Consejos para afrontar mañana el examen de Interno Residente. Cuando las cosas se complican... 1. ¡No intentes adivinar demasiado deprisa! Es importante leer todas las alternativas y no parar cuando encuentres una que creas probable. 2. Debes de seleccionar una alternativa no sólo técnicamente correcta, sino la más correcta. Alternativas como “todas las anteriores” o “ninguna de las anteriores” son muy inclusivas y tienden a ser más veces correctas que incorrectas. 3. Ten cuidado con alternativas que incluyan términos como “nunca”, “siempre”, “garantiza”, “asegura”. Tales palabras son bastante restrictivas y muy difíciles de defender en caso de ser elegidas. En la mayoría de las ocasiones son alternativas incorrectas. 4. Por el contrario, otros términos como “a veces resulta en”, “ocasionalmente puede derivar hacia”, pueden resultar correctos en más ocasiones. 5. Ten cuidado con las opciones demasiado largas o que incorporen “jerga” (terminología informal o no científica). Suelen ser utilizadas como señuelos o trampas. 6. Utiliza tu conocimiento previo sobre sufijos, prefijos y raíces de palabras para hacer adivinaciones inteligentes sobre términos que desconoces. Conocer el prefijo “hiper” por ejemplo, te ayudará a interpretar que la hipertensión se refiere presión sanguínea alta, no baja. 7. Estate pendiente de pistas procedentes de la gramática. La respuesta correcta al enunciado de un ítem que acaba en preposición o conjunción (ej. “en”, “a”) suele empezar por un artículo. 8. Utiliza la información y conocimientos que has adquirido al ir haciendo el test para revisar respuestas previas de las que no estabas seguro. 9. Si no estás seguro de una respuesta y has de jugártela, hazlo pero... metódicamente. Elimina alternativas que son claramente incorrectas y a continuación relaciona las que queden con el enunciado para comprobar si “encajan”. Quédate con una o dos alternativas y compáralas para identificar diferencias entre ellas. Finalmente, “adivina con fundamento”. 10. Cuando se te presenten opciones del tipo “todas las anteriores”, “ninguna de las anteriores” o “Ni A, ni B... es correcta”, considera cada alternativa como una pregunta de verdadero/ falso, y después relaciónala con el enunciado. 11. ¿Piensas que te has equivocado en una respuesta? ¿Quieres cambiarla? Si estás seguro de que tu primera respuesta está errada, cámbiala; pero si no tienes certezas y al escoger la primera respuesta tenías una mínima seguridad, no la cambies. 12. Finalmente, recuerda que la mejor manera de asegurar la selección de la opción correcta es saberse la respuesta correcta... Y para reducir la tensión antes de un examen... ... y evitar que afecte nuestra capacidad para razonar y responder, es recomendable: 1. Descansar bien la noche antes del examen: distrae tu mente con otras actividades y duerme bien (la mente cansada no da todo lo que puede). 2. Tomar un desayuno ligero: no «cargues el estómago» antes del examen, así evitarás sentirte físicamente incómodo. 3. Relajarse durante la hora anterior al examen: intentar aprender en el último minuto puede confundir lo que has estudiado antes, y además afectar a tu seguridad en ti mismo. 4. Asegurarse de contar con todos los materiales necesarios para el examen: bolígrafo. 5. Intenta evitar a aquellos compañeros que te ponen nervioso. Ramón C ampallo (albacete , 1965), considerado una de las personas con mayor fuerza mental del mundo. Plusmarquista mundial de memoria tanto rápida como de fondo. Lleva 9 años impartiendo cursos sobre técnicas de estudio, memorización y lectura ultrarrápida. (Madrid y Barcelona). M iedo al fracaso C uando se está haciendo un examen la suerte ya está definitivamente echada. En el momento de la verdad ya no debemos echarnos nada en cara, sino relajarnos, disfrutar del examen y dejar que nuestros conocimientos vayan fluyendo con normalidad. El factor psicológico varía normalmente el rendimiento entre un 60 y 