Lección 31 La fe del grano de Mostaza

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Lección 31 La fe del grano de Mostaza -­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐-­‐ Pasaje Bíblico “31 Otra parábola les refirió, diciendo: El reino de los cielos es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomo y sembró en su campo…”. Mateo 13.31 Versículo para Memorizar “7(…porque por fe andamos, no por vista…)”. 2 Corintios 5.7 Objetivos • Concientizar a las personas de que todos los creyentes tienen una medida de fe. • Enseñar que es la fe. • Llevar a las personas a incrementar su fe. Introducción El topico de la fe es uno de los más fascinantes de la palabra de Dios; ya que es por medio de la fe que podemos agradar al Señor y, ademas, nos lleva a una total dependencia de El. Sin embargo, algunos creyentes se les hace difícil aumentar su fe, debido a que ignoran el “principio de la fe del grano de mostaza”. Alguna vez usted se ha preguntado, como creer en cosas grandes teniendo una fe del tamaño de un grano de mostaza? A continuación, vamos a estudiar como es que esto se hace posible y como convertir la fe del grano de mostaza en la fe que mueve montañas. El Mensaje para hoy. La fe del grano de mostaza Que es la fe? Muchos ya hemos estudiado el pasaje bíblico que nos da el significado de lo que es fe; pero, a veces nos cuesta trabajo, que ese conocimiento que esta en la mente, llegue al corazón. Por lo tanto, vamos a repasarlo: “1Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”. Hebreos 11.1 En otras palabras, fe es una firme persuasión; es una confianza absoluta, es una creencia incuestionable en la palabra de Dios y en las cosas que no vemos. Fe es la garantía, la confirmación, el titulo de propiedad de las promesas que esperamos de Dios. Cuando Dios hace algo, por lo general, siempre lo comienza pequeño. Pero esta en Su naturaleza que no permanezca pequeño, por lo tanto, siempre crecerá; crecerá más y más cada día, ya que todo lo que tiene vida, crece. Veamos algunas particularidades de la semilla de mostaza: • La semilla de mostaza es la mas pequeña de todas las semillas de hortalizas. • El propósito de Dios es que el grano de mostaza crezca hasta llegar a ser grande, tan grande como un árbol. • Jesus pone como ejemplo el grano de mostaza porque su árbol logra crecer de 10 a 12 pies de alto y se reproduce con gran rapidez. Esto nos indica que la fe dada por Dios a cada creyente, tiene en si, el poder o la capacidad de crecer, de incrementarse. Que es lo que hace que esta fe (este grano de mostaza) llegue a ser grande y cambie las cosas alrededor? O como podemos hacer para que esa medida de fe que cada creyente tiene, se desarrolle? Por medio de escuchar la palabra de Dios continuamente. “17 Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios”. Romanos 10.17 Es interesante la definición de la palabra oír. Esta palabra, en el idioma griego, esta escrita en un presente continuo, oír continuamente. Esto significa que para que nuestra fe se desarrolle, debemos oír, meditar y vivir continuamente la palabra de Dios. Si esto ocurre, nuestra fe crecerá y seremos “gigantes en la fe”. Todo lo que Dios hace, tiene que crecer: el negocio, el amor por la familia, el amor a Dios, nuestro ministerio, nuestras finanzas, nuestra paciencia, etcétera. Hay diferentes tipos de fe; dentro de los cuales, se encuentra los siguientes: • La fe salvadora. Se recibe en el momento que somos salvos, es una fe que actúa para que el pecador pueda recibir a Jesus (pues, por si mismo no podría). • La fe general o la medida de fe (como la semilla de mostaza); don de fe dado a todos los creyentes. • La fe como fruto del Espíritu Santo (el don más grande entre los dones de poder). La fe como una semilla de mostaza tiene que ser del Reino de Dios. Tiene la fuerza del Reino, el poder del Reino. Usted puede ver “el grano pequeño” y decirle: “tu crecerás hasta llegar a ser un árbol”. Todos los creyentes tienen una medida de fe natural. Muchas veces dicen: “quiero que alguien ore para que Dios me de fe”, pero la verdad es que Dios ya le ha dado a cada persona una medida de fe, lo que pasa es que no esta desarrollada. “3 Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que esta entre vosotros, que no tengas mas alto concepto de si que el que debe tener, sino que piense de si con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada una”. Romanos 12.3 Todos tenemos que tener la meta de tener una fe grande, aunque la palabra de Dios es clara cuando dice: “20…de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasara; y nada os será imposible”. Pero debemos incrementar nuestra fe, y para hacerlo, hay que oír la palabra de Dios de continuo, según lo mencionamos anteriormente. Ademas, debemos ser perseverantes, porque cada vez que la fe crece, el enemigo levanta un demonio, una montaña para que esta fe no llegue a desarrollarse como un árbol grande. Sin embargo, cuando usted haya perseverado, creyendo en la palabra de Dios, entonces su fe se convertirá, paulatinamente, en una fe que no esta dormida, sino que es grande y mueve montañas. Que podría ser una montaña en nuestra vida? La salud, las finanzas, el matrimonio, el carácter, etcétera. “19Viniendo entonces los discípulos a Jesus, aparte, dijeron: Por que nosotros no pudimos echarlo fuera?” Mateo 17.19 “41Respondiendo Jesus, dijo: Oh generación incrédula y perversa! Hasta cuando he de estar con vosotros, y os he de soportar? Trae acá a tu hijo”. Lucas 9.41 Cada vez que los apóstoles se movían en fe, tratando de echar fuera demonios, sanando los enfermos y predicando la Palabra poderosamente, el enemigo levantaba montañas u obstáculos. Pero ellos siguieron creyendo, y no abortaron el plan de Dios en sus vidas. Aunque usted ore por un enfermo y no se sane, aunque este creyendo por cosas que todavía no hayan llegado, siga creyendo, que su fe va en camino a ser un árbol grande que moverá montañas. Ademas de oír la palabra de Dios y de ser perseverante en lo que creemos, hay otra cosa que podemos hacer para que nuestra fe crezca: orar y ayunar. Estas son armas poderosas! Si pasamos tiempo con Dios, El hará las cosas por las que creemos en tan solo minutos. “18Por la mañana, volviendo a la ciudad, tuvo hambre. 19Y viendo una higuera cerca del camino, vino a ella, y no hallo nada en ella, sino hojas solamente; y le dijo: Nunca jamás nazca de ti fruto. Y luego seco la higuera.20Viendo esto los discípulos, decían maravillas: Como es que se seco en seguida la higuera? 21Respondiendo Jesus, les dijo: De cierto os digo que si tuviereis fe, y no dudareis, no solo haréis esto de la higuera, sino que si a este monte dijeres: Quítate y échate en el mar, será hecho.22Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis”. Mateo 21.18-­‐22 Preguntas Finales • Que es la fe? • Porque Jesus compara la fe con un grano de mostaza? • Que podemos hacer para que esa medida de fe se incremente o se desarrolle? • Mencione los tipos de fe estudiados en esta lección? • Que sucede cuando intentamos incrementar nuestro nivel de fe? • Que podría ser una montaña en nuestra vida? Aplicación • El líder deberá activar a las personas del grupo orando por ellas para que puedan incrementar su nivel de fe; enseñándoles que oren específicamente por las cosas que están pidiendo. • El líder los instara a hacer una acción correspondiente a lo que han estado esperando. Por ejemplo, si se ora por un enfermo, declarar la sanidad y empezar a hacer lo que no podía hacer; si alguien no tiene trabajo, empezar a buscarlo con la certeza de que Dios lo proveerá de manera milagrosa, etcétera. 
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