Un alivio que tardó 54 años

Anuncio
57
LATERCERA Sábado 7 de febrero de 2015
Deportes
Fútbol
Esta semana se conoció el hallazgo de nuevos restos del avión DC-3 Nº 210, de LAN, que transportaba a
los jugadores de Green Cross. La noticia es celebrada por los compañeros de los fallecidos, quienes creen
que por fin se podrá cerrar un ciclo doloroso, que aún contiene muchos misterios.
Por Williamson Catalán Maldonado y Carlos González Lucay
Un alivio que tardó 54 años
OO La portada de La Tercera
informa sobre las dificultades
para acceder a los restos.
FOTO: GRUPOCOPESA
QQ De esta imagen, sólo cuatro
A
lfredo Gutiérrez
estaba viendo televisión cuando
se enteró de la
noticia. Han pasado más de 50
años del episodio, pero las sensaciones fueron
prácticamente las mismas: asombro, angustia y, de una manera
muy compleja, gratitud.
El miércoles 4 de febrero, sentado en el living de su hogar, supo
que los restos del avión en el que
debió morir en 1961 habían sido
encontrados en Linares. De un momento a otro, el recuerdo de Héctor Toledo, con quien intercambió
pasajes aquel fatídico 3 de abril,
irrumpió nuevamente.
De no ser por ese trueque, los
restos recientemente encontrados, quizás, serían hoy su secreto
mausoleo. De allí probablemente
proviene esa noción de agradecimiento; de no haber subido a ese
avión, de estar vivo, de continuar
junto a su esposa.
“Para mí fue una sorpresa el hallazgo, porque creía que eso lo habían encontrado hace 54 años.
Imagínate, yo debí haber ido en ese
avión, debí haber muerto en esa
nave y, sin embargo, estoy acá,
enterándome de todo esto”, confiesa quien fuera delantero del extinto Green Cross.
En Linares, a 3.200 metros de altura, los montañistas Leonardo
jugadores se salvaron de morir:
García, Sepúlveda, Maturana y
Díaz. FOTO: GRUPOCOPESA
Albornoz y Lower López encontraron lo que por cinco décadas no fue
más que una leyenda de la zona: el
fuselaje de la aeronave que, en
1961, se estrelló con ocho jugadores y el DT de los Pijes a bordo.
Pero el descubrimiento no fue al
azar. Ambos andinistas crecieron
cerca del sector en que se produjo la desgracia y, por lo mismo, lo
conocen a cabalidad. De hecho, la
de febrero era la tercera incursión
que hacían a la montaña, luego de
aproximaciones realizadas en enero y abril del año pasado.
Aun así, pese al convencimiento
que mantenían de encontrarse con
los vestigios de la aeronave, no
dejaron de sorprenderse. “Yo pensé que el avión iba a estar completamente desintegrado, pero encontramos gran parte del fuselaje.
Fue conmovedor y emotivo”, reconoce Albornoz.
Green Cross, campeón chileno
en 1945, dejó de existir hace 50
años, cuando se trasladó desde
Santiago hasta la Novena Región,
para fusionarse con Deportes Temuco. Pero quienes defendieron
su camiseta se han encargado de
mantener vivo el recuerdo de los
que fallecieron en la cordillera.
Santiago García, quien se desempeñara como lateral derecho en la
década de los ‘60, cree que con
este escenario se comienza a poner
fin a un ciclo. “Se cierra una etapa, ya que siempre quedó la duda
REACCIONES
“Se cierra una etapa (...). Lo
que se llevó a las urnas
fueron muy pocos restos
reales de las víctimas”.
Santiago García
Ex jugador de Green Cross.
“Me llamaron familiares de
tres víctimas. Estaban
contentos y emocionados.
Nos dieron las gracias”.
Leonardo Albornoz
Montañista.
“Sería bonito que los restos
fueran exhumados, para
poder determinar a quiénes
corresponden”.
Carlos Al-Konr
RR Uno de los expedicionistas contempla los restos de la hélice
Ex jugador de Green Cross.
del avión siniestrado. FOTO: LEONARDO ALBORNOZ
de dónde estaban los demás restos.
Lo que se llevó a las urnas fueron
muy pocos restos reales de las víctimas”, comenta.
Es allí, en el círculo familiar de los
desaparecidos, donde seguramente golpea más fuerte este suceso.
Está la esperanza de, ahora sí, poder realizar los funerales que sus
seres queridos se merecen. “Me
llamaron familiares de tres víctimas. Estaban contentos y emocionados. Nos dieron las gracias y los
vamos a ayudar en lo que necesiten”, confiesa Leonardo Albornoz.
En tanto, Carlos Al-Konr, jugador que no viajó, por estudios,
propone un acto de simbolismo
puro: “Sería bonito ir y hacer un
homenaje en el lugar del último
hallazgo. Pero lo que también sería bonito es que los restos de personas sepultadas hace 54 años se
exhumaran, para poder determinar a quién corresponden, porque
eso les daría la posibilidad a los familiares de lograr tranquilidad”.b
Descargar