Sobre el 20 no se ofreció reparo alguno, yen su virtud se votó y

Sobre el 20 no se ofreció reparo alguno, yen su virtud se votó y quedó
aprobado, sucediendo otro tanto con el 21 y último de la ley, levantándose
inmediatamente la sesión.
José l. de Márquez.
El diputado secretario,
Francisco Soto.
El diputado secretario,
Antonio José Caro.
ACTA 191. SESION EXTRAORDINARIA
DE LA NOCHE DEL 4 DE OCTUBRE
Se abrió la sesión con más del número de diputados necesario para formar congreso.
Leída y aprobada el acta de la última sesión extraordinaria del 2 del corriente, se dio cuenta de la representación del presidente del cabildo de la
ciudad de Timaná, en que se queja de haberlo destituido aquel gobernador de
la presidencia de la junta de manumisión, y de haber nombrado en su lugar al
comandante del cantón, y el congreso resolvió se pase esta solicitud a la comisión que presentó el proyecto de aquella ley. A la de negocios eclesiásticos
se mandó pasar la representación del cabildo de Medellín, sobre derechos
parroquiales. Quedó enterado el congreso del oficio que pasa el señor Antonio Torres, en que ofrece venir a incorporarse en este augusto cuerpo como
diputado electo por la provincia de Riohacha. La señora Juana Casanova pide
una pensión, en consecuencia de haber perdido a su marido en la campaña, y
el congreso mandó pasar esta solicitud a la comisión primera de hacienda,
y a la de legislación una comunicación del ministro del interior a la que acompaña el expediente y representación de la señora Rovira, por la que interpone
un recurso de injusticia notoria.
Procedióse en seguida a la tercera y última discusión del proyecto de ley
sobre las armas de la República, y después de un ligero debate, fue votado y
aprobado el artículo 10, en que salvaron su voto los señores Félix Restrepo y
Pereira.
206
Seguidamente se aprobó el artículo 2°, Ylo mismo el 3°, con la adición de
las palabras las iniciales, y últimamente se votó y aprobó el 4° y último,
quedando la ley concebida como sigue:
"El congreso general de Colombia,
"CONSIDERANDO:
"Que por el artículo 11 de la ley fundamental de la República, le corresponde designar las armas que deben distinguirla en lo venidero entre las naciones independientes de la tierra, ha venido en decretar y decreta lo siguiente:
"Artículo l" Se usará en adelante en lugar de armas, de dos cornucopias
llenas de frutos y flores de los países fríos, templados y cálidos, y de las FASCES
COLOMBIANAS,
que se compondrán de un hacecillo de lanzas con la segur atravesada, arcos y flechas cruzados, atados con cinta tricolor por la parte inferIOr.
"Artículo 2° El gran sello de la República y sellos del despacho tendrán
grabado este símbolo de la abundancia, fuerza y unión, con que los ciudadanos
de Colombia están resueltos a sostener su independencia, con la siguiente inscripción en la circunferencia: REPUBLICA DE COLOMBIA.
"Artículo 3° En las monedas de oro, platina y plata se imprimirá este
símbolo nacional por el reverso, con expresión de su valor respectivo, del lugar
donde fueron acuñadas y las iniciales de los nombres de los ensayadores.
"Artículo 4° Por el anverso tendrán impreso el busto de la libertad, en
traje romano y ceñida la cabeza con faja, en que se vea grabada la palabra
LIBERTAD,
y en la circunferencia, REPUBLICA DE COLOMBIA ... AÑO DE ...
"Comuníquese al poder ejecutivo para su observancia.
"Dado en el palacio del congreso general de Colombia, en el Rosario de
Cúcuta, a 4 de octubre de 1821, 11° de la independencia".
Pasó se a discutir inmediatamente el proyecto de ley sobre arreglo de la
marina nacional, y después de una corta discusión, se votó y aprobó el artículo 1° con esta adición, propuesta por el señor obispo: "y escudo de Veragua".
El 2° se aprobó sin que se hubiese presentado el menor reparo, y otro tanto se
verificó con el 3°, 4°, 5°, 6°, 7°, 8°, 9°, 10, 11 Y 12.
Abrióse después la segunda discusión del proyecto de ley, sobre el establecimiento de la contaduría general, y como ningún señor diputado hubiese
tenido por conveniente hablar sobre el asunto, se dio por terminada.
Finalmente, el congreso resolvió por votación formal a que excitó el
señor presidente, ponerse en comisión el sábado en la noche, para tratar de la
207
elección de senadores y ministros de la alta corte de justicia, y que el lunes o
martes siguiente, es decir, el 8 o el 9 del corriente, se procediese a verificar
dichas elecciones. Con lo cual se levantó la sesión.
José l. de Márquez.
El diputado secretario,
Francisco Soto.
El diputado secretario,
Antonio José Caro.
ACTA 192. SESION DEL DIA 5 DE OCTUBRE
Se .abrió la sesión con más del número de diputados necesario para formar congreso.
Leída y aprobada el acta de la sesión del día anterior, se mandaron agregar a ella los votos contrarios de los señores Félix Restrepo y Peña, a la resolución del congreso sobre asignación de sueldos a los ministros de la alta
corte de justicia; y como el señor presidente reclamase contra esta última, por
cuanto se dice en ella que faltó su señoría al reglamento de debates, se suscitó
sobre ello una ligera discusión, en que el señor Peña pidió la votación del
congreso, y el señor presidente insistió en que la secretaría expusiese en el
acta la conducta que había observado. Con este motivo pidió el señor Zárraga
se procediese a nueva votación sobre las proposiciones que ayer se hicieron
acerca de los sueldos de los ministros de la alta corte de justicia. El señor
presidente la apoyó, y admitida una vez a discusión, concluida ésta, se puso a
la resolución del congreso, y su majestad la desechó.
Seguidamente se leyó la comunicación del presidente Libertador sobre la
marcha a Quito y autorización de facultades para esta empresa, y el congreso
resolvió pasase a una comisión especial para que informase sobre ella a la
mayor brevedad. Consecutivamente se leyó el informe del mismo señor presidente de la República, en que manifiesta su concepto acerca de cuál debe
ser la capital de ella, y habiendo determinado el congreso resolver el punto en
el día, se trajo a la vista la exposición del cabildo de Bogotá, en que pide se
señale aquella ciudad por capital provisional del Estado. Concluida su lectura
208
y abierta la discusión, propuso el señor Peña se resolviese previamente si se
trataba de designar la capital perpetua que ha de llevar el nombre del Libertador, y después sobre la capital que ha de ser la residencia provisional del
gobierno. Dicha proposición fue apoyada, y puesta a votación, el congreso
resolvió que tan sólo se iba a tratar de designar cuál debiese ser por ahora la
capital del gobierno. Procedióse pues a la discusión, yen ella hizo el mismo
señor Peña la siguiente moción, que apoyó el señor Zárraga, a saber:
"Que siempre que el congreso designe a Bogotá, se reintegre el departamento de Venezuela, formándose uno solo de los tres en que se ha dividido
actualmente" .
El señor Blanco presentó la siguiente, apoyado por el señor Gabriel
Briceño:
"Que si se traslada el gobierno supremo a Bogotá, se nombre para Venezuela un jefe que, reuniendo la administración de los ramos de hacienda y
guerra, atienda a su defensa y responda de su seguridad, y que semejante
nombramiento sea sin perjuicio del de intendentes, gobernadores y demás
que prescribe la constitución y ley de la materia".
El señor Diego Gómez propuso se pidiese informe al vicepresidente de la
República sobre cuál deba ser en su concepto la capital que deba señalarse
provisionalmente al gobierno; el señor Gual, apoyado de otros señores diputados, pidió se difiera la resolución de este negocio para después de haberse
conferenciado y acordado amigablemente. Púsose a votación esta última propuesta, y ella fue aprobada por su majestad, señalándose el día de mañana
para la determinación del punto, a cuyo efecto se acordó igualmente ponerse
esta noche en comisión el congreso para conferenciar sobre la materia, después de levantada la sesión extraordinaria.
Seguidamente se votó la proposición del señor Gómez, y el congreso la
resolvió negativamente.
Diose después cuenta de la comunicación del ministro del interior, en
que consulta si todos los secretarios del despacho deberán autorizar el cúmplase que el poder ejecutivo ha de poner a la constitución, y el congreso resolvió afirmativamente la cuestión. Consecutivamente se leyó un oficio del Libertador presidente, en que propone si se admite al barón de D'Eben al servicio de la República, yen este caso, si como general de brigada o como coronel; y el congreso resolvió pasase a informe de la comisión militar.
Procedióse en seguida a la tercera y última discusión del proyecto de ley
sobre uniformar los pesos y medidas, y después de un ligero debate se votó y
209
se aprobó el artículo 1° Yconsiguientemente el 2° , 3°, 4° 5° , 6°, 7°, 8°, 9°, 11,
12 Y 13. Acerca del 14, propuso el señor obispo, apoyado del señor Félix
Restrepo, que se obligue a los propietarios a mantener corrientes los caminos
ya establecidos, y que los que nuevamente se abran tengan de ancho las 25
varas que señala el proyecto. El señor Ignacio Méndez adicionó dicha moción con las siguientes palabras: "previa la indemnización a los propietarios".
Cerróse al fin la discusión, y votado el artículo en los términos propuestos por
los señores obispo y Méndez, resultó negado, como también el artículo primitivo del proyecto.
Entonces el señor Azuero propuso se concibiese en estos términos:
"Los caminos públicos que se abran en Colombia en lo sucesivo, tendrán
de ancho 25 varas, por lo menos, siempre que lo permita el terreno, y serán
tan rectos como sea posible; y a los que ya existen se les dará el mismo ancho,
siempre que no resulte en perjuicio notable a los propietarios"; púsose a votación, y resultó aprobado.
Pasó se al artículo 15, el cual, sin discusión alguna, se aprobó, sucediendo otro tanto con el 16, 17, 18 Y 19. A lo dispuesto en el 20, propuso el señor
presidente esta adición: "que por razón de pesos y medidas no se cobren otros
derechos, quedando abolidos los llamados de almotacén"; y ella fue aprobada con el referido artículo.
