Jan Neruda (9. 7. 1834 – 22. 8. 1891) Por Alejandro Hermida de Blas Nació en Praga, en el barrio tradicional de Malá Strana, que él inmortalizaría literariamente. Era de origen proletario, circunstancia que se reflejará en su obra. Neruda no acabó sus estudios ni se casó jamás, aunque tuvo varios romances, entre ellos con la escritora Karolína Světlá. Toda su vida estuvo dominada por su carrera periodística, destacando como autor de crónicas, folletines y críticas culturales en el importante diario Národní listy (Hojas nacionales). Murió en Praga. Neruda se dio a conocer como autor en el almanaque Máj (Mayo) (1858), carta de presentación de la primera generación del Realismo checo. Su obra en prosa está íntimamente ligada a su profesión periodística: la frontera entre el folletín, el reportaje y el relato costumbrista no está muy clara en algunas de sus narraciones. Sus folletines, ingeniosos apuntes de la vida cotidiana escritos en una lengua fresca y popular, demuestran un talento considerable para la observación y la narración. El autor también transmitió a sus lectores sus impresiones de viaje por diversos países europeos y de Oriente próximo. Las prosas más literarias de Neruda están recogidas en los libros Arabesky (Arabescos) (1863, ampliado en 1880), el primer tomo de Studie krátké a kratší (Estudios breves y más breves) (1876) y, sobre todo, Povídky malostranské (Cuentos de Malá Strana) (1878). En todos ellos Neruda se muestra como autor realista, que tan pronto se inclina hacia el humor y la sátira como hacia un sentimentalismo social a lo Dickens; no falta en algunos cuentos el entusiasmo patriótico. Merecida popularidad conservan los cuentos de este último libro, dedicados a tipos característicos de su barrio natal y en los que domina el humor en sus diversas variantes: desde la ingenua o sentimental hasta la más satírica, sin olvidar algún toque de humor negro. El autor supo hacer de sus humildes personajes una parte inolvidable del imaginario popular praguense y checo. Por su tono romántico se distingue del resto el impresionante cuento erótico En "Los tres lirios" (U Tří lilií), ambientado en una tormenta de verano sensualmente descrita. A diferencia de sus cuentos y folletines, la poesía de Neruda apenas despertó interés cuando fue publicada; fueron los poetas y críticos del Modernismo quienes la elevaron póstumamente al lugar destacado que merece. Igual que el Neruda narrador, el Neruda poeta se apoya en la sencillez de la lengua popular. Aunque las antologías priman su lado más social y patriótico, el autor supo expresar una rica paleta de temas, desde los más colectivos hasta los más personales. Es notable su renovación del género de la balada, originariamente folclórico y ya cultivado por el Romanticismo. La obra poética de Neruda se publicó, con notables intervalos, a lo largo de cuatro décadas, desde los versos sentimentales y sociales de Hřbitovní kvítí (Flores de cementerio) (1858) hasta los himnos patrióticos de Zpěvy páteční (Cantos del viernes) (1896). En medio se encuentran los Knihy veršů (Libros de versos) (1868), que oscilan entre lo cívico y lo intimista; los Písně kosmické (Cantos cósmicos) (1878), ingeniosas alabanzas del progreso científico; las Balady a romance (Baladas y romances) (1883), de aire folclórico; y los reflexivos Prosté motivy (Motivos simples) (1883), ambientados en el marco simbólico de la naturaleza cambiante. Además de poeta y prosista, Neruda fue un gran organizador de la vida cultural del Realismo checo. Sus puntos de vista críticos sobre el teatro, la literatura o el arte influyeron de manera decisiva en la apertura al mundo de la cultura checa. Fue la admiración por su personalidad la que, al parecer, llevó al poeta chileno Neftalí Reyes a adoptar el pseudónimo por el que es conocido universalmente: Pablo Neruda. (Texto adaptado de Historia de las literaturas eslavas, Ediciones Cátedra, Madrid, 1997)