Carlos Tereschuk Recopilación de los libros del “Proyecto Vida Plena” Portada de Gilbert Williams www.gilbertwilliams.com Edición Previa Julio 2002 INTRODUCCIÓN A LA MITOLOGÍA GRIEGA INDICE 1.- Necesidad y utilidad actual del lenguaje mitológico. 2.- Conceptos e hipótesis sobre la mitología griega. 3.- Temas de leyenda de los mitos. 4.- Teogonía de Hesíodo. Urano, Gea, Crono, Zeus y Einstein. 5.- Hermes/Mercurio, el rey de los ladrones. 6.- Algunas “relaciones peligrosas” Afrodita, Atenea, Marte. 7.- Afrodita/Venus y el espejismo de la soledad. 8.- El origen del dinero. Hefesto, Atenea y Erictonio. 9.- Procusto, y las fuentes actuales del sufrimiento inútil. 10.- Quirón, el más grande curador del Olimpo. 11.- Nuevamente Hefesto y el inconmensurable poder espiritual. 12.- La síntesis entre mitologías, ciencia, religiones y filosofías. 2 del Olimpo. Hefesto, 1.- NECESIDAD Y UTILIDAD ACTUAL DEL LENGUAJE MITOLÓGICO Veamos una hipótesis acerca de PARA QUÉ nos pueden servir en nuestra vida cotidiana los significados que se ocultan en los mitos griegos, según un fragmento del libro “TODOS SOMOS INMORTALES – La Naturaleza del Alma Humana – Elementos para una educación inteligente”. Los griegos y la Sabiduría Eterna Entre un conjunto de conocimientos realmente revolucionarios y maravillosos, y una educación basada en el materialismo más brutal y en el temor a Dios y a la muerte, resulta casi imprescindible un conjunto filosófico de transición, en lo posible no contaminado con enfoques ni orientalistas ni teológicos ni científicos que provoquen rechazo en las vapuleadas mentes occidentales, cargadas de modelos ya completamente inservibles, pero aún poderosamente grabados a fuego en el inconsciente colectivo. Esta transición puede ser facilitada grandemente por la mitología griega. Estamos comenzando a dilucidar los significados ocultos detrás del lenguaje mitológico, rara mezcla de poesía y desenfado cruel y soez, sorprendente, pleno de metáforas poderosas. Con gran sorpresa, comprobamos a cada paso en este camino que se está haciendo lentamente en todo el planeta, que las afirmaciones iluminadoras de la Sabiduría Eterna, coinciden asombrosamente con el mensaje mitológico. Esta es la causa del inevitable reverdecimiento de la astrología, simplemente porque la astronomía, indisolublemente vinculada con la mitología griega, son ambas poderosas fuentes en las que abreva este lenguaje simbólico pletórico de pistas para el autoconocimiento del hombre y le revelación de no pocos misterios del Cosmos. Veremos brevemente, porque no es el propósito de este libro constituirse en un manual de interpretación mitológica, algunas de las ideas involucradas en este lenguaje simbólico, irreverente pero riquísimo, suma de la astrología, la astronomía y la mitología griega. 1) Los Dioses y los hombres. Entre aquello que denominamos vagamente Dios, El Uno, El Innombrable, que se divide en dos: Theos y Caos que a su vez generan el Cosmos, operan un conjunto de individualidades poderosas que interactúan entre sí y con los simples mortales humanos, que son las doce constelaciones del Zodíaco, originadoras de todo lo manifestado, y las siete deidades del Olimpo, las responsables de la realidad, aunque sometidas, ellas mismas, a la Ley. Aunque imaginadas algunas con forma humana, son concebibles como potentes energías, respondiendo a la concepción einsteniana de que “Todo es Energía”. Entonces, Dios es inconocible, desde nuestro nivel de conciencia, y resulta casi infantil cualquier intento de descripción, particularmente aquella de un señor omnipotente y muy enojado. Entre esa vaga idea de Dios y, por ejemplo, Bill Clinton o Bill Gates, existen numerosos individuos muy poderosos, actualmente invisibles, que operan con las energías a su disposición. 2) El camino del héroe. El sentido de la vida de un humano inteligente está caracterizado por la ejecución de aventuras prodigiosas, el enfrentamiento de dificultades y monstruos aparentemente invencibles, y de estados que deben ser arduamente conquistados. Estamos diseñados para hacer, a pesar de la ilusión. Estamos pensados para encontrar nuestro camino entre los espejismos y los ensueños que constituyen lo que denominamos “realidad sensorial”. 3) El modelo humano involucrado. Tanto Hércules (Heracles que significa La Gloria del Alma), como Psique (que significa el alma humana), acceden a la inmortalidad luego de doce trabajos el primero, y de cuatro tareas la segunda, prefigurando 3 la epopeya del Cristo Resucitado, vencedor de la muerte e indicador del camino del hombre: “Haréis cosas más grandes que las que Hice”. 4) Somos únicos e irrepetibles. Considerándonos como hologramas de estas poderosas energías del Universo, en el momento de nuestro nacimiento se imprime en nosotros (o elegimos nacer con) un patrón energético arquetípico que equivale a una “foto” de ese Universo, tomada desde el lugar y en el momento preciso de este nacimiento, que nos posibilita explorar la realidad de una manera particular. Este patrón, de posiciones relativas entre las constelaciones y los planetas del sistema solar, no se repite ni en 25.000 años, considerando solamente los planetas conocidos hasta hoy. De modo que astronómicamente, no hubo, no hay ni habrá un ser como yo o como usted. La comparación y la competencia carecen de sentido lógico. También las evaluaciones. “Tú no deberías juzgar”, dijo Jesús. 5) Somos seres de origen y potencialidad divina. Somos chispas únicas e irrepetibles, divinas, fiel reflejo de un estado particular del Cosmos en tiempo y espacio. Cada uno de nosotros es potencialmente divino. El arquetipo o modelo es perfecto. Pero como igoramos esta realidad, no solemos expresarla con perfección. Por eso nos enfermamos y morimos. 6) El sentido de la vida, de la enfermedad y de la muerte. La vida cobra un sentido trascendente: expresar, en cada instante, el potencial inmanente, cuya definición es aportada por los significados de las cualidades que la mitología griega atribuye con gran claridad a las energías de las constelaciones y los dioses. La enfermedad y la muerte implican que no lo estamos haciendo bien. Cuando hayamos aprendido, seremos inmortales. “Y seréis como soles”. 7) El conocimiento y el desarrollo del potencial humano. Una Carta natal no es más que un dibujo que contiene estos tres niveles simbólicos (estelar, planetario e individual), que conforman un conjunto de polaridades que deben ser exploradas y trascendidas, ratificando “el Camino del Justo Medio”, herramienta que la humanidad agradece a Buda, y que sirve para encontrar el camino hacia el fin del sufrimiento inútil durante nuestra vida en la Tierra. 8) El destino de la Humanidad. Algunos mitos, como el de Jasón y los Argonautas, contienen la clave de los próximos desarrollos posibles de los hombres. Los 49 argonautas, en un viaje protegido por Atenea, la diosa de la mente humana inteligente, encuentran las fuentes de la abundancia y de la curación energética, en el Vellocino de Oro, que representa el cuerpo etérico, donde se hallan los centros de energía del cuerpo humano, tal como viéramos en el capítulo anterior. Los desarrollos científicos de la espiritualidad humana prometen ser, sencillamente, asombrosos. El Quinto Reino está al alcance de nuestra mente iluminada. 9) El destino del hombre y el libre albedrío. Este modelo filosófico incluye la idea de que los seres humanos hemos sido creados libres. En el sitio en donde tomamos decisiones todos los días, si no queremos no entra nadie. Ni siquiera Dios. Por eso se dice que somos libres. En realidad, estamos condenados a la libertad. Pero no lo sabemos. Por miedo o por ignorancia estamos acostumbrados (o adiestrados) para no hacer lo que nos gusta, y nos obligamos a hacer lo que no nos gusta. Entonces sufrimos, y hacemos sufrir a otros. Un esclavo tiene un destino previsible. Un hombre que asume su libertad es, potencialmente, un dios. Por eso se dice que las estrellas condicionan, pero no determinan. El libre albedrío existe, pero hay que asumirlo. 10) Somos creaciones evolucionantes. Este concepto sintetiza las dos corrientes que han estado en pugna durante los últimos quinientos años: la científica, propulsora de un darwinismo bastante infantil, que fuera repudiado por el mismo Einstein cuando decía que “Dios no juega a los dados”, para significar que todo lo que existe no es el producto del azar; y la postura eclesiástica, de que somos creaciones limitadas, no divinas, sin destino de perfección. Ambos conceptos limitantes, parciales, obtusos, son incluídos en un enfoque que los trasciende, enriqueciéndolos. Pero lo más importante es que enriquece la visión, el sentido de la vida de cada uno de 4 nosotros, como creaciones de origen divino que estamos evolucionando hacia destinos de perfección, relativa, por supuesto, pero infinitamente más ricos que el de una vida eterna en el cielo o en el infierno. De este conjunto muy simplificado de ideas, surgen preguntas que pueden ser innumerables, o ninguna, según el personal grado de aceptación de estas hipótesis, lo cual es perfectamente válido en cualquier caso. Plantearemos algunas que consideramos importantes. 1) Si fuera cierto que existen individualidades más perfectas que nosotros, pero menos perfectas que La Deidad, al estilo del Olimpo griego, ¿quiénes son y dónde están, hoy, estos individuos? El Papa nos dio una pista interesante, al informarnos que debemos esperar la tercera venida de Cristo, pues nos permite enfocar la pregunta, dividiéndola en otras dos: ¿dónde está, hoy, Cristo?; entre el nivel de Cristo y el nuestro, ¿no hay nadie más? Las preguntas no son fáciles de responder, si bien están escritas en los libros sagrados y en los libros más mundanos que hemos mencionado al comienzo de este capítulo, pero es posible recurrir a la filosofía hindú para rescatar la idea de ciclos de tiempo en los que los dioses no alternan con los hombres. Tal es el caso del Kali Yuga, o edad oscura, en la que la humanidad hace lo que puede, aparentemente sola. Nunca, sin embargo dejamos de ser asistidos, vigilados y amorosamente cuidados, de modos y por seres que no son perceptibles por nuestros sentidos limitados. Pero que podremos percibir si alcanzamos a expandir nuestra capacidad de percepción hasta los niveles del Vellocino de Oro, o del Cuenco Dorado, según la Biblia. 