El 21 lo modificó el señor José Manuel Restrepo, pidiendo que las penas
que en él se señalan sean de cinco pesos por la primera vez, de diez por la
segunda y de 20 por la tercera, aplicados al fondo de propios; pero puesto a
votación el artículo, quedó aprobado como lo propone el proyecto. Era ya la
hora y se levantó la sesión.
José l. de Márquez.
El diputado secretario,
Francisco Soto.
El diputado secretario,
Antonio José Caro.
ACTA 193. SESION DEL OlA 6 DE OCTUBRE
Se abrió la sesión con más del número de diputados necesario para formar congreso.
210
Se leyó y aprobó el acta de la sesión del día anterior, y en seguida se dio
cuenta del informe de la comisión militar, acerca de la propuesta que para el
grado de coronel hace el Libertador presidente a favor de los tenientes coroneles Sandes, Heras, Carvajal, Maza, Ortega y Mantilla, y el congreso lo
aprobó.
Presentóse la redacción de la ley sobre papel sellado, y quedó aprobada
en los términos siguientes:
"El congreso general de Colombia,
"CONSIDERANDO:
"Que la renta de papel sellado es una de las menos gravosas a los pueblos,
y que las urgencias actuales demandan no solamente conservarla, sino también hacerla más productiva, ha venido en decretar y decreta lo siguiente:
"Artículo JO Continuará el uso del papel sellado en todos los juzgados y
tribunales civiles de la República, y habrá como hasta aquí, cuatro sellos, a
saber: 1°,2°,3° Y 4°.
"Artículo 2° La empresa o estampa del papel sellado tendrá en el centro
las armas de Colombia, y se imprimirá en el ángulo superior de la izquierda
de cada pliego, expresándose en la circunferencia el número del sello o clase
respectiva, y el año o años en que debe correr.
"Artículo 3° El sello 1° se dividirá en cuatro clases.
"Artículo 4° El valor de la primera clase será el de $24; el de la segunda,
18; el de la tercera 12, y el de la cuarta, seis pesos.
"Artículo 5° Del sello 1° de la primera clase se usará para otorgar las
escrituras de aquellos contratos y obligaciones, y de las sentencias ejecutoriadas de los pleitos que excedan de la cantidad de $8.000.
"Artículo 6° Del de segunda clase se usará para las escrituras, sentencias
y ejecutorias de los contratos, obligaciones y pleitos que pasen de $4.000.
"Artículo T' Del de tercera clase se usará para las escrituras, sentencias y
ejecutorias de los contratos, obligaciones y pleitos que pasen de $2.000; y del
de cuarta clase, para las de los contratos, obligaciones y pleitos que excedan
de la cantidad de $1.000.
"Artículo 8° Se extenderán en papel del sello 1° de la cuarta clase, todos
los títulos cuya renta no baje de $500; en el de tercera clase, excediendo
aquélla de $1.500; en el de la segunda clase, cuando no baje la renta de
$3.000, yen el de la primera, siempre que la renta exceda de dicha cantidad.
211
"Artículo 9° Los títulos de abogados, escribanos y toda clase de empleados, cuyos productos son eventuales, se extenderán en papel del sello 1° de la
tercera clase.
"Artículo 10. El valor del papel del sello 2° será el de tres pesos; y se usará
de él para todas las escrituras, sentencias y ejecutorias que no alcancen a
$1.000 ni bajen de 100; y generalmente para los testamentos, protestas, registros de buques, títulos de empleados con renta fija de menos de $500, y toda
especie de instrumentos públicos en que no hay establecida cantidad líquida,
precio o valor determinado.
"Artículo 11. El valor del pliego del sello 3° será de cuatro reales, y servirá para toda especie de certificaciones, memoriales, peticiones, escritos y
negocios que se ventilan o se presentan en todos los tribunales de la República, bien sean o no contenciosos.
"Artículo 12. El valor del pliego del sello 4° será el de un real, y se usará
de él en los libros de comercio, registros, libros de actas y acuerdos originales
y en testimonio de cabildos y corporaciones; no necesitándose en lo sucesivo
de este sello para los asuntos de los pobres de solemnidad probada y negocios
de oficio, que se escribirán en papel común.
"Artículo 13. Los libros de comercio que no estuvieren en papel del sello
4° deberán tener en la primera página una certificación del encargado de la
venta del papel sellado, en que conste haberse satisfecho el real correspondiente a cada pliego en blanco de que se compongan los enunciados libros,
bajo la pena del cuádruplo del valor que hayan defraudado a favor de la hacienda pública.
"Artículo 14. Los sellos 3° y 4° podrán expenderse por medios pliegos,
cobrándose solamente la mitad del valor del pliego entero a que correspondan.
"Artículo 15. Los contratos, obligaciones, escritos, certificaciones,
actas, libros, títulos y demás instrumentos públicos, que no estén escritos en
papel de los sellos y clases respectivas, según se establece en los artículos
anteriores, serán írritos y de ningún valor ni efecto, así en juicio como fuera
de él, exceptuando los testamentos que, cuando se hayan otorgado en papel
blanco, deberá reintegrarse el valor a la hacienda nacional.
"Artículo 16. Los jueces y escribanos que, en contravención a lo dispuesto anteriormente, autorizaren, admitieren en juicio, o firmaren instrumentos públicos o papeles, serán castigados, a favor del erario nacional, con
la multa de $300 y deposición de sus empleos respectivos.
212
"Artículo 17. La administración del papel sellado correrá a cargo de los
ministros de los tesoros de las provincias, quienes lo expenderán en los pueblos de su distrito por medio de los jueces políticos de los cantones, u otras
personas de su confianza.
"Artículo 18. El gobierno dispondrá el modo como deba sellarse y distribuirse el papel a las tesorerías correspondientes.
"Artículo 19. Los falsificadores del papel sellado quedarán sujetos a las
mismas penas que las leyes establecen contra los falsificadores de moneda.
"Artículo 20. Se revocan y anulan todas las leyes e instrucciones que
regían en el particular bajo el gobierno que ha expirado, en todo lo que se
oponga al tenor y cumplimiento de la presente, que comenzará a tener efecto
desde ello de enero de 1822.
"Comuníquese al poder ejecutivo para su publicación y observancia.
"Dado en el palacio del congreso general, en la villa del Rosario de Cúcuta, a 6 de octubre de 1821, 11° de la independencia".
La comisión de legislación presentó un proyecto de ley sobre consignaciones de comercio, y quedó admitido a discusión.
Procedióse después a la tercera y última del proyecto de ley sobre el establecimiento y organización de la contaduría general de hacienda, y leído el
artículo 1 quedó aprobado, así como también el 2°, 3°, 4° Y5°. También se
aprobó el 6° con la siguiente adición, propuesta por el señor Castillo.
"O del modo que sea posible".
Concluida la sanción de esta ley, se prosiguió en la de asignación de sueldos a todos los empleados de la República, que había quedado suspendida en
el artículo 3°, el cual quedó aprobado después de una corta discusión. El
señor Gómez hizo moción para que se agregase a esta ley un artículo por el
que se suprimiese el derecho de media anata, y el señor Urbina propuso se
agregase el siguiente:
"Que todos los militares e individuos empleados del ejército, hallándose
en campaña, reciban íntegras las dos terceras partes que se les asignan de sus
sueldos, y estén exentos de contribuciones".
El señor Domingo Briceño propuso que la media anata se cobre de la
tercera parte que queda en cajas por ahora. Cerróse al fin la discusión, y puesta a votación la proposición del señor Gómez, fue aprobada la del señor Domingo Briceño, en que salvó su voto el señor Carvajal. La proposición del
señor Urbina la había modificado el señor Castillo de este modo: "que el
militar en campaña no sufra la deducción de la contribución directa"; y puesta
0,
213
a votación, el congreso la aprobó. Pasóse al parágrafo 7° de la misma ley, en
que asigna los sueldos de los empleados en la contaduría general, y sin discusión alguna quedó aprobado.
Abrióse en seguida la primera discusión del proyecto de decreto sobre
autorización al poder ejecutivo para empréstito y aumento de la fuerza armada, y como no se presentase objeción alguna, se dio por terminada, y sucesivamente, la primera discusión también de la ley de empréstito de tres millones; pues antes de entrar a ella se declaró por el congreso que debe sufrir tres
exámenes. Consecutivamente el señor Azuero presentó un proyecto reducido
a autorizar al senado para la ratificación de los tratados de paz, alianza, etc.,
conforme al artículo 55 de la constitución, y el congreso lo admitió a discusión, así como también otro proyecto de decreto que también exhibió dicho
señor Azuero, sobre el modo de seguir las causas a los conspiradores, bandoleros, etc.
Abrióse de nuevo la discusión sobre designación de capital del gobierno,
con cuyo motivo pidió el señor obispo que, para que recayese resolución
sobre la materia, concurriesen las dos terceras partes de los diputados presentes, lo cual apoyó el señor Domingo Briceño, exigiendo que la votación fuese
nominal; y ambas proposiciones las negó el congreso. Seguidamente se votó
la proposición hecha ayer por el señor Blanco, y resultó aprobada por 31
votos contra 16, en cuya resolución salvaron los suyos los señores Ballén y
Domingo Briceño, y por último, el señor presidente puso a votación la siguiente proposición.Zlis la voluntad del congreso que el lugar provisional de
la residencia del gobierno sea la ciudad de Bogotá? Su majestad la resolvió
afirmativamente por 39 votos contra ocho; salvaron los suyos los señores
Urbina, Ballén, Blanco y Gabriel Briceño. En seguida se acordó, a propuesta
del señor Gual, nombrarse una comisión para que redacte dos decretos, uno
comprensivo de la proposición del señor Blanco, y otro sobre la designación
de la capital.
Continuó después la tercera discusión del proyecto de ley sobre tierras
baldías, y leído el artículo 6° quedó aprobado después de una ligera discusión, y consecutivamente el 7°,8°,9°, 10, 11 Y 12. Sobre el l3 hizo el señor
Peña la siguiente adición: "bajo la pena de que si no lo verificasen, volverán
las tierras a ser propiedad de la República". El señor Gual la modificó en
estos términos: "Pasados los cuatro años se notificará a los que no hayan
hecho el registro que lo verifiquen dentro de seis meses, y si no lo hiciesen, se
incorporarán las tierras en el dominio de la República". Esta proposición la
214
negó el congreso, habiéndose pretermitido la del señor Peña, que apoyó la del
señor Gual. El señor Castillo hizo la siguiente: "si pasados los cuatro años los
propietarios no cumpliesen con el registro y presentasen el mapa, sus tierras,
si fueron adquiridas por merced, se incorporarán al dominio de la República,
y si fueron adquiridas por compras sucesivas a otros títulos, el gobierno hará
a costa de ellos lo que voluntariamente no cumplieron". Esta proposición fue
apoyada, y puesta a votación, la aprobó el congreso, y se levantó la sesión.
