LECH LECHA Moralidad, Acercándose a Dios, y Abraham En la porción de la Torah Lech Lecha nosotros aprendemos como a Abraham se le ordeno el ir a la tierra la cual Dios le mostraría. Abraham fue el primer Judío. Abraham no era, sin embargo, el primero en creer en Dios. De acuerdo a nuestra tradición, había muchas personas antes de Abraham quienes creían en Dios. De hecho, aun había una yeshiva manejada por Shaim y Aver los cuales, de acuerdo a nuestra tradición, muchos de los patriarcas actualmente atendían. Melki Tzedek creía en Dios, así como aprendemos en esta porción de la Torah. Shaim creia en Dios, Chanoch creía en Dios. Noe y Adán creían en Dios. Cual era la cosa nueva que Abraham trajo a la religión la cual le permitió ser considerado ser el primer Judío? La cosa nueva de Abraham, su Kidush, fue que el proclamo que nadie podía acercarse a Dios a menos que el primero fuera moral. Para muchos, el Judaísmo es irreligioso. Que quiero decir con ello? quiero decir que el Judaísmo inicialmente no da importancia a el allegarse a Dios, el acercarse a Dios, aunque esa es la meta final. La importancia es dada primero al ser moral. Es solamente después que te has hecho moral que tú te puedes acercar a Dios. Muchas veces sucede que la religión puede tener un efecto devastador en la gente. Nosotros experimentamos esto en Texas solo hace unos anos atrás con el líder del culto David Koresh. El engaño a mucha gente. Muchos de estos eran personas educadas, muchos de ellos tenían diplomas de colegio, y muchos de ellos fueron a Harvard, pero, quienes, por querer acercarse a Dios, sintieron que ellos tenían que renunciar a sus facultades morales para con su líder, David Koresh. Cualquier cosa que David Koresh les decía que estaba bien estaba bien. Nosotros sabemos que en los tiempos antiguos había sacrificios de niños y la gente pensaba que ellos tenían que sacrificar a sus hijos para poder acercarse a Dios. Esto no es una exageración porque cuando las casas eran escarbadas en Amon y Fenicia y Carthage, ellos encontraron en todas estas casas los huesos de pequeños niños, por ello la religión, por si misma, puede llevar a efectos devastadores. En PRE-Colombia México y Sur América había también una gran cantidad de sacrificios humanos, especialmente sacrificios de niños. El nuevo asunto de Abraham era que tú tenías que primero ser moral antes de que tú pudieras ser religioso. En la porción de la Torah de la semana entrante, Vayera, nosotros aprendemos como Abraham erróneamente pensó que Dios había ordenado que el sacrificara a su hijo, Isaac. Cuando Dios le dio a Abraham el mandato que elevara a su hijo, lo cual en Hebreo podía significar sacrificar, no fue Dios quien le dijo que detuviera su mano sino un ángel de Dios. Los rabinos explican que el ángel verdaderamente era la Torah, que los sacrificios de niños era y es completamente contraria a las enseñanzas de la Torah, pues nosotros no debemos actuar inmoralmente, que Dios no nos puede pedir que hagamos cosas inmorales, que cualquier religión que nos pida que hagamos cosas inmorales es una religión falsa. Aun en nuestros propios días, nosotros decimos como el Nazismo y el Comunismo con sus falsas ideologías estaban basadas en inmoralidad. El Nazismo, por supuesto, era un movimiento Mesiánico el cual creía que podía salvar a toda la humanidad si solo pudiera destruir a todos los Judíos, que era solo porque los Judíos que el mundo estaba corrompido. Mata a los Judíos y el mundo será redimido, decían los Nazis. Por ello, ellos adoptaron, esta terrible, y vil filosofía que si ellos solo pudieran erradicar al pueblo Judío, el mundo seria perfeccionado. El Comunismo, inicialmente, tenia una buena filosofía: cada uno de acuerdo a su habilidad, a cada uno de acuerdo a su necesidad, pero ellos sintieron que para poder llevar a cabo sus metas ellos podían hacer lo que querían y Stalin mato 20 millones de personas en el deseo de establecer las metas del Comunismo. Para que nosotros poder allegarnos a Dios, nosotros primero debemos ser morales. Nosotros no podemos ser religiosos si somos inmorales. Eso, por supuesto, es a lo que los profetas se estaban oponiendo. Había muchas personas en el Israel antiguo quienes pensaban que si tu