especial

ESPECIAL
AZA3ACHE
2013
1
dirección editorial
Luis Mazzarello
concepto de diseño
2GYUNAERRE
diagramación
Luis Mazzarello
2
índice
3. AZABACHE: EUSEBIO Y EL NENE por KIKE FERRARI Y CARLOS ZANON
7. ULTIMO RELATO DE GUERRA por JUAN CARRA
9. UN COMUNISTA EN CALZONCILLOS - CLAUDIA PIÑEIRO
10. DOMINGO NEGRO por JUAN GUINOT
14. PREMIO NOVELA AZABACHE 2013
15. CRONICA BOXISTICA A CARGO DE ORESTES VALDENEGRO
por JUAN MARCOS ALMADA
26. FANTASY AZABACHE por VICTORIA BAYONA
31. LA PASTA DE NIELSEN por LUIS MAZZARELLO
33. 4 NUEVAS NOVELAS 4
CARRA - ALMADA - OJEDA - CORREA
35. ORGANIZADORES
CHIABRANDO - DEL RIO
A
W
AZABACHE: EUSEBIO Y EL NENE
Habla Kike:
por KIKE FERRARI y CARLOS ZANON
s
o
l
r
a
C
Kike y
No conocí a Carlos Zanón en mi viaje a la Semana Negra del 2011, cuando
sí me crucé con casi todos los demás de la legión española: Cristina Fallarás,
Willy Uribe, Pedro de Paz, Juan Ramón Biedma, Toni Hill, Javier Márquez
Sánchez, Jerónimo Tristante.
Y tampoco tengo sus novelas, aunque varios amigos me recomendaron mucho
su Tarde mal nunca. Lo leí sí, en Sigueleyendo. Incluso publiqué un texto suyo
sobre Jim Thompson en mi blog, hace ya dos años.
Tuve la oportunidad de conocerlo recién ahora, la semana pasada, en el Festival
Azabache, un evento que es, como la Semana Negra, una fiesta de la literatura y
la camaradería. Charlamos en La Casualidad, entre sanguchitos de carne y vasos
de vino, casi exclusivamente de literatura: de nuestro amado Jim Thompson y el
concepto de la amistad en Salgari.
Como escritores replicamos las historias que nos conmvieron de críos, dijo Carlos
en un momento.
Esa misma tarde compartimos una mesa. Triple presentación: el nuevo libro de
Fernando López, la edición argentina de mi novela Lo que no fue y la antología
Charco Negro donde hay un cuento de Carlos y también uno mío, Cruz rota, mi
primer incursión en lo fantástico.
También es fantástico lo que va a pasar.
3
r
Por problemas con la importación de
papeles no tengo ejemplares de la novela. Entonces, entre cervezas, cuento
el origen de Lo que no fue.
Corría el 2004 y yo trataba de escribir
una novela policial que s ucediera en
torno a Trotsky, entre el primer y fallido atentado y el segundo y definitivo.
Entre abril y agosto de 1940. Tenía la
trama, los personajes, el asesino, el
arma, el desenlace. Sólo me faltaba el
personaje de ficción (el investigador)
que me permitiera contar la historia
que tenía ganas de contar.
Entonces empecé a delinear a ese
personaje, Miguel el Nene Echeverría:
segundo hijo de inmigrantes anar-
CARLOS ZANON
KIKE FERRARI
ClausVonBraie
quistas, mamá violinista, papá panadero; militante de la reforma universitaria (sin ser universitario) y del
marxismo libertario de principios de
siglo XX; luego periodista, boxeador,
trotamundos, llega a España durante
el proceso revolucionario tras los pasos de un amigo... Y ahí me quedé.
A la mierda Trotsky, México y la novela policial. Escribí otra novela. Sucede
en Barcelona, durante los hechos de
mayo del 37. Habla de la amistad, las
esperanzas perdidas y la identidad.
Sobre todo la identidad, de qué estamos hechos.
La terminé el 9 de julio de 2007, la
tarde que nevó en Buenos Aires.
4
AZABACHE: EUSEBIO Y EL NENE
por KIKE FERRARI y CARLOS ZANON
Cuento que en 2009 la premió Casa de las Américas y que al año siguiente salió
publicada en Cuba. Digo que en un par de semanas va a estar disponible acá.
Finalmente leo un fragmento. Y entonces la magia del Azabache: la literatura,
casualidad y lo fantástico.
Miro a Carlos -mi primo Carlos de ahora en más- tiene los ojos brillantes.
Pero mejor se los cuenta él.
Habla Carlos:
s
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C
y
Kike
Leí a Kike en Sigueleyendo: la tabla de surf con que Cristina Fallarás se ha
empeñado en demostrar que el Atlántico es una ola. Estuve cuando lo premiaron
en Gijón en el 2012 y no pudo estar. Alguien leyó un texto suyo. Fue emocionante.
Nunca antes había visto a mi primo.
Y entonces ocurrió.
Escuché lo que estaba leyendo Kike y no podía creerlo. Es difícil saber porque hay
gente que se te incrusta en el corazón y otras no. Yo perdí a mi abuelo a lo 11 años.
