Documento descargado de http://www.elsevier.es el 19/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. RESÚMENES sional convencional de la PAS y la PAD o carecemos de suficiente información sobre el papel de las asociaciones antihipertensivas en la mejora de la PP. E. Vinyoles Variabilidad tensional y riesgo cardiovascular Antecedentes. Todavía no se ha aclarado el papel pronóstico de la variabilidad tensional como variable independiente en el hipertenso tratado. Los autores han evaluado la relación entre la variabilidad tensional y eventos cardiovasculares, mediante monitorización ambulatoria de la presión arterial (MAPA) no invasiva en hipertensos con tratamiento farmacológico. Métodos. Se evaluaron eventos cardiovasculares fatales y no fatales en 1.472 pacientes tratados. La MAPA se programó cada 15 minutos durante el día y cada 30 minutos por la noche. Se clasificó a los pacientes en sujetos con elevada o baja variabilidad tensional, según estuvieran los valores de las desviaciones típicas de las presiones sistólicas diurnas o nocturnas por encima o por debajo de la media de la muestra, respectivamente. En concreto, 738 y 734 pacientes respectivamente tenían baja y elevada variabilidad tensional diurna y 739 y 733 sujetos presentaban baja y elevada variabilidad nocturna, respectivamente. Resultados. A lo largo del seguimiento (4,88 ± 2,9 años; rango: 0,2-11,6 años) se dieron 119 eventos. La tasa de eventos por 100 pacientesaño en sujetos con baja y elevada variabilidad tensional diurna fueron 1,18 y 2,01, respectivamente, y en los sujetos con baja y elevada variabilidad noctura fueron 1,2 y 2,05, respectivamente. La supervivencia libre de evento fue significativamente distinta entre los grupos de reducida y elevada variabilidad (p = 0,006 para ambos períodos, diurno y nocturno). De todas formas, tras ajustar para otras variables en el análisis multivariante de Cox, el mal pronóstico asociado a una elevada variabilidad perdió su significación, aunque la edad, el tabaquismo, el colesterol ligado a lipoproteínas de baja densidad (c-LDL), la diabetes, los eventos previos, la hipertrofia ventricular izquierda y los valores tensionales sistólicos medios diurno y nocturno se mantuvieron como variables predictoras independientes de riesgo. Conclusiones. El incremento de variabilidad tensional se asocia tanto con una mayor incidencia de eventos cardiovasculares, como con otros factores pronósticos relevantes. Sin embargo, en el análisis multivariante el impacto del posible efecto pronóstico negativo de la variabi42 lidad tensional no se mantiene. Por ello, en los hipertensos tratados la variabilidad tensional evaluada mediante registros no invasivos no es un factor predictor independiente de eventos cardiovasculares. Pierdomenico D, Lapenna R, Di Tommaso S, Di Carlo A, Esposito R, Di Mascio E, et al. Blood pressure variability and cardiovascular risk in treated hypertensive patients. Am J Hypertens. 2006;19:991-7 Comentario Los valores de las desviaciones típicas de las medias de los períodos de 24 horas, diurno y nocturno, nos informan de la variabilidad tensional. A mayor desviación típica de la media de presión ambulatoria, mayor variabilidad, mayor dispersión de las lecturas y parece que mayor riesgo cardiovascular. Pueden considerarse elevadas las variabilidades de 24 horas superiores a 18 mmHg o a 15 mmHg para la presión arterial (PA) sistólica y diastólica, respectivamente. El análisis riguroso de la variabilidad tensional es preferible realizarlo con equipos pletismográficos (PA latido a latido) o, en su defecto, con oscilométricos programados para determinar la PA cada 10 minutos o para obtener, como mínimo, 6 lecturas por hora. Sin embargo, en el Estudio Ohasama la variabilidad obtenida con lecturas cada 30 minutos por MAPA fue predictora de mortalidad cardiovascular en población general a partir de desviaciones típicas diurnas superiores a 15 mmHg. En aquel mismo estudio se observó que si se combinan una elevada variabilidad tensional con una reducida variabilidad de la frecuencia cardíaca el riesgo cardiovascular es todavía mayor. La mayoría de estudios publicados hasta la fecha engloban en las muestras hipertensos tratados y no tratados. En el presente estudio de Pierdomenico et al se evalúan exclusivamente hipertensos en tratamiento farmacológico. En este caso, tras el análisis de regresión, la variabilidad tensional no es una variable independiente de evento cardiovascular. Sin embargo, los puntos de corte de las desviaciones típicas que separan el grupo de elevada variabilidad del de reducida variabilidad son 12,6 y 9 mmHg para la PA diurna sistólica y diastólica, respectivamente. No sabemos cuál habría sido el resultado si se hubieran comparado ambos grupos a partir de puntos de corte de desviaciones típicas de al menos 15 mmHg. En otras palabras: hay una cuestión que no contesta el artículo, pero que, probablemente, con un reanálisis de los datos podría plantearse: ¿a partir de qué punto de corte de la desviación típica la variabilidad tensional aparece como variable predictora independiente? Otras cuestiones quedan todavía sin respuesta: ¿cuál o cuáles son los grupos antihipertensivos Hipertensión (Madr.). 