2) ¿Para qué me sirve a mí, en mi vida cotidiana, conocer o reconocer todo esto? La ignorancia y el miedo son las causas del sufrimiento inútil. No es posible vivir una vida plena si opero desde los niveles más bajos de mi naturaleza real. Si me guío solamente por los impulsos de la Bestia, pierdo la posibilidad de expresar los poderes notables de la Bella: Verdad, Bondad, Belleza, Energía Ilimitada, entre otros. La crisis es grande. La oportunidad, fugaz. Por primera vez en la historia todo está escrito. Sin embargo, el poder del modelo materialista es asombrosamente grande. Todavía tiene gran poder la maldición bíblica: “Ganarás el pan con el sudor de tu frente...” Todas las instituciones occidentales sostienen este paradigma, ya sea por ignorancia o por conveniencia. Todavía somos esclavos de un modelo de dependencia, sin recordar que hace 2000 años alguien levantó la maldición: “No te preocupes por lo que vas a comer ni cómo vestirás...” En estas épocas en las que escasean el trabajo y el dinero, la crisis es enorme, y la oportunidad también. Podemos aprender a manejar correctamente estas energías, o podemos perecer abrumados por el miedo y la impotencia. Dado que somos seres libres, de nuestra elección depende el futuro de la humanidad. Si asumimos nuestra libertad y nuestro poder inmanente, el destino de la humanidad será uno. Si continuamos siendo esclavos de la necesidad y el deseo, ese destino será completamente diferente. Todo está preparado por la Vida para una entrada triunfal en una era de abundancia, de luz y de paz. Nadie está exento en esta crisis. Es, en realidad, la más clara expresión del proceso de globalización en el que estamos inmersos. Nadie estará excluído de una elección personal, íntima, profunda, verdadera. No hay bunker, isla solitaria ni paraíso fiscal o financiero que nos posibiliten escapar a esta decisión trascendental, para cada uno y para la humanidad. La crisis es global. La oportunidad es grande. Y fugaz. 5 La educación basada en los valores del Alma es un elemento de vital importancia en este tiempo. Sería algo muy deseable que proporcionáramos a nuestros hijos la oportunidad para elegir correctamente, con el conocimiento amplio de las alternativas que existen y que están al alcance de cualquiera. 6 2.- CONCEPTOS E HIPÓTESIS SOBRE LA MITOLOGÍA GRIEGA Los relatos tienen, algunos, más de 3500 años. Reconocen distintas clasificaciones y orígenes diversos. El Diccionario de Mitología Griega y Romana de Pierre Grimal es un compendio notable, imprescindible para investigar significados ocultos. Algunas hipótesis interesantes son las siguientes: 1) Es un cuerpo de conocimientos que atravesó casi intacto las quemazones de Alejandría, de la Santa Inquisición y de Hitler, entre otras. Quizás porque parece sólo un conjunto de cuentos soeces, divertidos o dramáticos. Hacía falta un lenguaje tan soez como el actual para comenzar a entenderlo. 2) Las historias diluyen las fronteras entre pasado, presente y futuro, y también entre la realidad y la fantasía, si se leen como metáforas o parábolas. 3) Los personajes, sus relaciones y aventuras son símbolos arquetípicos que ocultan más significados y leyes de los que a simple vista revelan. 4) Son profundamente significativos en cuanto a la composición de la naturaleza humana y su desarrollo. 5) A pesar de haber sido ubicadas en el ámbito de las Artes, tienen mucho que decirnos aún sobre las regiones del conocimiento que denominamos Ciencias, Religiones y Filosofías, a fin de que podamos alcanzar las elevadas cumbres de la Sabiduría. 7 3.- TEMAS DE LEYENDA DE LOS MITOS TEMAS DE LEYENDADE LOS DIOSES, HÉROES Y MORTALES DESCRIPTOS EN LA MITOLOGÍA GRECORROMANA adulterios destierros nacimientos violaciones esclavitudes resurrecciones castraciones encadenamientos regalos descuartizamientos escupitajos sabiduría asesinatos seducciones rejuvenecimiento fulminaciones abandonos piedad quemazones flagelaciones amor sacrificios venganzas liberación amputaciones incestos fundaciones transformaciones vergonzantes metamorfosis flores rayos mutilaciones magia tormentas raptos curación engaños perjurio educación traiciones suicidios inmortalidad castigos canibalismo canto ahogamientos guerras milagros muerte locura vida Casi, casi, como hoy. 8 4.- TEOGONÍA DE HESÍODO. Urano, Gea, Crono, Zeus Y Einstein TEOGONÍA GRIEGA CAOS+THEOS GEA ♥ URANO (COSMOS) Océano ♥ Tetis Ceo ♥ Febe Crío Hiperión ♥ Tea Jápeto Themis Mnemosine Crono ♥ Rea Hades Poseidón Zeus ♥ Hera Deméter Hestia LOS TITANES Y LOS OLÍMPICOS La Teogonía de Hesíodo narra, culminando el mito fundacional, las relaciones entre Urano y Gea, que constituyen el Cosmos (orden), emergente de las relaciones entre Caos (La sustancia sin forma) con la que crean formas los dioses (Theos) Urano representa la energía creadora por excelencia del Universo. Dice el mito que era el hijo de Éter. Gea representa la Tierra o la materia con la que crea el Cielo uraniano. Ambos se unieron para crear y así fueron naciendo los dioses, entre ellos el menor, denominado Cronos (luego Saturno por los romanos). La creatividad, fogosidad y ansia de perfección de Urano eran tan grandes, que cubría a Gea todas las noches, y volvía a enterrar en su vientre a todos aquellos hijos que no cumplían con sus expectativas de perfección. Cansada de la aparente crueldad y del acoso uraniano, la pobre Gea urdió un plan para liberarse del asedio. Mandó a fabricar una guadaña de proporciones celestiales, y le pidió a sus hijos que la emplearan en contra del padre. El único que aceptó fue Cronos/Saturno. 9 Un atardecer en el que Urano se aprestaba a cubrir nuevamente a la pobre Gea, Cronos le rebanó los genitales con un certero guadañazo, tomando el poder sobre Gea y sus hijos, y casándose con su hermana Rhea. Su reinado fue sombrío, signado por el miedo, porque un oráculo le había informado que uno de sus hijos lo destronaría. Con el fin de evitar las consecuencias de la profecía, Cronos/Saturno se comía prolijamente a sus hijos a poco de nacer. En el Museo del Prado hay un cuadro de Goya, de su época negra, que retrata con horrible precisión el acto motivado en la temerosa conservación del poder. Cuando Rhea tuvo a Zeus, también cansada de la brutalidad saturnina, escondió a la criatura en una caverna y le dio a comer en sustitución, una piedra envuelta en pañales. Así salvó a su hijo, quien luego destronaría a Cronos, su padre oscuro, asumiendo el poder con el luminoso atributo uraniano del rayo. Desde entonces se suceden entre los hombres las representaciones en una espiral interminable que concretan ciclos de construcción conservadora, y de destrucción liberadora de las construcciones que no le sirven a los hombres. Un notable anuncio del fin de las estructuras esclavizantes saturninas lo constituye una asombrosa homonimia entre el mito y nuestra realidad cotidiana. El mito señala como el comienzo del fin del reinado de Saturno, el hecho de comerse una piedra en lugar del tierno Zeus. Einstein significa literalmente en alemán, una piedra. El principio del fin del reinado del miedo está constituido por el cálculo preciso del poder oculto en cada ser humano. La clave de la teoría de la Relatividad, expresada en la fórmula E = m.c2 , significa que todo es energía; que la energía oculta en la materia es enorme, y lo probó con la bomba atómica. Cada uno de nosotros está conformado por energías que equivalen a las de la bomba atómica que destruyó a Hiroshima, construida con aproximadamente 7 kilogramos de materia. La fórmula de Einstein no tiene restricciones acerca del tipo de materia. Entonces, si somos tan poderosos, ¿de qué podríamos tener miedo? Obviamente, el miedo y la ignorancia son los elementos con los que las pétreas estructuras saturninas de poder intentan conservarlo, aunque para ello tengan que comerse a sus propios hijos. No hay piedad en las fusiones empresarias del capitalismo salvaje. La característica más notable de las experiencias saturninas de conservación del poder consiste en la construcción de muros de separación, de aislamiento, íntimamente ligados al concepto de escasez, de falta. Lo que hay no alcanza para todos. Entonces hay que acumular para cuando falte. Además, no hay más remedio que excluir a los más débiles, aunque sean nuestros hijos y se mueran de hambre. Todo lo nuevo es sospechoso, salvo que me sirva para acumular más poder y protegerme de los cambios. Esta mentalidad de acumulación y exclusión generó la caída del Imperio Soviético. En este caso, la acumulación del poder político en una persona (Gorbachov), evidenciada por la falta casi absoluta de libertad individual y social en la población y en las estructuras rígidas del poder, posibilitó la destrucción incruenta del sistema casi esclavista en el que había degenerado el intento ruso, que había nacido bajo las banderas de la igualdad y la fraternidad. De la noche a la mañana, sin disparar un solo tiro ni matar a nadie, Gorbachov contribuyó al derrumbe irreversible del “globo” soviético, relleno de pésimas relaciones humanas. El capitalismo globalizado, tomando como bandera la libertad económica, distribuye algo del poder político y de libertad individual, pero acumula insaciablemente e irreversiblemente el poder económico, generando exclusiones dentro y fuera de sus dominios reconocidos. A punto tal que el dinero se ha convertido en un elemento escaso y caro, que no fluye como debiera, sino que está siendo endicado y acumulado en cada vez menos manos. La expansión global, cada vez más notoria, que tiene asiento en la universalización del sistema financiero, que a su vez mantiene relaciones íntimas pero ocultas con el narcotráfico y con el tráfico de armas, sigue 10 con tanta precisión el modelo saturnino que el capitalismo ya ha comenzado a “comerse” a sus hijos dilectos: los consumidores. Porque la peor esclavitud es la miseria, particularmente cuando viene disfrazada de libertad. Ninguno de los dos ensayos polares del comunismo y del capitalismo, ha comprendido la razón esencial de su fracaso. La libertad, la igualdad y la fraternidad humanas no son valores que puedan excluirse mutuamente ni desarrollarse por separado sin el riesgo de crear estructuras de dominación cristalizadas que irremediablemente tendrán que ser destruidas. Esto parece ser válido en todos los ámbitos de la experiencia humana: la política, la economía, los credos de las iglesias, los sistemas de enseñanza, los enfoques filosóficos, las civilizaciones, las organizaciones, las empresas, los grupos, las parejas humanas, y finalmente las personas. La conexión con el miedo, el pensamiento dogmático, las relaciones no amorosas, la falta de cuidado, la rigidez, la rutina, la desidia, son expresiones mucho más conectadas con la naturaleza animal que con la naturaleza divina del hombre. Por eso son mortales, según la mitología griega. Fragmento del libro “EL NACIMIENTO DE UNA NUEVA CIVILIZACIÓN” Cap. 2 11 5.