Ha sido la persona que más he querido en mi vida. Y tampoco entiendo ni es justo
porqué siento eso por él y no por otros de mi entorno que me han dado más, que me
han cuidado y me han sacado adelante. Pero es. Había algo en él que era verdad.
Que no tenía nada que ver con que fuera mi abuelo, sino con lo que transmitía. Con
lo que los demás contaban de él y que Eusebio nunca afirmaba ni desmentía.
5
AZABACHE: EUSEBIO Y EL NENE
por KIKE FERRARI y CARLOS ZANON
Me hubiera sentido atraído por él del mismo modo si hubiera sido un vecino o
un maestro. Tenía algo que ver con que era un tipo al que habían roto pero no
vencido. Que seguía creyendo en lo que creía. Que sabía que jamás puedes fallar
a los tuyos. Ese tipo de cosas. Era natural de Toledo,de donde huyó en cuanto
estalló la Guerra Civil, siendo un crío con mi abuela. Con diecisiete años llegó
con ella a Barcelona donde nació un año después mi madre. Perdió la guerra.
Él y sus hermanos. Martín que era activista dela CNT y Francisco a quien le decían
El Ruso porque años después fue a luchar al Frente Soviético. Cuando no regresó
el apodo pasó a mi abuelo. Eusebio estuvo represaliado en España y en Francia
por un total de 14 años. Pero mi abuelo era mi abuelo. Y los que habían ganado
eran pequeños a su lado. Lo sentía así. Y mucho más con el paso del tiempo.
Cuando Kike decía que el tema de su libro era el de la identidad, supe que quería
decir. Algo intangible que va más allá de dónde has nacido, a quien has amado, la
bandera a la que has jurado obedecer. Era algo más como saber quién se es.
Y serlo más allá de todo lo demás. Ser quién eres a pesar de que perderás casi
todo. Las guerras, la paz y todos los putos armisticios que quedarán en medio.
Kike seguía leyendo. Su protagonista, El Nene, era un comunista desorientado.
Que lo envían al frente de Lérida y le están curando la amputación de los dedos
pequeños del pie izquierdo. Mi abuelo en medio de la guerra fue un comunista
desorientado que lo envían al frente de Lérida y Aragón con la Quinta del Biberón
(llamada así por el reclutamiento desesperado de los más jóvenes, inexpertos y
bisoños). Regresó por la amputación de dos de sus cinco dedos del pie. Puestos a
ser fiel a la verdad, el pie era el derecho.
¿Qué había pasado? ¿Qué era
todo aquello? Algo que tiene que
ver con el lenguaje vivo de los
muertos que hablan a través de
nosotros. Los escritores son la
lengua de su tribu, de su gente,
sean estos los que sean. Me da
igual. Creo que a Kike también.
Es por eso que a partir de ahora
es mi primo, porque me da la
gana.
Eusebio y el Nene. Vaya par de
tipos.
Ya no salimos así.
O quizás sí, qué cojones.
6
JUAN CARRA
ULTIMO RELATO DE GUERRA
Claaula
sVgramilla.
onBraierLas manos frías abrazan el metal más frío
El pecho pegado
del arma. La máscara que asfixia. El sol cae casi perpendicular. Repto.
Trato de alcanzar el objetivo. Cuatro de los míos van por otro lado. Ellos
son cinco. Esperan. Custodian el colectivo desvencijado. Están ocultos
detrás de los árboles. Nosotros, el ejército rojo, somos los que avanzamos.
Nuestro deber es volar por los aires su guarida. Ellos, los verdes,
estáticos, vigilan. Deben defenderla. A mí me toca atacar por uno de los
flancos. Mientras: Ricardo Romero, Iñaki Echeverría y Juan Guinot
llevan la bomba. Enzo Maqueira cierra la tenaza por la izquierda. Es el
señuelo.
Desde donde estoy escucho los disparos. No puedo distinguir de quién es
el fuego. Pero intuyo que son ellos: Carlos Marcos, Kike Ferrari, Santiago
Fernández Subiela, Marcelo Guerrieri y Santiago Maisonnave. Quieren
detener la embestida con una cortina de balas. Se escucha la muerte. Cae
uno, después otro. De un bando y del otro. Yo espero.
El plan trazado por el comandante Romero dice que ellos avanzarán en
abanico, al amparo de los árboles y acercarán la bomba al objetivo.
Entonces será mi turno. Saldré de los pastos y amparado en la ráfaga de
los míos, tomaré la bomba y cumpliré el objetivo. Esa es la teoría trazada
en el mapa del campo de batalla. Una más de las tantas a las que Romero
nos tiene acostumbrados. Somos carne de cañón en pos de un objetivo.
Pero es nuestro comandante. Y por más que las balas duelan, seguiremos
sus órdenes.
7
ULTIMO RELATO DE GUERRA
JUAN CARRA
El tiempo pasa. Se oye el impacto seco de cada bala en los
cuerpos. Guinot descarga ráfagas cortas pero efectivas.
Maqueira grita su muerte. También Guerrieri. Segundos antes
Echeverría –sniper de carrera– lo tuvo en la mira. Como ahora
Fernández Subiela aparece en la mía. El dedo se desliza hacia el
gatillo. Sé que si disparo tendrán bajas. Pero también quedaré al
descubierto. Romero fue claro: “No dispares, que no te vean”.
