¿Dónde te vas a quedar a vivir?

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¿Dónde te vas a quedar a vivir?
Zacarías 9:12
"Vuelvan a su fortaleza, prisioneros de la esperanza, pues hoy mismo les hago
saber que les devolveré el doble".
A veces cuando pasas por un problema o una situación difícil parece que la fe que
tienes está por debajo, que el problema supera tu fe, que el problema supera todo
lo que aprendiste acerca de Dios. Parece que todo lo que te enseñaron de Dios,
todo lo que te enseñaron acerca de la fe no te sirve para nada en medio del
problema.
Cada vez que pasamos por un problema se instala dentro de nosotros una lucha,
una batalla por un territorio. Ese territorio es el lugar donde te vas a quedar a
vivir; cada vez que hay un problema tú tienes que tomar una determinación: en
qué lugar te vas a quedar a vivir.
El enemigo trae un problema a tu vida y lo que quiere es que te quedes a vivir ahí,
que instales tu carpa en el territorio de la desesperanza; y Dios quiere
arraigarte en el territorio de la esperanza, donde todo se puede.
Esa lucha se instala dentro de tu mente; la lucha no es afuera; cuando hay un
problema la lucha es interna.
Hay dos batallas que vamos a pelear en medio de los problemas:
1) La batalla entre sobrevivir o progresar.
¿Qué es sobrevivir a un problema? Es decir: " bueno, tengo que pasar este
problema, ya vendrán días mejores, ya pasará; bueno, qué se le va a hacer, tengo
que pagar por mi error; voy a tener que pagar mi culpa por esto que hice; ahora no
voy a confiar en nadie más; ya pasará el momento malo, trataré de pasarlo lo
mejor que pueda".
Eso es sobrevivir al problema, saber que hay un problema pero me lo tengo
que aguantar. Personas que tienen mentalidad de sobrevivientes, personas que
achican su mundo y dicen: "tal vez tengo que perder mi casa por esta metida de
pata; tal vez tenga que perder mi familia; tal vez tenga que perder dinero; tal vez
tenga que perder la confianza, no voy a creer en nadie más". En vez de crecer,
sobreviven a su problema; achican su mundo, creen que han ganado pero en
realidad no han ganado una batalla.
1
Mente de sobreviviente, ¡fuera de mi vida!
Pensemos en lo que sucede en una sala de partos
Parecía que ya no dabas más; y el médico te dice en ese momento: "¡puje, puje!".
No te dice: "quédate tranquila, no hagas ningún esfuerzo, ya va a nacer..." ¡No! tú
gritabas y él te decía: "¡vamos señora, puje, puje!", porque esa mujer no se tiene
que quedar en el dolor.
En el momento de mayor dolor tiene que hacer fuerza para ver lo que ella
está esperando. En el momento de tu mayor dolor es cuanto más fuerza espiritual
tienes que hacer. Porque cuando viene más presión más cerca está la victoria;
por eso hay que pujar en fe, hay que ser fuerte, hay que usar fuerza de fe en el
momento del problema.
Tú no eres un sobreviviente; tú pujaste, tú obtuviste lo que querías pujando,
haciendo fuerza.
Tu mayor presión va a venir justo en el momento en el que estás a punto de
dar a luz tu gran sueño.
Por eso hoy tienes tanta presión; por eso ese problema te presiona tanto; por eso
hay tanta angustia; por eso parece que pierdes la fe; por eso en ese momento
tienes que hacer tu mayor esfuerzo de fe. Creé con más fuerza porque dentro
de poco vas a dar a luz a tu mayor sueño.
En ese momento del problema, en ese momento de la dificultad, en lugar de decir:
" bueno, tengo que aguantar, tengo que soportar" vas a decir: "no me voy a
detener, voy a hacer mi mayor esfuerzo de fe porque yo no llegué hasta acá, no
hice todo el esfuerzo que hice para quedarme atrás; yo no hice todo este esfuerzo
para tener mi casa y perderla ahora; yo no hice todo el esfuerzo para tener mi
familia y que se destruya ahora; yo no hice todo este esfuerzo para tener a mis
hijos y que se los lleve el enemigo. Si llegué hasta acá, hice un gran esfuerzo, voy
a terminar con fuerza, voy a terminar pujando hasta dar a luz mi sueño, lo que yo
quiero y lo que Dios quiere".
