Evaluacion etnofarmacológica de plantas usadas popularmente por

Resumen: E-003
UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E
Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2004
Evaluacion etnofarmacológica de plantas usadas popularmente por las
comunidades del Chaco argentino
1
Chifa, Carlos - Ricciardi, Armando I. A.
2
1.Cátedra de Farmacobotánica, Facultad de Agroindustrias, Carrera de Farmacia, UNNE.
Comandante Fernández N° 755, (H3700LGO) Sáenz Peña, Chaco, ARGENTINA. [email protected].
2.Cátedra de Química Orgánica III, Facultad de Ciencias Exactas, Naturales y Agrimensura, UNNE.
9 de Julio 1449, (3400) Corrientes, ARGENTINA. [email protected].
Introducción:
El territorio chaqueño ubicado al NE de la Argentina tiene una superficie de 99.633 km2, integrando una vasta
planicie que forma parte de la Subregión Geográfica Chaqueña perteneciente al Gran Chaco Sudamericano
constituyendo una de las regiones de mayor diversidad ambiental y biológica del planeta y la segunda área boscosa más
grande de toda América Latina.
A pesar de que gran parte de la Provincia del Chaco de Argentina se encuentra cubierta por extensos montes
naturales, es posible advertir una disminución de la riqueza forestal de N a S y de E a W debido a la distribución de las
precipitaciones; encontramos allí ubicada a la Provincia Fitogeográfica Chaqueña que muestra una composición
florística con vegetación polimorfa bastante homogénea, en la que se reconoce la presencia de especies con potencial
medicinal utilizadas por la población -en su mayoría rural- que allí vive, constituida principalmente por nativos o
criollos y aborígenes de las etnias Wichí, Toba y Mocoví.
Según el CENSO 2001, en la zona estudiada habitan 7.626 personas concentradas en 10 pequeños poblados, esto
es un promedio de 0,08hab/km2. El objetivo del trabajo fue realizar un inventario de las especies de la Flora Chaqueña
más utilizadas con finalidad medicinal en las comunidades rurales más alejadas de los centros urbanos, comprobar si
hay riesgos para la salud de la población familiarizada con su uso y verificar cuales de estas plantas presentan
potencialidades de uso medicinal en la literatura especializada.
Materiales y Métodos:
El presente trabajo etnobotanico se realizó en los Departamentos Comandante Fernández, Quitilipi, Maipú,
General Güemes, Libertador General San Martín, Sargento Cabral y Bermejo (Mapa I) de la Provincia del Chaco
(Argentina), durante el período 2001-2003.
Se efectuaron entrevistas con el fin de conocer los usos medicinales mas frecuentes de cada una de las especies
citadas, las que se colectaron y acondicionaron siguiendo las técnicas usuales para tal fin.
De cada muestra se prepararon ejemplares de herbario, se determinaron taxonómicamente y ante posibles
revisiones se depositaron en el Herbario de la Cátedra de Farmacobotánica de la Facultad de Agroindustrias, U.N.N.E.
Se elaboro un instrumento (encuesta-entrevista) que fue aplicado a la muestra poblacional mediante el cual se
entrevistaron a 53 personas, donde participaron hombres y mujeres adultos, líderes comunitarios, ancianos y jóvenes,
con conocimiento profundo de plantas medicinales con la finalidad de captar la información referente a usos, sus
nombres vernáculos, las partes y dosis utilizadas, métodos de preparación terapéutica y posibles efectos adversos, y se
tomó conocimiento de las especies nativas y/o exóticas que son utilizadas en rituales mágico-religiosos además de su
reconocido uso vernáculo como alternativa medicinal.
Cabe destacar que los datos aportados por los informantes fueron de una amplia heterogeneidad lo que
condujo a sistematizar la información en 14 propiedades reconocidas (Tabla I).
- Provincia del Chaco -
1 – Depto. Gral. Güemes
2 – Depto. Maipú
3 – Depto. Gral San Martín
4 – Depto. Comandante Fernández
5 – Depto. Quitilipi
6 – Depto. Sargento Cabral
7 – Depto. Bermejo
1
2
45
Mapa I
3
6
7
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Discusión de Resultados:
La información etnobotánica fue organizada sistematizada, graficada y tabulada a los efectos de su análisis e
interpretación y ulterior cotejo.
