No. 7 Agosto / 05 LA MUSICA “CRISTIANA” CONTEMPORÁNEA Recopilación de Carlos H. Marroquín Vélez - Marzo / 2003 I. PASAJES DEL NUEVO TESTAMENTO SOBRE MUSICA Y CANTO Marcos 14:26, “Después de haber cantado el himno, salieron al Monte de los Olivos”. Generalmente la celebración anual de la Pascua comenzaba cantando los Salmos 113-114 y terminaba con los Salmos 115-118. Hechos 16:25, “Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían”. Efesios 5:18-19, “No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu, hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones”. Col. 3:16, “La palabra de Cristo habite en abundancia en vosotros. Enseñaos y exhortaos unos a otros con toda sabiduría. Cantad con gracia en vuestros corazones al Señor, con salmos, himnos y cánticos espirituales”. I Cor. 14:15, “¿Qué, pues? Oraré con el espíritu, pero oraré también con el entendimiento; cantaré con el espíritu, pero cantaré también con el entendimiento”. Santiago 5:13, “¿Está alguno alegre? Cante alabanzas”. Apoc. 5:6-13, “en medio de los ancianos estaba en pie un Cordero como inmolado, que tenía siete cuernos y siete ojos, los cuales son los siete espíritus de Dios enviados por toda la tierra. Él vino y tomó el libro de la mano derecha del que estaba sentado en el trono. Cuando hubo tomado el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero. Todos tenían arpas y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los santos. Y cantaban un cántico nuevo, diciendo: «Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos, porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje, lengua, pueblo y nación; nos has hecho para nuestro Dios un reino y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra» ”. II. NOTAS DEL LIBRO “LA ESTRATEGIA DE SATANAS” por W. Wiersbe: “La adoración cristiana debe estar ligada a la Palabras de Dios y el Espíritu de Dios. La Palabra de Dios es el ancla; el Espíritu de Dios es el timón. Dios no está dando ningunas nuevas revelaciones; nosotros construimos nuestra adoración sobre las verdades reveladas en la Palabra de Dios. Pero Dios sigue dando nuevas expresiones de las verdades antiguas, y esto es donde el ministerio del Espíritu viene para guiarnos. Debe haber un equilibrio y también discernimiento”. “Qué en cuanto el canto? Un profesor de seminario me dijo una vez que “la música era el departamento de guerra de la iglesia”, Ef. 5:18-19; Col. 3:16. “Es triste ver la adoración congregacional en el Espíritu siendo reemplazada por espectadores observando entretenimiento religioso en la plataforma del templo. Es aún más triste cuando ese “entretenimiento” presenta música que no es bíblica. ¡Un cantante no tiene más derecho a cantar una mentira que un predicador tiene de predicar una mentira!” “Satanás puede introducirse en una iglesia tan fácilmente por medio de una canción como por medio de un predicador liberal – ¡y talvez más fácilmente! La música juega con las emociones, mientras que la predicación toca primeramente el intelecto y la voluntad. No hay nada malo con las emociones en la adoración, siempre que sean sentimientos verdaderos y no un sentimentalismo superficial, y siempre que den como resultado una voluntad dedicada que obedezca la Palabra de Dios”. “En mi ministerio como conferencista, ocasionalmente he tenido que predicar después de un “número musical” que estaba tan alejado de las Escrituras que podría haber salido de la guía telefónica. No es fácil predicar la verdad de la Palabra de Dios después que una canción ha distorsionado la Palabra de Dios o la ha contradicho”. III. NOTAS DE: “EL ROCK INVADE LA IGLESIA,” por John Blanchard: “Algunos músicos cristianos parecen excesivamente interesados en la fama, en su imagen; algunas empresas discográficas parecen estar orientadas hacia las ganancias a expensas de los ministerios de sus artistas, y puesto que su “paquete” está envuelto en un lenguaje y justificación pseudo-evangélicos, pocos se han dado cuenta de lo que está ocurriendo”. “La industria de la música rock es quizá una de las más corruptas que existen, y la impensable transferencia de sus técnicas a la esfera cristiana ha dado como resultado las difíciles mezcolanzas de Evangelio y basura que en el pasado han llevado el nombre de ‘conciertos cristianos’ ”. “el acontecimiento pop evangélico le