Pero la adrenalina de la muerte se me clava en cuello. La
respiración empaña la máscara. Lo tengo a tiro. Todo parece
detenerse. Menos un sonido: la voz de Echeverría que anuncia
su caída. Levanto la cabeza y no veo a los míos. Estoy solo.
Disparo. Fernández Subiela cae. Guerrieri me advierte entre los
pastos e inicia la réplica. Siento las balas zumbar sobre mí.
Estallan en los pastos. En los árboles. Pero Subiela vuelve de la
muerte. Y también dispara. El fuego cruzado me envuelve. Y
no puedo hacer más que disparar. Giro sobre mi cuerpo
buscando refugio. Pero no llega. Siento el impacto en la
espalda. Grito mi muerte.
El lente agudo de Fernando Del Río registra el combate.
Devenido en el Robert Capa Azabache, se acerca para lograr la
mejor toma. Los rojos están cayendo y no alcanzará el tiempo
para sobrevivir y buscar una nueva ofensiva. Los verdes lo
saben. El grito de victoria de Ferrari y Marcos lo demuestra. El
ClausVonanuncia
Braier el final de una nueva batalla. Los rojos están
megáfono
pintados de muerte. Los verdes, se agrupan en danzas tribales
de victoria.
8
“MUCHO DEL POR QUÉ SOMOS ESCRITORES ESTÁ EN LA
RELACIÓN CON NUESTROS PADRES”
Verborrágica, Piñeiro no ahorró detalles en cómo fue el proceso de
escritura de su nueva novela a la vez que trazó un paralelismo
entre el momento en que se desarrolla (1975-1976) y la
actualidad.
“Desde su escritura y lo que cuenta, "Un comunista en
calzoncillos" tiene que ver con la memoria y como ésta se arma
colectivamente”, resumió Piñeiro y afirmó: “de la memoria hay
que hablar siempre, cuando nos olvidamos de hacerlo como
sociedad es un problema”.
Precisamente este es un tema recurrente en su último libro, dado
que trata los recuerdos y como éstos se entrecruzan y actualizan.
Allí Piñeiro repasa parte de su infancia y la relación con su padre,
pero también el retrato de una época, una clase y un país. La
realidad política en Argentina, que hasta el momento llegaba
asordinada a las casas y al horizonte infantil, irrumpe en forma
de censura, secretos
y sospechas.
Cla
usVonBraier
El relato se suscita casi de manera autobiográfica planteándose
¿qué se puede decir? y ¿qué se debe callar? “En todos los
personajes hay algo de uno porque es una forma de hacer una
empatía con ellos, incluso en aquellos que son malvados”,
comentó la autora y reveló que “mucho del por qué somos
escritores está en la relación con nuestros padres”.
Este libro está dedicado a su hermano “porque seguramente él
recuerde cosas diferentes a las mías y hasta puede estar en
desacuerdo con cómo digo que sucedieron. Siempre un recuerdo
tiene algo de ficción porque es una construcción. Uno arma la
historia de su vida que puede soportar”.
9
CLAUDIA PIÑEIRO
UN COMUNISTA EN CALZONCILLOS
10hs. Llueve y hace frío. Es
temprano, demasiado
temprano si tenés en cuenta
que solo pudiste dormir
pocas horas porque te
pasaste la noche en la peña
de Los Gorriones. Es el
cuarto día del Festival
Azabache. Estamos arriba de
un bondi. No sabemos para
qué vamos a la estancia La
Casualidad. Subimos porque
confiamos ciegamente en
Fernando del Río y Javier
Chiabrando, sístoles y
diástoles de Azabache.
En la parte trasera de la
nave, corre un rumor
preocupante, parece que no
nos esperan con asado. Se
ClausVo
nBtren
raier
especula al respecto.
En
de charla, se cambia de
tema, afloran anécdotas del
paint ball, la pelea de boxeo
y la peña de Los Gorriones.
Empiezan las gastadas. La
camada de escritores,
ubicada al fondo del bondi,
no conforme con joder entre
ellos, decide meterse en el
territorio de adelante, donde
habitan cómodamente los
escritores experimentados, y
el blanco elegido es Juan
Sasturaín. Sastu se prende
al juego. A poco de llegar, el
colectivo, de punta a punta,
es joda pura.
JUAN GUINOT
DOMINGO NEGRO
10
JUAN GUINOT
ClausVonBraie
r
10,30hs. Llegamos a La Casualidad. Bajamos del bondi. La lluvia no cesa. Al
frente, detrás de un caserón, se divisa una columna de humo y renace la ilusión
de comer un asado. El pelotón acelera sobre los charquitos para llegar a la
puerta principal de la casona. En el salón, cuatro mesas preparadas con
facturas e infusiones, dan la bienvenida. Al rato, se presenta Leo, el dueño de
casa. Las paredes del salón están plagadas de obras que el mismo Leo ha
realizado.