- Hermes/Mercurio, el Rey de los Ladrones Transcribimos, del libro “EL NACIMIENTO DE UNA NUEVA CIVILIZACIÓN”, su Capítulo 20, que relata en detalle los problemas y la extraordinaria potencialidad de la mente humana. Capítulo 20.- La Religión Científica: la Unidad en la Diversidad. Re-ligare Hemos planteado que el empleo correcto de la mente es el modo de conectar aquellos planos del ser imperceptibles para nuestros sentidos limitados, pero cuyo poder y efectos son notorios para todo aquel que practique la libertad de pensamiento, y opere en la vida con apertura y sensibilidad. La misma persona, operando desde la conexión con la ira o el miedo, tiene comportamientos totalmente distintos si funciona conectada con la alegría y el amor. Lamentablemente, los instantes de brillo son pocos y efímeros. Una expansión de conciencia de tal magnitud que nos permita re-ligarnos o re-cordar lo que realmente somos, equivale a un re-nacimiento en vida, tal como el que Jesús le indicara como camino a Nicodemo, puntualizando que se trataba de un renacer espiritual y no físico. En todo episodio de nacimiento espiritual está involucrada la Virgen. Para tratar de hacer un poco más comprensible esta simbología mística, emplearemos conceptos de la Astronomía, de la Astrología y de la Mitología griega, con el fin de acceder a significados accesibles a nuestro acendrado materialismo. La Religión Científica involucrará la suma de conocimientos y experiencias que tienen que ver con el correcto empleo de la mente, como el aspecto integrador entre el Alma y la Personalidad. VIRGO, o La Virgen La constelación astronómica de Virgo es la única representación femenina entre las que integran el Zodíaco. Su estrella más brillante, visible a simple vista, es Spica, la espiga. Fecundidad y nacimiento son los símbolos de la femineidad en nuestro mundo cotidiano. En la Virgen, nace el Cristo. El útero y la placenta brindan un ámbito limitado y protector de la vida naciente; son símbolos femeninos que ocultan significaciones profundas de la potencialidad espiritual de los hombres. El nacimiento en la oscura caverna del retoño divino está expresado en la Biblia con la frase “Cristo en nosotros, es esperanza de gloria”. Constituye el primer reconocimiento consciente de un hombre de su probable condición divina. El ámbito limitado virginiano integra el eje zodiacal Virgo - Piscis, símbolos que pueden ser descriptos como La Parte y El Todo. El Todo es la Divinidad Trascendente, que nos incluye como la parte, en la que puede nacer y gestarse la conciencia de la Divinidad Inmanente. El vehículo de la fecundidad es Mercurio, operando como la Mente Iluminada. Hermes/Mercurio, el dios griego que fuera nombrado el mensajero de los Dioses del Olimpo, es el regente del signo de Virgo, y también el de Géminis. El contacto entre la Personalidad Integrada y el Alma, que se produce por intermedio de la Mente Iluminada, gestan al Cristo Interno, en una fecunda fusión cuyo reflejo es la sexualidad que conocemos. Los cuatro aspectos de Hermes/Mercurio Emplearemos la mitología griega como un notable instrumento simbólico, que en conjunto con la astrología, pueden operar como llaves de acceso a la verdad que han ocultado prolijamente durante milenios, hasta llegar a estos tiempos de revelación que hemos elegido para vivir. La mitología es un 12 cuerpo de conocimientos intacto que atravesó varios incendios de bibliotecas, probablemente por el hecho de estar redactado en un lenguaje soez, sólo comprensible en estas épocas de materialismo exacerbado. a) El Rey de los Ladrones o el dios del Comercio Hermes, el hijo de Zeus y Maya (la más joven de las Pléyades), es el primero de los dioses olímpicos. Representa varias de las facultades que podrían describirse como la mente elevada, una de las cuales es la insólita rapidez, representada en el mito como el veloz crecimiento del retoño. A las pocas horas de nacer, Hermes era un joven apuesto, alegre e inteligente. Como habíamos visto en capítulos anteriores, su primer acto consistió en robarle las vacas a Apolo, la divinidad solar. El ganado en el lenguaje mitológico representa a las ideas o pensamientos divinos. Las vacas de Apolo son la Verdad. Hermes se las llevó y las ocultó en una caverna. Apolo se quejó del abigeato ante los padres del joven, Zeus y Maya, quienes insólitamente lo defendieron, diciéndole a Apolo que un dios tan bello no podía hacer semejante cosa. La actitud de Zeus nos lleva a pensar que el Plan en la Tierra consiste en ocultar la verdad a los hombres. ¿Con qué finalidad? ¿Qué sentido tiene sumergir a seres autoconscientes en un mundo de ilusión? La única respuesta posible, para nuestra magna ignorancia de lo que somos y del Plan, es que la Escuelita del Dolor o de Respuesta Magnética, cuyos discípulos son llamados “los egresados del penoso esfuerzo” o “los adjudicadores que se encuentran entre los polos opuestos”, está diseñada para que aquellos que logren derrotar a la ilusión, al espejismo y a Maya, nunca jamás puedan ser engañados nuevamente por ningún otro miasma planetario. ¿Se imaginan la gran utilidad cósmica de tales seres? Volviendo a la mitología, la mente inferior está representada por un aspecto de Hermes/Mercurio que nos oculta la verdad, mereciendo ser llamado El rey de los ladrones o el matador de la verdad o el peor enemigo. Hércules, iniciando su camino a la inmortalidad, debió vencer a las 20.000 yeguas devoradoras de hombres, que representan a la mente inferior desbocada. Hermes/Mercurio es también el Dios del Comercio en nuestra civilización actual y en su predecesora, la civilización helénica, probablemente por varias razones, entre las cuales figuran la capacidad de comunicación, la rapidez y la inteligencia. Pero hay un episodio mitológico que representa mejor lo que significa el comercio en estas épocas. Cuenta el mito que Apolo no se conformó con la explicación de Zeus, y continuó buscando sus vacas. Como no podía ser de otra forma, encontró la caverna y a Mercurio sentado en la puerta de acceso, custodiando a las vacas. Rápidamente, el joven se apoderó de una tortuga que pasaba, y fabricó con el animalito una lira, que entregó a Apolo, enseñándole a tocarla. Fascinado, el Dios Sol se olvidó del robo de sus vacas. Ese fue el símbolo de nuestra sociedad de consumo desaforado, en la que el comercio y el marketing operan, no para satisfacer la necesidad humana verdadera, sino creando nuevas necesidades, quizás bellas, pero totalmente superfluas. Lo único que importa es vender, sosteniendo la ilusión, que es lo contrario de la Verdad. La clave simbólica de estos episodios está dada por un relato complementario. Los sabios habían sido reunidos por la divinidad para ocultar al hombre la Verdad, puesto que los dioses desconfiaban de su capacidad para emplear correctamente semejante poder. Luego de analizar varios sitios posibles (la cumbre de la montaña más alta, el fondo del océano), decidieron ocultar la Verdad en un sitio al que el hombre malo nunca llegaría, Y en caso que llegara, ya estaría preparado para usar bien el poder de la Verdad. Ese sitio es el corazón del hombre. La caverna donde Hermes ocultó las vacas de Apolo es el corazón del hombre. Allí se produce el nacimiento del Cristo Interno, en caso que aprendamos a usar la mente iluminada por la razón pura (que es amor) para descubrir qué nos gusta de corazón y elegirlo. Surgen dos preguntas, cuyas respuestas dejaremos para el final. ¿Hasta qué punto ha tenido éxito Mercurio en su gestión de generador de la Gran Ilusión? ¿Qué señales hay del nacimiento del Cristo Interno en la Humanidad actual? b) El Mensajero de los Dioses o el inventor del Juego que Ilumina El acontecimiento mitológico más significativo, luego del episodio de las vacas de Apolo, es el del nombramiento oficial de Hermes como Mensajero de los dioses por parte de Zeus/Júpiter, con la aprobación de Hades/Plutón y de Poseidón/Neptuno, que constituyen la Tríada Olímpica. Esta nueva función mercurial aparece vinculada a los gemelos Cástor, el Luminoso, y Pólux el Oscuro, estrellas 13 principales de la constelación de Géminis. Esta dualidad aparece también en las cualidades de Zeus/Júpiter, heredero de los atributos de Urano, la luz y el rayo, en contraposición con la Invisibilidad y la oscuridad de Hades/Plutón. La polaridad descripta se manifiesta también en la característica física del planeta Mercurio, el más cercano al Sol de todos los planetas conocidos de nuestro sistema, que posee el día más ardiente (400 grados centígrados) y simultáneamente, la noche más gélida (200 grados centígrados bajo cero). La dualidad o las polaridades que caracterizan nuestra percepción cotidiana de la Realidad, junto con la Ilusión, o el ocultamiento de la Verdad, configuran un contexto en el cual casi todos los hombres y las mujeres operamos “al borde de un ataque de nervios”. Nada de lo que nos transmiten los sentidos es verdadero, y aferrarse a un polo es nefasto. El problema actual de la humanidad consiste en que el desarrollo mental incipiente, y acelerado, sumado a la ignorancia de estas leyes, amplifica el miedo en nuestra vida. Porque si bien todos los libros sagrados, incluyendo a las mitologías, nos hablan de la solución, consistente en el desapego y en la confianza en nuestra condición divina, todos los días nos levantamos como Arjuna, el gran guerrero que no podía entender el sentido de tanta lucha inútil, en la que se veía obligado a matar a sus maestros y parientes. La única clave es el juego. Porque la palabra ilusión, etimológicamente, proviene de i - ludere, no juego, o falta de juego. La Verdad, que es lo contrario de la Ilusión, está en el Juego. Jugar al Juego de la Vida, sobre todo en épocas caóticas como la actual , implica la necesidad de DESDRAMATIZAR, de CONFIAR, pese a todas las apariencias, que la vida no está diseñada para embromarnos a nosotros. Si uno se aísla en un polo, por temor al otro polo, pierde el poder. Para que fluya la corriente, son