90% del rendimiento máximo que podría llegar a obtener. Hay estudiantes que por exceso de tensión nerviosa, debido a la carga psicológica a la que se someten, llegan a presentar vómitos, diarreas, mareos, taquicardias, dolor e le pecho, etc. Algunos llegan hasta el extremo de tener que abandonar el examen. Es muy importante concienciarse de que para conseguir un rendimiento próximo al 100% hay que ir al examen como si tal cosa, como si no nos jugásemos nada. Con la mayor relajación, autoestima y confianza que podamos alcanzar. En dos palabras Paz mental. Alejad de vosotros cualquier pensamiento que no os sugieran eso y reemplazarlo por aquellos que sí lo hagan. Hay que entrar al examen con el piloto automático puesto, sin pensar, ni analizar lo que estamos haciendo. Es una forma importante de controlar los nervios. Recordad, finalmente que si sufrimos en exceso por culpa de los nervios, el subconsciente tomará medidas defensivas para evitarnos ese mal trago ¿Y cómo no? nos ayudará amablemente con un bloqueo mental o algo similar, para que abandonemos la causa de nuestro sufrimiento. L ucha contra la tensión nerviosa. Es aconsejable tener algún medicamento guardado por si acaso, hasta que todo vaya sobre ruedas. Por este motivo, mi consejo es que te familiarices con las técnicas de control y relajación de nervios que se muestran a continuación. Inmediatamente que notemos que entramos en una situación de tensión nerviosa: Dejaremos de movernos o gesticular y aflojaremos el cuerpo totalmente. Mientras, intentamos alejar todos los pensamientos y dejar nuestra mente en blanco. A continuación, respiraremos 2 o 3 veces de manera lenta y profunda, expulsando todo el aire que tenemos en los pulmones. Según vamos respirando y nuestro cuerpo se va aflojando cada vez más, empecemos entonces a sentir interiormente una sensación de agrado y bienestar. Créala así: nada te molesta, nada te disgusta, que bien empiezas a sentirte y cada vez mejor. Nos aislamos mentalmente del mundo exterior y nos vamos sintiendo interiormente mejor, mejor mejor…. Esta técnica es conveniente entrenarla un poco para que nos salga de manera natural y no forzada. Si los nervios hiciesen acto de aparición durante el examen escrito, lo mejor sería: Dejar unos segundos escribir. Desarrollar la técnica anterior durante un minuto aproximadamente. F undamental: Nunca pensemos: “No puedo”, o “Esto se me va de las manos”. Sintámonos a gusto y recordemos que somos nuestro mejor amigo o amiga. Notemos realmente su compañía y ¡ si estamos tan bien acompañados..! ¿Por qué temer, entonces? Consejos finales Inspiracle: 1ª vuelta responde solo aquellas preguntas que estés completamente seguro de cuál es la respuesta correcta. 2ª vuelta responde a aquellas preguntas que consideres solo dos opciones como posibles. Valora las posibilidades de tener 190-200 preguntas correctas, si es así no sigas arriesgando. Cuanto más abajo de las 190 preguntas seguras acertadas consideres que estas más debes de arriesgar. No hacerlo no tiene sentido ya que no estarías cumpliendo el objetivo de conseguir plaza. Intenta ser frío, analítico y sincero contigo mismo, lo contrario solo lleva a que tu te engañes a ti mismo. Al principio no respondas a las respuestas del examen directamente en la plantilla oficial de respuesta, sino que hazlo en el propio examen. Después debes de trasladar las respuestas a la plantilla oficial que es la única que tiene validez. Ten mucho cuidado en ese proceso cualquier error al apuntar mal puede acabar con tus posibilidades de éxito. Al rellenar la casilla en la plantilla de respuesta, recuerda dejar espacio para poder tachar y corregir la respuesta. Guarda bien la copia de tu plantilla de respuestas pues es lo único que tienes para impugnar tus resultados publicados. Esperamos que el documento os pueda facilitar la contestación del test y un mayor rendimiento en el examen. Iliana Perdomo Directora de Inspiracle.