WILLEM-ALEXANDER, PRÍNCIPE DE ORANGE Administración Integrada de los Recursos Hídricos: mucho se ha logrado, pero todavía queda mucho más por realizar Discurso de Su Alteza Real, el Príncipe de Orange, en la inauguración de la sesión sobre la Administración Integrada de los Recursos Hídricos durante el Cuarto Foro Mundial del Agua en la Ciudad de México, celebrada a las 10.00 hrs. del sábado 18 de marzo de 2006 Sus Excelencias, damas y caballeros: Este año se conmemora el décimo aniversario de la Asociación Mundial del Agua. Como patrocinador de este grupo tan prominente para el concepto de la Gestión Integrada de los Recursos Hídricos (IWRM, por sus siglas en inglés), menciono este hecho con orgullo y satisfacción. Gracias al trabajo de la Asociación Mundial del Agua y de otras personas, la IWRM ha ocupado un lugar sólido en el debate mundial sobre el agua. Hace exactamente tres años en esta fecha, pude decir lo siguiente en la inauguración del Tercer Foro Mundial del Agua: ‘Son cada vez más las personas que están convencidas que las crisis actuales del agua se originan por la administración inadecuada o incorrecta de los recursos del agua, y no tanto por la escasez de agua per se’’, repito las mismas palabras hoy, no porque me guste mencionar lo ya dicho, sino para demostrar que esta convicción ha aumentado desde 1992. En ese año, se llegó a la conclusión en Dublín y en Río de Janeiro que la administración tradicional del agua y específica a los diferentes sectores era económicamente ineficiente, socialmente injusta y ambientalmente insostenible. Por esta razón, en Kyoto expresé mi satisfacción por el acuerdo alcanzado en Johannesburgo en 2002 en cuanto a que todos los países habrían implantado la IWRM para 2005, junto con planes para la eficiencia del agua. Ahora, al principio del año 2006, ésta es una razón suficiente para hacer un inventario de nuestra posición. Tal como lo demuestra la reciente encuesta sobre IWRM de la Asociación Mundial del Agua, 21% de los países está avanzando con sus planes integrados del agua. Hace tres años, esta cifra solamente representaba 12%. Ahora, 53% está tomando algunos pasos en dirección de la IWRM. El porcentaje de los países que sigue en las etapas iniciales disminuyó del 39% a 26% en tres años. Eso significa, y queda totalmente claro, que no hemos logrado alcanzar los objetivos de Johannesburgo. Por lo tanto, exhorto a los países en cuestión a que tomen acciones con mayor rapidez. Al mismo tiempo llego a la conclusión de que para la mayoría de los países, aparentemente el agua ya no es un producto básico que pueda darse como un hecho en la creación de políticas. Ya no es algo eterno que simplemente fluye. La conciencia que se debe tener incluso para iniciar la IWRM es que son cada vez más los países que están tratando el agua como un recurso sumamente apreciado, entendido y protegido. Se ha 1/4 llegado a ver como un recurso que es necesario administrar, porque es crucial para el desarrollo social y económico, para los ecosistemas y para la seguridad. Y esto, damas y caballeros, es a lo que llamo progreso. Obviamente, queda un largo camino por recorrer. Todavía necesitamos más pruebas de que podemos implantar planes tomando acciones en el campo, y acelerar nuestro ritmo. Sin embargo, no debemos olvidar que empezamos casi de cero. Por lo tanto, el mensaje que deseo transmitirles al inicio de esta sesión es que el vaso de la IWRM no está medio vacío, sino medio lleno. Nuestra misión en estos momentos es asegurar que podremos llenar el resto del vaso lo más rápido posible. Como mencioné al principio de esta semana en la ceremonia de inauguración, no necesitamos políticas nuevas. Lo que necesitamos son proyectos en los que las personas enfrenten sus propios problemas reales. La encuesta de la Sociedad también muestra los dos obstáculos más importantes que tenemos frente a nosotros. El primero es el dinero, muy poco dinero para comprar el hardware que se necesita para los proyectos, y muy poco dinero para invertir en software humano a través de educación. Esto resalta nuevamente la importancia de que los países donadores cumplan con sus compromisos internacionales y destinen 0.7% de su PIB para la cooperación y desarrollo. Es por su propio interés hacerlo, porque invertir en el agua significa invertir en desarrollo, equidad y estabilidad. Por lo tanto, están invirtiendo en el futuro de nuestro planeta. Sé que esto suena muy sencillo, pero la solución para el primer obstáculo estriba en gran parte en la actitud de los países donadores. El segundo obstáculo para introducir la IWRM es la responsabilidad de cada uno de los países. Como lo muestra la encuesta, un número considerable de países está tratando de aumentar su nivel de perfección en la formulación de políticas, y esto en sí se ha convertido casi en un fin. Muchos de los procesos para la creación de políticas y leyes se llevan más de cuatro o cinco años antes de su conclusión. Lo importante es no caer en esa trampa y, al mismo tiempo, tomar en consideración a todas las personas y grupos que tienen participación e interés en los planes. Si dejamos fuera a alguno de ellos los planes tendrán poco que ver con la IWRM y su implementación no será parte de un proyecto integral. La buena noticia es que no hay un solo país que tenga que empezar de cero. Y esto me lleva al propósito de la sesión de hoy. Hay una gran riqueza de conocimiento y experiencia disponible, siendo la Sociedad Global del Agua nuestro punto focal. Permítanme darles dos ejemplos europeos: 1 Holanda ha tenido consejos del agua desde la Edad