necesarios los dos polos. Si uno acumula, porque cree que le falta, se convierte en un pedidor, cuando el diseño humano es , en realidad, el de un ser dador. Trascender la polaridad significa aprender a jugar entre los polos, sabiendo que el camino de trascendencia de la polaridad se encuentra en algún punto entre los extremos. Esa fue la síntesis de la sabiduría que Hermes/Buda legó a la humanidad. Cuanto mayor es la Crisis, más grande es la Oportunidad. Si no creemos que esto es así, nos perdemos el perfume de la vida. Y seguiremos operando como hijos de la necesidad y esclavos de nuestros deseos. Hasta que aprendamos el secreto de la DOSIS. Mercurio, en otra vuelta de la espiral, SANA con la dosis correcta. Más es veneno, menos, también. Mucha madre mata. Poca, también. Y en una vuelta aún más elevada de la espiral podemos convertirnos en SALVADORES, transformando la ofensa en amor (poniendo la otra mejilla), y transformando, por el inconmensurable poder del amor, la caca en flor, como hacen cotidianamente las plantas. Aprender a preguntar, y aprender a jugar, son las claves geminianas en las que Hermes/Mercurio es maestro indiscutido. ¿Qué y a quién preguntamos? ¿A qué juegos podemos jugar hoy? c) Hermafrodito o el vehículo de la Plenitud y la derrota de la Miseria La ilusión, el espejismo, maya y la dualidad incesante constituyen las causas primordiales de la miseria en la que vivimos inmersos. Hemos generado una sociedad no apta para niños. La plutocracia, suma de los tres únicos sistemas globalizados del planeta que son el narcotráfico, el tráfico y el uso de armas y el sistema financiero de acumulación salvaje, ejerce ocultamente el poder, sojuzgando a todos los sistemas políticos y económicos, que son aún nacionales. La tensión entre estos polos presagia un surgimiento interesante. En este punto es importante recordar el significado de la palabra MISERIA, porque contiene la clave del origen de nuestro estado actual como humanidad sufriente, y también la clave de la trascendencia posible de la polaridad evidente entre la miseria de los opulentos y la miseria de los desheredados del planeta. Miseria, según el diccionario es la escasez extrema de algo. No se especifica de qué. Tampoco en Latín se aclara qué es lo que escasea en la miseria. Es necesario recurrir a los griegos. La palabra está compuesta por otras dos. MIS es una partícula negativa, que aparece en el idioma inglés 14 como misbehavior o misunderstanding, y significa DESCONECTADO DE o FALTO DE. EROS es el dios del AMOR, Hijo de AFRODITA. Miserable es toda situación o actitud en la que estamos desconectados del amor. Y si no estamos conectados con el amor, estamos seguramente conectados con el miedo, o con el odio, o con la ira, que no son más que otros nombres del miedo. La plenitud y la abundancia, y en consecuencia el fin de la miseria, consisten en aprender a conectarnos con el Amor, que como sabemos, es la energía rectora y la más abundante en este sistema solar. Mercurio nos enseña, desde su apariencia mitológica, después de haber creado un mundo polar y de ilusión, el modo en que resulta posible un tránsito inteligente y amoroso por este valle de lágrimas que es la Tierra en esta época oscura. Simplemente, se trata de vivir conectados con el Amor. Aprender a elegir, por medio de la Mente, lo Bueno, lo Bello y lo Verdadero en cada momento importante de la vida. En cada encrucijada de los caminos griegos, existía una efigie de Hermes. Quizás para recordarnos que hay que elegir el Amor, la estatua estaba dotada de notables atributos sexuales. Hermes/Mercurio quedó prendado de Afrodita/Venus en el episodio en que ésta es atrapada en la poderosa red invisible de Hefesto, su esposo, en el acto en que ella hacía el amor con su amante Ares/Marte. El desairado Hefesto exhibió a los amantes inmovilizados por la red a todos los dioses, lo que provocó las interminables carcajadas divinas y el interés de Hermes por la diosa del Amor. Finalmente se unieron para generar a Hermafrodito, una divinidad bisexual, bella e íntegra, cuyo nombre recuerda la fusión amorosa de sus padres. Esta tercera función de Mercurio nos recuerda que la integridad humana, la plenitud y la abundancia, provienen de la fusión del Alma y la Personalidad por intermedio de la Mente Iluminada. Nada tienen que ver con las posesiones materiales ni con la cuenta bancaria. En cuanto a la humanidad, es posible afirmar que ya se perciben las señales tempranas del advenimiento de una civilización del Amor y de la Abundancia. El Papa acaba de anunciar la inminente venida de Cristo, que emergerá en el corazón de los hombres iluminando sus mentes. d) Psicopompo o el ayudante de Karma La cuarta función de Mercurio trasciende los tres mundos del esfuerzo humano. El nombre de Psicopompo con el que también se lo designa en la mitología, significa literalmente “EL acompañante de las Almas”. De modo que si no logramos liberarnos del deseo y de la necesidad por voluntad propia, Hermes nos acompaña en las sucesivas oportunidades en que la piadosa muerte nos libera de tales encierros ilusorios, nos lleva a un lugar apartado, y nos hace ver todo, todo. Luego nos pone en contacto con las Erinias, Guardianas y Ejecutoras de la Ley, a la que está sometido incluso el magnífico Zeus, quienes hacen un balance de nuestras deudas y nos proponen un plan de pagos accesible a nuestras posibilidades. Hermes era el dios que regía ciertas fiestas en las que intercambiaban roles los amos y los esclavos... Hermes/Mercurio reúne las funciones de Guardián del Umbral, de lector de los Archivos Akáshicos y de colaborador de los Señores del Karma. Por eso es el portador del Vellocino de Oro que buscan y encuentran Jasón y los Argonautas, y que puede tener el significado del cuerpo etérico, pero que no puede integrar este breve estudio por razones obvias, y que está destinado solamente a vislumbrar el poder revelador de este lenguaje simbólico que denominamos Mitología Griega. Las separaciones ilusorias, o los muros que se derrumban La fusión de los polos Virgo -Piscis, la Parte y el Todo, la integración de nuestros aspectos separados, fragmentados, posibilitan la primera expansión de conciencia, denominada el nacimiento del Cristo interno. Pero primero es necesario presentir, percibir, reconocer y destruir las separaciones, aquello que nos separa del Todo, del mismo modo que se destruye la placenta en el acto del nacimiento. Como sabemos, esto puede acontecer a nivel individual, y también al nivel de la Humanidad Una. Es posible plantear, entonces, la siguiente pregunta: ¿Qué grandes separaciones está percibiendo y 15 reconociendo la humanidad, como límites que deben desaparecer para integrarnos al Todo, o por lo menos para re-conocernos como seres divinos? Tal como habíamos planteado, la primera gran separación, que ha sido iluminada por la luz de la Ciencia, es la que conocemos con las palabras Espíritu y Materia. Einstein, a principios de siglo, expuso la idea de que la materia es energía, en su famosa formula E = m.c2, y la probó con la bomba atómica. La materia no existe. Es sólo una forma de energía. Espíritu y materia son energía. Todo es energía. Esta idea ha destruido las bases científicas del materialismo, y de la separación entre los conceptos de espíritu y materia, o entre religión y ciencia, creada por los teólogos hace más de un milenio, y custodiada celosamente por la Santa Inquisición, hasta dar lugar a la civilización más tremendamente materialista de la historia conocida. Podemos afirmar entonces que la combinación entre la Ilusión, el Olvido, el Kali Yuga, la ignorancia, y la impotencia de las diversas iglesias para mantener a los hombres vinculados con su espiritualidad ha sido altamente efectiva. Sin embargo, la brillante luz de la energía oculta en la materia ha abierto una brecha por la que ya se está filtrando la luz hacia la Humanidad en sombras. El hecho de que el materialismo esté herido de muerte es perceptible por los intelectuales abiertos a lo nuevo, aunque en apariencia el materialismo egoísta goce de muy buena salud. Pero la rigidez, la cristalización y la corrupción son signos inequívocos de la muerte de cualquier forma viviente. Ya se percibe el nacimiento de la nueva Ciencia de la Espiritualidad. La otra gran separación, que genera enormes cantidades de sufrimiento inútil, es la que denominamos escasez/abundancia. Todo el sistema económico del capitalismo vigente está basado en el concepto de escasez. La pseudo ciencia vigente afirma que economía es la administración de los recursos escasos. Y así surge la separación entre los denominados pobres y los denominados ricos, entre los conceptos de miseria y los de abundancia. Como hemos visto, la miseria es en realidad falta de amor en la vida. Cuando esto sea reconocido, se disipará la ilusión de la escasez, y nacerá la nueva economía de la abundancia. La Primera Teoría Científica de la Existencia del Alma ya tiene 25 años, y postula que la naturaleza del hombre puede ser comprendida como la de un holograma viviente de todas las energías inteligentes del Universo. Los conceptos de separación, de soledad y de escasez ya pertenecen a un pasado materialista e ignorante. Todo lo necesario para una vida digna es abundante, incluso el dinero como símbolo de valor nulo que representa el valor de la confianza entre los hombres. El problema es la ignorancia y el miedo. Por ello, la solución es la educación. Una tercera separación muy importante que mantiene divididos a los hombres en amos y esclavos, es el concepto bíblico obsoleto que todos conocemos y que dice “Ganarás el pan con el sudor de tu frente”. Prácticamente no existe ninguna institución que no esté basada en este principio, lo que demuestra la profunda ignorancia de la mayoría y la probable conveniencia de algunos para mantener vigente lo que en realidad es UNA MALDICIÓN BÍBLICA, que le propinara Jehová al pobre Adán cuando éste eligió probar la manzana del Árbol del Conocimiento, y que constituye la base ideológica de nuestra civilización judeocristiana materialista. Casi nadie recuerda que Cristo levantó, hace ya dos milenios, semejante condena a la esclavitud de los muchos, cuando dijo que no nos preocupáramos por lo que vamos a comer, ni por lo que vestiremos. Como no lo hacen los pájaros ni las flores del campo. Nuestro Padre sabe cuáles son nuestras necesidades. “Buscad, entonces, el Camino hacia