José l. de Márquez.
El diputado secretario,
Francisco Soto.
El diputado secretario,
Antonio José Caro.
ACTA 194. SESION DEL 8 DE OCTUBRE
Se abrió la sesión con más del número de diputados necesario para formar congreso.
Leída el acta de la sesión ordinaria anterior y aprobada por el congreso, se
dio cuenta y mandó agregar a donde corresponde la protesta del señor Domingo Briceño, contra la resolución de que Bogotá sea la ciudad donde resida
provisionalmente el gobierno, y la votación afirmativa que recayó en la proposición del señor Blanco.
La comisión militar, evacuando el informe que se le pidió con fecha 22
del pasado sobre la pena que deba imponerse a los desertores, presentó un
proyecto de ley que fue admitido a discusión, guardándose en este acto lo
establecido en el reglamento de proceder.
El señor obispo de Mérida hizo presente la solicitud del clero de Trujillo,
en que reclama la permanencia de aquellos conventos de religiosos, aunque
no tienen el número de individuos requeridos por la ley, y se mandó pasar a la
comisión eclesiástica, lo mismo que la exposición que hace el prelado de
regulares de San Francisco del convento de Maracaibo pidiendo secularización.
La comisión de legislación sometió al congreso el proyecto de decreto
sobre designación de representantes a cada una de las provincias de la República, y fue admitido a discusión.
215
Seguidamente continuó la tercera y última discusión de la ley de sueldos
a los servidores de la patria, y fueron aprobados sucesivamente algunos artículos del parágrafo 4° y los artículos 4° y 9° que restaban aún por sancionar.
Sobre el artículo 9°, que habla de la extinción de media anata en los empleados que no reciban un sueldo fijo de los fondos públicos, se suscitó la duda de
si sería parte de esta ley o exigiría un decreto por separado, y el congreso
decidió afirmativamente el primer miembro de esta proposición.
Tuviéronse después la primera discusión de la ley sobre el modo de hacer
las consignaciones en el comercio, de la ley sobre el modo de seguir las causas a los desafectos al sistema de independencia, bandoleros y ladrones en
despoblado, y del decreto sobre la autorización del senado para la ratificación
de tratados, etc., y la segunda del decreto en que se autoriza igualmente al
gobierno para que aumente las fuerzas de mar y tierra e imponga empréstitos
para los gastos de la República, y de la ley sobre el de los tres millones de
pesos.
Ultimamente se leyó el informe de la comisión especial para autorizar al
presidente de la República en la próxima campaña de Quito con facultades
extraordinarias, y el congreso, después de una bien detenida discusión, lo
aprobó en todas sus partes, encargándose al señor Azuero la redacción del
decreto respectivo, y votándose previa y afirmativamente esta proposición:
¿ Se permite al Libertadorpresidente mande en persona las armas en la campaña de Quito? También se aprobó la siguiente adición, que fue presentada por
el señor Azuero y apoyada por varios señores diputados: "El presidente de la
República si saliese a la campaña, como desde luego puede hacerlo, llevará
consigo estas facultades a los lugares donde haga personalmente la guerra,
las dejará y las dejará el vicepresidente para que éste pueda delegarlas con las
restricciones que tenga por conveniente respecto de los otros puntos de la
República que sean el teatro de la guerra".
Terminado todo esto, el señor presidente anunció que era llegado el caso
de proceder a la elección de ministros de la alta corte de justicia y de senadores, según que antes se había determinado. Con este motivo, y para evitar
dudas, se votaron afirmativamente estas dos proposiciones: la ¿Quiere el
congreso que la elección de ministros sea anterior a la de senadores? y 2
¿ verificado el primer escrutinio y no resultando elección, se contrae ésta al
número duplo de los que hayan obtenido mayor número de votos? En seguida el señor presidente designó a los señores Antonio Briceño, Manuel Restrea
,
216
po, Quijano y Domínguez, para que conforme a la constitución ejerciesen las
funciones de escrutadores junto con los secretarios.
Verificado el primer escrutinio, resultaron los señores Miguel Peña con
29 votos, Vicente Azuero con 20, Félix Restrepo con 17, Estanislao Vergara
con 11, Ignacio Herrera con nueve, Andrés Narvarte con ocho, José María
Cuero con 12, Ramón García Cádiz con tres, Cristóbal Mendoza con ocho,
Joaquín Ortiz con dos, Juan Martínez con cuatro, Miguel Tobar con tres,
Nicolás Ballén de Guzmán con cinco, Antonio Viana con tres, Francisco Javier Yanes con seis, Ignacio San Miguel con dos, Diego Gómez con uno,
José María del Castillo con uno, Alejandro Osorio con uno, Vicente Borrero
con uno, y Jerónimo Torres con uno, por lo cual fue nombrado constitucionalmente ministro de la alta corte el señor Miguel Peña.
En el segundo escrutinio resultaron los señores Félix Restrepo con 30,
José María Cuero con 26, Estanislao Vergara con 19, y Vicente Azuero con
23, siendo por lo mismo elegidos constitucionalmente para ministros los dos
señores Restrepo y Cuero.
Hízose después el escrutinio para la elección de fiscales, y los votos se
distribuyeron de la manera siguiente: 30 en el señor Andrés Narvarte, 26 en el
señor Vicente Azuero, 19 en el señor Estanislao Vergara, uno en el señor
Diego B. Urbaneja, uno en el señor Francisco Cuevas, tres en el señor Alejandro Osorio, 16 en el señor Miguel Tobar, tres en el señor Francisco Javier
Yanes, dos en el señor Joaquín Ortiz, dos en el señor Cristóbal Mendoza, uno
en el señor Diego Fernando Gómez y dos en el señor Ballén de Guzmán,
resultando de consiguiente canónicamente nombrados los señores Narvarte y
Azuero.
Decidido que la elección de senadores se hiciese sucesivamente para los
de cada departamento, y que en segundo acto se contrajese al número duplo
como la de los ministros, resultaron nombrados para senadores del departamento del Orinoco los señores general Santiago Mariño, por 40 votos; general Antonio José de Sucre, por 26; Fernando Peñalver, por 30, y Eusebio
Afanador, por 28; también obtuvieron: los señores Félix Blanco, ocho votos;
Juan Martínez, dos; Gabriel Gómez, nueve; general Bermúdez, cinco; Miguel Alcalá, cuatro; Jaime Hamilton, cinco; Diego B. Urbaneja, doce; Gabriel Rojas, dos; Francisco Bastardo, siete, y Gabriel Monagas, nueve.
Para senadores del departamento de Venezuela fueron nombrados en el
primer escrutinio los señores general José Antonio Páez, con 42; Ignacio
217
Méndez, con 40; Martín Tobar, con 34; coronel Judas T. Piñango, con 30;
tuvieron igualmente tres votos el señor Cristóbal Mendoza; el señor Coronel
F. Conde, cinco; el señor Bartolomé Salom, 11; el señor Miguel Pumar,
cinco; el señor J.A. Pérez, seis; el señor R. García Cádiz, ocho; el señor
Miguel Palacio, uno; el señor Félix Blanco, dos; el señor Diego B. Urbaneja,
uno; el señor Prudencio Lanz, uno; el señor Francisco Javier Yanes, uno, y
otro el señor Lorenzo Uscátegui.
Concluida esta acta, se levantó la sesión por ser ya mucho más de la hora
señalada.
José l. de Márquez.
El diputado secretario,
Francisco Soto.
El diputado secretario,
Antonio José Caro.
ACTA 195. SESION EXTRAORDINARIA
DE OCTUBRE POR LA NOCHE
DEL 8
Se abrió la sesión con más del número de diputados necesario para formar congreso.
Se abrió la sesión dándole cuenta del informe de la comisión eclesiástica
sobre la solicitud del provisor de Bogotá para recoger limosnas de todas las
provincias, con objeto de promover negociaciones con la silla apostólica, y
fue aprobado.
Se dio asimismo cuenta del informe de la comisión militar sobre la consulta del Libertador acerca de si debía o no admitirse al servicio al barón
D'Eben, y después de una corta discusión el señor Antonio Briceño fijó la
siguiente proposición: "que se diga al Libertador presidente que el congreso
no tiene inconveniente en que se admita al barón D'Eben al servicio de la
República en el grado que su excelencia le presente", y puesta a votación fue
aprobada generalmente.
Se presentó la redacción del proyecto de decreto sobre la extensión de las
facultades extraordinarias del presidente en la campaña del sur, y el señor
Urbina hizo presente que si el presidente no comenzaba a ejercerlas desde la
218
provincia de asamblea, el ejército no podría organizarse y marchar con celeridad, por lo que, en caso necesario, pedía la revocación del artículo 12. Los
señores Restrepo (Manuel), Azuero y Antonio María Briceño apoyaron y
comprobaron la indicación, y el señor Castillo presentó la siguiente proposición: que en lugar del artículo 12 se sustituya el siguiente artículo: "el ejercicio de las facultades extraordinarias comenzará desde que se reúna el ejército
en la provincia de asamblea, y entre en ella el presidente"; y habiendo preguntado el señor presidente si se admitía a discusión, se aprobó por más de las
dos terceras partes, por cuya mayoría fue en seguida votada afirmativamente.
Se continuó la tercera discusión del proyecto sobre enajenación de tierras
baldías, y aprobados los artículos 14 y 15, se levantó la sesión.
José l. de Márquez .
El diputado secretario,
Francisco Soto.
El diputado secretario,
Antonio José Caro.
ACTA 196. SESION DEL 9 DE OCTUBRE
Se abrió la sesión con más del número de diputados necesario para formar congreso.
Leída y aprobada el acta de la sesión ordinaria anterior, el señor presidente manifestó era llegado el caso de proceder a la elección de presidente y
vicepresidente del congreso, por ser hoy el día en que terminaban estos oficios, y verificada la elección por el orden regular, resultaron nombrados el
señor Ignacio Márquez para el primer destino (que actualmente desempeña),
por 22 votos, y para el segundo, el señor obispo, por 23 votos.