DOMINGO NEGRO
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DOMINGO NEGRO
11,15 hs. Sentados en redondo, queda al medio el calor que
irradia el hogar encendido. Del Río y Chiabrando cuentan las
de este retiro en el campo. La idea es terminar de armar
Crazones
lausVonBraier
un manifiesto de Azabache 2013. Surge un disparador, el futuro
del libro. Críticos, escritores del fantasy, terror, policial, ciencia
ficción y realismo componen un texto coral que, por suerte, Majo
ha venido grabando para pasar a papel. Ni uno se ofrece para
tomar apuntes. Tampoco interesa seguir el intercambio de ideas.
Un cambio abrupto de interés acontece en el ambiente ni bien
aparecen bandejas repletas de comida.
14hs. Tras la comilona de salame, quesos, fiambres y carne a la
parrilla (con la ayuda inestimable del vino), aparecen las ganas de
dormir la siesta. El café talla para despabilar a los que todavía
deben ponerse al frente de las conferencias de la tarde. Dormir, ni
en pedo. En una hora hay que estar de regreso en La Plaza del
Agua.
JUAN GUINOT
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DOMINGO NEGRO
ClausVonBraie
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La caminata de treinta metros bajo una intensa lluvia termina de lavar la modorra.
El bondi recupera los pasajeros y emprende la ruta del regreso.
El camino de tierra ha mutado a barro. La marcha es puro zigzagueo. Entre
sacudones, se desafinan temas de rock nacional.
Si bien queda la tarde, ya se huele bajón.
Se sabe que al final quedan los recuerdos, pero cuesta uno y la mitad del otro
despedirse de gente con quien, durante cuatro días, se la ha pasado de puta madre.
JUAN GUINOT
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PREMIO NOVELA
AZA3ACHE 2013
DIJO EL JURADO:
"ES MÁS IMPORTANTE UNA BUENA HISTORIA QUE UNA
EXCELENTE REDACCIÓN”
En la tarde del sábado, el Festival Azabache dio a conocer el nombre del ganador del Premio Novela en su edición 2013. El jurado en la voz de Claudia Piñeiro
anunció la novela ganadora titulada “No llores, hombre duro”, del escritor Mariano
Quiroz oriundo de Resistencia, Chaco quien participó bajo el seudónimo: Alejo
Luna. Por primera vez, el jurado incluyó también una mención especial para
“Malaventuranza” de Ezequiel Dellutri de Buenos Aires, cuyo seudónimo fue:
Débora Jeremías. Las dos novelas serán publicadas en la edición Tinta Roja, de
la editorial EDUVIM.
Para este concurso, fueron recibidos más de cien manuscritos de todas partes
de la Argentina y de países como Israel, Alemania, Colombia y México.
El anuncio del ganador se realizó en la Plaza del Agua con la presencia de todo
el jurado compuesto por los escritores Claudia Piñeiro, Gustavo Nielsen y Horacio
Cla
Convertini, este
último
ganador
la edición 2012 con “La soledad del mal”, texto
usVo
nBraiede
r
que actualmente está concursando en la popular Semana Negra de Gijón.
“La novela elegida es de una gran riqueza literaria con algunas desprolijidades
de tiempos verbales, pero aún así cuenta una gran historia”, dijo Gustavo Nielsen
y agregó: “el segundo premio es más estricto en cuanto a redacción, pero de
todas formas preferimos ponderar la historia del primero. En ese punto coincidimos como jurado en que es más importante que un escritor tenga una buena
historia para contar, a que tenga una excelente redacción pero que lo que cuente
sea aburrido”.
La novela ganadora cuenta una historia muy asfixiante que ocurre en un pueblo
que se llama Laguna Fría, en Chaco, signado por la falta de agua, el viento y por
dos desapariciones y un crimen. El autor maneja muy bien la tensión y tanto la
trama como el desenlace consiguen atraparte y tenerte en vilo. La novela que
recibió la mención especial trata de una misteriosa quema de iglesias en el partido de San Miguel, dentro de las que aparecen cuerpos de chicas adolescentes.
Los dos personajes que llevan adelante la trama son muy interesantes, un
inspector de policía y un escritor que se desenvuelven de una manera muy
creíble y con mucho humor.
En base a su experiencia anterior, el periodista y escritor dejó un mensaje a los
ganadores y público presente, diciendo que “el Festival Azabache abre muchas
puertas, es un concurso muy respetado y los invito a todos los que no hayan
participado, a hacerlo el año que viene”.
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Promediaba el mediodía de un frío sábado marplatense.
Camperas, gamulanes, sobretodos protegían a los valientes y
resignados transeúntes que se acercaban a la mítica esquina
de Salta y Moreno. A pesar del clima hostil, las calderas del
Instituto Vecchio estaban a pleno funcionamiento. Una
velada boxística nos esperaba.
Primero la presentación de un libro con relatos de boxeo. Y
cuando digo “relatos” me refiero al género literario,
comúnmente llamado cuento, y no al relato boxístico a cardo
de un spiker.
12 relatos, entonces, de distintos autores, en su mayoría
porteños, cada uno de los cuales trabajó como tema el
deporte que nos convoca en esta columna.
El detalle de oro es que el gran Sergio Víctor Palma, campeón
supergallo AMB, fue quién prologó el libro con diestra pluma.