Media, de hecho son la institución democrática más antigua. Durante cientos de años han creado un vínculo directo entre los intereses, representación y pago de costos en la administración local del agua. En consecuencia, tenemos más de 800 años de experiencia que ofrecer. Es claro que para aplicar esa experiencia en otro lugar es necesario adaptarla a la situación local. Aún así, ocho siglos de conocimiento y experiencia ofrecen oportunidades excelentes para acelerar la IWRM en otras partes del mundo. En los últimos cuatro años, los consejos del agua de Holanda han estado trabajando 2/4 con socios en Surinam, Indonesia, Sudáfrica y Egipto para establecer autoridades locales y regionales del agua. Por ejemplo, en Egipto, el intercambio de conocimiento ha generado resultados positivos en el distrito de Fayoum, donde los interesados unieron sus fuerzas para administrar los sistemas de agua potable, irrigación y drenaje. Sudáfrica adoptó una moderna y sumamente ambiciosa Ley del Agua en el 2000, que acerca más la administración del agua a la gente. Hay dos proyectos piloto con las Agencias de Administración de Captaciones que están operando en dos cuencas de ríos con la ayuda de los consejos de agua holandeses, que actúan como socios asesores. 2 El segundo ejemplo es la Directiva del Marco Europeo del Agua. Su propósito es que la calidad del agua en toda la Unión Europea cumpla con las normas para el año 2015. En ese año el agua debe ser limpia y ecológicamente sana. Por primera vez en la historia, los 25 estados miembros de la Unión Europea se han comprometido a administrar conjuntamente todos sus recursos de agua dulce a nivel de las cuencas de ríos. Esto convierte a la Directiva en una parte importante de la legislación del agua. Sin embargo, se necesitaron 30 años pare lograr este avance. Podrán imaginarse que esos 30 años y la Directiva misma nos han enseñado lecciones que podemos compartir con otros países y regiones. Y, obviamente, estamos listos para hacerlo. El punto fundamental es que no hay botones mágicos que podamos presionar para arreglar las cosas de inmediato. Con la IWRM nos queda un trayecto largo y difícil por delante, que requiere de paciencia y trabajo arduo. Sin embargo, al final todo ese trabajo duro rendirá sus frutos. La aplicación de la IWRM es como jugar con un suministro interminable de bloques de construcción. Con cada bloque colocamos los cimientos para el siguiente cambio necesario y tener la casa perfecta. Podemos preguntarnos si alguna vez lograremos nuestro objetivo fina, la implantación total de la IWRM. Pero cualquiera que haya visto a los niños jugar con estos bloques de construcción estará de acuerdo que el proceso representa el factor crítico de éxito. La consideración y las consultas de las ideas e intereses de los demás nos acercarán gradualmente a la perfección. De esta manera, el concepto de la IWRM parecería contradecir la satisfacción que debemos sentir al dar los pequeños pasos posibles. Personalmente siento esa satisfacción cada vez que tengo la oportunidad de constatar cuántos países, regiones y aldeas están haciendo frente a sus problemas del agua. 1 Por ejemplo, en octubre del año pasado estuve en Zhengzhou, China, donde fui testigo del inicio de la primera sociedad del agua de GWP a nivel de cuencas entre las nueve provincias chinas del Río Amarillo. Fue un ejemplo maravilloso de la participación de muchas partes interesadas y de una planificación integrada, que merece ser copiada en todo el mundo. 2 En noviembre del año pasado, estando parado sobre un canal de irrigación en Marruecos, de nuevo me sentí sorprendido al darme cuanta de que el trabajo que hagamos en los salones de conferencias internacionales no tiene ningún significado si no se hace nada para mejorar las vidas de las personas que viven en regiones con 3/4 3 problemas de agua. Y la experiencia más reciente que me impresionó enormemente ocurrió en enero, cuando acompañé a una delegación de Louisiana en un recorrido por las principales obras hidráulicas en Holanda. El senador y su delegación mostraron gran interés por aprender cómo enfrentamos nuestro propio Katrina, el huracán que causó devastación en nuestra costa suroeste en 1953, y que cobró más de 1 800 vidas. Puedo decirles con toda honestidad que estábamos ansiosos por compartir nuestro conocimiento, porque lo que sucedió en Nueva Orleáns trajo muchos recuerdos a la gente de mi país. La visita de la delegación de Louisiana me comprobó una vez más que es esencial compartir el conocimiento y las experiencias para enfrentar los problemas del agua que tenemos frente a nosotros. Damas y caballeros: En el décimo aniversario de la Asociación Mundial del Agua tenemos razones para sentirnos satisfechos, pues mucho se ha logrado. Sin embargo, no podemos confiarnos, porque queda todavía mucho por hacer. Creo que fue una decisión correcta dedicar este Foro a las mejores prácticas. Como bien lo saben, algunas personas consideran que los grandes eventos internacionales sobre sustentabilidad y desarrollo son más bien talleres de discusión que producen pocos resultados tangibles. Estos comentarios también se escucharon durante los preparativos para el Cuarto Foro Mundial del Agua. Los invito a que demostremos a los críticos que están equivocados. Al aprender de todos nosotros aquí y al motivarnos con las acciones y proyectos de los demás, podrán hacer un esfuerzo adicional cuando regresen a sus hogares. Se necesitará de toda su energía y resolución. Pero no queda otro camino porque, damas y caballeros: tenemos que llenar ese vaso. Muchas gracias 4/4