el Padre, y lo demás os será dado por añadidura” La Humanidad, gracias al correcto uso de las facultades mentales, y a la sabiduría de Hermes/Mercurio, está a punto de liberarse de tres grandes esclavitudes milenarias: la del pecado original, la del dinero y la del trabajo. Cuando Cristo renazca en nuestro corazón, la Humanidad Una experimentará la iniciación del Nacimiento en Belén, que es la Ciudad del Pan. Para todos. El enfoque esotérico de Mercurio 16 Las Naciones Unidas han informado que en el presente siglo se han producido 250 guerras (251, contando la que penosamente continúa en el sudeste europeo), que han generado más de 110 millones de muertos. Es el siglo de las guerras. ¿Cómo podemos hablar de paz y de amor? En la astrología esotérica se afirma que la percepción de la realidad es lo que eventualmente diferencia al hombre inteligente común del que está más avanzado en la escala evolutiva, como los sabios o los maestros. Para éstos es posible ver más allá de las apariencias. Entonces, los significados simbólicos son más profundos y más incluyentes. Por eso, en otra vuelta de la espiral de la evolución, Mercurio aparece como el regente esotérico de Aries, el dios de la guerra: “Aries y Virgo, por medio de Mercurio y la Luna, se relacionan con la Armonización del Cosmos y del individuo a través del conflicto, produciendo unidad y belleza. Los dolores del parto del segundo nacimiento. EL CRISTO CÓSMICO E INDIVIDUAL” Es evidente que estamos sufriendo los dolores del parto. Aún no podemos ver claramente lo que nace, pero ya se está produciendo la rotura de muchas bolsas, y se percibe un gran hastío del conflicto, y de los guerreros que lo sostienen. En estos momento de aparente caos, de mucha sangre derramada, de sufrimiento porque algo muy grande fuerza su paso por canales vírgenes, es necesario enfocarse en lo más elevado, en el propósito de más prístina pureza que podamos concebir, y confiar. Se ve el conflicto porque Aries es el “lugar del nacimiento de las Ideas Divinas, del Plan de Dios para los hombres”. El lema superior para ARIES es: “SURJO, Y DESDE LA MENTE, RIJO” Las ideas del Plan están en inexorable conflicto con la realidad impiadosa de esta civilización materialista. Por eso , en los momentos de guerra, podemos hablar de la paz, y en los momentos de conflicto, podemos conectarnos con la armonía, y en los momentos de esclavitud más notables, como los actuales, en los que el narcotráfico esclaviza a gobernantes y gobernados, podemos hablar de libertad. No sólo podemos, sino que debemos. Cuando estés aterrado por la muerte, háblame de tu inmortalidad. Es la Ley, en un mundo de polaridades. La Unidad en la Diversidad La posibilidad del renacimiento, o la conexión consciente con el Alma, es el acceso a niveles del ser en los que la Unidad es un hecho, lo que permitirá delinear los esbozos de la religión, que será, como no puede pensarse de otro modo, tan unificada como la Humanidad Una, y estará basada en los conocimientos científicos que hemos descripto, cuyos postulados esenciales son muy claros y accesibles para la mayoría, y que posibilitan una relectura reveladora y en total armonía intelectual con la mayoría de las escrituras sagradas del planeta. Los presuntos misterios que guardan celosamente los sacerdotes de todas las iglesias será iluminados por esta nueva fusión entre ciencia y religión, a la que deberán sumarse las viejas iglesias so pena de desaparición por falta de seguidores ignorantes. No obstante, sin duda alguna, habrá nuevos misterios. 17 6.- Algunas “Relaciones Peligrosas” del Olimpo 18 7.- Afrodita/Venus y el espejismo de la soledad La mente inferior, alimentada por los sentidos limitados, produce la ilusión de la separatividad, cuya manifestación más conocida es aquello que llamamos yo, distinto, único y separado de lo que llamamos otro y otros, separado también de lo divino, de la naturaleza y del Cosmos. De allí surge la ilusión de la soledad de la que emana la fuerte necesidad de completarnos con algo o alguien “externo”, y el consiguiente impulso de adquirir y poseer que caracteriza a la mayoría de nuestras relaciones es esta etapa de la evolución humana. Del amor, ni hablar. Esta ilusión mental de la separatividad nos lleva a investigar a Afrodita (Venus), la diosa del Amor. Nacida de los genitales de Urano, que fueran cercenados por Crono (Saturno) a pedido de su madre Gea, cuando cayeron en los Océanos, el reino de Poseidón (Neptuno). AFRODITA (Venus) Emergió de las aguas la diosa más bella, cuya naturaleza está simbolizada por su nombre. Afros es espuma en griego. La fluidez acuosa de Neptuno provee la forma externa más perfecta que se conoce: una delgada superficie esférica transparente, que constituye la parte visible de las infinitas esferas que forman la Espuma del mar. La sutil naturaleza transparente del aire, provisto por el Padre Urano, permanece encerrada en el interior de cada esfera. Esta notable metáfora griega acerca de la naturaleza íntima de la diosa del Amor nos permite una comprensión muy clara de aquello a lo que llamamos espejismo. Las imágenes que refleja una burbuja transparente son dos (cualquiera puede hacer el experimento con una pompa de jabón): una imagen al derecho, y la otra al revés , porque la superficie externa de la parte anterior de la burbuja funciona como un espejo convexo, y la superficie interna de la parte de atrás de la burbuja funciona como un espejo cóncavo. Las dos imágenes del observador están invertidas (cabeza arriba y cabeza abajo). La imagen normal produce atracción. La imagen invertida provoca repulsión. 19 El verdadero Amor no es atracción ni repulsión. El verdadero Amor no es emoción ni ilusión. El verdadero Amor es Razón Pura, simbolizada por al aire del interior de la burbuja. Esta es una de las más adecuadas descripciones del espejismo, o del efecto engañoso que los sentimientos de atracción o de repulsión provocan en las personas no advertidas. (Del libro “EL ASOMBROSO DESTINO DE LA HUMANIDAD”) 20 8.- EL ORIGEN DEL DINERO. Hefesto, Atenea y Erictonio LOS CAPÍTULOS 2 Y 3 DEL LIBRO “EL FUTURO DEL DINERO” SE OCUPAN DEL MITO DE HEFESTO (VULCANO) Y ATENEA (MINERVA) CAPÍTULO 2: LOS MITOS: FUSIÓN DE PASADO, PRESENTE Y FUTURO La herramienta que con más frecuencia utilizaremos para explorar el pasado del dinero será la mitología, en especial la griega. La elección está fundada en dos razones. La primera es que el uso del dinero reconoce un estrecho vínculo con el primer rey de Atenas, como veremos. La segunda razón es que la mitología es un cuerpo de conocimientos en el que es posible percibir significados y ciclos históricos en que los modelos arquetípicos con que desarrollan sus relaciones los dioses, héroes y los mortales parecen tener validez tanto para representar el pasado, como para describir algunas vicisitudes humanas de la actualidad, y también para vislumbrar algunos aspectos de la probable evolución futura. Por ejemplo, el planeta Plutón fue descubierto en 1930. Para los griegos, 4.000 años antes, Plutón era “el rico”, “el poderoso”, “el invisible”, y conservó el nombre en la mitología romana... ¿Por qué los astrónomos le habrán puesto ese nombre al planeta? Los griegos, y también los romanos, asociaban a esa deidad con la abundancia de las riquezas ocultas de la tierra. El oro, la plata, ¿el plutonio?, la agricultura, ¿el uranio?... y también el reino de los muertos. ¿Serán éstas las épocas de develar algunos significados de las potencialidades ocultas de lo material? ¿Qué significa plutocracia? ¿Qué riquezas, además de la agricultura, del oro y de la energía atómica se ocultan en la materia? Las exploraciones realizadas en este siglo han sido impresionantes. La tierra es tan generosa, que una superficie mínima del planeta, estimada en un pequeño cuadrado de 250 Km de lado (una pequeñísima porción de los campos que atravesamos al viajar desde Buenos Aires a Mar del Plata), alcanza para dar de comer a toda la humanidad (6.000 millones de personas) durante toda la vida. Eso sí, empleando las últimas tecnologías. Einstein predijo con su ecuación (E = m. c2 ) que la energía encerrada en la materia en una masa equivalente a la de un cuerpo humano es igual a la de la primera bomba atómica arrojada sobre Hiroshima en 1945. Los griegos, cuando hablaban de Plutón, lo hacían con gran respeto. Y también con gran sentido del humor. Quizás esta última característica sea la que ha permitido que la mitología griega haya transitado casi intacta a través del extenso período de dos civilizaciones. El modo desenfadado de describir las relaciones entre los dioses y los hombres salvó a la mitología de ser considerada una religión. En efecto, las alternativas de vinculación están representadas por adulterios (de los que Zeus, el Rey del Olimpo, es el campeón indiscutido, aunque Hera, su mujer, no le va en zaga), violaciones, castraciones, descuartizamientos, asesinatos, fulminaciones, quemazones, sacrificios, amputaciones, transformaciones vergonzantes, rayos, tormentas, engaños, sacrificios, traiciones, castigos dolorosos, destierros, esclavitudes, encadenamientos, escupitajos, seducciones, abandonos, flagelaciones, venganzas, incestos, metamorfosis, mutilaciones, raptos, guerras, suicidios, y también nacimientos, resurrecciones, regalos, 21 sabiduría, rejuvenecimiento, piedad, amor, liberación, fundaciones, flores, magia, curación, educación, inmortalidad, canto, música, milagros, vida. Casi, casi, como hoy... Los mitos describen en forma simbólica la verdadera naturaleza del hombre y las energías que operan en el incesante proceso evolutivo que transforma a los simples mortales en héroes, y a los héroes sabios en dioses inmortales. Esta fuente de sabiduría atravesó los incendios de papiros y de libros y los intentos de censura que sufrieron otras expresiones de las culturas de la humanidad, quizás protegida por su doble condición de historieta alucinante y cuento fantástico, que comienza recién ahora, después de 40 siglos de oscuridad, a revelarnos los misterios más hermosos de la condición humana. Aunque algunos de ellos parezcan a primera vista, aterradores. La mitología, en el complejo abanico del conocimiento humano formado por las teologías, las ciencias, las filosofías y las artes, ocupa hoy un oscuro sitio dentro del área de la poesía como la historia de dioses y héroes de fábula. La mitología no ha trazado, como dice Toynbee, la línea