Buenas Nuevas sitio: http://www.buenasnuevas.com << >> email: [email protected] Para crecer como Discípulos Misioneros Llamados por Jesús para anunciar su Reino por Marcelo A. Murúa Al llamar a los suyos para que lo sigan, les da un encargo muy preciso: anunciar el evangelio del Reino a todas las naciones. Aparecida, 144. Discipulado y misión son como las dos caras de una misma medalla: cuando el discípulo está enamorado de Cristo, no puede dejar de anunciar al mundo que sólo El nos salva. Aparecida, 146. El Evangelio nos muestra el camino " Cuando Jesús oyó que Juan había sido encarcelado, se retiró a Galilea. No se quedó en Nazaret, sino que fue a vivir a Cafarnaún, a orillas del lago, en la frontera entre Zabulón y Neftalí. Así se cumplió lo que había dicho el profeta Isaías: Tierra de Zabulón y tierra de Neftalí, en el camino hacia el mar, a la otra orilla del Jordán, Galilea, tierra de paganos, escuchen: La gente que vivía en la oscuridad ha visto una luz muy grande; una luz ha brillado para los que viven en lugares de sombras de muerte. Desde entonces Jesús empezó a proclamar este mensaje: «Renuncien a su mal camino, porque el Reino de los Cielos está ahora cerca.» Mientras Jesús caminaba a orillas del mar de Galilea, vio a dos hermanos: uno era Simón, llamado Pedro, y el otro Andrés. Eran pescadores y estaban echando la red al mar. Jesús los llamó: «Síganme, y yo los haré pescadores de hombres.» Al instante dejaron las redes y lo siguieron. Más adelante vio a otros dos hermanos: Santiago, hijo de Zebedeo, con su hermano Juan; estaban con su padre en la barca arreglando las redes. Jesús los llamó, y en seguida ellos dejaron la barca y a su padre y lo siguieron. Jesús empezó a recorrer toda la Galilea; enseñaba en las sinagogas de los judíos, proclamaba la Buena Nueva del Reino y curaba en el pueblo todas las dolencias y enfermedades." Mt. 4, 12-23 Copyrigth Buenasnuevas.com 2008 Pistas para la reflexión + El encarcelamiento de Juan el Bautista provoca un cambio en la vida de Jesús. Deja su casa familiar y su trabajo en Nazaret, para trasladarse a la zona del lago de Galilea y comenzar su predicación. + Mateo, que escribe para cristianos de origen judío que conocen las Escrituras, se esfuerza por relacionar la vida de Jesús con las profecías. Aquí señala que las palabras de Isaías (ver Is. 8, 23 y 9, 1) se hacen realidad en la práctica de Jesús. + La predicación de Jesús está centrada en el Reino de Dios. Mateo traduce esta expresión a «Reino de los Cielos» pues los judíos no podían nombrar a Dios. La forma de participar del Reino es la conversión personal, el cambio de vida, «renunciar al mal camino» y escoger el camino de Dios. + La primera actividad misionera de Jesús es convocar a otras personas a participar de su misión y formar una comunidad de seguidores. Sus primeros discípulos son gente sencilla, traajadores del pueblo que dejan todo, su trabajo, familia y bienes, para seguir sus pasos. + Juntos comparten la misión de Jesús: predicar el Reino anunciando la Buena Noticia y atendiendo las necesidades y sufrimientos del pueblo. Para compartir con nuestra comunidad Preguntas para partir de la vida • ¿Conoces personas que han seguido con fidelidad los pasos de Jesús? Comparte con los demás un retrato de esas personas, cómo vivían, qué hacían, por qué dejaron huellas en tí. Descubre en ellas rasgos de Jesús. Preguntas para profundizar el evangelio • ¿Qué significa el Reino para Jesús? Intentar dar respuesta a esta pregunta a través de las propias palabras y práctica de Jesús en los evangelios. ¿Cómo nos muestra y enseña qué es el Reino? Preguntas para pensar en la oración • Jesús nos llama para construir el Reino junto a El, ¿qué cosas debes dejar para seguirlo? ¿Qué cosas te atan e impiden dar una respuesta más profunda a su llamado? Compartirlas y ponerlas en sus manos. Para orar juntos Copyrigth Buenasnuevas.com 2008 Nos has llamado para construir el Reino contigo. Estamos dispuestos a dejarlo todo... Pero es difícil y necesitamos tu ayuda. Señor, convencenos de darlo todo, compartir nuestros bienes, nuestro tiempo, nuestros dones. Enséñanos a descubrir que cuanto más damos más recibimos y más re-conocemos los muchos talentos que nos has dado. Queremos vivir como servidores haciendo la voluntad del Padre y con la fuerza del Espíritu dando lo mejor de cada uno para que todos puedan vivir más y mejor. ¡Que así sea, buen Jesús! Marcelo A. Murúa [email protected] Recibiremos con gusto tus comentarios y sugerencias, escríbenos a [email protected] Copyrigth Buenasnuevas.com 2008