Tabla I: Opinión sobre cada especie y propiedad reconocida
ESPECIES
1
Cocu
XI
Qubracho
blanco
Pata de buey
XE
XI
Cambará
Yerba
carnicera
Cabello de
angel
Catinga de
negro
Seibo
Yerba del
toro
Sombra de
toro
Uña de gato
2
4
5
6
7
XI
XI
XI
XI
XE
XE
XI
3
XI
XE
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
11
12
13
14
15
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
X
XI
XE
XI
XE
XI
XE
XI
XI
XI
XI
XI
Vara de oro
XE
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
Ajo
XE
XI
Anis
estrellado
Boldo
XI
XI
XI
XI
XI
XE
XI
Menta
XI
XE
XE
XI
XI
XI
XI
XI
XI
X
XI
X
XI
XI
XI
XI
XE
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
Granada
Manzanilla
X
XI
XI
XI
XE
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XE
Anis verde
XI
XI
XI
Aloe
X
XI
XE
XE
XI
XI
XI
XI
XI
XI
Sarandí
blanco
Curupí
Tilo
10
XE
XI
Barba de
choclo
Eucalipto
9
XI
Cina-cina
Verbena
encañutada
Liga
8
XI
XE
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
XI
X
XI
XI
XI
XI
1.digestivo -2.dérmico -3.febrífugo -4.béquico -5.diurético -6.hepatoprotector -7.estomáquico -8.emenagogo -9.antiasmático 10.antidiarreico- 11. tónico cardiaco -12. antiparasitario -13. antihepertensivo -14. hipoglucemiante -15. mágico-religiosos XI uso interno - XE uso externo
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Mediante las entrevistas-encuestas se identificaron 28 especies que la población local conoce y utiliza como
medicinales.
El 70% de los entrevistados (Tabla II) son mayores de 50 años de los cuales el 66% del sexo femenino, que
tienen como máximo el 1° grado de escolaridad (78%), con conocimientos sobre plantas medicinales originados en la
tradición de uso de familiares, constatándose que la terapia popular en la región presenta un perfil semejante al
encontrado en la bibliografía especifica, incluyendo la utilización de especies exóticas. como “aloe”, “ajo”, “anís
verde”, “anís estrellado”, “boldo”, “barba de choclo”, “eucalipto”, “granada”, “manzanilla”, “menta” y “tilo”.
Según las entrevistas, los usos medicinales más sobresalientes son: de acción en afecciones dermatológicas, le
siguen las que actúan en el aparato digestivo, sistema cardiovascular, sistema respiratorio, y en otras afecciones como
contra fiebres, de acción diurética, béquicas, hepatoprotectoras, dolencias en el aparato genital y endocrino o como
antiparasitarias.
Tabla II: Sexo, edad y grado de instrucción de los encuestados
%
FEMENINOS
MASCULINOS
66%
34%
%
‹ 30
años
31-40
años
1
3
1
30%
EDAD
41-50
51-60
años
años
7
4
13
9
61-70
años
› 71
años
11
2
70%
1
1
ESCOLARIDAD
1º Grado
1ria.
2ria.
22
19
78%
4
6
19%
1
1
3%
Frente a las enfermedades surge la medicina popular. En la búsqueda de la restitución del equilibrio, las plantas
cumplen un rol primordial actuando como intermediarias entre el hombre y la naturaleza.
Las enfermedades se catalogan de acuerdo a un canon tradicional, que en la mayor parte de los casos busca
combatir el dolor, o sea atacar el síntoma, más que ir directamente contra la causa del mal. Los usos de las plantas que
se citan se relacionan con una amplia gama de dolencias, que incluyen enfermedades comunes, dolores, inflamaciones,
heridas, fracturas, granos y afecciones de la piel (dermatitis).
Algunas de estas plantas fueron asociadas con órganos específicos, como remedios para la menstruación, para
afecciones del corazón, con referencias a cambios en sus propiedades medicinales en dependencia a cómo y cuándo sus
órganos son colectados (etapas vegetativa y/o reproductiva).