ofrece al joven cristiano una oportunidad de expresar su cristianismo de esta manera sin resistir la presión de su grupo cultural” “el pop cristiano no presenta demandas éticas, morales o espirituales” “la iglesia tiene un apetito mucho mayor por lo trivial y divertido que por lo bíblico y penetrante” “En toda la música pop, la letra es secundaria. La música pop es sentimiento, dirigido en primer lugar al cuerpo y sólo en segundo lugar al intelecto”. “descubrimos que los conciertos evangélicos produjeron el total más bajo de conversiones en cualquiera de las once categorías que incluimos. Para dar algunos ejemplos, la escuela dominical o clase bíblica, las campañas evangelísticas y los campamentos juveniles eran, cada uno, cinco veces más productivos, mientras que los cultos en las iglesias y la conversación personal eran cada uno la influencia principal en unas diez veces el número de casos”. “Puede que les interese saber que pasé diez años dedicándome principalmente a entrevistar y seleccionar candidatos [para el servicio misionero]. No recuerdo un solo incidente de un concierto pop que figurara en una conversión o llamamiento. Puede que sí, pero no recuerdo ninguno y en años recientes estuve más alerta a esta posibilidad”. “Martín Lutero dijo lo mismo más expresivamente: ‘La música debe ser alabada como secundaria sólo en cuanto a la Palabra de Dios porque mediante la misma todas nuestras emociones son sacudidas’ ”. “como escribió el predicador y comentarista del siglo XIX Albert Barnes: “El carácter prevaleciente de la música en la adoración a Dios debería ser vocal. Si se utilizan instrumentos, éstos deberán estar tan subordinados que el culto se caracterizará por el ‘canto’ ”. “no hay ninguna referencia en el Nuevo Testamento a la utilización de la música por parte de la iglesia primitiva para alcanzar a los no cristianos con el Evangelio (aunque la iglesia tenía evidentemente la música a su disposición)”. “¿Se equivocaron o sabían algo que nosotros hemos olvidado o dejado a un lado?” “Un análisis de las letras de la mayoría de las canciones gospel revela una idea muy superficial de la salvación y del cristianismo”. “La existencia de la ‘escena rock cristiana’ es un síntoma de una gran apostasía en relación con la Palabra de Dios en nuestros días”. PREGUNTAS ACERCA DE LA NUEVA MÚSICA “CRISTIANA”: 1. ¿Te ayuda a escuchar la Palabra de Dios claramente? Dios nos dio el Evangelio en palabras y nada en la música debe distorsionar u oscurecer o, en modo alguno, relegar al trasfondo lo que la Biblia llama ‘la palabra verdadera del Evangelio”, Col. 1:5. Si el volumen o disonancia de la música son tales que las palabras no se pueden oír claramente, entonces toda la actuación es un ejercicio absurdo”. Juan Calvino [el Reformador del siglo XVI]: “Debemos precavernos... no sea que nuestros oídos tengan más interés en la música que nuestras mentes en el significado espiritual de las palabras... Las canciones que se componen meramente para cosquillear y deleitar los oídos son impropias de la majestad de la iglesia y no pueden sino desagradar a Dios en grado sumo”. “El gran Agustín ciertamente así lo reconoció. En sus Conferencias escribió: ‘Me inclino a aprobar la costumbre de cantar en la iglesia. Sin embargo, ocurre que cuando me mueve más la canción que lo que se canta, confieso que peco de una manera que merece un castigo, y entonces preferiría no oír el canto’ ”. “Pero ¿qué de otras canciones? ¿Están basadas en la Biblia? ¿Es la Palabra de Dios lo que comunican? ¿Tienen un sólido contenido doctrinal? No toda la himnología es buena teología”. ¿Podría ser que lo que algunos de la audiencia oyen no es tanto un desafío a reconciliarse con el Dios que los ha creado y a quien han de dar cuenta de sus vidas, sino más bien una invitación a enamorarse de Jesús”. 2. ¿Tiende esta música a darte una mayor visión de la gloria de Dios? El evangelista americano David Wilkerson ha ejercido un notable ministerio entre los marginados y otros desfavorecidos y está muy familiarizado con la escena de la juventud actual... Los muchachos en la audiencia parecen disfrutar con la percusión. Baten palmas, sonríen, se relacionan, se animan y se emocionan. Pero algo dentro de mí, en lo profundo de mi alma, no se siente bien. Hay una pequeña herida que no puede explicar. Me siento como si el Espíritu Santo dentro de mí no diera testimonio apoyando a los sonidos del rock en medio de un culto de salvación. También tengo una sensación, un conocimiento interior, que el tierno Espiritu Santo no se siente cómodo en la atmósfera que la música crea”. 