divisoria entre la realidad, los sueños y los deseos del hombre. Lentamente, con el estudio de las mitologías comparadas y de las creencias religiosas, está emergiendo como un tesoro hundido que puede ayudarnos a disipar las tinieblas del miedo y de la ignorancia acerca del sentido de nuestra vida y del significado de los procesos históricos. Sin embargo, éste no es un libro de mitología ni de historia. Sólo es una interpretación libre de ciertos sucesos que nos preocupan. Por eso, no pretende ser aceptado ni creído, ni tampoco autorizado por nadie. Con lo cual se conserva intacta la libertad del autor de decir lo que se le ocurra, y también la libertad del lector de no creer en nada de lo que lea. A menos que le sirva para algo, en cuyo caso también está en plena libertad para emplearlo como mejor le parezca. Establecido lo cual, nos trasladaremos al inicio de nuestra civilización occidental, para explorar luego los comienzos de la civilización grecorromana, de la que nos reconocemos hijos dilectos. La caída del Imperio Romano a manos de los bárbaros coincide con la generación del cristianismo, hace unos 2.000 años. Esa caída marca el fin de la Civilización Helénica, de la cual el Imperio de los Césares es considerada su fase de expansión militar por algunos historiadores lúcidos. Dos mil años antes de ese suceso, la Civilización Minoica con epicentro en Creta, moría para renacer, renovada, en la península del Ática que alberga a la celebérrima ciudad de Atenas, considerada cuna de la filosofía y de la democracia. Su primer monarca, Erictonio, según los mitos, es una especie de “hijo” del Fuego y de la Razón. Cuenta la fábula que Hefesto, soberano del fuego central, que era rengo, se había enamorado apasionadamente de su hermana Atenea. La diosa virgen, nacida de la cabeza del propio Zeus, rey del Olimpo, merced a un certero hachazo oportuno de Hefesto, representa obviamente a las energías de la mente desarrollada del padre. Siempre armada, es la más implacable matadora de las ilusiones que ocultan la Verdad a los hombres. Todas sus experiencias son castas e impolutas, por lo cual no se le conocen hijos, salvo el propio Erictonio, nacido en uno de los más curiosos episodios míticos. Hefesto, que había quedado cojo porque su padre lo arrojó a la Tierra desde las alturas olímpicas cuando el párvulo había intentado salir en defensa de su madre Hera durante una disputa que ella sostenía con Zeus, recibió un día la visita de Atenea, que venía a encargarle nuevas armas. Hefesto quedó prendado de la diosa y de inmediato intentó satisfacer su fogosidad. La virgen huyó, pero el dios, aunque cojo, fue más rápido. En el forcejeo subsiguiente, el semen de Hefesto brotó y chorreó por la pierna de Atenea. Asqueada, logró huir del antro subterráneo, no sin antes limpiarse con unos vellones de lana que estaban a mano, los que al caer al suelo fecundaron la tierra con el potente efluvio de Hefesto. Erictonio nació de esa unión. Su nombre está compuesto por dos palabras griegas que significan “Lana” y “Tierra”. No resulta extraño que uno de los nombres del dinero, entre nosotros, sea precisamente “lana”. 22 Erictonio es considerado como el primero que introdujo en Atenas el empleo del dinero. Atenea lo reconoció y trató siempre como su hijo y lo educó cuidadosamente en su templo hasta que le llegó el momento de reinar en el Ática. CAPÍTULO 3: LEY, SEXO Y DINERO: HOY, Y EN EL COMIENZO Aunque la leyenda de Erictonio no se diferencia de los novelones de la televisión actual, donde la ley, el sexo y el dinero se mezclan hasta formar un barro bastante repelente, que reconoce su origen en la diarrea diaria de los telenoticieros, es posible ejercitar nuestra imaginación para rescatar algún significado más digno de Atenea que del cotidiano cóctel de sangre, semen y fuego que nos regalan los medios. Erictonio es un nombre que une las palabras Lana y Tierra. La lana aparece en dos relatos fundamentales de la mitología griega. Uno es el episodio de Atenea y Hefesto que acabamos de ver, y el otro es el del Vellocino de Oro, el famoso botín de lana áurea del viaje de Jasón y los Argonautas. Esta “lana” vital es empleada por Atenea y luego por el mismo Zeus como elemento de transmisión de energía o de poder. Hay otro mito que veremos más adelante, también relacionado con la lana. Representa, quizás, un elemento que si se usa en relación con los dioses más brillantes, etéreos e inteligentes de todo el Olimpo, permite a los hombres una conexión con la sabiduría de la diosa y con el poder creador del soberano único e indiscutido. Sobre este tema fundamental volveremos en la tercera parte del libro. En cuanto a la “madre” real de Erictonio, la Tierra, la potencia que reinaba en el mundo terrestre subterráneo era Hades, hermano de Zeus. En los dominios de Hades tenía Hefesto instalada su fragua. Su sobrenombre ritual era Plutón, “el rico”, poderoso, invisible, transportaba el cuerno de la abundancia porque su nombre significa “ocultador de tesoros enterrados”. También era el soberano de los muertos y del infierno. Presumiblemente Erictonio poseía los atributos plutonianos que le permitieron inaugurar el empleo del dinero: ¿Qué clase de energía acumulan los avaros y usureros de la tierra? Veamos. La unión de la “lana” (iluminada por Hefesto y Atenea), y de la “tierra” oscura y poderosa (gobernada por Plutón), ha dado lugar a combinaciones que se manifestaron como fuerzas notables. Oro, plata, diamantes, rubíes, esmeraldas, son productos brillantes y duraderos del reino mineral que fueron empleados como valores de cambio e incitaron siempre a la acumulación por su escasez y porque su tenencia ha otorgado poder y control a sus poseedores. ¿Poder y control sobre qué? Sobre otros hombres. Y mujeres. De ese modo la ley, el sexo y el dinero han establecido una relación cuyos frutos han sido muy diversos a lo largo de la historia. La unión (no otra cosa es el sexo) entre lo más luminoso y sutil del Olimpo, con lo más oscuro y concreto de la materia han generado los metales y las piedras “preciosas” que deberían recordarnos a los hombres el origen divino de todo lo que existe. Sin embargo, no suele ser ésta la motivación reconocible habitualmente ni por los usureros ni por los avaros, mucho más conectados con los aspectos estrictamente materiales de sus posesiones. 23 Otro brillo cegador, mucho más activo, repentino y poderoso ha sido revelado recientemente. La materia oculta una energía, manifestada por la fisión atómica, que ha sido empleada hasta ahora de modos bastante destructivos. ¿Conocemos todas las expresiones probables o posibles de esta unión primigenia entre la luz y la oscuridad, entre el espíritu y la materia? La ciencia investiga los procesos de fusión atómica, aparentemente más poderosos y menos destructivos. Y no puede afirmarse que no haya otros. Estas últimas expresiones, por otra parte, nos conectan con la idea de abundancia más que con la de escasez. Luego de esta brevísima recorrida, es posible imaginar que nuestras conductas relativas al origen, a la utilidad y al empleo del dinero no son de lo más sabias, sino que, más bien podrían calificarse de ignorantes. ¿Será inocuo acumular dinero? ¿Qué consecuencias emergen de los intentos de endicar o bloquear estas energías poderosas? ¿Tendrán algún uso correcto? ¿Servirán para algo diferente de la mera satisfacción egoísta de nuestros deseos? Estos enfoque nos hacen sospechar que hay leyes que no conocemos, vinculaciones sexuales diferentes, poderes de los que ni tenemos idea, y usos del dinero que deberían incitarnos a ser más cautos, por un lado, y fabulosamente optimistas, por otro. Hefesto es el ígneo creador de formas notables y poderosas, y es un dios que ha tenido contactos profundos con las diosas más bellas del Olimpo, Afrodita entre ellas. La diosa del amor, llamada Venus por los romanos, nacida de la unión de las aguas del mar y de la sangre vertida por Urano durante la castración que sufriera a manos de su hijo Cronos/Saturno mediante una guadaña que fabricara Gea. Hefesto es el Vulcano de la mitología romana. Los astrónomos aún no han descubierto ningún planeta con este nombre, por lo que es probable que no estemos preparados aún como especie para comprender el alcance de los poderes de Hefesto, por lo que nos concentraremos en el concepto de fuego que se oculta en la materia. Parece que estuviéramos con mayores posibilidades de explorar a Hades/Plutón, el soberano del lugar donde se oculta Hefesto. Lo que podría indicarnos el mito es que el fuego oculto en la materia fluye a través de la mente y el corazón de cada hombre, tomando formas diversas, cuya magnitud y cualidad recién estamos develando. Las diosas del Amor y la Sabiduría, trabajando con la potencia transformadora de los ciclos Plutonianos, están preparando a la humanidad para un surgimiento que puede ser fabuloso. Tanto, que es probable que sean completamente trasmutados nuestros gastados conceptos sobre la Ley, el Sexo y el Dinero. Hefesto, aparentemente feo, rengo y contrahecho, personificación del deseo sexual, lleva internamente la aspiración de unión con las energías más elevadas del Olimpo. Hefesto, el fuego de la materia, tiene como destino la unión gloriosa con el fuego de la mente y el fuego del amor. ¿Estaremos próximos a este surgimiento luminoso? Pero todo surgimiento está basado en una tensión que aumenta entre dos polos. ¿Cuáles son esos polos en la actualidad? El primero lo vimos en el Capítulo 1. Se trata de la descripción del enorme poder generado por las esclavitudes modernas: la de las drogas, la de las armas y la del consumismo. A ese polo lo llamaremos Plutocracia Egoísta Destructiva (PED). Egoísta porque está basada en la codicia y en la acumulación como ideal personal y grupal. Destructiva porque al prevalecer el crecimiento a toda costa y la concentración en pocas manos, es un sistema expulsivo. Cada vez menos personas poseen más dinero y bienes. 