminadas, podrán ser tomadas como patrón de referencia por
todos los países del mundo”.
“Cada país podrá utilizar estas curvas a
nivel poblacional, para comparar a sus
niños respecto a los de otras naciones, y
también a nivel individual, para observar si el crecimiento del chico es acorde
al de su edad”, precisó De Onis, de nacionalidad española, que trabaja en la
oficina central de la OMS en Ginebra.
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necesidades básicas insatisfechas.
Con la desocupación en un índice
que extraoficialmente trepa al 16 por
ciento, los niños no están ajenos a esa
situación. Y es que las familias en las
que los padres no tienen empleo, la
alimentación que se les proporciona a
los pequeños no es la adecuada, y en
algunos casos ni siquiera logra
satisfacer las necesidades primordiales. En la ciudad de las diagonales, el
14,8 por ciento de la población no tiene trabajo. Eso repercute directamente en la condición de vida de los chicos platenses.
En resumen, el hecho de que prácti-
Situación crítica
de los comedores
Sin fondos ni
alimentos
Los comedores comunitarios
nacieron como alternativa para
paliar la pobreza en distintos
barrios platenses. Pero, desde hace
varios meses, estos centros de
ayuda padecen una situación que
los mismos encargados de esos
sitios califican como “crítica”. Y es
que, entre otras cosas, reciben cada
vez menos ayuda de los organismos
oficiales (que desde hace años los
proveen de alimentos y subsidios).
Al mismo tiempo, aumenta la cantidad de chicos, madres y padres
que asisten en busca de -aunque
más no sea- un plato de comida.
¿Cómo subsisten? Sus responsables
aseveran que, pese a los inconvenientes que afrontan a diario, se
mantienen a flote por la ayuda que
reciben de “la gente, que es muy
solidaria”. Más uno que otro
aporte de empresarios platenses
El comedor “Ayúdenos a ayudar” -en 609 esquina 126, Villa
Alba- atraviesa una delicada situación en lo que a subsistencia
se refiere. Poco más de 500 chicos acuden cotidianamente por
un plato con alimentos o una taza de leche. Sin embargo, los organismos estatales “no ayudan
demasiado”, dicen en el lugar. Y
es que la Municipalidad de La
Plata “apenas nos reconoce a 100
del total de pequeños que vienen
a comer”, se lamenta Estela
Sánchez, encargada del centro de
ayuda, cada vez que se le pregunta por los subsidios que recibe
del Estado. Y confiesa que hace
“malabares” para poder administrar los pocos fondos que
obtiene luego de luchar incansablemente.
Silvia Mariño, del Hogar “Los
pequeños hijos de la colina del
Sol” (476 bis entre 138 y 139 de
Gorina), cuenta que “cada vez
vienen más chicos a pedir un plato de comida, y nosotros no nos
podemos negar”.
camente la mitad de los niños del país
sea pobre significa que han nacido en
hogares que no pueden cubrir los gastos de la canasta familiar básica, tanto
de bienes como de servicios.
Y lo peor es que de lunes a lunes,
esos índices se reproducen en las principales calles del casco urbano.