Diose cuenta de la comunicación del Libertador presidente de la República en que propone al barón D'Eben para general de brigada, y el congreso
accedió a esta propuesta.
Continuada la tercera discusión de la ley sobre enajenación de tierras baldías, fueron sucesivamente aprobados los artículos 16, 17, 18 y 19, y de
consiguiente quedó sancionada esta ley.
219
Hizo presente después el señor Azuero que, en su concepto, era necesario
añadir a la ley de organización de tribunales el artículo siguiente: "En los
recursos que se interpongan de las sentencias que pronuncien los tenientes
asesores en estas causas como jueces de primera instancia, se consultará el
gobernador con otro letrado de dentro o fuera de la provincia"; y esta proposición fue apoyada e inmediatamente discutida. El señor Félix Restrepo presentó esta moción: "los asesores de los gobernadores e intendentes no conocerán de los negocios en primera instancia". Apoyada esta modificación y
declarado el punto suficientemente discutido, fue negada la proposición del
señor Restrepo y aprobada la del señor Azuero por una gran mayoría.
Manifestó asimismo el señor Azuero el inconveniente que resultaba de la
modificación sancionada ya por el congreso, que se había hecho al artículo 60
de dicha ley de tribunales, en cuanto imponía al suplicante la obligación de
pagar los costos del testimonio de autos, y pidió que por las dos terceras
partes se revocase este acuerdo. Apoyada, admitida y discutida esta proposición, el congreso resolvió casi por unanimidad que en lugar de hacer el costo
de testimonio el que interpuso el recurso, se expresara en estos términos: a
costa del mismo solicitante.
Pidió, en fin, dicho señor Azuero que se suprimiera el artículo 90, y siendo apoyada esta proposición, fue votada afirmativamente por el congreso.
En este momento se leyó la comunicación del Libertador presidente de la
República a la que acompaña un ejemplar de la proclama que dirige a los
pueblos con la constitución del Estado, y anunciándoles igualmente la designación de Bogotá por el lugar en donde provisionalmente ha de residir el
gobierno; el congreso la oyó con agrado y mandó que se archivase.
Procedióse inmediatamente a la elección de senadores, y el señor presidente nombró para escrutadores, en unión de los secretarios, a los señores
Escobar, Vicente Borrero, Yanes y Blanco. Practicado el escrutinio de los
senadores del departamento del Zulia, resultaron nombrados para tales senadores los señores general Rafael Urdaneta, por 31 votos, obispo de Mérida,
R. Laso de la Vega, por 34 votos, Antonio María Briceño, por 30 votos, y
Luis Baralt, por 28 votos; obtuvieron igualmente votos los siguientes:
Doctor Mariano Talavera .
Manuel Amador . . . . .
Coronel Francisco Delgado
Doctor Francisco Antonio Aguilar
220
18
16
4
6
Coronel Cruz Carrillo . . .
Doctor Tiburcio Echeverría
Manuel Benítez
Coronel Juan Antonio Paredes
José Ignacio Balbuena
Rafael Nevot. .
Luis Mendoza .
Gabriel Briceño
16
2
2
2
Siguió después la elección de senadores del departamento de Boyacá, y
resultaron electos los señores doctor Nicolás Cuervo, presbítero, por 30
votos; doctor Francisco Cuevas, letrado, por 36, y Francisco Soto, por 33;
obtuvieron igualmente votos los señores:
Antonio Malo . . . . . .
Juan Nepomuceno Azuero
Joaquín Ortiz
.....
Domingo Lobo Guerrero
Pablo Plata
DiegoF. Gómez
Sinforoso Mutis
Pacífico Jaime .
Andrés Rosillo .
José Antonio Bárcenas
Jacinto Ramírez .
Joaquín Suárez . .
Clemente Calderón
Manuel Campos .
Coronel JoséM. Mantilla
16
23
23
4
1
2
1
3
6
Faltando pues uno de los senadores del expresado departamento de Boyacá, hizo presente el señor presidente que debiera hacerse la elección de éste,
contrayéndose a los dos que habían obtenido mayor número de votos, que
eran los señores Azuero y Ortiz. Manifestó entonces el señor Diego F.
Gómez que el doctor Ortiz no era nacido ni vecino del departamento, pues
aunque es cierto que tiene hacienda en jurisdicción de Tunja, es sin embargo
vecino de Bogotá. Habiendo corroborado algunos señores esta observación,
221
preguntó el señor presidente si la elección debía contraerse a los doctores
Juan Nepomuceno Azuero y Antonio Malo, y resuelto afirmativamente,
practicado el escrutinio, fue nombrado senador el señor Malo por 26 votos,
habiendo recaído los otros 20 en el señor Azuero.
Hízose después el escrutinio para la elección de senadores del departamento de Cundinamarca, y resultaron con votos los siguientes:
Coronel Luis Rieux, con .....
Doctor Estanislao Vergara (letrado)
José Sanzde Santamaría
Francisco Montoya . . . . .
General Antonio N ariño, con
Ignacio Parfs, con
Miguel Uribe, con
Antonio Viana, con
José María Lozano
Ignacio Sanmiguel
Pedro Arrublas . .
Doctor AlejandroOsorio
Señor Diego Padilla
Nicolás Ballén Guzmán .
JoséMiguelPey
....
Doctor José María Hinestrosa
Coronel Domingo Caicedo .
Presbítero Fernando Caicedo
Doctor Juan Ronderos
Presbítero J. M ...
Doctor Miguel Tobar
Joaquín Gómez
Pantaleón Gutiérrez
Manuel Cacer . .
Doctor Pablo Plata
Cristóbal Vergara
25
22
22
17
29
3
10
2
7
1
2
3
1
9
7
10
10
1
3
Quedaron pues con mayoría de votos los señores Luis Rieux y general
Antonio Nariño. Publicado el escrutinio, tomó la palabra el señor Diego
Gómez y expuso que el general Nariño no podía ni debía ser senador, pues
que la constitución 10 excluía de este destino; él es deudor fallido, dijo el
222
señor Gómez; sus fiadores en la tesorería de diezmos han pagado por él cantidades de mucha consideración, ya pesar de eso todavía debe alguna al Estado, fuera de lo que debe a dichos fiadores; el general Nariño ---<:ontinuó-- se
ha entregado voluntariamente al enemigo en Pasto; su conducta ha sido criminal, y aún no ha sido juzgado en consejo de guerra; le falta, en fin, la
residencia que exige la misma constitución, pues que él ha estado ausente
como se ha dicho por su gusto y no por causa de la República.
El señor presidente indicó que podía continuar el acto sin perjuicio de que
después se tomara en consideración el inconveniente objetado al general Nariño, pero otros señores creyeron que debía decidirse previamente este punto
y que si era cierta la quiebra y lo demás que se objetaba al nombrado, la
elección era inconstitucional. El señor Ignacio Méndez, esforzando lo que
antes había indicado el señor Antonio Briceño, sostuvo la elección, por cuanto el general Nariño había sido presidente del Estado de Cundinamarca en la
época anterior de la República, y ahora había sido el segundo magistrado de
Colombia; el cual argumento fue respuesto [sic] por otros señores. El señor
obispo, que había sido citado por el señor Azuero como sujeto que debiera
estar impuesto de la quiebra del general Nariño, expuso constarle, como que
en su poder habían estado los autos de la materia, en calidad de juez hacedor
de diezmos de Bogotá, que Nariño había quebrado en $80.000, que pagaron
sus fiadores, haciendo para ello muy crueles sacrificios y dejando sus familias sumidas en la miseria, y en $11.000 más que no pagaron, porque su
fianza sólo alcanzaba a los $80.000; que Nariño hasta dicha época de la revolución tampoco había pagado los $11.000, pero que su señoría no podía atreverse a calificarlo de deudor fallido a causa de que el dinero de diezmos lo
había empleado en grandes negociaciones, cuyo producto existía entonces en
Londres, Francia y Habana.
Como ya eran mucho más de las dos de la tarde, ocurrió la duda de si la
sesión sería permanente o debería levantarse. El señor presidente lo preguntó
al congreso, y se decidió por la negativa el primer miembro de la proposición,
salvando su voto el señor Santamaría y levantándose inmediatamente la
sesión.
José l. de Márquez.
El diputado secretario,
Francisco Soto.
El diputado secretario,
Antonio José Caro.
223
ACTA 197. SESION DEL 9 DE OCTUBRE POR LA NOCHE
Se abrió la sesión con más del número de diputados necesario para formar congreso.
Leída y aprobada el acta de la sesión extraordinaria anterior, se leyó
igualmente, y mereció la aprobación del congreso el decreto sobre designación de capital provisional de la República en la ciudad de Bogotá. He aquí su
contenido:
" El congreso general de Colombia,
"CONSIDERANDO:
"1 ° Que habiéndose reservado por la ley fundamental de unión, para mejores días, levantar la ciudad de Bolívar, que debe ser la capital de la República, es necesario entretanto designar el lugar que por ahora sea la residencia
ordinaria del gobierno, conforme al parágrafo 21 del artículo 55 de la constitución.
"2° Que debe escogerse, en cuanto sea posible, aquel que diste y se comunique con más igualdad a los extremos del territorio de la República, al
propio tiempo que haga menos peligrosas y más expeditas y frecuentes las
relaciones con los diversos pueblos del interior, esparcidos en un país tan
vasto y con caminos y montañas casi inaccesibles.
"3° Pero que al consultar esta ventaja, es preciso atender también a la
benignidad del clima, multiplicidad de edificios, abundancia de recursos en
todos los ramos de la administración y otras comodidades de la vida.
"4° Que ninguno mejor que la ciudad de Bogotá reúne estas proporciones, situada por la naturaleza en el corazón de la República, con dos ríos
navegables al poniente y al oriente, que le ofrecen pronta comunicación con
sus costas y con los departamentos de la antigua Venezuela.
"5° En fin, que la necesidad de llevar la guerra a los opresores de la desgraciada Quito reclaman la cercanía y las principales atenciones del gobierno, al menos por ahora, hacia aquella interesanteporción de Colombia; ha
venido en decretar y decreta:
"Artículo 10 La ciudad de Bogotá será la residencia del gobierno supremo de la República, hasta tanto que variadas las presentes circunstancias no
se designe otro lugar por el congreso.