Uno no tiene que desanimarse en el momento del problema; uno tiene que decir:
"he trabajado para estar en este lugar, por lo tanto no voy a volver atrás, voy a
hacer mi mayor esfuerzo".
En ese momento de mayor presión uno tiene que acordase de todo el esfuerzo
que hizo para tener ese matrimonio, para criar sus hijos, todo el esfuerzo que
hiciste para tener ese negocio, todo el esfuerzo que hiciste para llegar a ser líder.
Ahora vas a repetirte: "no voy a volver atrás porque estoy a punto de dar a luz mi
mayor sueño". Tu cansancio te hacer decir: "me estanco, no me arriesgo
más; este problema me va a terminar matando; me dejo robar las cosas..."
2
¿Sabes cuándo el enemigo más ataca? Cuando sabe que perdió a esa persona,
que perdió ese territorio. Cuando el enemigo sabe que ese territorio ya no puede
tocarlo ahí el enemigo hace más presión y te ataca más fuerte, porque estás a
punto de conquistar el gran sueño que hay en tu corazón. Dice la Biblia en
Hebreos 10:35 que si sabes mantener tu fe, tu confianza, te espera la
recompensa. Vas a tener recompensa cuando tengas tu fe firme. De la fe nadie
me mueve. En el momento de mayor dolor, en el momento de la prueba, tú sabes
mantener tu fe, tú vas a recibir recompensa sí o sí de parte del cielo.
¿Cómo es la mentalidad de progreso?
La mentalidad de progreso es llegar a un nivel superior. Yo estoy pasando por
este problema y no voy a tener mentalidad de supervivencia, no puedo seguir
igual después de este problema; porque si yo estoy pasando por todo esto,
por todo este sufrimiento, por todo este dolor, tengo que subir a un nuevo
nivel.
Tienes que tener mentalidad de progreso, mentalidad de multiplicación. Es lo que
tenía Jesús: cuando estaba con los discípulos y había una multitud Él les
preguntó: "¿cómo les vamos a dar de comer?", y los discípulos -que tenían
mentalidad de supervivencia- dijeron: "Señor, hasta acá llegamos; que se vayan
a su casa, porque no tenemos para darle de comer a todo el mundo". Pero Jesús
tenía mentalidad de progreso, no de sobrevivencia; y con un milagro alimentó
a todos.
¿Qué mentalidad tienes tú? ¿De mantenimiento o de progreso? ¿Cómo estás
mirando tus problemas? Cuando Dios viene a la vida de una persona no es
para que sobreviva, es para que tenga mentalidad de multiplicación.
Yo sé que Dios te multiplicará. Dios va a multiplicar tu salud; Dios va a multiplicar
tu alegría; Dios va a multiplicar tus finanzas; Dios va a multiplicar tu fe; Dios va a
multiplicar tu casa; Dios va a multiplicar s tu pareja; Dios va a multiplicar a tus
hijos;
Dios te va a dar más. Porque la persona que tiene mente de progreso, tiene mente
de multiplicación.
Lo que viene después de la prueba es un nivel superior
La Palabra de Dios dice que aún en medio del desierto Dios nos multiplicará.
Si estás pasando por un desierto, el Señor está encargándose de multiplicar y de
enriquecer toda tu vida, aún cuando no veas nada. Dios te va a hacer próspero en
el momento del desierto.
3
El problema no viene para que aguantes; el problema viene para que
avances. Esa es la primera batalla: ser una sobreviviente, vivir en la tierra de la
desesperanza; o vivir en la tierra de la esperanza, donde hay progreso, donde hay
multiplicación, donde crezco en medio del problema.
Y después cuando miro atrás digo: "gracias Señor, porque he madurado, he
crecido; si no hubiese pasado por eso hoy no estaría en el lugar donde estoy". A
mayor sufrimiento mayor crecimiento. Dios te está tomando una prueba porque
ahora vas a pasar a un nuevo nivel.
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