8.1. El Imperio de Carlos V. Conflictos internos: Comunidades y Germanías. Al morir Isabel en 1504, su hija, Juana, fue proclamada reina de Castilla, mientras que en Aragón continuó gobernando Fernando el Católico. Juana estaba casada con Felipe el Hermoso, de la dinastía austriaca de los Habsburgo. Dos años después de que Juana subiese al trono, Felipe el Hermoso muere y Juana enfermó mentalmente. Debido a su incapacidad para gobernar, su padre, Fernando el Católico, asumió la regencia de Castilla hasta su muerte. A su muerte, el hijo primogénito de Felipe y Juana, Carlos, nacido en Gante (Bélgica) en 1500, fue proclamado rey en Bruselas y llega a España en 1517. Con Carlos I, nieto de los RRCC, la corona española quedó en manos de la dinastía de los Habsburgo, o de los Asturias. Carlos llegó a España rodeado de una gran Corte extranjera que no conocía ni el país ni hablaba castellano, pero se va a hacer con los cargos del gobierno, lo que produjo el malestar de los nobles. Una vez en España, Carlos será reconocido como rey por las Cortes como CarlosI. (Se le puede considerar en sentido estricto el primer Rey de España). De España, al nuevo rey, en un principio, sólo le interesaba conseguir fondos para sus planes imperialistas europeos (prestó más atención a su función de emperador de occidente que como monarca español). En 1519, fallece su abuelo paterno, el emperador Maximiliano, y Carlos va a ser elegido como emperador, con el nombre de Carlos V de Alemania. A los cincuenta y seis años y debido a problemas de salud, en 1556 abdicó el trono de España en su hijo Felipe II y dejó el Imperio de occidente en manos de su hermano Fernando. Entre los conflictos entre la monarquía de Carlos I y los grupos sociales y políticos de España destacamos los levantamientos de las Comunidades y las Germanías que tuvieron carácter político, social y antiseñorial. 1. Las Comunidades (1520/22). Surgen en Castilla cuando Carlos I convoca las cortes para pedir dinero para su coronación como emperador. En un principio se le niega este dinero ya que los nobles estaban en contra, pero el rey va a ir convocando diferentes cortes hasta que en Santiago se aprobó la petición del rey. Una vez tiene el dinero, Carlos I marcha para Alemania dejando en el poder a personajes extranjeros como el regente Adriano de Utrecht. Esto provoca que tras su marcha se iniciara la revuelta de las Comunidades o ciudades castellana, protagonizada en Toledo, Ávila, Segovia, Zamora, Burgos, Guadalajara… que en muchos casos contaron con el apoyo de la nobleza y de la Iglesia. Se sublevaron contra la monarquía de Carlos I y ofrecieron el trono a la madre, a Juana la Loca. En este movimiento los principales líderes eran Padilla, Bravo y Maldonado que pertenecían a la clase media. El conflicto se extendió y se produjeron revueltas campesinas de carácter antiseñorial aprovechando la coyuntura revolucionaria. Debido a esto, en contra de estos movimientos se sitúa la monarquía, la nobleza y los grandes exportadores de lana (Burgos, única ciudad del bando realista). Con ayuda de los opositores a esta revolución, se reunió a un ejército que derrotó a los comuneros en la batalla de Villalar y los principales dirigentes fueron ajusticiados. 2. Las Germanías. (1519/22) Estallan al mismo tiempo y afectan a los territorios de Aragón. Los hechos más graves se producen en Valencia y se extendió a Murcia y Mallorca. Desde el principio tuvo un carácter social. El rey había confirmado a los artesanos el permiso para formar una milicia (Germanía) en caso de ataque de los piratas berberiscos. Tras reunirse en una junta, proponen la reducción de los privilegios de los nobles, el conflicto se radicaliza hasta llegar a la rebelión cuando muchos nobles abandonan las ciudades ante la llegada de un brote de peste y las germanías se hicieron con el poder municipal. El Ejército imperial, con el apoyo de la nobleza acabó con la rebelión. Como en Castilla la alianza entre monarquía y nobleza se consolidó.