PALABRAS DE AGRADECIMIENTO DE LA SEÑORA MINISTRA OLGA SÁNCHEZ CORDERO DE GARCÍA VILLEGAS, EN LA CEREMONIA DE NOMBRAMIENTO COMO MIEMBRO HONORARIA DE LA ASOCIACIÓN MEXICANA DE JUZGADORAS A.C., EL DÍA 4 DE MARZO DE 2014 EN EL EDIFICIO DE REVOLUCIÓN. Es un Honor ser distinguida como Miembro Honoraria de tan importante y trascendental asociación, como lo es la de las Juzgadoras; cuyo aporte en la equidad de género, y efectividad real como parteaguas en la apertura de espacios para la Mujer Mexicana, tanto en la administración de justicia, a través de la institucionalización de acciones afirmativas a favor, como de criterios jurídicos en pro de las mujeres, así como en la administración pública; que en los dos años de su existencia son fehacientes. 1 Agradezco la gentileza de la Presidenta de la Asociación Magistrada Mexicana Adriana de Juzgadoras, Leticia Campuzano Gallegos, quien han mostrado gala de su consideración y finas atenciones que ha tenido conmigo esta tarde; pero especialmente por su dedicación y apoyo en los dos años en los que se ha desarrollado y consolidando con acciones materiales la Asociación. Gratitud que hago extensiva para todas y cada una de las integrantes de la Asociación Mexicana de Juzgadoras. A.C., de quienes, como en este día, hoy y siempre, soy beneficiaria de su gentileza y aprecio; pero CONFIANZA, especialmente recibiendo sólo SU cosas positivas de todas ellas. 2 El ser distinguida por la Asociación Mexicana de Juzgadoras, como Miembro Honoraria, es satisfactorio, en particularmente lo personal y profesional, puesto que la actividad que desarrolla tan destacada asociación, representa un tema que me apasiona y me preocupa de manera considerable como lo es la apertura de espacios para la mujeres en el ámbito jurisdiccional, el juzgamiento con perspectiva de género, y la creación de criterios jurídicos encaminados a ello, para su aplicación en todos los ámbitos, tanto de la administración pública, como en los relativos al iniciativa privada. 3 El recibir este reconocimiento me demuestra que somos muchas más personas de las que a veces se podría pensar, a quienes nos preocupa y ocupa llegar a un verdadero momento de igualdad. La sola detección y reconocimiento de los sectores que se encuentran en una situación de desventaja, de nulo acceso a los cargos públicos, y de desigualdad por la calidad de mujeres NO BASTA. Es necesario aplicar medidas que logren condiciones en las que se ubiquen —no ante un trato estrictamente igualitario—, sino en igualdad de condiciones, implementando las medidas necesarias para reducir la brecha que marca la misma desigualdad en que se encuentran, para tener las mismas oportunidades, desarrollo y participación en la sociedad. 4 Para lo cual se requiere de la participación y sensibilidad de todas y cada una de nosotras, tanto en el sector público, como de la sociedad en general; funcionarias, no académicas, organismos gubernamentales, grupos empresariales, trabajadoras asociaciones y sociedad civil. de Y es precisamente en este ámbito de unión y cohesión que genera la Asociación Mexicana de Juzgadoras A.C., en el que la sociedad debe apoyarse aún más en la madurez y sensibilidad profesional y académica de sus integrantes. 5 Las Juzgadoras, tenemos una responsabilidad frente a los demás dentro del marco democrático que vivimos y al que aspiramos consolidar como país, en el que vivamos un presente oportunidades para de las igualdad mujeres, y de de equidad de género; como cimientos sólidos para la construcción del futuro para nuestras hijas y nietas. Cuando una mujer tiene la alta distinción de recibir un reconocimiento como el que ahora generosamente me concede la Juzgadoras, Asociación al Mexicana nombrarme de miembro honorario; quizá lo primero que haga, sea, como fue mi caso, reflexionar sobre el mérito que se tiene para ser 6 merecedora de tal honor. Al tiempo, lo que se descubre es la gentileza de las colegas y amigas, la fortuna de contar con ellas y hacer lo que se debe hacer. Ningún otro mérito se descubre, sino el inexorable transcurso del tiempo que, a su paso, nos deja el invaluable tesoro de la experiencia y la fortuna de haber participado y aportar en el cambio social. Pero especialmente, inspiración que el todas ánimo Ustedes e me contagian al honrarme con tal calidad dentro de la Asociación, para redoblar esfuerzos en la misión que como juzgadoras tenemos. 7 Con total honestidad, me siento privilegiada de la consideración de tan distinguida asociación y foro. Lo que adquiere una especial magnitud, cuando se trata de una asociación de tan alto nivel, integrada por juristas de la más alta talla nacional e internacional, que dirigen toda su energía y fuerza al fomento, desarrollo y protección de la mujer y de actividades humanistas; siempre preocupadas por los temas importancia, sociales con de una la mayor visión y perspectiva de género. 8 Al recibir los honores que hoy me tienen aquí, se hacen patentes los frutos que rinde todo el esfuerzo que, tanto a nivel personal, como profesional, he dedicado a la equidad de género, y a impartir justicia sin perder nunca de vista la igualdad de la mujer. No me resta más que agradecer profundamente a quienes hoy me otorgan la calidad de miembro honoraria de la Asociación Mexicana de Juzgadoras A.C., haciéndome parte activa a través de ella, y de la mano de sus integrantes de este cambio tan importante que está viviendo nuestro país en materia de igualdad de género, y las invito para que continuemos los esfuerzos para lograr una sociedad más justa, más equitativa, más incluyente y plural. Muchas gracias. 9