224
"Artículo 2° El poder ejecutivo dictará todas las disposiciones necesarias
para el cumplimiento de este decreto, preparando los edificios, enseres y
demás conducentes, para la reunión y despacho de las cámaras del senado y
de representantes, del poder ejecutivo y sus secretarías, de la alta corte de
justicia y demás tribunales y oficinas establecidas por las leyes, que deban
residir en la República.
"Comuníquese para su ejecución.
"Dado en el palacio del congreso general, en la villa del Rosario de Cúcuta, a 8 de octubre de 1821, 110 de la independencia".
La comisión de legislación presentó un proyecto de decreto sobre autorizar a la contaduría general para la liquidación de la deuda nacional, y después
de discutido el artículo 1o, fue aprobado, protestando contra la votación el
secretario Soto, por cuanto el acto era contrario al reglamento de proceder.
Suscitóse con este motivo un ligero debate, y resultando de él duda sobre el
modo de proceder, el señor presidente preguntó si ésta debía tenerse por la
tercera discusión de dicho decreto, y la votación fue negativa. Preguntó después si se admitía el proyecto a discusión, y el congreso lo negó.
Túvose inmediatamente la primera discusión del proyecto de decreto
sobre el cupo de representantes a las provincias, y terminada, continuó la
primera discusión de la ley sobre penas que debieran imponerse a los reos de
deserción.
Ultimamente se leyó el informe de la comisión primera de hacienda,
sobre asistencia a las viudas y familias de los muertos en la campaña o asesinados por el gobierno español, y después de haber objetado el señor Briceño
(Antonio María) y algunos otros señores diputados el dictamen de la comisión, a causa de que si se socorría a una u otra viuda o familias, era necesario
socorrer a todas las que se hallaban en igual caso, y entonces faltarían rentas
para mantener huérfanos. El señor Castillo fijó esta proposición, que fue apoyada y votada afirmativamente:
"Que se expida un decreto en que el congreso manifieste el sentimiento
que le causa no poder aliviar por lo pronto a las viudas y huérfanos de los que
han perecido en la campaña o han sido asesinados por el gobierno español, y
que en él se ofrezca que la representación nacional habrá de convertir su atención hacia este interesante objeto luego que lo permitan las urgentes necesidades del Estado".
225
Con lo cual, siendo más de la hora, se levantó la sesión.
José l. de Márquez.
El diputado secretario,
Francisco Soto.
El diputado secretario,
Antonio José Caro.
ACTA 198. SESION DEL 10 DE OCTUBRE
Se abrió la sesión con más del número de diputados necesario para formar congreso.
Leída y aprobada el acta del día de ayer, bajo la observación que hizo el
señor Félix Restrepo, y se colocó en su lugar, se dio cuenta y se leyó la exposición que hace el reverendo obispo de Mérida, como diputado en congreso,
en la cual concluye pidiendo la continuación de la bula llamada de cruzada,
con el objeto de que sus productos se destinen a la conservación y fomento de
misiones; su majestad tuvo a bien mandar que informase la comisión de negocios eclesiásticos, así como también sobre la solicitud que exhibió igualmente el señor obispo, del clero y vecinos de Trujillo, en que reclaman la conservación de los conventos menores de frailes, ya extinguidos por la ley.
A la de peticiones se mandó pasar una queja que dirige el ciudadano Antonio Rodríguez Terán, vecino de Pamplona, contra aquel gobernador y comandante general, porque lo depuso del empleo de alcalde ordinario que
obtenía en dicha ciudad de Pamplona; y también la solicitud de Manuela Surbarán , esclava residente en Maracaibo, que reclama su libertad.
Empezó después la segunda discusión del decreto en que se autoriza al
senado para la ratificación de los tratados que celebra el gobierno con las
naciones extranjeras. El señor Castillo hizo la moción de que el número de
senadores que exige el artículo 2° de dicho decreto sea sólo el de lo militar y
uno más, la cual fue apoyada por el señor Miguel Tobar. Discutido suficientemente este decreto y la anterior proposición, se procedió a la discusión segunda del proyecto de ley sobre consignaciones en el comercio, y después a
226
la del proyecto sobre el modo de seguir las causas a los conspiradores contra
la patria, bandoleros, etc.
Discutióse por tercera vez la ley en que se autoriza al ejecutivo para
aumentar y equipar la fuerza armada de la República e imponer empréstitos
en lo interior, y fueron sucesivamente aprobados los artículos 1°, 2°, 3° y 4°.
El señor Manuel Restrepo pidió que se agregase a esta ley un artículo en que
se facultase al gobierno para que en las urgencias de la guerra pueda tomar
víveres y caballerías, y el señor doctor Fernando Gómez apoyó esta proposición, añadiendo, conforme a la constitución, estas palabras: bajo una justa y
presupuesta indemnización. Hízose sobre la proposición primitiva y la adición
la observación de que eran innecesarias, porque la constitución y las leyes
habían previsto y ocurrido difícilmente al caso, y con este motivo el señor
presidente preguntó al congreso si la anterior proposición adicionada se agregaba a la ley como un artículo; y esta aserción fue resuelta negativamente.
Siguió después la tercera y última discusión de la ley en que se faculta al
poder ejecutivo para hacer el préstamo de tres millones. El señor Azuero,
renovando una proposición que se había hecho en la segunda discusión, pidió
que la resolución que contiene esta ley se agregase a la anterior como un
artículo, y fue apoyado. Dio esto motivo para una larga discusión que fue
terminada con la aprobación del artículo 1° del proyecto, pretermitida la moción del señor Azuero. El artículo 2° fue igualmente aprobado, y en cuanto al
3°, hizo el señor Azuero la siguiente modificación: "Los tres millones se aplicarán al pago de los gastos que ocurran"; y fue apoyada por algunos señores.
Discutido el punto suficientemente, se negó la proposición del señor Azuero,
se aprobó el artículo como está escrito, y el congreso, en fin, acordó que esta
resolución sobre el impuesto de los tres millones y lo demás que acaba de
sancionar se publicase por medio de una ley, según lo presenta el proyecto.
Tomóse después en consideración la indicación que ayer hizo el señor
Gómez sobre el nombramiento de senador que había obtenido el general Nariño. El señor Peña hizo en esta materia la siguiente proposición, que fue
apoyada: "Que el señor Nariño presente ante el senado futuro la certificación
del tribunal de diezmos que le justifique del cargo de fallido que se le ha
hecho y los documentos sobre su conducta militar en el sur, y que siendo
aprobados unos y otros sea tenido por senador del departamento de Cundinamarca, por no haber en este congreso documentos que justifiquen sus cargos
o su inocencia". El señor Manuel Restrepo fijó esta proposición: "Que manteniéndose al general Nariño en la elección de senador decida el futuro con227
greso sobre las tachas que se le objetan"; y fue apoyada. Terminada la discusión del punto y reducido a votación, fue aprobada la proposición del señor
Restrepo, protestando los señores Antonio Briceño e Ignacio Méndez, expresando el primero que lo hacía por ser dicha resolución anticonstitucional, yel
doctor Fernando Gómez. Los votos afirmativos fueron 21, Y 20 los negativos. Dicho señor Gómez presentó inmediatamente la siguiente adición: "Que
al futuro congreso se pase copia de las actas de ayer y hoy en la parte que
habla del general Nariño"; y habiendo sido apoyada, expuso el autor los motivos que tenía para presentarla. Discutida, se votó y quedó aprobada.
Insistió el señor Peña en que se votase su proposición, pero habiendo
creído algunos señores que esto era ya innecesario, por cuanto dicha proposición estaba sustancialmente contenida en la del señor Restrepo, preguntó el
señor presidente si debería o no votarse la moción del señor Peña, y el congreso resolvió que no había lugar a esta nueva votación.
Leyéronse inmediatamente dos comunicaciones del ministro del interior,
la primera contraída a pedir, en nombre del vicepresidente de la República, se
le permitiese destinar al señor Orbegozo a cierta comisión, y fue concedido; y
la segunda, a pedir se permitiese a los señores Castillo y Manuel Restrepo
tomar posesión de las secretarías de hacienda y del interior para que habían
sido nombrados por el gobierno; y su majestad, en consideración a la falta
que hacen en el congreso estos dos señores ya que dentro de cuatro o seis días
habrá de disol verse esta corporación, no pudo acceder a la solicitud del vicepresidente de la República.
Siguió después la elección de senadores del departamento de Cundinamarca, y como que los señores Miguel Uribe, Domingo y Fernando Caicedo,
tenían cada uno de ellos diez votos, fue necesario que la suerte designase a
cuál o a quién debía contraerse la elección junto con los señores José Sanz
Santamaría, Francisco Montoya y Estanislao Vergara, que habían obtenido
la mayoría aproximada o relativa. Nombrados los señores Valencia, Mendoza (José Antonio), Calvo y Quijano, por escrutadores, en unión de los secretarios, designado por la suerte el señor Miguel Uribe y contraída la elección a
dicho señor y a los señores anteriormente expresados, resultaron senadores el
señor Estanislao Vergara, con 35 votos, y el señor Miguel Uribe, con 25,
habiendo obtenido el señor José Santamaría 20, y seis el señor Montoya.
Practicado el escrutinio de los senadores del departamento del Magdalena, resultaron: Los señores José María del Real, con 41 votos; Manuel Benito
228
Rebollo, con 38, el coronel José Francisco Munive, con 37, YRemigio Márquez, con 22, habiéndose distribuido los demás votos de la manera siguiente:
Al señor coronel Padilla . . . .
Al señor Sinforoso Mutis . . .
Al señor Juan Salvador Narváez
Al señor Ildefonso Méndez .
Al señor Ignacio Cavero
Al señor Francisco Sotomayor
Al señor Esteban Granados .
Al señor Julián Patiño(presbítero)
y al señor Antonio Torres . . . .
9
7
3
2
5
1
3
Hízose por último el escrutinio para la elección de senadores del departamento del Cauca, y resultaron con votos los siguientes:
Jerónimo Torres, con .
Agustín Varona, con
Joaquín Mosquera, con
PedroA. de Hoyos, con
Vicente Lucio Cabal, con
Mariano Escobar, con
Santiago Pérez Arroyo, con
Manuel María Quijano, con
Ignacio Torres, con .