24 El otro polo, que se genera natural y espontáneamente por el mismo proceso de expulsión, es el de los que están viviendo en el sistema, pero no participan de sus beneficios. Lo llamaremos Proletariado Altruista Creativo (PAC). Son los expulsados que carecen de dinero forzados a unirse en la desgracia, y que son compelidos a emplear su inteligencia para sobrevivir sin quebrarse ni entregarse. Según Toynbee, esta tensión entre los PEDOS y los PACOS es la responsable de la caída de 20 de las 21 civilizaciones de la historia conocida de la humanidad. La única que subsiste aún es nuestra civilización occidental. ¿Es usted un PACO o un PEDO? Hay personas que son netamente PEDOS. Viven en la opulencia plutócrata sin el menor rastro de culpa. Son casos muy claros los narcos, los guerreros, los mafiosos, los dirigentes de la banca privada, del FMI, los dirigentes políticos neoliberales, etc. No vislumbran límites a la acumulación porque son seres esencialmente PEDIDORES. Nunca será suficiente. Hay personas que viven claramente una vida de PACOS. Son los devotos de todas la iglesias y credos del planeta. Están enamorados de su propia idea de lo que es Dios. No piensan en sí mismos porque son seres esencialmente DADORES. Todo se lo dan a los otros. El resto de los humanos transitamos (con bastante poca conciencia de ello) entre ambos polos, movidos por las fuerzas de la vida. Tenemos momentos de PACOS y momentos de PEDOS. Algunos de nosotros somos unos PEDOS atómicos en ciertos ambientes y unos PACOS notables en otros. En horario bancario, somos una cosa y en horario vespertino entonamos los cánticos a nuestros dioses preferidos. Están también los seres que han logrado trascender la polaridad. Pero nosotros no creemos que existan. Son como mitos. Es decir, una fábula. Son los Einstein, los Maslow, los Krishnamurti. Viven otra vida. No existen. Llega un momento en que los PACOS, cansados de soportar las esclavitudes y maltratos a los que los someten los PEDOS, destruyen el orden en el que se sustenta el sistema, generalmente aliados a los bárbaros externos, crean una nueva religión, y los actores del drama quedan liberados para emprender una nueva aventura de creación humana. Y surge entonces una nueva civilización, que toma lo bueno de las anteriores y crece hasta superar todos los límites históricos conocidos. Siempre, siempre, este crecimiento estuvo sustentado en las buenas relaciones entre los que tenían el poder y sus mandatarios, los pueblos de la tierra. El escenario aparentemente caótico en el que vivimos, permite abrigar muchas esperanzas de un surgimiento a una nueva vida, que tiene que ver con la posibilidad de un hombre nuevo, que emergerá de la potencia de la unión entre ambos polos de la realidad. La síntesis posible entre un ser humano egoísta (todo para mí) y un santo completamente altruista (todo para los otros) es un ser que, tomando las energías a su disposición, logra irradiar en su medio ambiente inmediato. ¿Qué puede irradiar un hombre? Las energías que lo integran. Las energías de Hefesto, Atenea y Afrodita, cuyo nombres modernos son: Verdad, para generar una nueva Ley. Belleza, para instituir nuevas relaciones, o el nuevo Sexo. Bondad, para manejar sabiamente la energía del Dinero. Alegría, para dar testimonio de que esa nueva vida es posible. ¿Qué estamos irradiando hoy nosotros? 25 9.- Procusto, y las fuentes actuales del sufrimiento inútil Cuenta la leyenda que Procusto era un bandido que tenía la costumbre de asaltar a los transeúntes indefensos que circulaban por los caminos del Ática, y los sometía a un destrato particularmente curioso. Los llevaba a su casa, y los ataba a un lecho. Si la pobre víctima era más larga que la cama, le cortaba la parte sobrante de las piernas. En cambio, si era más corta, procedía a estirarla hasta que tuviera la medida exacta. ¿Cuántos Procustos puede usted identificar entre las personas y los docentes que conoce? ¿Conoce algún sistema de evaluación o de clasificación que se le parezca a Procusto? ¿Cuántas veces en su vida sintió que le cortaban las alas, o lo estiraban para que diera una medida inalcanzable? ¿No hemos sido, alguna vez, unos soberanos Procustos con nosotros mismos? Nuestra condición natural de seres únicos e irrepetibles es poco conocida y menos aún respetada por las personas, las familias, las organizaciones y las instituciones actuales. De esta notable ignorancia se despliega la mayor parte de nuestro sufrimiento inútil. 26 10.- Quirón, el más grande curador del Olimpo El Planeta Quirón y la Herida Absurda Un misterioso párrafo bíblico nos recomienda algo extraño: “Pide y se te concederá; golpea y se te abrirán las puertas; busca y encontrarás; pregunta y se te responderá”. Nuestra cultura, materialista y arrogante, nos ha educado en la creencia de que lo sabemos todo. La pregunta es un tabú moderno, porque pregunta el que no sabe, y nosotros, en particular en la Argentina, ya sabemos todo... y así nos va. Además, si preguntamos, nos echan del trabajo, de manera que mejor no preguntar. Esto nos convierte en ignorantes pre-socráticos, simplemente porque Sócrates, el más grande sabio, decía “sólo sé que no sé nada”. El significado de la frase bíblica tiene que ver con la ley fundamental del desarrollo humano, que es la del Libre Albedrío. Hemos sido creados como Seres Libres. En el plano donde cada uno toma decisiones, no entra nadie. Ni Dios... Entonces, si uno no pregunta, la Vida respeta el Libre Albedrío. Si uno no pide, o no busca o no golpea, la Vida espera. Pero cuando uno lo hace, la respuesta es precisa y contundente, en los tiempos de la Vida. El clamor humano por un poco de cuidado, de curación, de sanación es tan grande, que en 1977 se descubre el planetoide Quirón, nombrado según el más grande de los maestros curadores del Olimpo, y entran en la escena casi todas las terapias alternativas, despertando la conciencia de la humanidad hacia las posibilidades concretas de curación disponibles. El asunto termina de clarificarse cuando en 1988 Quirón duplica su brillo, sin que los astrónomos hayan acertado a explicar la razón. Pero en 1989, la Organización Mundial de la Salud publica un informe sobre un relevamiento planetario efectuado por tres médicos occidentales. Las conclusiones son asombrosas; el 82% de la población mundial, es decir 5.000 millones de personas, nunca vieron un medico, ni lo verán hasta que se mueran. La recomendación de los tres médicos fue terminante: la única actitud inteligente consiste en integrar todos los sistemas de sanación conocidos, de los cuales el informe efectuó un prolijo relevamiento. La herida absurda de Quirón consistió en que era un centauro inmortal, que se hirió accidentalmente con una de las flechas envenenadas que empleaba Hércules, uno de sus más grandes discípulos, las que producían una terrible y dolorosa agonía, y luego la muerte. Pero Quirón, por ser inmortal, permaneció en una terrible, dolorosa y eterna agonía. Cuenta el mito que Prometeo, conmovido por la situación de Quirón, le cedió su derecho a la muerte. El principal enemigo de la medicina occidental es la muerte. Y la elección es tan desgraciada, que siempre pierde la batalla. Semejante estupidez se basa en la ignorancia de que la muerte no existe. Ignora la medicina que lo único que muere es una forma que ya no sirve al propósito del alma. Ignora la medicina que la muerte es una elección del alma. Ignora la medicina que la muerte es una piadosa ley inexorable que nos garantiza que jamás quedaremos atrapados en una forma que ya no nos sirve. Ignora la medicina que las causas de las enfermedades no están en el plano físico , sino en los planos más sutiles del ser humano. Todas las heridas absurdas de los humanos, particularmente de los occidentales, provienen de dos causas principales: la ignorancia de lo que somos, y de las leyes de la Vida, y el miedo a la muerte, origen de todos los otros miedos y broncas. Del Libro “EL ASOMBROSO DESTINO DE LA HUMANIDAD” 27 11.- Nuevamente Hefesto y el inconmensurable poder espiritual El Fuego Eléctrico en la mitología, la literatura y la ciencia. Un hijo notable de Helios, el Sol, era Hefesto (Vulcano para los romanos), el dios del Fuego. Oculto en las profundidades de la Tierra, donde tenía su fragua, era el hacedor de cosas notables del Olimpo, como el dinero y la primera máquina fotográfica (ver el libro “El Futuro del Dinero”). Íntimamente relacionado con Afrodita (Venus, la diosa del Amor) y con Atenea, la mente más alta y pura. Hefesto era un dios cojo, porque fue arrojado desde la cima del Olimpo hacia la Tierra por Zeus. Esta inmersión del Fuego Divino en la materia recuerda el enfoque judeo-cristiano de “los ángeles caídos”. Lo único que le pasó a Hefesto fue una renguera perpetua, pero eso no le restó capacidad para realizar cosas notables, como la colaboración para el nacimiento de Atenea por medio de un certero hachazo que partió la cabeza del mismo Zeus, dejando así en libertad a la energía de la mente. También ató a Hera, hermana y esposa de Zeus, a un trono de oro que construyó especialmente y que sólo él sabía desatar, cosa que hizo tras muchos ruegos olímpicos. Este atributo de amarrar a una deidad, que para muchos significa el alma universal, a la materia, implica un poder vital notable. Luego amarró a Prometeo a las rocas, por haber robado el fuego de la fragua de Hefesto para entregarlo a los hombres. Un águila le devoraba cotidianamente el timo que le volvía a crecer cada noche. Fue liberado por Hércules. Tal calidad atractiva o de voluntad inquebrantable para sostener un propósito implica la existencia de un poder excepcional. Dirigiendo a los Cíclopes, fabricaba los rayos de Zeus, las espadas de la mente de Atenea y las flechas de Apolo. Fue el hacedor de joyas y piedras preciosas. Era considerado un inventor notable, para quien ningún milagro técnico resultaba imposible, a tal punto que contribuyó a la creación de Pandora, la primera mujer, cuyo cuerpo modeló con barro, a la que Atenea le otorgó la mente, y a la que algunos mitos (y no pocos enfoques eclesiásticos posteriores), le adjudican la responsabilidad por la difusión de todos los males por la superficie de la Tierra. Este poder creador hefestiano podría interpretarse como inmanente o subyacente a todo lo que vemos, puesto que participa en su creación. Ese poder oculto en la materia comienza a develarse de manera inteligible para la humanidad a partir del empleo de la llamada “energía atómica”. No obstante, desde hace más de un siglo este tema ha logrado impresionar a varias mentes atentas de investigadores, literatos, artistas y filósofos, en particular desde el punto de vista eléctrico. En 1871, dos años antes que Maxwell formulara su Teoría de los campos electromagnéticos, Sir Edward Bulver Lytton (autor de “Zanoni”), escribió una novela llamada “La Raza Futura”, de la que transcribimos dos párrafos referidos a la energía que empleaba una raza humana evolucionada, con la que el protagonista había tomado contacto accidentalmente. “...gracias al gradual descubrimiento de las potencias latentes almacenadas en el omnicompenetrante fluido que ellos denominaron Vril.... “...tal fluido es susceptible de ser obtenido de toda clase de materia, animada o inanimada, y convertido en un poderoso agente. Puede destruir como el rayo; en cambio, aplicado diferentemente, puede restablecer y vigorizar la vida, curar y preservar. Se valen del mismo para curar las enfermedades, o mejor dicho, para ayudar al organismo físico a restablecer el equilibrio de sus poderes naturales y, de consiguiente, a curarse por sí mismo. Por medio del mismo agente atraviesan las sustancias más sólidas y abren valles al cultivo a través de las formaciones rocosas de su subterránea inmensidad. Del mismo extraen la luz que les proporcionan sus lámparas, la que es más fija, suave y saludable que la obtenida de las sustancias inflamables que utilizaban antiguamente. 