Dijo que trabajaba para Satán y pidió que lo ejecutaran

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Trama URBANA
Suplemento de Justicia, Seguridad y Policiales del diario Hoy en la Noticia
La Plata, miércoles 9 de agosto de 2006
PENA CAPITAL EN ESTADOS UNIDOS
La aterradora vida de Darrell Ferguson
Dijo que trabajaba para Satán y pidió que
lo ejecutaran para no volver a matar gente
En 2001 asesinó a un familiar y dos ancianos a los que también asaltó en sus domicilios. Dijo que lo hizo por placer. Ayer fue ejecutado en la prisión de Lucasville. Le aplicaron una inyección
letal. Sus últimas palabras fueron para sus padres: les dijo que los quería y les deseó lo mejor. La historia de un criminal que fue declarado incurable por la magistrada que lo condenó
vLAS CLAVES
Ohio (EE.UU.).- Decía que trabajaba para Satán y pidió ser ejecutado.
Amenazó que si lo dejaban libre iba a
volver a matar y aseguró que cometía
sus crímenes por placer. Finalmente,
todos sus deseos se convirtieron en
realidad.
Un hombre de 28 años que asesinó
a tres personas en diciembre de 2001
se convirtió en la persona más joven
ejecutada en Ohio desde 1962.
El condenado admitió que disfrutaba al golpear y matar a sus víctimas, que lo conocían y por eso le
abrieron las puertas de sus viviendas.
Por estos hechos, fue él mismo quien
solicitó la pena capital para su caso.
)
)
En su sentencia, la jueza
de la causa describió al
joven condenado como
un “asesino incorregible,
sádico y despiadado”
Darrell Ferguson fue declarado
oficialmente muerto ayer a las 10.21,
hora local, tras recibir una inyección
letal en el Centro Correccional de
Lucasville.
La primera víctima del asesino había sido un familiar suyo, Thomas
King (61) al que mató con un cuchillo de cocina el 25 de diciembre de
2001. Después del crimen, se robó
dos televisores y una radio, las cuales
Sin suerte. Los pedidos de clemencia no prosperaron. Ferguson fue ejecutado ayer a las 10.21 de la mañana
vendió para poder comprar cocaína.
En esos días, el condenado disfrutaba
de unos días de permiso en un centro
de drogas donde había sido recluido
después de cometer un delito menor.
Un día después, asaltó y terminó
con la vida de una pareja de ancianos,
que habían sido sus vecinos en Dayton, una ciudad con cerca de un mi-
llón de habitantes.
Lo increíble del caso ocurrió durante el juicio. Allí, Ferguson no sólo
admitió su culpabilidad, sino que rechazó la posibilidad de apelar la condena y hasta llegó a solicitarle a la
jueza encargada del caso que lo condenara a la pena capital.
En la sentencia, la magistrada des-
cribió al joven como un “asesino incorregible, sádico y despiadado”.
Las últimas palabras del asesino estuvieron dedicadas a sus padres: les
dijo que los quería y que les deseaba
lo mejor. Para su cena de despedida
solicitó tres filetes de carne, dos pechugas de pollo, un batido de chocolate y un refresco.
La pena de muerte se aplica en 71 países
El caso emblemático y el que más
repercusión tiene es el de EE.UU.,
pero no es el único. En la actualidad
existen 71 países en los cuales existe
la pena de muerte. Sin embargo, si se
toman en cuenta sólo las naciones
que llevan a cabo la ejecución de presos, la cifra es mucho menor.
Los datos pertenecen a Amnistía
Internacional, una organización que
trabaja para proteger los derechos
humanos en todo el planeta.
De todas formas, las cifras oficiales
no suelen reflejar la realidad. Al menos eso es lo que se remarca en,
web.amnesty.org, la página oficial de
Amnistía.
Allí se dice que en el año 2004 fueron ejecutadas unas 3.797 personas
en 25 países. Al mismo tiempo, otras
7.395 recibieron una condenada a
muerte en otras 64 naciones. Sin embargo, se aclara que “éstas son sólo
cifras mínimas; las cifras reales son
sin duda más elevadas”.
Las formas de ejecución más comunes son las inyecciones letales y la
silla eléctrica. Pero también existen
otros métodos en distintas partes del
mundo: ahorcamiento, fusilamiento,
lapidamiento y decapitación.
En el año 2004, el 97 por ciento de
todas las ejecuciones de las que se tuvo noticia ocurrieron en China, Estados Unidos, Irán y Vietnam.
Además de lo atroz de las muertes,
lo más preocupante es que, a veces,
se condena a inocentes. Desde 1973,
122 personas que estaban cerca de
ser ejecutadas pudieron demostrar su
inocencia. De esos casos, 6 ocurrieron en 2004.
Adiós. El coche negro lleva los restos de Ferguson. Tenía 28 años
Sin piedad ni
arrepentimiento
Pese a haber admitido su culpabilidad y solicitar que se lo
ejecute, Darrell Ferguson
nunca pidió perdón por los
crímenes que cometió.
Las víctimas eran personas
que lo conocían y por eso no
dudaron en abrir las puertas
de sus casas. Igual, las
asesinó salvajemente.
Oficial: fueron en
ocasión de robo
La fiscalía aseguró que el
robo fue el motivo por el cual
se cometieron los crímenes.
El ejecutado asesinó a las tres
personas mientras gozaba de
unos días libres en la navidad
de 2001. Había sido internado
en un centro de rehabilitación donde se trataba su
adicción a los estupefacientes.
Su ejecución fue la cuarta que se
lleva adelante este año en Ohio y la
número veintitrés desde que este estado restableció la pena de muerte en
1999. Ferguson pasó a engrosar la lista de 1.038 personas que fueron ejecutadas desde que el Tribunal Supremo del país del norte restableció ese
castigo en 1976.
Estados Unidos
lidera el ranking
de ejecuciones
De acuerdo a varios tratados
internacionales, la aplicación
de la pena de muerte a
menores de edad está totalmente prohibida.
Sin embargo, desde 1990 se
han registrado por lo menos
ocho países que han ejecutado
a presos que tenían menos de
18 años en el momento en que
cometieron el delito. Estos son:
Arabia Saudita, China, Estados
Unidos, Irán, Nigeria, Pakistán,
la República Democrática del
Congo y Yemen.
Siguiendo con sus nefastas
cifras, el país que ha llevado a
cabo el mayor número de ejecuciones de menores es Estados
Unidos : en total fueron 19,
entre 1990 y 2003. Cifras que
asustan y hablan por sí solas.