Félix Vergara, con
Fernando Carvajal, con
Antonio Arboleda, con
Joaquín Fernández Soto, con
Francisco Pereira, con
CayetanoConde, con .
Miguel Domínguez, con
José Cornelio Valencia, con
Manuel Escobar, con
Gregorio Hoyos, con
Tomás Tenorio, con
31
32
30
11
10
1
9
8
5
2
2
2
7
3
5
1
2
229
Quedaron pues legalmente elegidos los señores Agustín Varona, Jerónimo Torres y Joaquín Mosquera; y como los señores Vicente Lucio Cabal y
Pedro de Hoyos obtuvieron la mayoría respectiva de votos, la elección se
contrajo a ellos, y del nuevo escrutinio resultó nombrado el señor Vicente
Lucio Cabal, con 34 votos, y el señor Pedro de Hoyos sólo tuvo cuatro. Con
lo cual terminó la sesión a las tres y media de la tarde.
losé l. de Márquez.
El diputado secretario,
Antonio losé Caro.
ACTA 199. SESION DEL 11 DE OCTUBRE
Se abrió la sesión con más del número de diputados necesario para formar congreso.
Se leyó y aprobó el acta del día de ayer. Leyóse después una comunicación del ministro de la guerra, a la que acompaña cuatro pliegos del comandante militar y vecinos de Ocaña que refieren las últimas ocurrencias de aquella ciudad, y el congreso acordó que pasara todo al gobierno, para los efectos
convenientes.
Se leyó la redacción del decreto sobre la proposición aprobada en la sesión extraordinaria del 9 de este mes, y que había presentado el señor Castillo. El congreso, después de una larga discusión, aprobó esta redacción:
"El congreso general de Colombia,
"penetrado de justo dolor por la situación triste y desolada de las viudas,
huérfanos y padres de tántos hijos de Colombia, inmolados a la patria en los
campos del honor y en los patíbulos elevados por la crueldad para castigar la
virtud eminente del patriotismo; y considerando por una parte no sólo lajusticia con que estos objetos de la compasión y gratitud nacional demandan los
medios de subsistir, de que fueron privados por los enemigos, sino las obligaciones diferentes con que está comprometida hacia ellos la República; y por
otra, que las grandes atenciones del Estado no dejan un sobrante con qué
230
socorrerlos durante la lucha gloriosa que sostiene para afirmar la independencia, y asegurarles su existencia y los medios de sostenerla en lo futuro; considerando también, que la memoria de tántas víctimas no debe quedar en el
olvido a que quiso condenarla la bárbara crueldad del despotismo, y que sus
viudas y herederos tendrán un consuelo en el recuerdo que de ellos se haga, y
en la esperanza que les ofrezca una resolución de la representación nacional,
ha venido en decretar y decreta lo siguiente:
"1 ° Todos los colombianos muertos en los campos del honor y de la gloria defendiendo la independencia de su patria, son beneméritos de ella en
grado eminente, y su memoria debe conservarse fielmente en los anales de la
República.
"2° Los que por sus servicios y su opinión perecieron en los patíbulos,
condenados en odio de la virtud con el designio de afirmar la tiranía que se
propusieron destruir, son mártires ilustres de la libertad de la patria, y su
memoria debe transmitirse a la posteridad con la gloria de que es digna.
"3° Los que sirvieron con honor a la República y murieron naturalmente
sirviéndola, son dignos de la consideración que les merecier •...
" sus mismos
servicios, y de un recuerdo grato de sus conciudadanos.
"4° Las viudas, los hijos menores, las hijas honestas y los padres de los
que murieron de cualquier modo de los expresados, si por los empleos de los
muertos tienen opción al montepío militar o ministerial en conformidad con
las leyes de España que se conservan con vigor en Colombia, o con las particulares de la República, deben comenzar a gozar de él, luego que se arregle
este ramo importante y haya fondos para satisfacer esta deuda de justicia, a
cuyo efecto se encarga especialmente su organización.
"5° Al instante que se disminuyan las atenciones actuales de la guerra,
cuando se vean los aumentos de las rentas nacionales como efecto de las leyes
que se han dado, y se cuente con un sobrante de ellos, el gobierno, con los
informes necesarios, propondrá al congreso las pensiones que deba decretar
en favor de las viudas, huérfanos y padres, que no tengan opción al montepío,
y entonces serán aliviadas las penalidades y miserias de personas que siempre
son dignas de la compasión y consideración nacionales.
"6° Entretanto, y siempre, el gobierno cuidará de que los huérfanos sean
convenientemente educados gratuitamente en las escuelas y colegios mandados establecer, y de que sean empleados los hijos que heredaron las virtudes
de sus padres en los destinos para que tengan aptitud.
231
"7 Este decreto será observado fielmente y con absoluta igualdad en Colombia, sin que contra su observancia se conceda ni permita continuar algún
privilegio.
"Comuníquese al poder ejecutivo para su publicación y cumplimiento.
"Dado en el palacio del congreso general, en la villa del Rosario de Cúcuta, a 11 de octubre de 1821, 11 de la independencia".
La solicitud del cura de esta villa para que se manden pagar las sillas que
se han usado en el congreso, y han tenido deterioro, se mandó dejar sobre la
mesa.
El congreso difirió a la próxima legislatura la reclamación del señor obispo de Mérida, en que pide se declaren privados los magistrados seculares del
conocimiento de las causas de espolios.
El señor Zárraga hizo la moción de que se instale en esta villa la alta corte
de justicia, y fue apoyado por el señor Castillo. El señor presidente previno
que la trajese por escrito para tomarla en consideración.
Siguió después la segunda discusión del proyecto de decreto sobre asignar a cada provincia el número de representantes que deba nombrar, y la del
proyecto de ley sobre la pena que ha de imponerse a los desertores.
Se dio cuenta del informe de la comisión de peticiones sobre la que hace
la madre de Juan Pablo Grillo, suplicando se le conceda indulto de la pena
que se le impuso por el delito de hurto calificado, y el congreso lo indultó de
la pena capital, conmutándola en la que le asignó el tribunal competente,
denegándose a que lo fuese en seis años de presidio, sobre cuya última circunstancia salvaron su voto los señores Castillo y Antonio Briceño, expresando el primero que lo hacía porque la resolución era contraria a las leyes
que prohíben la reunión de un nuevo consejo de guerra; el señor Blanco también protestó. Habiendo pedido el señor Ballén la revocatoria de la última
parte de la proposición votada, el congreso la negó por 14 votos contra 28,
pues que eran necesarias las dos terceras partes.
Se dio cuenta del informe de la comisión especial sobre la consulta que
hizo el vicepresidente de Cundinamarca, apoyada por el gobierno, para saber
si deben admitirse los esclavos que voluntariamente se presenten al servicio
de las armas. Proponía el gobierno que fuesen admitidos, y que de los fondos
de manumisión se pagase a los dueños su valor, y la comisión era de este
mismo concepto; el congreso aprobó su informe.
Se leyó después la redacción de la ley sobre enajenación de tierras baldías, y el congreso la aprobó. He aquí la ley:
0
0
232
"El congreso general de Colombia,
"CONSIDERANDO:
"1 ° Que uno de los primeros deberes es fomentar la agricultura por cuantos medios estén a su alcance.
"2° Que la enajenación de tierras baldías a precios cómodos y equitativos, debe contribuir poderosamente a tan importantes objetos.
"3° Que los productos de esta enajenación son necesarios para cubrir los
inmensos gastos y erogaciones a que están sujetas las rentas públicas, ha venido en decretar y decreta lo siguiente:
"Artículo l" Podrán enajenarse en lo sucesivo, así en las provincias marítimas como en las del interior, las tierras baldías que no han sido antes concedidas a persona alguna, o que habiéndolo sido por composición, han vuelto al
dominio de la República, según lo dispuesto en las leyes anteriores.
"Artículo 2° Se exceptúan de esta regla las tierras de comunidad de indios
y de los pastos y ejidos de villas y ciudades, sobre las que continuarán observándose las que rigen en el particular.
"Artículo 3° Queda por consiguiente abolido el método de composición
establecido particularmente por la instrucción de 15 de octubre de 1754, y
cualesquiera otras leyes posteriores para la enajenación de tierras baldías,
debiéndose ésta en lo sucesivo verificar por los precios y con las formalidades
que aquí se declaran.
"Artículo 4° Los que se hallan actualmente en posesión de las tierras baldías con casas y labranzas en ellas, sin título alguno de propiedad, serán preferidos en las ventas, siempre que en concurrencia de otro se allanen a pagar
el mismo precio que se ofrece por ellas.
"Artículo 5° Los que poseyesen tierras baldías de tiempo inmemorial, o
so protexto de una justa prescripción, deberán concurrir en el término perentorio de un año a sacar sus títulos de propiedad, debiendo, si no lo hicieren,
volver al dominio de la República las expresadas tierras aunque estén pobladas o cultivadas.
"Artículo 6° Se venderá la fanegada de tierras baldías en las provincias
marítimas, a razón de dos pesos de moneda corriente; y por uno, en las del
interior.
"Artículo 7' Si la situación o fertilidad de las tierras baldías y su aproximación a las costas, lagos, ríos navegables y poblados, aumentase su impor233
tancia y ventajas, se harán avaluar por peritos, fijándose carteles para su
venta en pública subasta por el término de 30 días; y se declarará la propiedad
a favor del que ofrezca el precio que más se aproxime a los avalúos, y que no
baje del de la ley.
"Artículo 8° El valor de las tierras baldías se abonará en las tesorerías
respectivas, por cuartas partes, al vencimiento de cada año, y no se dispondrá
de sus productos sin orden especial del gobierno.
"Artículo 9° Los que quieran comprar tierras baldías ocurrirán a los gobernadores de las provincias en que se hallen situadas las expresadas tierras,
manifestando su localidad, ríos yaguas que las bañan, y que no pertenecen en
dominio y propiedad a ninguna persona.
"Artículo 10°. El gobernador pasará entonces orden al agrimensor de la
provincia, y no habiendo agrimensor, a los peritos que tenga por conveniente, para que midan las tierras y levanten un plano topográfico tan exacto como
sea posible.
"Artículo 11. Practicadas estas diligencias a que se agregará el plano indicado, las pasará el gobernador al intendente del departamento para que se
declare la propiedad en favor del postulante, comunicando aviso a la tesorería
respectiva para el cobro de su valor por cuartas partes en los cuatro años
sucesivos.