3. ¿Te hace esta música mirar con arrepentimiento la depravación del hombre? ¿Vence sinceramente estas dificultades la música que tocas, cantas o escuchas y lo hace de tal manera que te ayuda a llevarte al arrepentimiento, a aborrecer el pecado y no querer tener ninguna relación con él”. 4. ¿Te anima esta clase de música a vivir una vida piadosa y disciplinada? “La vida cristiana es una lucha, no un festival; un conflicto, no un concierto; una constante batalla contra las fuerzas del mal y demanda vigilancia, disciplina, sacrificio y determinación espiritual”. ¿Te capacita la música misma y la manera en que se interpreta a dirigir tu atención hacia Dios y no hacia los intérpretes? 5. ¿Te ayuda esta clase de música a separarte del mundo? ¿Qué voz estás oyendo en tu música? ¿Apela a lo sensual o a lo espiritual? ¿Parece tener sus raíces en este mundo o en el cielo? ¿Estimula apetencias puras o impuras? ¿Te lleva a desear más los valores de este mundo o menos? ¿Se sienten los impíos cómodos o violentos con ella? ¿Ayuda u obstaculiza el deseo de librarte de la manera mundana de hacer las cosas? 6. ¿Es esta clase de música lo que te imaginas ser parte de un avivamiento espiritual? ¿Dirige la atención a los intérpretes o a Cristo? Siempre que la música haga difícil ver al Hijo por causa de las estrellas, ¡podemos estar seguros de que algo va mal! 7. ¿Es ésta la clase de música bajo cuya influencia puedes imaginar cómo los cristianos son atraídos a un servicio misionero sacrificado a tiempo completo? ¿Es una música que te ayuda a calcular reflexivamente el costo de un compromiso con Cristo de todo corazón? 8. ¿Esperas hallar esta música en el cielo? la Iglesia”) (Hasta aquí el libro “El Rock Invade IV. NOTAS DEL LIBRO: “EXPLOSION CARISMÁTICA”, de W. Bühne “Así no es de extrañar que poco a poco las convicciones carismáticas estén entrando en las iglesias por medio de estas canciones, influyendo en su teología”. “Está muy acertado lo que dice Martín Wollin al respecto: “Los amigos de Lutero se enfurecieron más por sus nuevos himnos que por su predicación, ya que sabían que la dogmática cantada podía asentarse de manera mucho más duradera en el pueblo que cualquier predicación. Lo que hay en nuestros himnarios es generalmente doctrina cantada. La selección de los himnos era la tarea de especialistas con una motivación teológica y su criterio decisivo era transmitir afirmaciones teológicamente sanas sobre Dios, Su reino y la Iglesia”. “Entonces, de verdad que hay que sorprenderse de la ingenuidad de los responsables que creen que los cánticos del movimiento carismático son inofensivos”. V. NOTAS DEL ARTÍCULO: “GUÁRDESE DE LA FILOSOFIA ECUMÉNICA DE LA MÚSICA CRISTIANA CONTEMPORÁNEA” “La música cristiana contemporánea es uno de los pegamentos que mantienen unido al movimiento ecuménico de los últimos tiempos, y representa un gran peligro a las iglesias creyentes de la Biblia”. “La apostasía de los tiempos del fin está caracterizada por un rechazo de los enérgicos absolutos y amonestaciones y doctrina de la Biblia y por maestros que miman en lugar de predicar, que generalizan en lugar de ser específicos, que son positivos antes que “negativos”, que construyen la autoestima en vez de llamar al arrepentimiento”. “La música cristiana contemporánea está bien acomodada en los contextos más ecuménicos. La misma música será perfectamente adecuada en un retiro católico romano o en una conferencia del Concilio Mundial de Iglesias o en un avivamiento carismático de la risa”. “La música cristiana contemporánea fue la música del masivo programa evangelístico “Key 73”, que fue promovido por____ y muchos otros líderes cristianos claves. El programa reunió a bautistas, metodistas, episcopales, presbiterianos, luteranos, pentecostales, carismáticos y católicos romanos. Para crear una unidad ecuménica tan ancha se requiere que los asuntos doctrinales sean ignorados. El mensaje deberá ser limitado cuando la asociación es agrandada. Esta filosofía ecuménica controló el tipo de música que fue