Formato de impresión El Estado Islámico se concentra en sus feudos tras varias derrotas 2015-01-03- Internacional-Poblacion NGELES ESPINOSA, El Pas Las fuerzas kurdas e iraques han sumado nuevos xitos en su guerra contra el grupo yihadista Estado Islmico (EI) en el norte de Irak y la frontera turco-siria. Si hace 15 das, los kurdos rompieron el bloqueo al Monte Sinjar, donde el pasado verano sufrieron una gran humillacin a manos de los combatientes del EI, ahora es el enclave de Sultan Abdal, localidad situada a 80 kilmetros de Erbil, capital del Kurdistn iraqu. Segn reporteros en el terreno de la cadena catar Al Yazira, los peshmerga (fuerzas regulares kurdas) han retomado esta ciudad, punto estratgico vital para cruzar el ro Tigris hacia Mosul, controlada por los integristas. El Ejrcito iraqu ha informado tambin esta semana de la recuperacin de varias localidades en los alrededores de Samarra, entre ellas Dhuluiya, al norte de Bagdad. Estas victorias se unen al avance en la localidad siria de Kobane, junto a la frontera turca. Activistas del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos calculan que milicianos kurdos controlan ya al menos el 70% de la ciudad, objetivo fundamental del EI en el norte de Siria. La batalla por el monte Sinjar es, no obstante, una de las principales claves en el frente norte de Irak. El acceso a esa montaa, tierra ancestral de la minora yazid, ha supuesto tanto una victoria estratgica frente a aquel grupo como un estmulo psicolgico para quienes lo combaten. Pero el entusiasmo no debe eclipsar que los radicales islamistas estn reforzando sus posiciones en la provincia de Al Anbar y que sigue pendiente la recuperacin de Mosul, la tercera ciudad iraqu, todava en su poder. "La mayora de Sinjar est bajo nuestro control; con la ayuda de Dios, liberaremos el resto, declar ufano el presidente kurdo, Masud Barzani, durante una visita a la cima del monte, en cuyas faldas vivan la mayora de los yazides de Irak. Los peshmerga han contado con el apoyo siquiera simblico de milicias yazides y de los kurdos sirios del PYD, pero tambin con los bombardeos de la coalicin que encabeza EEUU. La apertura de un corredor desde el norte ofrece sin duda un alivio para varios miles de yazides que se refugiaron en esa montaa cuando los yihadistas avanzaron sobre sus aldeas el pasado agosto. An falta conquistar la ciudad de Sinjar, tras lo cual los kurdos habran recuperado la mayora del territorio que perdieron en aquella ofensiva. De tener xito, la operacin privara al EI de una importante lnea de abastecimiento a sus bases en Siria, al otro lado de la frontera. Sin embargo, tal como ha advertido Ahmed Ali del Institute for the Study of War, tambin puede contribuir a que los yihadistas consoliden sus posiciones en Mosul, su principal trofeo en Irak y el objetivo ltimo para el Gobierno central de las operaciones en el norte del pas. A principios de diciembre, el primer ministro iraqu, Haider al Abadi, manifest ante el Parlamento su intencin de establecer un "proceso de liberacin para Nnive, la provincia de la que Mosul es capital, con el fin de expulsar al EI. El diario saud Al Sharq al Awsat ha publicado declaraciones de un miembro del Consejo Provincial, segn el cual la operacin se iniciara a principios de 2015 y contara con un despliegue de 80.000 fuerzas de seguridad, Pero los analistas tienen dudas. Por un lado, la empresa resulta complicada en tanto las provincias de Saladino y Al Anbar sigan prcticamente controladas por el EI. De hecho, mientras los xitos en Sinjar llenaban los titulares de prensa, el derrumbe en Al Anbar, la ms extensa de las provincias iraques y de poblacin casi en exclusiva sun, est recibiendo escasa atencin meditica. En parte, ello se debe a las dificultades de acceso. A diferencia del norte, donde los kurdos, facilitan en gran medida el trabajo de los periodistas, resulta muy difcil y peligroso intentar acceder a esa regin, en poder de los yihadistas desde hace un ao. A pesar de las promesas del nuevo primer ministro, Haider al Abadi, y de su proximidad a Bagdad, los militares y las tribus que les apoyan se quejan de falta de medios para mantener sus posiciones en Al Anbar. Un reciente reportaje de la BBC, que logr empotrar a un equipo con el Ejrcito iraqu, mostraba la situacin desesperada en la que se encuentran los soldados que defienden la base area de Ain al Asad, prcticamente rodeada por las huestes del EI. Es la mayor instalacin militar de la provincia y, si cae en sus manos, les dar acceso a Haditha, ms al noroeste, uno de los pocos enclaves sunes que ha resistido sus ataques durante los ltimos seis meses. Por otro lado, avanzar sobre Mosul, requiere la cooperacin de los peshmerga. Barzani ha manifestado que estn dispuestos a participar si se lo pide el Gobierno de Bagdad, pero tienen condiciones. Aunque el lder kurdo ha evitado enumerarlas, no resulta difcil imaginar que, entre ellas, estar un nuevo trazado de las lindes de la regin autnoma que incluya el territorio que han ganado al EI desde que su avance hizo poner los pies en polvorosa a los soldados del Ejrcito iraqu el pasado junio. Copyright ElPeriodicodeMexico.com