Un gato negro llamado Alzheimer

Un libro para David
De la parte de Stefan
Esta historia se puede personalizar.
Visite www.bookata.com, donde usted podrá:
Cambiar el nombre del niño, sus características étnicas y su género
Cambiar el nombre y el tipo de mascot
La presencia y número de hermanos, padres, abuelos y amigos
El lenguaje de la historia (inglés, francés, y más a venir)
Insertar / cargar sus propias ilustraciones mientras que mantiene la historia
Mantener las ilustraciones, pero cambiar el relato con su propia experiencia
Y el último toque: sólo hay que dirigirse a nuestros creadores para estilizar un nuevo
personaje, o un nuevo giro de la acción
Bookata - El lector ES la historia!
Escrito por Viorel Anghel ©
Ilustrado por Mónica García ©
Credits
Sobre el autor:
Viorel Anghel vive en Montreal. Además de trabajar como periodista, esta contratado a tiempo
completo por su hija de 6 anos como creador de historietas. Contadas todas las noches, olvidadas el
día siguiente, y recreadas al azar una semana mas tarde, de acuerdo con la resolucion de la
niña. Viorel esta encantado de descubrir como sus historietas despiertan un gran placer en las
almas de los jóvenes.
Sobre la ilustradora:
Se podría decir que Mónica Garcia vive con su familia, desde que nació en 1972, en La Habana,
Cuba. Pero la verdad es que su mente realmente vive en un universo paralelo, lleno de colores,
criaturas fantásticas e historias fascinantes y interminables. Una artista y maestra gráfica, Mónica
ama la música, la danza y su mascota y musa - su gata Mina.
A Bookata Book
Alex era un niño como tú, David. Y cuando digo «como tú» quiero decir que era un niño ni más
joven ni mayor que tú. El no era más alto, ni más bajo. Y cuando el se echaba a reír ... ¿Sabes cómo
se reía? No? El se echaba a reír como tú, suficientemente fuerte como para que todos los vecinos la
oigan.
Alex tenía un abuelo como tú tienes un también - su Pierre. El abuelo de Alex se llamaba Rene. Era
un abuelo increíble. Cuando los padres de Alex estaban ocupados, el abuelo Rene siempre jugaba
con el.
Cuando los padres de Alex partían de la casa por la mañana temprano, el abuelo le despertaba para
llevarlo a la guardería. El abuelo Rene le preparaba el mejor chocolate caliente en todo el mundo y
una galletas de canela increíbles. La casa siempre olía bien cuando él estaba allí.
El abuelo Rene le contaba a Alex todo tipo historias, le contaba historias de brujas, duendes o
hadas. A Alex le gustaban mucho los duendes, incluso una vez le dijo a su madre que definitiva y
categóricamente cuando fuera grande quería ser un duende.
Alex y su abuelo a veces salían juntos sin que los mismos padres supieran. En verano, se iban a
comprar helado, a uno le gustaba el de chocolate y al otro de vainilla.
Sin embargo, algo extraño estaba sucediendo al abuelo Rene últimamente. Sus visitas eran menos
frequentes y él parecía estar siempre molesto y no jugaba más con Alex como lo hacía antes.
La cosa más rara pasó en su cumpleaños. Los papás de Alex habian encargado una gran torta. Alex
había pedido específicamente que el pastel sea mitad vainilla para el y mitad chocolate para el
abuelo Rene. En el centro de la torta estaba Shrek, su personaje favorito de los dibujos animados.
Pero el abuelo no venía.
"Tal vez se le olvidó", dijo el papá. "Propongo que comamos la torta" Alex empezó a llorar, el
quería esperar a su abuelo. Mamá tomó el teléfono y llamó a Rene para averiguar lo que pasaba.