traías un sacrificio a Dios era para reparar tu injusto actuar hacia los pobres y los inocentes. Esto es paganismo. Esto no es Judaísmo. Siempre ha habido dos distintas mentiras en el Judaísmo. La primera mentira es que yo no tengo que ser moral. Todo lo que yo tengo que hacer son actos rituales y todo estará bien. De hecho, los profetas aun se opusieron a la oración como un acto ritual. Las personas que piensan que pueden maltratar al pobre, hacer daño a las personas, sobornar a los jueces y después hacer donaciones a instituciones religiosas con dinero que ellos ganan injustamente y ese dinero es considerado dinero santo, ellos están totalmente equivocados. Ese dinero es inmoral, no dinero santo, y es una travestía. Lo mismo aplica a la gente quien siente que ellos pueden robar a la gente y luego orar a Dios y Dios los va a perdonar. Dios no los perdonara a menos que ellos primero desistan de sus prácticas inmorales de robar a la gente y dañar a la gente. La segunda mentira, por supuesto, es que todo el Judaísmo es moralidad. Eso, por supuesto, no es verdad. Después que nosotros somos morales, eso es solo el primer paso. Entonces nosotros tenemos que tratar de acercarnos a Dios. A menos que nosotros queramos acercarnos a Dios, la vida será vacía para nosotros, pero primero nosotros tenemos que ser morales. En la porción de la Torah de esta semana, uno de los temas principales es quien iba a sustituir a Abraham. Al principio Abraham pensó que Lot, su sobrino, iba a sustituirlo. Lot fue un hombre quien se veía exactamente como Abraham. El además fue un hombre quien guardo muchos principios religiosos Judíos. El era extremadamente hospitalario. El guardo Pesaj y muchas de las leyes y rituales, pero el era un ladrón. El era una persona quien estaba interesada solo en el dinero. El era un hombre de negocios exitoso quien hacia lo que fuera por el dinero. El estaba dispuesto a ir a un lugar como Sodoma y Gomorra, la cual el sabia que podía ser peligrosa para sus hijos, porque allí el podía ganar dinero. A el no le importo que sus hijos tuvieran una educación Judía y, por ello, Lot no estaba capacitado para ser el sucesor de Abraham. Entonces Abraham pensó que su sucesor seria Eliécer, su siervo, pero Eliécer no podía ser su sucesor ya sea por que Eliécer solo sabia como seguir ordenes, y nosotros sabemos que tan devastador eso es en la esfera moral y religiosa. Esa fue la plegaria de Eichmann, “Yo solo estaba siguiendo ordenes.” En el Judaísmo tu estas supuesto a cuestionar aun a Dios. Eso fue lo que Abraham hizo cuando Dios le dijo que El iba a destruir las malvadas ciudades de Sodoma y Gomorra. Abraham le suplico por la gente justa allí. “Acaso el Juez de todo el mundo no hará justicia?” todos nosotros somos llamados a alegar con Dios. Nosotros estamos supuestos a cuestionar todo. Nosotros no estamos supuestos a tener una religión que solo tiene que obedecer ordenes. Nosotros estamos supuestos a ver las cosas cuidadosamente y cuestionar si son morales y justas y correctas. Ultimadamente, por supuesto, Dios solo nos puede pedir que hagamos cosas que son ultimadamente justas y correctas. Dios no nos puede pedir que hagamos cosas inmorales. Nosotros creemos que Dios esta atado por su propia moralidad. Cualquiera que ha ido a una yeshiva y ha tenido una educación Judía sabe que lo más importante no son las respuestas. Lo mas importante son las preguntas. Siempre y cuando el pueblo Judío pregunte las mismas preguntas, entonces el pueblo Judío sobrevivirá. Y las preguntas no son, como puedo obtener una casa mas grande, o como puedo obtener una piscina mas bonita, pero las preguntas son, que es lo que Dios esta demandando de mi? Como puedo yo hacer este un mundo mejor? Como puedo yo ayudarle a Dios a redimir y perfeccionar este mundo? Siempre y cuando nosotros estemos haciendo estas preguntas, entonces el Judaísmo será una fuerza viable en el mundo. En la yeshiva, el buen estudiante, el estudiante sobresaliente es uno que sabe como preguntar preguntas, no el que puede responder las preguntas necesariamente. Eliécer no podía sustituir a Abraham porque el era solo un siervo, solo un obedecedor de ordenes. Después Abraham pensó que Ismael lo remplazaría, pero Ismael era