usada: “Se envió una amplia invitación para que fueran escritas músicas nuevas que promovieran el mensaje de “Key 73” con varias condiciones: el uso de las palabras justicia, juicio, santidad, arrepentimiento y varios otros términos bíblicos no fue permitido, y las letras debían ser de una naturaleza positiva. Había un esfuerzo intencional para escribir canciones no ofensivas. (H. T. Spence, Confrontando la Música Cristiana Contemporánea”. Recomendamos leer los libros anteriores para mayor información. VI. NOTAS DEL ARTÍCULO “¿POR QUÉ CANTAR HIMNOS?” por Arlin Horton El Dr. Arlin Horton, dice: “Un más serio dilema que ése ha venido a nuestro país. Muchos jóvenes hoy están creciendo en iglesias que nunca cantan los grandes himnos de nuestra herencia cristiana, ni tendrán el gozo de cantar los himnos los himnos del Evangelio acerca del cielo o la vida santa. Se les está negando la herencia de himnos que han hermanado a los cristianos por generaciones y que han implantado verdades bíblicas en las mentes y corazones del pueblo de Dios. Ellos serán extraños a todo eso. ¡Qué pérdida para ellos!” La música contemporánea (rock) está totalmente de moda en muchas iglesias. Su apelación a la carne y al “mundo” hace que sea aceptada con gran entusiasmo por los bebés en Cristo, por los creyentes mundanos y por los asistentes a la iglesia que no son salvos”. “La tendencia de hoy es reemplazar los himnos tradicionales con coros de alabanza contemporáneos. Esta no es una buena tendencia, especialmente para la juventud y los nuevos creyentes quienes necesitan un fuerte enfoque doctrinal. La mayoría de los coros de alabanza contemporáneos carecen de este énfasis. Por ejemplo, un musulmán puede cantar muchos de esos coros y nunca expresar ninguna contradicción a su fe, porque los coros de alabanza tienden a enfocarse en nuestros afectos hacia Dios en vez de centrarse en la verdad doctrinal”. “Los coros de alabanza contemporáneos a menudo omiten la identidad del Dios a quien le están cantando, y son tan vagos que podían ser cantados a cualquier dios falso”. “Descartar los himnos no sólo es una falta de sabiduría, sino también peligroso, porque la identificación y carácter de nuestra fe cristiana depende de las distinciones doctrinales. Al cantar los himnos que están empapados con las verdades doctrinales, ayudamos a proteger a las generaciones jóvenes contra la acusación bíblica: “no hay verdad, ni misericordia, ni conocimiento de Dios en la tierra”, Oseas 4:1. VII. LA MÚSICA MODERNA CONTEMPORÁNEA: UN VEHÍCULO SUTIL PARA EL ECUMENISMO Ha desplazado a la música acumulada por las iglesias evangélicas durante cinco siglos. Su mensaje es muy superficial y de poco contenido teológico evangélico protestante. Puede ser cantada por cristianos, miembros de sectas y aun no cristianos, pues no alude a los temas distintivos del cristianismo evangélico y no compromete con lo que afirma. Es indefinida, por ello promueve sutilmente el ecumenismo o unificación de todas las ramas del cristianismo, primer paso para la reunión de todas las religiones. Usa los mismos ritmos y estilos de la música secular de la cual no se diferencia. De lejos, al no escucharse las palabras, se confunde con los ritmos populares mundanos. Apela a la sensualidad y a la danza y no profundiza en las demandas morales al cristiano. Menciona poco o nada a Dios y a Jesucristo, o lo hace sin definirlo más en detalle. Evita temas como: pecado, arrepentimiento, castigo eterno, llevar la cruz, negarse a sí mismo, el camino estrecho, tentación y otros que comprometen al que canta y al que oye. Con frecuencia se canta ininterrumpidamente, por largos períodos, acompañada de aplausos, danzas y otros movimientos para producir estados de éxtasis. Muchos prefieren cantar más que dar tiempo para la predicación expositiva de las Escrituras. Pareciera que se le habla más a Dios y casi no se le permite que Él hable. Es curioso que mucha música moderna no hable de la encarnación, de la Navidad, de los sufrimientos, muerte y resurrección de Cristo, del perdón por Su Sangre, y otros temas, también pasados por alto por el gnosticismo y el pensamiento positivo. Aunque se le llama “música de alabanza”, no debería ignorar los temas mencionados anteriormente. A diferencia de lo anterior, analicemos estas estrofas del Himario “Corazón y Vida”. “Alabado el gran manantial, que de sangre Dios nos mostró, alabado el Rey que murió, su pasión nos libra del mal. Lejos del redil de mi dueño, vime mísero, pequeño vil, Lávame le pude decir, y nívea blancura me dio”. En este viejo canto de alabanza, sí se menciona la pasión y muerte de Cristo, su sangre expiatoria, el pecado y la miseria humana, el arrepentimiento y la conversión. Y veamos este otro canto: “Cristo nació en un pesebre, la amarga copa bebió. Cual inocente cordero en el calvario murió. Resucitó de la tumba y al cielo ascendió, Más pronto viene en su gloria, esta promesa nos dio”. En este otro himno se halla un credo en compacto: el nacimiento de Cristo, sus sufrimientos y muerte expiatoria como el Cordero de Dios, su resurrección y ascensión; y su segunda venida. Si hacemos a un lado el tesoro teológico y doctrinal del Himnario Corazón y Vida, se habrá desechado una valiosa enseñanza bíblica para la vida cristiana. El himnario Corazón y Vida debe ser utilizado nuevamente con nuevo entusiasmo, pues se trata de mensajes bíblicos y sermones cantados, que son una recopilación de cinco siglos de cristianismo. Esto no quiere decir que no se incorporen nuevos cantos debidamente escogidos, que procedan de autores cristianos evangélicos y tengan un mensaje bíblico definido, con música que se distinga como reverente y solemne y no se confunda con los ritmos mundanos de rap, rock, cumbia, merengue, etc. Escojamos muy cuidadosamente la música que se utiliza en el culto público en nuestras Iglesias Evangélicas Amigos. No nos dejemos seducir por la música con ritmos sensuales, volumen escandaloso y pobres en enseñanza que están de moda en otras iglesias. VIII. CÓMO SELECCIONAR MUSICA CRISTIANA PARA LA IGLESIA La Iglesia local debe tener una comisión integrada por adultos y jóvenes para examinar la música antes de utilizarla en la iglesia. Esta debe explicarle a la congregación los criterios que se usarán para la selección, entre ellos: 1. Los cantos deben ser examinados en cinco aspectos, hasta donde sea posible: el autor, la música, la letra, la procedencia y su ejecución. a. El autor: debe investigarse quién es, a qué iglesia y denominación pertenece, su servicio y su testimonio. b. La música: el ritmo debe ser tal que, al tocarse sin palabras y oírse a la distancia, no se confunda con los ritmos mundanos ni dar la impresión de que se celebra un baile. El ritmo no debe incitar la sensualidad –placer para el cuerpo y los sentidos- y no incitar a los aplausos y a la danza. El ritmo es sólo un vehículo para elevar las palabras delante de Dios. Ejemplos: “Dulce Oración”, “Es Jesucristo mi Todo”. c. La letra: debe mencionar clara, repetida y valientemente a Dios en cualquiera de sus nombres usados en la Biblia: Jesucristo, el Señor, el Todopoderoso, el Salvador, el Consolador, etc. Debe tener un mensaje bíblico inconfundiblemente identificado con las iglesias evangélicas: Sólo Cristo salva; La Biblia es la Palabra de Dios; Somos salvos por la sangre de Cristo en la cruz; Andaba perdido y Jesús perdonó mis pecados; Busca a Cristo o irás a eterna perdición; Jesucristo pronto viene por sus redimidos; etc. Hay que descartar los cantos de autores que de manera consistente rehúyen los grandes temas del Evangelio: El nacimiento de Jesucristo, su encarnación, la Navidad, la condición caída del hombre, el llamado al arrepentimiento, la conversión por aceptar a Jesucristo como Salvador personal, el perdón de los pecados por el sacrificio de la cruz, etc. c. La procedencia: Deben rechazarse los cantos que proceden de los círculos carismáticos ecuménicos y sus enseñanzas: pensamiento positivo, evangelio de la salud y la prosperidad, movimiento de la palabra de fe, etc. d. Su ejecución: Los cantos que se toman de videos, películas, conciertos en vivo, en los cuales los intérpretes imitan a los cantantes del mundo con sus ropas, actuación envueltos en cambiantes luces de colores y humo –todo contrario a la sencillez y modestia que enseña la Biblia - deben ser desechados. ACLARACIÓN IMPORTANTE: Debe quedar claro que no toda la música ‘cristiana’ contemporánea está contaminada. Hay hermosas composiciones que deben adoptarse, después de haberlas estudiado con el discernimiento que da el Espíritu Santo después de orar sinceramente. RV10