"Artículo 12. Se creará en la capital de la República una oficina de agrimensura general, y una particular en cada provincia, en que se registren las
propiedades rurales de todos los ciudadanos y extranjeros residentes en las
expresadas provincias.
"Artículo 13. Dentro de cuatro años, contados desde la publicación de la
presente ley, todos los ciudadanos y extranjeros residentes en Colombia deberán registrar sus propiedades rurales en las oficinas particulares de cada
provincia, y desde este tiempo ningún juez y escribano podrá autorizar contratos de compra y venta de dichas propiedades, sin que se acompañe un certificado del agrimensor de haberlo así verificado.
"Artículo 14. Si pasados los cuatro años, los propietarios no cumplieren
con el registro prevenido, sus tierras, si fueren adquiridas por merced o composición, se reincorporarán al dominio de la República, y si fueren adquiridas
por compras sucesivas u otros títulos, el gobierno hará practicar los registros
a expensas de los propietarios.
"Artículo 15. Los agrimensores, al tiempo de hacer estos registros en sus
oficinas respectivas, agregarán el plano que se haya levantado, con expresión
234
de las fanegadas, estancias, celemines o cuartillos de tierra de que conste la
propiedad territorial.
"Artículo 16. El agrimensor general residente en la capital de la República será el órgano regular de todas las comunicaciones del gobierno con los
particulares de cada provincia, en todo lo que mira al buen orden y régimen
de sus oficinas.
"Artículo 17. El agrimensor general llevará el registro general de todas
las tierras baldías que vayan enajenándose sucesivamente; a cuyo efecto los
de las provincias le remitirán copias de los planos y declaratorias de los respectivos intendentes.
"Artículo 18. Será del cargo del agrimensor el levantar , recoger, rectificar y custodiar todos los libros, mapas y cartas geográficas de las provincias
de Colombia, de sus costas, lagos, ríos navegables, o propios para establecimientos de utilidad pública.
"Artículo 19. El agrimensor general recibirá por sus servicios el sueldo
fijo de $2.000 al año, y los particulares de provincia, los emolumentos y
obvenciones que por tarifa les asignare el gobierno entretanto no los detallare
la ley.
"Artículo 20. Se autoriza al poder ejecutivo para que pueda enajenar tierras baldías por las dos terceras partes del valor que asigne la ley, siempre que
los compradores lo satisfagan inmediatamente en las tesorerías nacionales.
"Comuníquese
al poder ejecutivo para su cumplimiento.
"Dado en el palacio del congreso general de la República de Colombia,
en la villa del Rosario de Cúcuta, a 11 de octubre de 1821, 11 de la independencia" .
0
Se dio cuenta del informe de la comisión de legislación sobre la solicitud
del gobernador del Chocó acerca de los protectores de indios, y de la imposición que éstos deban pagar a beneficio de aquéllos, y el congreso aprobó su
concepto, que era el de que el expediente pase al gobierno para que se decida
el punto por la ley sancionada sobre extinción de tributos.
Aprobóse también el informe de la misma comisión en la solicitud del
señor Cristóbal Zigler, quien pedía carta de naturaleza. El concepto de la
comisión era que el interesado ocurriese al gobierno para hacer su solicitud.
Enterado el congreso del informe de la misma comisión sobre la solicitud
del gobernador de Cartagena acerca de la extinción de ciertas municipalidades en aquella provincia, el congreso aprobó su concepto, que era el de que el
235
expediente pasara al ejecutivo para que lo decidiese conforme a las leyes de la
materia.
Aprobó igualmente el informe de la misma comisión sobre los arbitrios
adoptados por la junta de propios del Citará, para aumentar este fondo. La
comisión era de sentir que el expediente se reservase para la primera legislatura.
Aprobó también otro informe de la misma comisión, promovido a solicitud de los ministros del tesoro público de Bogotá, sobre la exacción de media
anata, acordando que se guardase lo últimamente establecido en la materia, y
que se diera un decreto en que se extinga el 18% de conducción a España.
Asimismo se aprobó el informe de la comisión de legislación sobre la
solicitud del vicepresidente de Cundinamarca, relativa al aumento de sueldos
de los gobernadores militares, y en el cual la comisión opinaba que ya no
había lugar a tomarlo en consideración, a la vez que el punto estaba resuelto
en la ley de sueldos.
Igualmente aprobó el dictamen de la propia comisión sobre la solicitud
del cabildo de Iscuandé para que se grave a los labradores y traficantes del río
Tapaje con una pequeña suma. Opinaba la comisión que el expediente se pase
al gobierno para que con los datos que deben adquirirse se presente a la legislatura próxima.
También se aprobó el informe de dicha comisión en que expone tome el
gobierno los que convengan para designar armas a la villa de Plato en la provincia de Santa Marta, y que con ellos lo presente al futuro congreso.
Igual aprobación recayó sobre el informe de la misma comisión, en cuanto manifiesta que la señora Manuela García del Fierro, viuda del coronel Joaquín Palacio, está comprendida con respecto al montepío militar, y reclama en
la ley que acaba de sancionarse sobre esta materia, y que en razón de la acreencia que tiene contra el Estado use de su derecho ante quien corresponda.
Aprobando el congreso el informe de dicha comisión, acordó que la solicitud del gobernador del Chocó sobre los derechos de bodegaje que trata de
establecer en el Atrato para fomentar su navegación, se pase al gobernador a
fin de que resuelva lo conveniente, como que es asunto de su resorte.
También se aprobó el informe de dicha comisión, en que manifiesta debe
archivarse el expediente remitido por el vicepresidente de Cundinamarca,
sobre si los avecindados en los pueblos de indios pueden edificar en la plaza,
a la vez que ya estaba resuelto este punto en la ley sobre extinción de tributos
de indios.
236
La misma aprobación recayó en el informe de la comisión dicha sobre
arreglo de la secretaría del departamento de Cundinamarca, mandando en
consecuencia archivarse el expediente, por estar ya resuelto este punto en las
leyes sancionadas.
Conforme al dictamen de la misma comisión, el congreso mandó devolver al ejecutivo para que pase al tribunal competente el recurso de injusticia
notoria interpuesto por la señora Rosa Rovira.
Mandó también su majestad que se pasara al gobierno la consulta del
gobernador político de Cartagena sobre la protecturía de indígenas, puesto
que la ley de extinción de tributos ha establecido ya una regla sobre esta materia, según lo pedía la comisión de legislación.
Acordó el congreso, según el dictamen de la misma comisión, que se
archivase el expediente en que conste haberse publicado en Margarita la
constitución de Venezuela, y otro expediente en que el Libertador presidente
indicaba la necesidad de crear un cuarto departamento de las provincias de
Coro, Maracaibo, Mérida, Trujillo y Pamplona, por cuanto ya el congreso
había sancionado lo conveniente en esta materia.
Resolvió el congreso, de acuerdo con la comisión legislativa, que se pasase al próximo congreso la solicitud del ciudadano Miguel Jaramillo, en que
pide a su majestad declare a los parientes el derecho de reversión a los bienes
dotales que han llevado las monjas a sus conventos al tiempo de su profesión.
Se mandó también reservar para el futuro congreso, según informaba la
misma comisión, las consultas que han ocurrido sobre venta de los oficios
renunciables.
Tomado en consideración el informe de esta comisión legislativa en la
consulta que hizo el gobierno sobre si debían continuar los secuestros que se
hicieron en Venezuela en 1813 y 1814 de los bienes de los enemigos de la
independencia, y cuya materia decía la comisión que se reservase para el
futuro congreso, observándose entretanto las leyes dictadas en el particular, y
las comunes que tienen relación con ella, su majestad aprobó este informe.
Resolvió el congreso que se devolviese al ejecutivo la consulta que hace
el gobernador político de Tunja sobre creación de escribanías y modo de proveerlas, por cuanto en la ley de tribunales se acordó ya lo conveniente, según
así lo pedía la comisión de legislación.
La comisión de educación pública informa sobre la solicitud del cura y
vecinos del Socorro; pedían se destinase el convento de capuchinos a un hos-
237
picio, y manifiesta que se pase el expediente al gobierno para que resuelva
conforme a las leyes que hablan del caso, y el congreso aprobó este informe.
Resolvió también que se suprima el impuesto de un real por cada cerdo,
con que son gravados los traficantes en el paso de Bebará y Timaná (que se
aplica para propios), subsistiendo el derecho de peaje que se cobra para reparo de las bodegas y corrales en los términos que propone la comisión primera
de hacienda en el informe que ha dado sobre el particular.
El congreso resolvió que pasara al gobierno el expediente promovido por
el gobernador del obispado de Popayán para que la junta de diezmos se traslade a la ciudad de Cali, una vez que la ley de intendentes designaba a Popayán
capital de dicha intendencia, a fin de que en observancia de esta ley se arregle
lo conveniente según lo informa la comisión de legislación.
En el expediente sobre establecimiento de bodegas y corrales en el puerto
del río de Andágueda, acordó el congreso, después de haber examinado el
informe de la primera comisión de hacienda (en el informe que ha dado sobre
el particular), la siguiente proposición, que fijó el señor Castillo:
"Vuelva este expediente al gobierno, para que tome todos los conocimientos y noticias que puedan contribuir a que la próxima legislatura dicte la
resolución más conveniente en el particular, suspendiéndose entretanto el
cobro de los derechos que se habían impuesto provisionalmente en el puerto
de Andágueda".
Aprobando el congreso el informe de la comisión especial sobre la demarcación de límites de las misiones del Caroní y agregación que intentaba su
corregidor, se resolvió que este expediente se devuelva al gobierno para que
obre en él como corresponda en justicia y sea más útil a los indígenas y vecinos del Bajo Orinoco. Tomado en consideración el informe de la comisión
primera de hacienda, sobre la recomendación que ha hecho el gobierno en
favor de las viudas de los vicepresidentes Roscio y Azuola, resolvió el congreso que a la señora viuda del doctor Roscio se le den $1.000 del tesoro
público, para que pueda transportarse a su país, y que esta asignación sea a
buena cuenta de lo que la hacienda pública deba al mismo doctor Roscio por
razón de sus sueldos; 2°, que la solicitud de la señora viuda del difunto doctor
Azuola sea comprendida en la disposición general que se ha dado respecto de
las demás viudas.
