Después de un curso en Grecia, como Erasmus, tengo que decir que la experiencia ha sido inolvidable. A continuación expongo mis impresiones y una breve descripción de lo que un Erasmus puede encontrarse por aquellas tierras. La Acogida. Todo fueron facilidades y, a pesar del problema del idioma (el griego es complicadillo), en inglés te puedes defender perfectamente. En la Universidad del Pireo, donde estuve, te acogen como si fueras uno de ellos, tanto alumnos como profesores. Una vez instalados nos ofrecieron una comida de bienvenida con un ambiente muy agradable en una típica taberna griega. La universidad de El Pireo. Se trata de una universidad moderna y bien estructurada; aulas amplias y gran ambiente universitario. Los profesores siempre están a tu disposición y se toman gran interés en integrarte. Al llegar tendréis que ir a la oficina de Relaciones Internacionales para que os den el carnet de universitario, el código para la biblioteca y el bono de transporte. Y si aún no tenéis alojamiento ahí también os pueden ayudar. En el Pireo no hay residencias de estudiantes así que lo más normal es compartir piso. Las comidas y cenas son gratis para los estudiantes Erasmus en el comedor universitario. Transportes. Los autobuses son como los de cualquier gran capital. El metro es muy puntual y lo bueno es que pasa cada pocos minutos. La parada para ir a la Universidad es la de “Faliro” en la línea verde, la facultad está a unos 15 minutos andando. Atención con los taxis porque, no todos, pero algunos, no bajan la bandera, con lo que luego cobran lo que quieren o simplemente fijan un precio antes de salir. Allí los taxis se comparten. Con el bono de transporte todo cuesta la mitad, 0.50€, y si sacas un ticket para el metro sirve para hora y media, si no recuerdo mal, y ese mismo sirve para el autobús, el tranvía, etc… No se controla nada que compres el ticket o no, pero si alguna vez te pillan tienes que pagar una multa creo que importante. Los griegos. Son muy agradables y serviciales; hacen esfuerzos por comprenderte y ayudarte, ya sea en griego, inglés o “por señas”. Amables, dicharacheros y muy simpáticos. Me llamó la atención el alto nivel de inglés que tiene la mayoría de ellos en cualquier ambiente: comercios, supermercados, incluso en los kioscos, que son como los que había aquí hace 10 o 15 años, por lo menos en El Pireo. Lo único, que me ha llamado la atención es que no son muy respetuosos con los semáforos, así que cuando vayáis atención a los “pasos de cebra” ¡¡¡¡¡ Como tienen algo de turcos, si os gusta el “regateo”, vais a disfrutar. Os podéis abrir una cuenta en Citybank si no queréis usar visa o pagar comisiones. Allí la podéis usar como si estuvierais en España, no tiene comisiones sacar dinero. Lo único que solo podéis hacer operaciones de cajero (sacar dinero, consultar, etc…) de ventanilla nada. El Pireo. Es un “barrio” de Atenas que, por sus características, es una gran “montaña rusa”: excepto en las proximidades de los puertos (tiene tres) todo es cuesta arriba o cuesta abajo, pero al final te acostumbras y, conforme va pasando el tiempo, las cuestas arriba te parecen menos empinadas. Atenas. No voy a reseñar aquí lo que es Atenas; lo podéis encontrar en multitud de guías, pero sí os animo a que si tenéis oportunidad, la visitéis: Es un puro monumento digno de ver. Con el carnet de estudiante entras a todos los museos y sitios de interés cultural gratis.