A continuación de las palabras del señor Juan Carrá, (en su rol
de periodista), Marcos Almada (antologador, junto con la aún
señorita Mariana Kozodij, ausente con aviso), se explayó
sobre la génesis del libro. Luego, los señores Juan Guinot y
Marcelo Guerrieri,
hablaron
su relación personal con
Clau
sVonBrade
ie
r
nuestro amado deporte, y de sus propios relatos. Un publicó
atento y respetuoso, pero algo dicharachero, asistió a la
presentación ubicado cómodamente, tanto en las butacas
como en las gradas. Box y literatura unidas una vez más.
Crónica boxística a cargo
de Orestes Valdenegro
JUAN MARCOS ALMADA
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El público subió las
escaleras del Vecchio
mientras los
contendientes se
vendaban y hacían
precalentamiento.
Pero había un detalle
ineludible, los
boxeadores no se
conocían, ninguno
había visto sobre el
ring al otro. Entre la
asistencia Imperaba
la imaginación, los
rumores, el miedo y
hasta la mofa lisa y
Clano
usVonBraier
llana. Pero eso
distraía a los púgiles,
concentrados en dar
lo mejor de sí.
La entrada de cada
uno de los
boxeadores al mini
estadio, fue
reportado
fotográficamente por
Noelia Monópoli.
16
JUAN MARCOS ALMADA
Crónica boxística a cargo
de Orestes Valdenegro
Crónica b
oxística a
de Orest
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es Valden
egro
Huber Calderón, insigne promotor y entrenador boxístico de la ciudad marplatense y su primogénito,
(prueba viva de que el boxeo se enseña y se aprende de generación en generación, como los
conocidísimos casos de los Coggi, de los Spinks, de los Vázquez y de los Chávez, sin omitir el
controversial caso de los Mayweather), se prestaron a la tarea de arbitrar, el padre, y de trabajar en
la esquina de los boxeadores, el hijo.
El primer combate sería entre Fernando “anguila” del Río y Juan “el esgrimista” Carrá.
Sonó la campana y ambos contendientes se prestaron al combate. Carrá, dada su estatura y la de su
contrincante, que lo superaba por tres y hasta cuatro cabezas, no tenía otra posibilidad que proponer
la pelea en la corta distancia, meterse en la guardia de del Río y trabajar los ganchos al bazo y a la
zona hepática. Por supuesto que el jabb en punta de del Río lo mantuvo a raya. Pero la gallardía y el
empeño de Carrá, junto a su velocidad y al buen manejo de piernas, hicieron marrar a del Río su
punta de lanza, una cuantas veces. En un empellón de Carrá, el otro, agachando su cuerpo lanzó una
derecha a los genitales, que a pesar de la protección reglamentaria de esa zona blanda, entró de
lleno.
El púgil Carrá acusó inmediatamente el golpe, que el juez entendió como involuntario, ya que de otra
manera tendría que haber descontado un punto al boxeador apodado anguila .
Una vez recuperado Carrá, que se tomó apenas unos segundos, se reinició el combate. No hubo un
gran despliegue entre los créditos locales, es verdad, pero ambos mostraron buena técnica defensiva,
que fue lo que primó en el match. El jurado declaró el combate como empate cerrado, cosa que dejó
Cla
usVonBraier
conforme a la prensa
presente.
JUAN MARCOS ALMADA
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JUAN MARCOS ALMADA
La segunda pelea enfrentó a Kike Stallone Ferrari y a Marcos el tanque
Almada. Ambos boxeadores, armados y con la guardia alta, probaron
sus jabbs en el rostro del oponente. Por momentos parecían
espejados, uno copiando la técnica del otro. Almada a la espera de que
Ferrari abriera su guardia lanzando el jabb de izquierda para meter en
uno dos en el hueco, pero Ferrari sabe pelear en las dos guardias, y
eso quedó demostrado promediando la mitad del round. El público,
impío, les pedía a los boxeadores que hicieran cintura, esa crueldad
distrajo momentáneamente a los púgiles. Pero la reprimenda atenta
de Huber Carderón, acostumbrado a tratar con pupilos díscolos,
regresó al combate a nuestros boxeadores. La hinchada vitoreaba el
nombre de “pastelero”, “pastelero”, apodo casual que se ganó Almada
por representar al sindicato afín. Pero los vítores se apagaron de
pronto cuando un recto de derecha franco impactó en el rostro de
Almada, que recompuso la guardia, tal y como le supo enseñar su
mentor boxístico, Christian El elegido Nieto. La pelea fue eso, el un
dos de Almada que era repelido por el jabb picante de Ferrari. Una vez
más, se dio un fallo unánime: empate.
ClausVonBraie
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de Or
JUAN MARCOS ALMADA
Para la tercera pelea el promotor pensó
en Marcos Almada vs. Fernando del Río.
Había pica, eso se notó en el momento en
que ambos se miraron mientras el juez
daba las instrucciones. Almada tenía
hambre, eso se notaba, iba a poner todo
lo que tenía: quería ganarse un voucher
para el almuerzo en Chichilo. Fernando
lausV
Anguila del RíoCsabía
que
onBAlmada
raier se le iba
a ir encima. Una vez más tenía que
trabajar desde la larga distancia, meter el
jabb, haciendo valer su largo de brazos.
