Un repaso a las fases de la Luna Un repaso a los eclipses de Sol… Durante las fases Llena y Nueva pueden tener lugar eclipses … y a los de Luna El tiempo que emplea la Luna en completar una órbita alrededor de la Tierra con respecto a las estrellas fijas es el mes sidéreo, cuya duración es de 27.32 días. Por otra parte, el tiempo que la Luna emplea en volver a una misma fase (por ejemplo, el tiempo transcurrido entre dos fases llenas o dos fases nuevas), es el més sinódico, cuya duración es de 29.53 días. También puede verse como el tiempo transcurrido entre dos configuraciones idénticas Sol – Tierra – Luna consecutivas. La diferencia entre el mes sidéreo y el sinódico radica en que la Tierra se mueve alrededor del Sol (y la Luna con ella). Día 29,53 Para que tenga lugar un eclipse, la Luna ha de alcanzar la fase llena o nueva en uno de sus nodos, durante la llamada estación de eclipses, que tiene lugar cada 5 – 6 meses. Día 27,32 5,1º Nodo Día 0 Línea de los nodos La inclinación de la órbita de la Luna con respecto a la eclíptica es de 5,1º, por eso no hay eclipses durante todas las fases llenas y nuevas. Llamamos mes draconítico al tiempo que transcurre entre dos posiciones consecutivas de la Luna en un mismo nodo. Su duración es de 27,21 días. 1 Por último, para que dos eclipses tengan la misma apariencia y duración, la Luna ha de encontrarse a la misma distancia de la Tierra en ambos (recordemos que la órbita de la Luna es una elipse). Supongamos que se produce un eclipse determinado; para que vuelva a producirse un eclipse idéntico ha de coincidir: - Que transcurra un número entero de meses sinódicos, de manera que la Luna vuelva a la misma fase (llena o nueva). Apogeo (406.000 km) Perigeo (356.000 km) - Que transcurra un número entero de meses draconíticos, ya que la Luna ha de estar en un nodo para que haya eclipse. - Que trancurra un número entero de meses anomalísticos, ya que la Luna ha de estar exactamente a la misma distancia de la Tierra. El mes anomalístico es el tiempo que la Luna emplea entre dos posiciones consecutivas en su órbita a la misma distancia de la Tierra. Pues bien, cada 6585.322 días (18 años y 11.322 días), ocurre que transcurren un número entero de meses sinódicos (223), draconíticos (242) y anomalísticos (239), digamos que todo vuelve a empezar de nuevo y se repite un eclipse idéntico. Esos 18 años y 11.322 días es un Saros… El hecho de que el Saros no sea un múltiplo exacto del día, sino que contiene 0.322 días, hace que de un eclipse a su homólogo en el Saro siguiente o anterior, la Tierra no complete una rotación exacta sobre si misma y por lo tanto el eclipse no se vea desde las misma regiones en la Tierra, sino 120º (1/3 de rotación) más al Este que el anterior (cada 3 saros, 54 años y 34 días sí se repite, un Exeligmos). 2