3. Tratamiento de deformaciones

Manual de carrocería de automóviles. Reparación
3. Tratamiento de deformaciones
Cuando un elemento de plástico sea sometido a una determinada solicitación externa, sufrirá daños de mayor o menor cuantía, dependiendo de la magnitud de la solicitación y del tipo de material de
la pieza.
Atendiendo a criterios de orden técnico y económico, dichos
daños pueden obligar al reemplazamiento del elemento por otro
nuevo, o bien a su reparación. En el caso de optar por una reparación, el método a seguir dependerá de factores como tipo de material de la pieza, tipo de localización del daño, etc.
La magnitud de los daños puede ir desde una simple deformación
hasta una rotura con falta de material. Vamos a centrarnos en el tratamiento de deformaciones, dejando los procedimientos y técnicas
de reparación para apartados sucesivos.
3.1. Fundamento
La corrección de deformaciones, en sí misma, puede ser bien
una solución única para la recuperación de determinadas piezas,
bien un método de apoyo que permitirá llevar a cabo una posterior
reparación más a fondo.
La corrección de una deformación consiste, lógicamente, en devolver a la pieza su forma y configuración originales. Para ello, es
preciso que estén presentes dos factores: calor y presión.
Aplicación de calor
El calentamiento de la zona dañada tiene como finalidad llevar el
material a un estado próximo al pastoso, facilitando de este modo su
conformación. Dicho calentamiento se hará de forma extendida a
través de toda la superficie dañada, o bien en una parte de la misma, dependiendo de la magnitud de la deformación. Para ello, se
empleará el soplete de aire caliente regulado a una temperatura entre 300°C y 400°C.
La operación de calentamiento cesará cuando la superficie del
plástico comience a adquirir brillo, pues en caso contrario se puede
producir una degradación del material.
Aplicación de presión
La aplicación de presión, necesaria en la mayoría de los casos,
posibilitará la conformación propiamente dicha, pues los materiales
plásticos no fluyen por sus propios medios. Dicha presión se ejercerá en sentido opuesto a la que produjo la deformación, hasta que
el material recupere su forma original. Es prácticamente habitual
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Reparación de plásticos
aplicar la presión cuando el material está caliente, y mantenerla hasta que alcance la temperatura ambiente.
3.2. Equipamiento
Para realizar este tipo de operaciones no se requiere ningún
equipamiento especial, sino el disponible en un taller de carrocerías
donde se efectúen reparaciones de plásticos.
Equipamiento para la corrección de deformaciones.
En líneas generales, se requieren herramientas para aplicar calor, ejercer presión y mantener la presión durante el enfriamiento.
En la siguiente tabla aparece reflejado de forma esquemática este equipamiento y su aplicación principal:
Equipamiento
Aplicación
Lamparilla de fontanero
Soplete de aire caliente
Calentamiento de la zona dañada
Botador
Útil para presionar o destornillador con punta curvada.
Tases de chapista
Conformación por medios mecánicos
(ejerciendo presión) de la zona dañada,
previo calentamiento de la misma
Sargentos
Mordazas autoblocantes
Mantener la presión constante, hasta que
el material se haya enfriado
Tablillas de diferentes formas y
tamaños.
Ayudar a mantener la presión de forma
constante, evitando marcar al material
Bayeta
Esponja
Enfriamiento rápido de la zona calentada
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CASO PRÁCTICO DE CONFORMACIÓN DE UN PLÁSTICO TERMOPLÁSTICO
PIEZA: Paragolpes delantero
Renault Laguna.
Material base: PE.
Productos empleados:
Resina epoxy bicomponente.
Operación realizada:
Corrección de la deformación
mediante la aplicación combinada de presión y calor. Acabado final con resina epoxy.
DESCRIPCIÓN DEL PROCESO
1. El paragolpes ha sufrido un impacto
en su esquina superior izquierda, y ha
dado lugar a una deformación permanente, por encima de su límite elástico, pero sin llegar a producirse una rotura del material.