En efecto, el abuelo Rene se había olvidado celebrar su cumpleaños. Papá fue a buscarlo con su
auto para que todos pudieran comer la torta juntos. Todos cantaban el "Cumpleaños Feliz", y el
abuelo, que estaba en un estado de ánimo muy bueno, prometió a Alex que iría al día siguiente - tal
vez al zoológico o al museo de los niños. Pero al día siguiente el abuelo se olvidó de volver.
Antes de acostarse, la madre de Alex entró en su cuarto y le dijo que tenía un secreto que contarle.
-El abuelo está actuando extraño últimamente. Es gruñón y olvidadizo...
-Es cierto respondió Alex. Ni siquiera me trajo un regalo para mi cumpleaños. Pero eso está bien,
yo no estoy enojado con él.
- Bien hecho, querido, sabes, no es su culpa, el abuelo Rene no quiere olvidar. Esto es lo que
sucedió: un día, el abuelo encontró un libro de cuentos. El libro era grueso, pesado y polvoriento ; él
lo llevó a casa para limpiarlo y leerte las historias.
- ¿Y entonces, le preguntó Alex.
- Después de quitar el polvo, y justo cuando estaba a punto de abrir el libro, el abuelo encontró un
duende dentro.
- Un duende?
- Sí, Copertina, una bruja mala había dejado atrapado al duende en el interior del libro. El duende
conocía sus secretos y también cómo vencerla si es que ella tramaba algo malo. La bruja Copertina
siempre intimidaba a las hadas del país de las hadas, les enmarañaba el pelo,les cortaba sus
vestidos o les perdía sus zapatos para que no pudieran ir a las fiestas. Ella quería ser la más mala de
las brujas. Incluso las otras brujas no querían hablar con ella. El duende, tan pronto como fue
liberado por tu abuelo, tomó la palabra:
- Oh, muchas gracias por liberarme! Ya era hora. Creo que la desagradable Copertina está
provocando algunos problemas en el país de las hadas, ayudaré a las hadas a derrotarla ... pero hay
que tener cuidado! Ella es muy, muy mala, y ella se enterará de que me has liberado y querrá
vengarse.
El duende se había ido antes de que su abuelo podiese hablar. Y él realmente quería preguntar
acerca de los duendes, porque sabía lo mucho que a tí te gustan.
- Sí, dijo Alex. Quiero ser un duende cuando crezca y quiero ... - Lo sé, lo sé, mamá interrumpió.
Déjame que te cuente el resto de la historia. Copertina la bruja se enteró de inmediato que alguien
había abierto el libro en el que ella había atrapado al duende. Su cara estaba roja de ira y juró que
conseguiría su venganza.
Entonces ella tomó su sirviente, un gran gato malo y negro llamado Alzheimer, y juntos miraron en
el espejo mágico para ver quien había liberado al duende. Por la noche, cuando el abuelo dormía,
Copertina y Alzheimer se colaron en su habitación y por venganza le robaron sus recuerdos.
Alzheimer se echó a reír y el abuelo Rene se despertó. Los dos cómplices huyeron con una bolsa
llena de recuerdos.
- ¡Oh, no, gritó Alex
- Sí, su madre continuó. Copertina no podía llevarse todo sin embargo. Por eso el abuelo no podía
recordar tu cumpleaño, pero sabía que iba a Disney on Ice hace un año. Ahora el abuelo espera que
el duende y las hadas puedan derrotar a Copertina y Alzheimer y traer de vuelta sus recuerdos..
Pero tenemos que ser pacientes, David. Lo que sabemos hasta ahora es que Copertina se esconde de
las hadas en un bosque espeso y oscuro. Las hadas han pedido ayuda al Príncipe Lumix, del reino
de las luciérnaga quien ahora está reuniendo un gran ejército luciérnaga para entrar en el oscuro
bosque, encontrar a Copertina y recuperar la bolsa con recuerdos del abuelo. Estoy esperando lo
mejor, pero debemos estar preparados en caso que la bolsa se haya perdido para siempre.
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