2007;24(1):41-4 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 19/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. RESÚMENES que pueden reducir la variabilidad tensional? ¿Una reducción de la variabilidad tensional se traduce en una mejora del pronóstico cardiovascular? ¿Cuál es la concordancia entre la variabilidad tensional medida oscilométricamente con la medida latido a latido? Como es habitual para contestarlas se necesitan nuevos estudios. E. Vinyoles Factores determinantes de la reducción de la excreción urinaria de albúmina en la hipertensión arterial esencial El objetivo de este estudio prospectivo fue analizar los factores relacionados con cambios a largo plazo de la excreción urinaria de albúmina (EUA) en pacientes hipertensos no diabéticos con microalbuminuria (n=252) o proteinuria (n=58). Tras la inclusión en el estudio los pacientes recibieron el tratamiento habitual, incluyendo medidas no farmacológicas y un esquema de tratamiento antihipertensivo, con el objetivo de reducir la presión arterial por debajo de 135/85 mmHg. Se realizaron determinaciones periódicas de la EUA hasta la regresión o una reducción significativa (definida como una disminución de la EUA >50% de sus valores iniciales, además de una reducción de la EUA <30 mg/24 h en pacientes con microalbuminuria y < 300 mg/24 h en aquellos que presentaban proteinuria). Entre los pacientes microalbuminúricos, 113 (44,8%) mostraron una reducción significativa de la EUA tras un seguimiento medio de 18 meses (rango: 12-69 meses). Entre los pacientes con proteinuria, 29 (50%) presentaron una reducción significativa de la EUA tras un seguimiento medio de 25 meses (rango: 12-51 meses). El análisis de regresión de Cox mostró que la tasa de filtración glomerular al inicio del seguimiento, los niveles de presión arterial diastólica y la glucemia basal durante el seguimiento fueron factores independientes relacionados con la regresión o reducción significativa. La regresión de la EUA se relacionaba de forma independiente con la presencia de una tasa de filtración glomerular al inicio ≤ 60 ml/min/1,73 m2 (hazard ratio: 0,57; IC 95%: 0,38-0,86; p = 0,001) y unos niveles de presión arterial diastólica ≥ 90 mmHg durante el seguimiento (hazard ratio: 0,57; IC 95%: 0,38-0,86; p = 0,001) tras el correspondiente ajuste para edad, sexo, índice de masa corporal, glucemia basal, presencia de tratamiento al inicio del seguimiento y tratamiento con inhibidores de la enzima de conversión de angiotensina o bloquean- tes de los receptores de angiotensina durante el seguimiento. Por tanto, se concluye que la reducción de la EUA se relaciona con la presencia de una tasa de filtración glomerular preservada y con un adecuado control de la presión arterial. Pascual JM, Rodilla E, Mirallesa A, González C, Redón J. Determinants of urinary albumin excretion reduction in essential hypertension: a long-term follow-up study. J Hypertens. 2006;24:2277-84. Comentario A pesar de su relevancia como marcador del desarrollo de lesión de órganos diana y de riesgo cardiovascular, los cambios en la EUA relacionados con el tratamiento antihipertensivo han sido estudiados fundamentalmente a corto plazo, mientras que la modificación de dicha EUA a largo plazo en pacientes hipertensos no ha sido muy estudiada. Recientemente se han descrito los factores relacionados con el desarrollo de microalbuminuria en pacientes hipertensos tratados farmacológicamente. De hecho, en presencia de hipertensión grado I, se ha observado que el desarrollo de microalbuminuria se relaciona con un insuficiente control de las cifras tensionales y con un incremento progresivo de la concentración plasmática de glucosa. Sin embargo, la información sobre los cambios de la EUA a largo plazo es escasa y la idea preestablecida de que la presencia de albuminuria es el primer paso hacia la lesión orgánica irreversible y la insuficiencia renal puede no ser cierta en pacientes hipertensos. El conocimiento de los factores que determinan los cambios de la EUA a largo plazo pueden contribuir a considerar dicha EUA no sólo en el momento de estratificar el riesgo del paciente hipertenso, sino también ser útil a lo largo del seguimiento. De hecho, algunos autores propugnan que la EUA puede ser una herramienta útil para monitorizar el adecuado manejo del riesgo cardiovascular global del paciente hipertenso. Además, este estudio ha mostrado que la mitad de los pacientes hipertensos con una EUA inicialmente elevada pueden presentar reducciones significativas, especialmente en presencia de una función renal preservada. Teniendo en cuenta que la presencia de microalbuminuria o proteinuria y una tasa de filtración glomerular disminuida son indicadores de un tiempo de evolución prolongado, la existencia de albuminuria en presencia de función renal normal debe ser considerada como una señal precoz de la necesidad de una intervención rápida, dirigida a mejorar la protección orgánica frente a la hipertensión. Hipertensión (Madr.). 2007;24(1):41-4 J. Segura 43