La vida de Hildegart Hildegart nace el Madrid en 1914 hija de Aurora Rodríguez Carballeira quien la concibe para liderar la "reforma social" de la España de principios de siglo, después de elegir cuidadosamente al padre a quién llama el "colaborador". Paradójicamente, Aurora quien considera que para la importante misión que tiene preparada es necesario que sea una niña, manifiesta a lo largo de su vida un claro desprecio por la mujer considerando a éstas incapaces de pensar, de sentir y desprovistas de alma. A pesar de ser inscrita con el nombre de Carmen Rodríguez Carballeira, utilizó siempre y sin apellidos el nombre de Hildegart que, según su madre, está formado por la palabra "gart" que significa jardín y "hilde" que significa conocimiento o sabiduría. El jardín de la sabiduría que parecía corresponder claramente con el objetivo que para ella tenía programado su madre. Bajo su absorbente control Hildergart crece como una niña prodigio que empieza a hablar al mismo tiempo que leer y escribir, en español, inglés, francés y alemán. A los once años ya comienza a dar conferencias, y a los trece finaliza sus estudios de bachiller, a los catorce comienza su carrera de derecho gracias a una dispensa especial que finaliza a los diecisiete, momento en el que inicia la carrera de medicina. Se afilia al sindicato UGT a los catorce años e ingresa en las Juventudes Socialistas madrileñas. Su vida está así marcada por una doble faceta política, como incansable activista, y científica en tomo al estudio de la sexualidad. Cofundadora, con Marañón, de la Liga Española para la Reforma Sexual, con su sede central en Berlín, mantiene también amistad con otras personalidades del momento. Sus relaciones se extendieron hasta las más importantes personalidades que en Europa estaban destacando en sus estudios en tomo al tema de la sexualidad, con Ellis desde Inglaterra y con Hirschfield desde Alemania. En la fascinante e increíble, especialmente por la edad a la que es realizada, obra de Hildegart se pueden diferenciar tres importantes fases La primera cuando con sólo once años pronunciaba conferencias y escribía artículos entre los que destacan los escritos en la revista Sexualidad, en la sección "higiene sexual". Será la segunda su época más conocida en la que escribe sus libros más divulgados desde un claro planteamiento feminista -defendiendo los derechos de las mujeres- y socialista defendiendo a la clase trabajadora-. Planteando la emancipación de la mujer a partir de su liberalización sexual. La tercera y última parte de su obra corresponde al último año de su vida, indudablemente la fase más madura y mostrando un dominio de la temática más sorprendente aún si tenemos en cuenta su edad. La calidad y profundización de su pensamiento queda patente también en el resto de sus aportaciones llevadas a cabo en esta época, fundamentalmente a través de sus conferencias. Pero esta intensa vida sindical y científica se ve truncada por su prematura muerte. Hildegart muere el 9 de junio de 1933 a la edad de 18 años asesinada por su propia madre quién parece ver truncada la importante misión para la que había sido concebida: abanderar la revolución social que permitiría la instauración de un socialismo ideal. Casualmente Ellis había escrito un artículo dedicado a Hildegart titulado la Virgen roja, en el que aplaudía y elogiaba su trabajo al mismo tiempo que censuraba la simbiótica relación que ésta mantenía con su madre, que llegó a las manos de Hildegart y su madre el día anterior al asesinato, lo que pudo haber actuado de detonante del fatal desenlace. De hecho en relación al móvil que pudo haber desencadenado la trágica muerte se barajaron dos hipótesis: el deseo de Hildegart de separarse de la agobiante presencia de su madre lo que ésta no podía ni quería consentir, o el supuesto "enamoramiento" de ésta, lo que su madre no parecía dispuesta a tolerar. Sin embargo, el trabajo de Hildegart no se desarrolló en solitario, y un amplio grupo de autores contemporáneos, entre ellos el doctor Gregorio Marañón, harán que el estudio de la sexualidad en la España de esta época no pueda ser considerado como un tema aislado de interés, sino una temática que aglutinó a un nutrido grupo de intelectuales de diversos ámbitos, y permitió que se aportaran relevantes contribuciones, que se vieron truncadas por la guerra civil española (1936-1939) y la censura que sobre esta temática caracterizaron los años de la dictadura de Francisco Franco y el olvido al que fue relegado este fecundo pasado y con él la persona de Hildegart. Maria Lameiras Fernández