Una pelea deslucida esta, hay que decirlo.
Primero, un trabajo deficiente de parte
de la gente del rincón de del Río, ya que
el cabezal mal ajustado le impidió la
visión en gran parte del round. Ventaja
para Almada, ventaja que no supo
capitalizar cabalmente. Almada hizo lo
suficiente para ganar la pelea por puntos,
pero no lo necesario para conquistar la
gloria. Ganó la pelea, es verdad, pero no
así el voucher. Le pedimos a ambos
contendientes más gimnasio, y le
pedimos al cuerpo técnico, mas exigencia
aeróbica, ya que los dos boxeadores
terminaron la pelea respirando por la
boca como dos pescados.
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de
19
JUAN MARCOS ALMADA
enfrentaba a un púgil hábil, con buen desplazamiento, que sabe caminar el
ring. Ligero, como Oscar de la Hoya, como Julio César Chávez, como Manny
Pacquiao, como Mano de piedra Durán, como el mejor libra por libra actual,
Floyd Mayweather. En este caso, el de Carrá, un ligero que da ventaja en la
Maravilla
enfrentaba a los pesados, siendo que era crucero, claro, cuando todavía no
Ferrari nunca dejó que Carrá entrara. Lo mantuvo en la larga, toda la pelea,
frustrándolo. Una cosa hay que decir, Carrá nunca dejó de intentar. Tenaz,
aunque podría haber intentado otra estrategia, alguna variante que le
experiencia, sabe. Le bastó para llevarse el triunfo en fallo dividido. No sé qué
pelea estarían mirando los jueces. Pero es sabido, la localia pesa.
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de Or
Crónica boxística
a cargo
de
Orestes
Valdenegro
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JUAN MARCOS ALMADA
En el rincón a Carrá le cambiaron la estrategia. No podía hacer lo mismo que
contra Ferrari, tenía que innovar, sorprender. Y así lo hizo. Velocidad y
repetición. Paso adelante y meto combinación. Cuatro y hasta cinco golpes.
Explosión. Paso atrás y me armo. Almada no tira y lo que tira lo absorbe la
guardia de Carrá. Es muy movedizo, Almada no lo encuentra. Y vuelta el paso
adelante, y tiro. Apabullar a Almada, no dejarlo pensar. Está cansado, eso se
le nota, ya no se mueve, es un blanco fijo. Cuando Almada encara, trazo la
diagonal y que pase de largo. Entra un cross de derecha en la guardia de
Carrá. Lo agarró retrocediendo. Pero Carrá sale de las cuerdas con cintura y
mete un gancho al hígado. Almada parece no acusar el golpe, pero su rincón,
que lo conoce bien, tira la toalla y se termina el combate. Ganador por
nocaut técnico Juan el esgrimista Carrá.
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Crónica boxística
a cargo
de
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JUAN MARCOS ALMADA
Almada quedó picante, y Ferrari, más descansado, tenía ganas de una más.
Ya se habían medido en el primer round, en este tenían que demostrar. Los
dos estaban estáticos, ninguno se animaba más allá del jabb, utilizado mas
para tomar distancia que para lastimar. Huber Calderón, con buen ojo, les
dijo que caminaran el ring, que se movieran. Trataron de hacerle caso, pero
las piernas no les respondían, movían un poco la cabeza, pero las manos del
otro eran más rápidas. Apretaron un poco más y se pudieron ver buenos
cruces, alguna mano clara, el un dos de Almada, el cruzado derecho de
Ferrari. En los últimos diez segundos tiraron todo lo que les quedaba. Que
era poco. Cerró mejor Ferrari con otro recto. Pero los jueces, volvieron a dar
empate. Todos contentos y a las duchas que hay que comer los sanguchitos
de miga y tomar algún aperitivo.
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Crónica boxística a cargo
de Orestes Valdenegro
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JUAN MARCOS ALMADA
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FANTASY AZA3ACHE
Las fotos que aparecían en los muros de mis amigos los días
posteriores al Festival Azabache me generaban envidia. Eso. Envidia.
Los veía disfrutando de las mesas, las charlas, las comidas. Tanto
que consideré la posibilidad de ponerle pausa a la producción
fantástica para crear un texto truculento con el cual ganarme un
pasaje a la ciudad feliz.
No me dieron tiempo. Cuando me disponía a incurrir en mis primeros
asesinatos literarios, me enteré de que los géneros se habían
expandido y ahora también convocaban Ciencia Ficción y —¡oh,
felicidad!—, Fantasy.
Queminviten queminviten queminviten, repetí como un mantra
durante semanas.
Recuerdo Chaberme cruzado a Antonio Santa Ana, uno de los
lausVonBraier
afortunados que ya habían sido confirmados, y confiarle mis anhelos.
“¿Cómo hiciste para que te inviten?”, le pregunté. “Vendí 400.000
ejemplares de mi novela”, fue su respuesta, y lo único que atiné a
hacer fue asentir con la cabeza.