un hombre salvaje. El no hizo lo mismo que Lot. El no racionalizaba y pretendía que el mal era lo bueno y tratar de hacer todo solo para ganar dinero. Ismael sabia lo que era el mal y el bien, pero el era un hombre salvaje y su mano estaba contra todos y la mano de todos estaban contra el. Todo en lo que el estaba interesado era hacer lo que el quería. Cualquier cosa que el sentía hacer, era lo que el quería hacer. Esto es similar a lo que muchos sienten hoy en América, que, “Yo debo tener la libertad para hacer lo que quiero hacer. Lo que sea que me haga feliz, eso es lo que yo debo poder hacer, no importa a quien lastime.” Eso, por supuesto, no es una persona moral y decente. Hay muchas personas que abandonan a sus familias y a sus hijos porque ellos quieren hacer lo que ellos quieren hacer. Ellos no quieren asumir sus responsabilidades. Ellos no quieren actuar moralmente. Ellos no quieren actuar justamente, por ello estas personas no podían sustituir a Abraham. El único que podía sustituir a Abraham era Isaac. Isaac en Hebreo también significa risa. Isaac tenía un buen sentido de humor. Para poder actuar moralmente, muchas veces tú tienes que olvidar esto por eso. Tú tienes que ver todo el panorama. Tú no tienes que mirar si vas a ser un éxito instantáneamente. Tú tienes que poder reírte de ti mismo y preocuparte de ser una bendición. Eso es de lo que tú te tienes que preocupar, y eso, por supuesto, es lo que a Abraham se le dijo en el principio de esta porción de la Torah cuando a el se le dijo que dejara la tierra de sus padres. Dice, “Y tu serás una bendición.” Aun es más importante ser una bendición que ser un éxito. Abraham vino a la tierra de Canaan, los rabinos dicen, para proclamar los ideales del Judaísmo. Ellos lo comparan a una caja de especias cual olor y aroma puede solo ser sentido si ellos son meneados. Pero cuando Abraham vino a la tierra de Canaan, la gente de allí pensó que el era de mala suerte, no un anunciador de maravillosas noticias, porque cuando el vino a Canaan, una hambruna azoto inmediatamente. Abraham tuvo muchas derrotas. Por una hambruna el tuvo que ir a Egipto. Cuando el fue a Egipto, ellos tomaron a su esposa, y después cuando el regreso a la tierra de Canaan, el tuvo problemas con Lot y Abimeleck, toda clase de problemas. El entendió que es más importante ser una bendición que ser un éxito. Ultimadamente, si tu eres una bendición tu serás un éxito, también, quizás no en términos monetarios pero en otros términos. Por ello, lo más importante en la vida es ser una bendición. Nosotros solo podemos ser una bendición si nosotros actuamos moral y decentemente y tenemos cuidado de las personas a nuestro alrededor. Nosotros no seremos una bendición si nosotros tomamos desvíos morales para ser un éxito. Si, a veces el éxito moral puede eludirnos, entonces porque nosotros hemos decidido ser una bendición y no tomar los desvíos morales como Lot lo hizo. Nosotros no solo debemos tomar órdenes como Eliécer lo hizo, o tratar de despilfarrar o tratar de revolcarnos con nuestras fantasías, como Ismael lo hizo. Para poder verdaderamente ser un sustituto de Abraham, nosotros primero tenemos que ser morales antes que nosotros podamos ser algo más. A menos que nosotros seamos morales, nosotros ni siquiera podemos acercarnos a Dios. Yo recuerdo la historia que dicen de un hombre quien llego a su casa y fue recibido por su esposa quien lo vio y le dijo, “Te tengo buenas noticias y malas noticias. Cual quieres escuchar primero?” “Dime las buenas noticias primero.” Su esposa dijo, “La bolsa de aire trabaja.” En cierto sentido, Dios es nuestra bolsa de aire. El nos salva de muchos diferentes tipos de catástrofes, pero El no nos asegura éxito solo porque nosotros tratamos de ser una bendición. Todo lo que El nos asegura es que El nos dará las fuerzas para vencer nuestros problemas, pero El nunca dijo que nosotros no tendríamos problemas. Es nuestro trabajo tratar de ser una bendición y no tratar de tomar algún tipo de desvió para triunfar. Si nosotros verdaderamente somos una bendición, entonces nosotros verdaderamente cumpliremos el mandato de nuestro padre Abraham y vamos a poder acercarnos a Dios y verdaderamente ayudar a traer al Mesías. Amen.