April 4 Y cuando oigáis de guerras y de sediciones, no os alarméis

April 4
NI SE ADIESTRARAN MÁS PARA LA GUERRA
THEY SHALL LEARN WAR NO MORE
Y cuando oigáis de guerras y de sediciones, no os alarméis; porque es necesario que estas
cosas acontezcan primero; pero el fin no será inmediatamente. Lucas 21:9
Existe una inscripción en el edificio de la Naciones Unidas que ha sido tomada del libro de
Isaías, capítulo 2, que dice, “Y volverán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en
hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra.” (Isaías
2:4); sin embargo, la inscripción en las Naciones Unidas omite la frase que la preside, “Y
juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos.” (Isaías 2:4) Hasta que
Jesucristo regrese y establezca su reino, continuarán las guerras y los desacuerdos.
Hablando de lo que puede suceder hasta ese entonces, Jesús dijo, “Y cuando oigáis de
guerras y de sediciones, no os alarméis; porque es necesario que estas cosas acontezcan
primero; pero el fin no será inmediatamente.” (Lucas 21:9).
De acuerdo a un historiador, en los pasados 5,000 años, han existido 2.9 guerras por
año desde el inicio de los tiempos. Solamente 10 generaciones durante este tiempo han
vivido y muerto sin tener que vivir bajo la sombra de las guerras.
Un artículo de 1965 dice, “El mundo de hoy está embarcado en una carrera
armamentista letal. Los últimos misiles con cabezas nucleares, tienen el poder para matar a
300 millones de personas en una hora; fácilmente podrían destruir a toda una civilización.” Las
armas han llegado a tener tal sofisticación electrónica y precisión científica que en el pasado
se creía imposible obtenerla.
La gente pregunta, “Acaso nuestro mundo volverá a ver la paz?” Hablando de su
regreso para establecer Su reino y traer paz a nuestro mundo, Jesús dijo, “Pero del día y la
hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino sólo mi Padre.” (Mateo 24:36).
Las Escrituras dejan bien en claro que la fecha del regreso de Jesús está en las manos
del Padre Celestial, y solamente El la conoce. Amigo, estudie Isaías 65 y 66 y allí descubrirá
una descripción de lo que sucederá cuando los hombres conviertan sus espadas en rejas de
harado, y sus lanzas en hoces, y el lobo coma junto con el cordero. Pero hasta eso, mantenga
su puerta con seguro.
Lectura basada: Isaías 65
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