VICTORIA BAYONA 26
FANTASY AZA3ACHE
Mis esperanzas estaban en peligro de extinción cuando llegó el mail de
Annie Yohia, fundadora de Huellas de Tinta (una excelente revista
on-line de Literatura Juvenil con base en Mar del Plata) en el que me
contaba que todos los integrantes de La Cofradía del Fantasy
Argentino habíamos sido invitados a participar del Festival.
Puse a cargar la cámara. Este año las fotos eran mías.
Emprendí viaje con Leo Batic al volante y María Inés Linares de
copiloto. Ambos miembros, al igual que yo, de La Cofradía del
Fantasy, una agrupación de escritores de —sí, adivinaron— Fantasy.
La formamos con el objetivo de apoyarnos en la promoción de
nuestros libros. Y porque nos llevamos bien y nos divierte, para qué
mentirles.
Ya en la ruta empezaron las aventuras. Escuchábamos la banda de
sonido de Indiana
honor al sombrero que suele usar Batic
ClausVoJones
nBraieen
r
cuando el móvil se fue aletargando hasta estancarse en la banquina.
“Me quedé sin nafta”, dijo Indy y lo vimos partir, bidón en mano, rumbo
a la estación de servicio más cercana, mientras sonaban las estrofas
conocidas “pamparampaaaa pamparaaá pamparampaaaaa pam pa
ram pam pam”. Una gallina picoteaba peligrosamente al costado de la
ruta y María Inés, preocupada porque no lograba distinguir si era
gallina o gallo, rogaba que no avanzara y terminara estampada (o
estampado) en el asfalto. Yo supuse que el animal sabría mejor que
nadie no exponerse a la amenaza de los coches pero igual fueron
varios minutos de tenso dramatismo musicalizados por Williams.
Finalmente el batichéroe regresó con el combustible y pudimos
completar de manera eficaz el trayecto restante hasta la sede principal
del Festival.
VICTORIA BAYONA 27
La plaza del Agua estaba preparada para la inauguración, sus
organizadores dispuestos sobre el escenario. Una vez
finalizada la breve ceremonia pudimos conocerlos: Javier
Chiabranco y Fernando del Río, almas emprendedoras,
amables y entusiastas que se preocuparon en todo momento
de que estuviéramos cómodos, contentos y bien alimentados.
Se sucedió luego un sinfín de caras y saludos amistosos.
Minuto a minuto llegaban escritores-lobo respondiendo a la
llamada del Azabache: Muerde Muertos, colegas conocidos y
desconocidos, organizadores, libreros, público en general.
Estábamos todos. Se escuchó el disparo de largada y
arrancamos. Algunos dicen que la bala fue a parar a la frente
lausV(Ver
onBra
de Nicolás CPinto.
foto
ier adjunta del escritor, intervenido por
la mano experta de Malena Krueger)
Fueron cuatro días alocados. Los miembros de La Cofradía;
Leo, María Inés, Julián Cáceres Narizano, Juan Iribarne, Nico
Pinto, Tiffany Calligaris y yo (Pablo Nieto ausente con aviso),
tuvimos la maravillosa posibilidad de intercambiar
experiencias con una audiencia joven y apasionada.
Hablamos de lo que es el Fantasy y el panorama del género en
Argentina; tuvimos el placer de conocer en persona a Annie
Yohia para al fin agradecerle con abrazos el papel tan
importante que tuvo en la difusión de nuestros proyectos.
VIC TORIA BAYONA
FANTASY AZA3ACHE
28
E
H
C
A
3
A
Z
A
Y
FANTAS
ClausVonBraie
r
No conformes con esto, compartimos
mesa con La Oreja de Van George,
fervientes seguidores de Harry Potter en
la ciudad feliz. Admiramos sus varitas,
nos prestaron sus bufandas y nos
llenaron de cariño pottérico.
Por último tuvimos el honor de ser
jurados durante la Invasión Friki y
terminar nuestro paso por el festival
hablando de nuestros libros y de lo que
más amamos: escribir.
Me llevo también cenas, desayunos y
almuerzos con amigos (qué ricas esas
cervecitas en el Che Café con Pinto e
Iribarne, las medialunas y el café en el
muelle con Guerrieri y Figueras, el
dígalo con mímica con los Marcos y cia.
en Estancia Mendoza) y compruebo que
me divertí y disfruté más de lo que
imaginé cuando miraba (con envidia, sí)
fotos ajenas.
VICTORIA BAYONA
29
Ayer recibí un correo de una joven lectora que tuvo
asistencia perfecta en todas las exposiciones de la
“Cofra”. Entre otras cosas, decía:
“(…) me encantó la primera charla que dieron. Me
acuerdo que me preguntaste si leía Fantasy, y te dije que
no. Como verás, era mentira, pero sin intención. Nunca
tuve claros los límites entre un género y otro hasta que lo
explicaron. Ustedes me facilitaron mucho el trabajo de
buscar. Estaba cansada de no encontrar libros que me
engancharan. Así que gracias.”
Y este mail resume lo que pasa en el Azabache: magia.
La magia de la que habla Ende en su “Historia
ClaulasVque
Interminable”,
onBva
raieyr vuelve y alimenta un mundo y
otro. En este caso, el de autores y lectores.