La comisión de manumisión informa que debe pasarse al gobierno el expediente sobre la revocatoria de libertad que dieron los españoles a un esclavo
por los servicios que hizo contra la causa de la independencia, como que debe
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existir en él, y no es necesario dar una ley sobre la materia; y el congreso
aprobó este informe.
La comisión primera de hacienda informa sobre la solicitud de la señora
María Manuela Quijano, en que reclama la pensión que se le había señalado
en unión de sus hermanas por el gobierno español, y el congreso después de
haber examinado el punto a solicitud del señor Antonio Briceño, acordó lo
siguiente:
"Cesan desde luego las pensiones asignadas a varias personas por sus
servicios hechos en tiempo del gobierno español, así como las demás que no
hayan sido aprobadas por el congreso general".
Declaró el congreso comprendida en esta resolución la solicitud de la
señora María Josefa Carrasquero, que pedía se le continuase pagando la pensión que antes disfrutaba en la tesorería de Maracaibo, después de haber examinado y discutido suficientemente el punto.
La comisión de manumisión informa que la queja del alcalde de Garzón,
en la provincia de Neiva, sobre presidencia de lajunta de manumisión, se pase
al gobierno para que dicte la providencia que haya lugar y el congreso aprobó
este informe.
La educación pública es de opinión que se pase al gobierno la solicitud
del cabildo y gobernadores de Tunja, para que se establezcan allí estudios, a
fin de que la tenga presente en la ejecución de la ley que habla de la materia; y
también se pasa al mismo gobierno lo del señor Juan José Pérez, en que pide
se le permita establecer una academia de lenguas en Bogotá, y el congreso
aprobó este informe.
También acordó que pasara al poder ejecutivo la solicitud de la señora
Mercenaria Ortiz, que pedía se le mandasen restituir los bienes embargados
de orden del teniente coronel Alaix, en la ciudad de Anserma.
La comisión especial creada para examinar los dos proyectos que se habían presentado sobre la reducción de los censos, informa que deben reservarse a la suprema legislatura, con recomendación, por cuanto el actual congreso no puede prolongar sus sesiones; y fue aprobado este informe.
El expediente remitido por el ministro del interior, sobre una competencia que ocurrió entre el cabildo y comandante de Ocaña, se mandó devolver al
ejecutivo, según informa la comisión de legislación.
Acordó el congreso que el ciudadano Pablo Lezama, que solicita el empleo de contralor del hospital de Maracaibo, ocurra a quien corresponda,
según lo propone la comisión de peticiones.
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Tomado en consideración el expediente remitido por el cabildo de Medellín, apoyando la solicitud de los vecinos de Copacabana, en que piden se
declare libre el cultivo del anís, el congreso resolvió "que sea libre dicho
cultivo" .
Se difirió sine die la solicitud del tesorero jubilado de Maracaibo, en que
pide jubilatura del medio sueldo de lo que gozaba por el gobierno español.
"Pase a quien corresponda para la resolución que deba dictarse con arreglo a la ley dada por el congreso sobre repartimiento de bienes nacionales",
fue la resolución que recayó en la solicitud del general vicepresidente de Cundinamarca, contraída a pedir cierto traspaso de un censo de $2.400 en la tesorería a cuenta de su haber.
De conformidad con lo expuesto por la comisión militar, acordó el congreso que el teniente coronel José Sardá, gobernador de Riohacha, ocurra al
poder ejecutivo a pedir la confirmación del grado que reclama.
También se presentó y aprobó la redacción de la ley sobre empréstito de
tres millones:
"El congreso general de Colombia,
"CONSIDERANDO:
"I" Que el estado de guerra en que se halla empeñada la República, ha
aumentado considerablemente los gastos de la lista civil y militar.
"2° Que para cubrir el déficit de estos gastos en los años pasados ha sido
forzoso contraer algunas deudas, cuyo capital e interés deben satisfacerse a lo
menos, a fin de evitar mayores perjuicios a los que con tanta generosidad nos
han socorrido en circunstancias tan apuradas, ha venido en decretar y decreta
lo siguiente:
"Artículo ]0 Se autoriza al poder ejecutivo para que pueda negociar y
aceptar en Europa u otra parte, un empréstito de tres millones de pesos en los
términos que crea más ventajoso a los intereses de Colombia.
"Artículo 2° Para conseguir este empréstito podrá hipotecar a beneficio
de los prestamistas los productos de cualquier ramo particular de las rentas
del Estado.
"Artículo 3° Estos tres millones de pesos se aplicarán al pago de los intereses devengados de la deuda nacional, o a amortizar dicha deuda en todo o
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en parte, y a cubrir el déficit de la lista civil y militar a que no alcancen las
rentas públicas en el año de 1822.
"Comuníquese al poder ejecutivo para su observancia.
"Dado en el palacio del congreso general de la República de Colombia, a
11 de octubre de 1821, 11° de la independencia".
Habiéndose aprobado la redacción de la ley sobre facultades al poder
ejecutivo para pedir empréstitos, etc., se levantó la sesión. He aquí el texto de
la ley:
"El congreso general de Colombia,
"CONSIDERANDO:
"JO Que por el artículo 55 de la constitución corresponde al poder legislativo establecer los impuestos, fijar los gastos públicos, decretar la conscripción de los ejércitos y señalar el tiempo que deben existir.
"2° Que en la imposibilidad de acopiarse todos los datos y presupuestos
necesarios, debe facultar ampliamente al poder ejecutivo para que disponga
de los bienes nacionales y proveer a las necesidades de la patria, ha venido en
decretar y decreta:
"Artículo l" Se autoriza al poder ejecutivo para que conserve, aumente o
disminuya, según lo sugieran las circunstancias, el ejército que hoy tiene la
República, hasta tanto que se reúna el congreso del año de 1823, o que antes
de este término cese la guerra.
"Artículo 2° Podrá también crear, aumentar, equipar y conservar una
fuerza marítima por el tiempo del artículo anterior.
"Artículo 3° Quedan a su disposición los fondos del tesoro nacional para
el pago de la lista civil y militar en los términos ordenados por la ley, como
también para cualesquiera otros gastos extraordinarios, o imprevistos que
ocurran, con tal que sean en servicio inmediato y directo de la República.
"Artículo 4° Si puestas en práctica todas las leyes sobre contribuciones
decretadas por el presente congreso, resultare que no alcanzan sus productos
para cubrir los gastos, podrá el poder ejecutivo exigir empréstitos a los ciudadanos y habitantes de Colombia, en los términos y bajo las reglas que se
prescribieron en el decreto de 30 de junio último.
Comuníquese al gobierno para su observancia.
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"Dado en el palacio del congreso general de la República de Colombia,
en la villa del Rosario de Cúcuta, a 10 de octubre de 1821, 11 de la independencia" .
0
José l. de Márquez ,
El diputado secretario,
Francisco Soto.
El diputado secretario,
Antonio José Caro.
ACTA 200. SESION EXTRAORDINARIA
DEL 11 DE OCTUBRE.
Se abrió la sesión con más del número de diputados necesario para formar congreso.
Leída y aprobada el acta de la noche anterior, se dio cuenta de la comisión
de negocios eclesiásticos sobre la consulta del antiguo presidente de Cundinamarca, de la inversión de las rentas de la canonjía lectoral, destinadas antes
para la inquisición, y se resolvió conforme al dictamen de la comisión, que
dichas rentas se inviertan en el objeto para que fueron destinadas, pudiendo el
gobierno hacer uso de ellas para los gastos públicos mientras subsisten las
urgentes atenciones del Estado.
Se presentó el informe de la segunda comisión de hacienda sobre la solicitud del señor Francisco Córdoba, para trabajar una mina de sal con la propiedad de ella y privilegio exclusivo, y se resolvió que el expediente pase al
gobierno, para que determine en la materia.
Se dio cuenta del informe de la misma comisión de hacienda sobre la
solicitud de la señora Francisca Ferrer, a fin de que se le entreguen las legítimas maternas de tres nietas suyas, hijas de don Joaquín Farías, emigrado, y
se determinó pase la solicitud al poder ejecutivo, para que resuelva lo que
haya lugar.
Se leyó igualmente la hecha en favor de la ciudad de Mérida para el desestanco de aguardiente, y se resolvió pase al poder ejecutivo, para que tome
providencia conforme a la ley del congreso sobre la materia.
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Se leyó asimismo el informe de la comisión de peticiones sobre la representación de Juana Casanova para que se le dé una pensión de $200, y se
decretó pase al poder ejecutivo, para que providencie según la ley sobre pensiones.
La comisión primera de hacienda informó sobre la petición de esta villa
para el arreglo de monedas, exención de alojamientos y aumento de sus propios, y se resolvió que habiendo el gobierno dictado providencia sobre el
primer punto, no había para qué tomarlo en consideración; el segundo se resolvió negativamente, y el tercero se mandó pasar al gobierno.
Se leyó el informe de la primera comisión de hacienda sobre la solicitud
de los administradores de tabacos y alcabalas de Bogotá, para que los guardas
sean montados y abonados sus sueldos íntegramente, y se decretó pase al
gobierno para que tome providencia conforme a la ley sobre la materia.
Según el informe de la misma comisión, se mandaron pasar al conocimiento del gobierno la solicitud del cabildo de Mompós contra el administrador de la aduana, y el expediente promovido por el gobernador comandante
general de Cartagena, para probar la inutilidad de la aduana de Mompós.
La comisión informó sobre la consulta del vicepresidente de Cundinamarca en cuanto a derechos de tonelada cobrados por los capitanes de puerto
de Santa Marta y Sabanilla, sobre la inversión de derechos de anclaje, cobros ,
arbitrarios y de los derechos de capitanes a la entrada y salida de buques, y
sobre el derecho impuesto a los buques costaneros, y se resolvió que habiéndose sancionado ley por el congreso sobre derecho de toneladas, no hay para
qué tomarle en consideración; que los derechos de anclaje "e destinen precisamente a hospitales y lazaretos, y que sobre derechos arb.trarios a buques
mayores y menores, se ordene por el gobierno no se cobren en lo sucesivo.
Con lo cual se levantó la sesión.
José l. de Márquez .
El diputado secretario,
Francisco Soto.
El diputado secretario,
Antonio José Caro.
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