Forman parte de este proceso curativo, los rituales mágico-religiosos. No nos referimos en este trabajo a los
aspectos relacionados con la magia y/o la religión y que, a pesar de que pueden pasar por desapercibidos, evidencian
cómo la medicina folklórica o vernácula tiene sus raíces extendidas hacia las profundidades del remoto pasado,
resultando muy difícil esclarecer su origen, pues pueden haberse filtrado del área indígena, como haber sido traídos por
los inmigrantes europeos; al respecto, la población entrevistada reportó especies exóticas y citó plantas nativas con otras
categorías de usos, las que además de poseer atributos medicinales son empleadas en rituales mágico-religiosos
principalmente en forma de baños, tes o sahumerios, como por ejemplo “cabello de ángel” es una liana rizomatosa muy
utilizada en forma de cataplasmas para contrarrestar afecciones dérmicas y además, con las hojas y flores se preparan
sahumerios que se encienden dentro del hogar cuando llega alguna persona indeseable.
Las especies nativas citadas con mayor frecuencia, fueron Allophyllus edulis (A.St.-Hil., A.Juss. & Cambess.)
Radlk., “cocú” (Sapindaceae), Aspidosperma quebracho-blanco Schhltdl , “quebracho blanco” (Apocinaceae), Bauhinia
forficata Link. subsp. pruinosa (Vogel) Fortunato & Wunderlin, “pata de buey” (Fabaceae), Buddleja brasiliensis Jacq.
ex Spreng., “cambará” (Buddlejaceae), Conyza bonaeriensis (L.) Cronquist var. bonaeriensis, “yerba carnicera”
(Asteraceae), Clematis montevidensis Spreng. “cabello de angel” (Ranunculaceae), Cleome hassleriana Chodat,
“catinga de negro” (Caparaceae), Erytrina crita-galli L., “seibo” (Fabaceae), Hyptis mutabilis (Rich.) Briq. “yerba del
toro” (Lamiaceae), Jodina rhombifolia (Hook. & Arn) Reissek “sombra de toro” (Santalaceae), Macfadyena unguis-cati
(L.) A.H.Gentry, “uña de gato” (Bignoniaceae), Parkinsonia aculeata L., “cina cina” (Fabaceae), Phyllanthus
sellowianus Müll. Arg., “sarandí blanco” (Euphorbiaceae), Sapium haematospermum Müll. Arg., “curupí”
(Euphorbiaceae), Solidago chilensis Meyen var. chilensis, “vara de oro” (Asteraceae) , Verbena intermedia Gillies &
Hook. f. intermedia, “verbena encañutada” (Verbenaceae) y Viscum album L. “muérdago o liga” (Lorantaceae).
La forma más sencilla de las preparaciones consisten en separar (extraer) de ellas sus principios activos como
resultado del cocimiento de los materiales vegetales en agua y luego, el líquido filtrado o no, es empleado en tomas frías
o calientes según el caso, o en baños y fricciones, pudiendo utilizarse a tal fin una o varias especies a la vez; al citar la
forma de preparación se mencionan en forma de “tes” o “infusiones” pero en realidad son decocciones donde se colocan
el agua fría y la parte del vegetal a utilizar llevados a ebullición durante varios minutos. A diferencia de los aborígenes,
en general los criollos prefieren el agua de mate como vehículo para ingerir las “medicinas”.
En lo que respecta a las cantidades utilizadas en cada preparación, se citan varios términos: puñado (lo que se
puede tomar en una mano) indicado cuando se emplean hojas generalmente no trituradas; cucharadas (refiriéndose a la
cuchara de mesa de mayor tamaño) si son flores pequeñas o semillas, y siendo el agua el vehículo o excipiente mas
corriente en cantidad aproximada a medio litro de agua para cada preparación. Para secar las plantas, se acopian y
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disponen en forma de ristra o rosario, atravesadas por un hilo y dejadas bajo un techo o a la sombra, nunca guardadas o
preservadas en recipientes cerrados o al abrigo de la luz.
Conclusiones:
El elevado precio de los medicamentos convencionales, los efectos laterales que algunos producen, el fácil
acceso a las especies vegetales, y la tendencia a respetar y mantener los conocimientos transmitidos de sus ancestros y
su confianza en los mismos, convierten a las plantas en elementos de elección.
En las zonas rurales, procurarse una planta determinada no constituye, en general, un problema difícil.
Por tanto conocer la interrelación del hombre con su medio entorno en sus diferentes ámbitos ecológicos y
culturales se ha transformado en una herramienta indispensable para tener acceso a la tradición milenaria transmitida
generacionalmente con continuidad y al mantenimiento de esas prácticas a través del tiempo con el fin primordial de
ofrecerla al servicio de los hombres.
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Presentado en el VII Simposio Argentino y XI Simposio Latinoamericano de Farmacobotánica.
Buenos Aires, Argentina. Agosto de 2004.