Gracias a Fernando del Río y Javier Chiabrando, a Mauro
De Angelis, Juan Carrá y Marisa Potes por darnos la
oportunidad de conocerlos y dejarnos conocer. Por
haberse preocupado de que nuestro paso por Mar del
Plata haya sido en verdad feliz, enriquecedor y
memorable.
¿Qué es el Azabache? El Azabache es una fiesta: se
espera con ansias, se vive con alegría, se recuerda con
nostalgia y después uno se encuentra tachando el
calendario hasta que llegue el próximo.
VICTORIA BAYONA
FANTASY AZA3ACHE
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Tarde del viernes en la Bodeguita. Nielsen se calza un delantal blanco.
No va a hablar de cuentos, novelas, ¡nada de literatura! Va a amasar
unos fideos.
–¡Ja! Esto tengo que verlo —digo. Agradece al chef de la Bodeguita por
el espacio brindado y mete los dedos en un bol con harina. Comienza a
mostrar cómo se le da con los fideos. Gourmet Channel. Toma un trago
de vino blanco y la literatura asoma. Un recuerdo. Una anécdota.
Hotel Llao Llao, Bariloche High Line. Gustavo participaba de un
encuentro de escritores. Ahí se le ocurrió lo mismo que en Azabache:
amasar unos fideos para los compañeros/ras de letras. A los
organizadores les pareció bárbaro y el chef (un pingo patagón de
aquellos) le cedió parte de la cocina y preparó unas salsas increíbles. En
el hotel les daban el morfo, pero las bebidas se las tenían que bancar
ellos. La noche anterior, cuando pidió la carta, observó que los vinos no
tenían precio. Ahí se dijo: uuupaaa. Pidió un vinito de todos modos. Se
la bancó con estoicismo
ClausVoncuando
Braier llegó la cuenta. La cuestión que un
tano, un comendatore, de paso por la Suiza Argenta quería hincar el
diente en la pasta de Nielsen. El RRPP consulta con nuestro gourmet
literato si eso es posible. Nielsen acepta, pero con la condición de que
no comparta la mesa de los hombres y mujeres de letras. Para el tano
habilitan un salón. Ese salón se abría contadas veces y para que eso
ocurra había que desembolsillar un buen fangote. A la mañana
siguiente lo despierta el RRPP por teléfono. Le solicita tenga a bien
bajar a la recepción que el comendatore querría saludarlo. ¡Qué
pesado!–pensó Gus. Se negó. El RRPP, insistió. Gus se empacó. Y así
estuvieron hasta que al RRPP se le ocurrió decir: ¡Le pagamos!
–¡Eh!
LUIS MAZZARELLO
LA PASTA DE NIELSEN
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LA PASTA DE NIELSEN
Lo estaban esperando en una
sala. El comendatore con el RRPP
y la signora unos pasos atrás.
–¡Nunca comí nada igual!
–haciendo montoncito con los
dedos cerca de la boca y los ojos
entrecerrados. Nielsen asintió,
miró al RRPP, miró al sibarita.
–¿Cuánto hai pagato per la pasta?
–cocolicheó. El RRPP mutó en
verde.
–Pero... es un atrevi... –quiso
interponer, el comendatore
sacudió una manito
despreocupado.
ClausVonBraie
r
–Cinquecento
–E mangió due –acotó la signora.
Gus aplaudió y se refregó las
manos mirando de reojo al RRPP.
¡Se lo cobró! ¡Y cómo!
A partir de esa noche cenó con
vino todas las noches que duró el
encuentro. Su amigo el chef le
recomendaba lo mejor y
compartía una copita con él.
–¿Habrá sido verdad? –preguntó
mi prima, marplatense por
adopción, que había concurrido
conmigo a la mesa.
–Yo creo que sí, pero eso es lo de
menos. Lo importante es cómo lo
cuenta y en qué momento.
LUIS MAZZARELLO 32
4 NUEVAS NOVELAS 4
Criminis causa, Juan Carrá.
Lengua Muerta, Juan Marcos Almada.
Falso contacto, Ana Ojeda.
Súcubo, Nicolás Correa.
Escritores en actividad, como gusta decir Ana.
Nuevas propuestas. Nuevas editoriales.
Criminis causa, Letra Sudaca.
Lengua Muerta, Alto pogo.
Falso contacto, Milena Caserola.
Súcubo, Wu Wei.
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4 NUEVAS NOVELAS 4
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JAVIER CHIABRANDO
ORGANIZADORES
FERNANDO
DEL RIO
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ORGANIZADORES
Javier Chiabrando y Fernando del Rio, organizadores y fundadores del Festival Azabache, figuras
omnipresentes del evento, siempre atentos, solícitos y contenedores, lograron que esta tercera
ClausVonBraie
r
versión superara las expectativas
de la mayoría
de los participantes con sus propuestas
innovadoras, entretenidas, para muchos inolvidables.
Todos los que concurrimos, estamos a la espera de la próxima versión convencidos de que asumen el desafío, esperando otros cuatro días a pura literatura, porque en el Azabache no sólo se
lee y se la difunde, sino que aquí, se vive la literatura.
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