28 “...En otra ocasión había manifestado yo el deseo de ver los vehículos que empleaban. Estos eran de dos clases; unos para viajar por la tierra y otros por el aire. Los primeros eran de todas dimensiones y formas; algunos no más grandes que los carruajes ordinarios; otros eran casas móviles de un piso, de varias habitaciones amuebladas, de acuerdo con las ideas de comodidad y lujo propias de los Vril-ya. Los vehículos aéreos estaban construidos de sustancia liviana; en nada se parecían a nuestros globos (en 1871 no se conocían los aeroplanos. N. del T.), sino que eran más bien embarcaciones de placer con timón y volante, con grandes alas en vez de remos y la máquina central actuada por Vril. Todos los vehículos, tanto los de tierra como los del aire, eran movidos por ese misterioso y potente elemento.” Por la misma época, pero esta vez en Filadelfia, John Worrell Keely inventó un generador de fuerza que él llamaba “una máquina vibratoria”, de la que decía: “Sólo después de investigar y estudiar minuciosamente las propiedades fenomenales de la substancia “etérea” , producida per se, he llegado a poder prescindir de mecanismos complicados, y a obtener, como pretendo, dominio sobre la fuerza sutil y extraña que estoy manejando” La máquina de Keely generaba energía de la nada, o mejor dicho del aire. Pero tenía un inconveniente grande que hizo fracasar el intento de comercialización: el motor funcionaba solamente si era operado por Keely en persona... En 1925 se publicó en los Estados Unidos de Norteamérica, en inglés, la primera edición de la obra “Tratado sobre Fuego Cósmico” de Alice Bailey, posteriormente traducida al castellano, de la que citamos los siguientes párrafos: “Primeramente, los científicos del plano físico podrán hablar con autoridad acerca del cuarto éter, aunque no lo reconozcan como el inferior de los cuatro grados etéricos de sustancia; se comprenderá su esfera de influencia y su utilización, y “la fuerza” llegará a conocerse lo mismo que hoy se conoce el hidrógeno, como un factor de la materia o la manifestación eléctrica de energía dentro de límites precisos. Su manifestación ya puede verse en el descubrimiento del radio, así como en el estudio de sustancias radiactivas y en la demostración electrónica. Este conocimiento revolucionará la vida del hombre; pondrá en sus manos lo que los ocultistas llaman “poder de cuarto orden” - en el plano físico. Permitirá utilizar la energía eléctrica para la regulación de su vida diaria en forma hasta ahora incomprensible; producirá nuevos métodos de iluminación y de calefacción a bajo costo y prácticamente sin gasto inicial. Quedará establecida como una realidad la existencia del cuerpo etérico; la curación del cuerpo físico denso a través del cuerpo etérico, mediante la utilización de la fuerza y de la radiación solar, reemplazará a los métodos actuales...” .... ¿Qué clase de civilización se podría crear con fuentes de energía eléctrica y de salud abundantes, disponibles y gratuitas? Sin duda, alguna más altruista y bella que la actual, donde podría ponerse en práctica aquello del mayor bien para el mayor número de personas. Algunos de nosotros podríamos dudar hoy de esa posibilidad, porque ¿qué impediría que esas fuentes fueran administradas, como lo son ahora, por seres ambiciosos, crueles y profundamente egoístas? Afortunadamente, Keely probó que la energía fluye solamente a través de hombres libres, conectados conscientemente con sus mejores valores. Por definición, un hombre libre no está conectado con el miedo ni puede ser sometido por ningún miasma planetario. Si lo fuera, perdería su libertad, y en consecuencia, su poder. O sería fulminado por uno de los rayos de Zeus. Por eso es necesario educar para la libertad, la igualdad y la fraternidad a todos los hombres, y fundamentalmente a nuestros niños. Todo lo demás vendrá por añadidura. Incluso, sin duda alguna, el fin de los intermediarios actuales en la energía. Del Libro “EL FIN DE LOS INTERMEDIARIOS” 29 12.- La síntesis entre mitologías, ciencia, religiones y filosofías La Síntesis o Fusión de los Enfoques Científicos, Religiosos, Mitológicos y Filosóficos. Nada de esto implica la desaparición ni el rechazo de los notables avances concretados durante milenios por los científicos de la historia de Occidente, sino una síntesis y una notable ampliación del campo de estudio y exploración del ámbito científico, que incluirá los aún más milenarios conocimientos de la sabiduría de Oriente, fusionados, como en realidad lo están, en el fabuloso cuerpo de conocimientos constituido por todas las mitologías, en particular la griega. Del mismo modo que la fórmula de Einstein sintetiza y unifica en el hombre los conocimientos científicos de Oriente y de Occidente, en un solo conjunto armónico e interdependiente de energía y materia. Veamos cómo: CENTRO ENERGETICO (Cuerpo etérico) ALBERT EINSTEIN CORONARIO AJNA LARINGEO GLANDULA (Cuerpo físico) EPIFISIS O PINEAL HIPOFISIS O PITUITARIA E = m . c2 TIROIDES CARDIACO TIMO PLEXO SOLAR PANCREAS SACRO BASE GONADAS ADRENALES Cada uno de nosotros, a cada instante, transforma energías emocionales, mentales y del alma, en materia, en forma de hormonas que son secretadas por las glándulas del sistema endocrino. Melatonina, adrenalina (la hormona del miedo), endorfinas (las hormonas de la felicidad), saturan el torrente sanguíneo según nuestro estado anímico sea de miedo o euforia, o de armonía excelsa con todo lo que existe. Los mecanismos fisiológico-energéticos del ser humano quedan así integrados para el estudio y la experimentación por parte de las nuevas ciencias del hombre. Para saber cuáles son los conocimientos del ámbito energético, debemos estudiar las ciencias de Oriente. Para saber cuáles son los conocimientos del ámbito material debemos estudiar las escuelas científicas de Occidente. 30 Para conocer la relación entre ambos cuerpos de conocimientos tenemos a Einstein. Para guiarnos en el nuevo camino tenemos a la mitología griega, y a todos los maestros que durante el último siglo han divulgado el precioso tesoro de la sabiduría eterna, y a los numerosos adelantos de las investigaciones científicas occidentales, cuyos resultados se acercan cada vez más a los conceptos y teorías del Oriente. Como ejemplo, la física subatómica investiga en la actualidad una nueva teoría a la que se denomina Cromodinámica Cuántica. Theos, Cosmos, Caos; Padre, Hijo y Espíritu Santo, o Shiva, Vishnu y Brahma, y la Cromodinámica Cuántica. La Santísima Trinidad, origen de todo lo que existe y constituye un Universo septenario, se denomina de diversos modos en los distintos sistemas de conocimiento. La Santísima Trinidad genera un conjunto de Siete Arcángeles ante el Trono de Dios, responsables de la manifestación septenaria de Universo (siete colores del arco iris, siete notas musicales, siete días de la semana, siete dioses olímpicos, siete glándulas endocrinas principales, siete centros etéricos, etc.) Shiva, Vishnu y Brahma se expresan por medio de los Siete Rishis de la Osa mayor. La Cromodinámica Cuántica es una teoría científica reciente que describe la Fuerza Nuclear Fuerte, que está originada por partículas que transportan cargas eléctricas Fuertes, que son TRES. Estos TRES Tipos de carga han sido denominados con los nombres de los tres colores básicos (Rojo, Verde y Azul), aunque no exista conexión aparente entre lo que son los colores en su sentido habitual. Estos tres “colores” pueden expresarse como su opuesto o ”anticolores”, o positivo y negativo, o Espíritu y materia. Matemáticamente, dos elementos que se expresan de tres formas distintas, pueden generar combinaciones diferentes, según la siguiente fórmula: siete 2n – 1 = 23 – 1 = 8 – 1 = 7 Que significa, en lenguaje corriente, que dos elementos esenciales (espíritu y materia), interactuando (o siendo impulsados por) tres formas distintas de movimiento, generan siete (ni más, ni menos) potencias diferentes que se expresan o constituyen los elementos básicos de su manifestación, que será diversa pero septenaria en su origen. La Santísima Trinidad, los Siete Arcángeles; Shiva, Vishnu, Brahma y los siete Rishis, y las Tres Cargas Eléctricas Fuertes que generan un universo septenario, parecen ser la misma cosa con nombres diferentes, y que por ejemplo en la Mitología Griega se designan con los nombres conocidos de Theos, Caos, Cosmos, y en otros enfoques reciben los nombres de Espíritu, Alma y Cuerpo, o Vida, Cualidad, Apariencia, o Voluntad, Amor, Inteligencia, o Espíritu, Conciencia, Materia, o Energía, Luz, Masa, etc., responsables de toda manifestación perceptible originada por lo imperceptible, por intermedio de siete combinaciones de poderosa energía creadora. Estas analogías son interminables, abarcando casi todas las religiones y las mitologías conocidas, y permiten acercarnos a la síntesis o fusión de los polos en la apasionante evolución del conocimiento humano, que integrará en un solo cuerpo, lo visible y lo invisible, lo material y lo espiritual, que ya no pueden ser estudiados en forma independiente, haciendo comprensible para todos el dicho de Hipócrates: “No puede ser llamado médico aquel que no conozca nada de astrología” y de Paracelso: ”Cualquiera puede hablar de lo visible. Médico es aquel que también puede hablarnos de lo invisible” Fragmento del libro “TODOS SOMOS INMORTALES” 31