Con la ayuda de un soplete de aire caliente, se calentará toda la zona dañada a una temperatura de aproximadamente 275°C, inferior a la temperatura
de reblandecimiento del PE.
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2. Antes de que el material se enfríe, y
con la ayuda de un útil apropiado, se
ejercerá presión por la parte interna
para ir recuperando la deformación.
3. Una vez que se ha recuperado en
gran parte la deformación y se han eliminado las tensiones, se colocará una
mordaza autoblocante en el borde del
paragolpes para mantenerlo alineado.
4. Las pequeñas deformaciones se corregirán con la aplicación simultánea
de calor y presión. El calor se aplicará
por toda la zona y la presión se ejercerá por la parte interna de los puntos
bajos.
5. El enfriamiento rápido de la zona con
un paño humedecido en agua acentuará el efecto buscado.
Esta operación de calentamiento y enfriamiento rápido se repetirá las veces
que sea necesario hasta acondicionar
la zona.
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Reparación de plásticos
6. Para corregir las deformaciones puntuales que aún existen, se seguirá
aplicando calor.
7. Una vez que el material está caliente,
y antes de que se enfríe, se aplicará
presión sobre las zonas hundidas, sufriendo por el exterior con un tas.
8. Mediante la presión ejercida por ambas caras con el útil de presionar y el
tas, se acabará de corregir las pequeñas deformaciones puntuales.
9. Un lijado superficial permitirá detectar
las zonas que aún puedan quedar
hundidas y que ya no se aprecian mediante el tacto o la vista.
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10. Aspecto de la zona tras el lijado. En
esta parte se aprecian pequeños
puntos que no han sido atacados por
la lija, por encontrarse ligeramente
hundidos.
11. Con una lamparilla de fontanero se
aplicará un ligero flameado a la zona,
para mejorar la adherencia del producto de acabado.
12. A continuación, mediante una espátula, se aplicará una resina epoxy bicomponente, para eliminar las imperfecciones que han quedado.
13. Aspecto de la aplicación de la resina
antes del lijado.
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Reparación de plásticos
14. Una vez seca la resina, se eliminará
el material sobrante mediante un lijado, y se dará por terminada la conformación en el área de carrocería.
15. Éste es el aspecto final de la reparación. La pieza queda lista para pasar
a la zona de pintura.
3.3.2. Conformación de termoestables semirrígidos y flexibles
En los termoestables semirrígidos y flexibles, fundamentalmente
poliuretanos, las deformaciones que puedan producirse son fácilmente recuperables mediante la aplicación de calor. Para ello, bastará con calentar uniformemente la zona dañada con la tobera libre
del soplete de aire caliente. Deben evitarse sobrecalentamientos
que darían lugar a hervidos superficiales de material, que comenzará a degradarse.
En ocasiones, para mantener una presión constante durante el
enfriamiento es conveniente construir un contramolde con una geometría similar a la forma que se va a recuperar. Estos contramoldes
pueden construirse de forma más o menos rápida mediante la aplicación de resina de poliéster y fibra de vidrio.
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CONFORMACIÓN DE UN TERMOESTABLE FLEXIBLE
PIEZA: Paragolpes delantero
Opel Corsa.
Material base: PUR.
Operación realizada:
Conformación mediante la
aplicación conjunta de calor y
presión.
DESCRIPCIÓN DEL PROCESO
1. Detalle de la deformación.
La deformación no presenta ningún tipo de rotura, pero, a pesar de ello, a
primera vista parece muy acusada.
Sin embargo, debido a la elasticidad
de estos poliuretanos, su conformación se realiza fácilmente.
2. Con la tobera libre del soplete de aire
caliente, se calentará uniformemente
toda la zona deformada.
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Reparación de plásticos
3. Como puede apreciarse, únicamente
con la aplicación de calor y sin la necesidad de presión, se ha recuperado
en gran medida la deformación, debido al comportamiento de este material.
4. Una vez que con el calentamiento ha
recuperado su forma original, y para
hacer que mantenga dicha forma, se
enfriará la zona rápidamente con una
bayeta humedecida en agua.
