Clara Wieck

El suave aroma
de las
Compositoras
Los compositores hombres acaparan el
panorama de la música y hasta hay quienes
afirman que las mujeres no están dotadas por
naturaleza de un talento creador, esta visión
machista desde luego no tiene fundamento
histórico alguno.
En la historia de la música han existido
más de cuatro mil compositoras, pero el
rechazo generalizado a su labor llegó a
amargar incluso a las más talentosas,
y sus obligadas tareas domésticas
consumieron el tiempo que pudieran
dedicar a la creación musical.
C
lara Wieck, esposa del compositor romántico Robert
Schumann, fue una creadora de importancia universal y
a pesar de su innegable talento llegó a exclamar: "Maldigo a mi
padre que me dejó creer que yo era compositora".
Nacer mujer ha representado una desventaja en cuanto al posible
éxito profesional en el pasado y las compositoras han sufrido en
carne propia esta discriminación.
Carlotta Ferrari en el siglo XVII; Pauline Viardot-Garcia, en los
albores del siglo XX; Nadia Boulanger, en el siglo XX; han sido algunas
representantes sobresalientes. Sin dejar de mencionar a Hildegarda, del
siglo XII, compositora que ha sido descubierta como una de las musas más
importantes en la historia de la música, pues la abadesa de Bigen ha creado piezas
de extraordinaria belleza.
Las mujeres en el pasado no podían decir abiertamente que eran compositoras,
muchas entonces publicaban como anónimas, o utilizaban nombres de sus esposos,
hermanos o amigos.
¿Es posible detectar un sello distintivo de sexo en la composición? ¿Es posible
detectar por la pura música si la pieza había sido creada por un hombre o por
una mujer? Creo que ningún musicólogo serio se atrevería realizar un análisis
concluyente.
City Life • Septiembre
Sin embargo se puede decir que las mujeres abordan el
proceso creativo musical de una forma diferente, en general
tienden un poco más hacia la elaboración de detalles finos
y se les dificulta la terminación de la forma general de la
composición.
Los hombres logran fácilmente definir la forma de la pieza
musical, la construcción de las culminaciones, pero batallan
con la terminación de detalles.
Esta es quizás la única diferencia entre la música de los
hombres y las mujeres, pero en cuanto a la calidad están
perfectamente a la par, ambos sexos tienen la misma
probabilidad de escribir una pieza genial.
Han habido mujeres, autoras de música, que influían
poderosamente en las composiciones de sus esposos.
Según investigaciones recientes, Alma Mahler, esposa de
Gustav Mahler, creador tan genial como neurótico, había
ayudado a determinar la forma final de las piezas del autor
vienés de manera mucho más importante de lo que se
pensaba hasta ahora.
MOZARTEUM •
compositor y después de la muerte de Gustav Mahler se volvió
casar, pero nunca se quitó el apellido de su antiguo compañero,
quedando para la historia como la esposa de Mahler.
En varios ejemplos se puede confirmar que el dominio de
los hombres en la música y en la composición, conocido como
andropocentrismo, no tiene ninguna justificativa genética o
predeterminación biológica, sino que es resultado simple de
la opresión de la mujer y se debe a las pocas oportunidades
del género femenino de desempeñarse profesionalmente en
la música.
Con la emancipación de la mujer tendremos
seguramente cada vez más compositoras y a lo mejor
no sabemos si ya nació la mujer que desarrollará su
talento creativo equivalente a Beethoven o Mozart.
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De la propia obra de Alma Mahler han
sobrevivido más de una docena de
lieder, piezas para voz y piano y
algunos fragmentos de una
ópera, pero se sospecha cada
vez más que ella ha ayudado
determinantemente
a modificar las
composiciones de Gustav
Mahler.
Gustav Mahler, como
creador, ha tenido una
conocida tendencia
épica, tendía a
extenderse demasiado
en su obra al grado de
caer en frases vacías.
Aparecen entonces en
sus manuscritos decenas
de páginas completas de
partitura para orquesta,
tachadas, desechadas, y muy
probablemente como resultado
de sugerencias de su esposa,
primera crítica de sus obras.
Alma Mahler utilizó en su propia
obra texto de "Himno a la noche", del
poeta romántico Novalis y reflejó en su obra una fuerte
personalidad romántica.
Además era una gran improvisadora en el piano, una mujer
sumamente atractiva física y espiritualmente, se separó del
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