5. Las deformaciones que han experimentado mayor estiramiento, como la
de los nervios de refuerzo, habrá que
tratarlas de forma independiente. Para
ello, se calentará la zona con el soplete y se ejercerá presión para conformar la deformación.
6. La presión se ejercerá con una mordaza autoblocante apropiada, que
permitirá mantener la pestaña alineada y la presión hasta que se haya enfriado la zona.
Si la deformación fuese mayor que la
zona que la mordaza permite abarcar,
se mantendrá la pestaña alineada por
medio de unas tablillas y unos sargentos.
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7. En ese caso, para acentuar el efecto
buscado, puede ser necesario enfriar
con una bayeta húmeda la zona mientras se mantiene la presión.
8. Finalmente, para eliminar las pequeñas deformaciones residuales, se
volverá a calentar uniformemente toda
la zona.
9. Un enfriamiento con agua dará por
concluida la reparación.
10. Como puede apreciarse en el aspecto final de la reparación, la deformación se ha recuperado por completo.
Los arañazos superficiales que pueda presentar el paragolpes, se corregirán en la zona de pintura.
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CONFORMACIÓN DE UN TABLERO DE A BORDO
PIEZA: Tablero de a bordo
Peugeot 405.
Material base: Espuma de
poliuretano expandido y vinilo.
Operación realizada: Conformación mediante la aplicación de calor.
DESCRIPCIÓN DEL PROCESO
1. Como consecuencia de un impacto, el
tablero presenta una deformación sin
rotura de la lámina externa de vinilo,
que será posible corregir de forma rápida y sencilla.
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Reparación de plásticos
2. Se aplicará calor a la zona dañada
mediante un soplete de aire caliente,
regulado a una temperatura aproximada de 250°C.
Su regulación está en función de la
densidad de la espuma de poliuretano.
3. La aplicación del calor se hará de forma difundida a lo largo de toda la zona.
4. Se evitará un calentamiento excesivo,
así como mantener el soplete estático
sobre algún punto concreto para evitar
dañar o quemar el recubrimiento termoplástico.
5. Si fuera necesario, puede facilitarse la
conformación con un leve masaje sobre la zona calentada.
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6. Cuando la deformación haya desaparecido, se dará por concluida la reparación y se dejará que la pieza se
enfríe.
7. Aspecto final de la conformación.
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Reparación de plásticos
4. Reparación de
termoplásticos
Uno de los métodos de uso más generalizado en la reparación de
materiales plásticos es la soldadura. Es, además, el procedimiento
de unión que mejores resultados ofrece, especialmente en la reparación de materiales termoplásticos, debido al comportamiento que
experimentan con el calor.
Los termoplásticos utilizados más frecuentemente en el automóvil presentan generalmente buenas condiciones de soldabilidad; no
obstante, en ocasiones se utilizan termoplásticos de difícil identificación, y que no sueldan ni siquiera con el mismo material de que
están constituidos. Estos plásticos generalmente proceden de la aleación de dos o más elementos base (copolímeros).
La soldadura de termoplásticos guarda muchas similitudes con la
soldadura de los metales, pero presenta también algunas diferencias que es necesario conocer para obtener buenos resultados.
4.1. Parámetros de la soldadura
En la soldadura de materiales plásticos hay que tener presentes
dos parámetros fundamentales: la temperatura y la presión, lógicamente con una velocidad de avance adecuada.
Temperatura
La temperatura es necesaria para llevar el material a estado pastoso y provocar su unión.
Cada material llegará a fluir a una determinada temperatura, y
por tanto la temperatura de soldadura de un material a otro será distinta. En la tabla adjunta se indican las temperaturas de soldadura
de los materiales más comunes. Debe tenerse en cuenta que las tolerancias son muy estrechas y que admiten tan sólo variaciones del
orden de 20 a 30°C.
Material
Temperatura para soldadura
PP
300°C
PE
280°C
PP/EPDM
300°C
PA
400°C
PC
350°C
PC-XENOY
350°C
PC-ALPHA
350°C
ABS
350°C
PVC
280°C
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