1. INTRODUCCIÓN Y JUSTIFICACIÓN En nuestro país se encuentra vigente la Ley 42/20101, que prohíbe fumar, “en todo el recinto, incluidos los espacios al aire libre, de centros sanitarios y educativos (excepto universitarios o de adultos)”, entre otros espacios públicos. Este marco legal, además de conseguir entornos más saludables, ayuda a disminuir el consumo de tabaco y estimula la producción de una serie de actividades para el control del tabaquismo. La OMS junto a otras organizaciones, recomienda la actuación sobre grupos específicos de fumadores como los pacientes ingresados en los hospitales y la adquisición por parte de los centros sanitarios de tratamientos para la dependencia del tabaco por resultar una manera muy rentable de reducir la enfermedad y prolongar la vida de las personas2 3 Diversos estudios4 demuestran que entre los enfermos cardíacos, las segundas crisis son más comunes en aquellos que continúan fumando. Los afectados por cáncer de pulmón, tumores craneales y neoplasias de la zona del cuello que han sido tratados con éxito pero continúan fumando tienen un elevado riesgo para un segundo cáncer. También se han observado efectos negativos del fumar en la cicatrización de heridas y en la consolidación de las fracturas óseas. También puede comprobarse como un 25% de los pacientes fumadores admiten haber fumado durante el ingreso e incluso un 4% lo hacen en la habitación, incumpliendo las normas hospitalarias5. En una revisión sistemática de la Cochrane Library sobre intervenciones en pacientes hospitalizados para abandono del hábito de fumar, los autores llegaron a la conclusión de que los resultados dependían del tipo y de la intensidad del programa aplicado6. Una intervención intensiva (contacto durante la hospitalización más seguimiento durante al menos un mes) se asoció con una tasa de abandonos significativamente mayor comparada con el control. La incorporación de tratamiento farmacológico para ayudar a dejar de fumar no parecía producir un aumento estadísticamente significativo de la cesación sobre la que se logró con la orientación intensiva sola. Sin embargo, en un ensayo randomizado los autores concluyen que las intervenciones en pacientes hospitalizados que incluyen tratamiento sustitutivo con nicotina (TSN) podrían incrementar las tasas de abstinencia al año de seguimiento7. Comprometido con un modelo de atención sanitaria integral y multidisciplinar, bajo la perspectiva de la continuidad asistencial, el Hospital Juan Ramón Jiménez, apuesta por las líneas de trabajo que se están desarrollando en Europa a través, de la Red Global de Servicios Sanitarios Libres de Tabaco (ENSH, Global Network for Tobacco-free Healthcase Services) como estrategia integral y transversal para progresar en el abordaje del tabaquismo en el ámbito hospitalario. Con este fin, se constituye como miembro corporativo de la ENSH (octubre 2010) la Red Andaluza de Hospitales Libres de Humo (RAHLH) Un "Hospital Libre de Humo" es una institución que promueve procesos de cambios graduales, expansivos y consistentes en relación a la prevención y control del tabaquismo que, además de la regulación del consumo, contempla otros factores impulsores de una transformación sostenible en la organización como el compromiso del equipo directivo y de todo el personal laboral con la realización del proyecto, la sensibilización de todas las personas trabajadoras, pacientes y público sobre espacios libres de humo de tabaco, formación específica sobre la estrategia para el personal del hospital que cubra diferentes perfiles y necesidades, actividades para la prevención y atención de tabaquismo a diferentes niveles, mecanismos de autoevaluación y seguimiento del proyecto y, por supuesto, el desarrollo de programas de deshabituación tabáquica idóneos, por una parte, para facilitar mediante tratamiento adecuado el cumplimiento de la normativa a las personas fumadoras durante su ingreso hospitalario y, por otra, ayudarlas a avanzar en el proceso de abandono. Los resultados obtenidos en los estudios realizados en el tema muestran la necesidad de reflejar en la historia de todas las personas ingresadas el antecedente de tabaquismo pues, en primer lugar, las personas fumadoras se ven obligadas a cesar su consumo durante horas o días, y en segundo, algunas o muchas de ellas pueden estar ingresadas por causas directamente relacionadas con el tabaco, lo que incrementaría la vulnerabilidad percibida hacia las consecuencias del consumo sobre la propia salud8. Estas situaciones concretas facilitarían la intervención durante el ingreso, por lo que es primordial que todos los profesionales sanitarios aprovechen el periodo de hospitalización para favorecer la deshabituación tabáquica. 2. OBJETIVOS 2.1 Objetivo general Desarrollar e implantar un protocolo de actuación para evitar que las personas fumadoras hospitalizadas, familiares y profesionales puedan fumar en el recinto hospitalario y a avanzar en el proceso de abandono. 2.2 Objetivos específicos Dar cumplimiento a los objetivos institucionales en lo que respecta al tabaquismo. Si es preciso denunciar y sancionar a los infractores. Aliviar los síntomas del síndrome de abstinencia de los pacientes fumadores ingresados que no desean dejar de fumar. Incrementar la captación de fumadores que desean abandonar el tabaquismo aprovechando su estancia hospitalaria. 3. PROTOCOLO DE ACTUACIÓN 1. Identificación de pacientes, familiares, usuarios y/o profesionales fumadores/as por parte del personal de Seguridad del centro. 2. Solicitar al fumador/a que apague su cigarrillo por encontrarse en un recinto hospitalario. Si es necesario, ofertamos ayuda de deshabituación tabáquica: - Si responde asertivamente damos las gracias y reforzamos positivamente la abstinencia. - Si responde negativamente lo identificamos y rellenamos hoja de denuncia (ver anexos). En el caso que no quiera identificarse se solicitará la actuación de las fuerzas de seguridad para su correcta filiación y tramitación de la denuncia. 3. En el caso de tratarse de un profesional: - Si es la primera vez, le reforzamos la abstinencia y ofertamos ayuda de deshabituación tabáquica. Lo incluimos en lista de profesionales fumadores advirtiéndoles que una segunda vez será motivo de expediente administrativo. - Si es la segunda vez o más veces, se abre expediente administrativo. 4. Oferta de intervención avanzada 5. Derivación a los recursos de deshabituación disponibles cuando proceda. 6. Evaluación de la abstinencia y de la intención de abandono en todos los sujetos de la muestra en el momento del alta hospitalaria. 7. Evaluación de la abstinencia de todos los sujetos de la muestra a los seis meses del alta hospitalaria. 4. EVALUACIÓN Prevalencia de tabaquismo: porcentaje de no fumadores/as, exfumadores/as y de fumadores entre la población de estudio. Cumplimiento de la normativa: porcentaje de pacientes de cada grupo del estudio que se mantiene sin fumar en el momento del alta hospitalaria. Efectividad de la intervención básica y TSN: porcentaje de pacientes de cada grupo del estudio que se mantiene sin fumar a los seis meses del alta hospitalaria. Conformidad con recibir ayuda para dejar de fumar: Porcentaje de pacientes que recibe intervención avanzada tras el alta hospitalaria. Efectividad de la intervención avanzada: Porcentaje de pacientes que recibe intervención avanzada y que se mantiene sin fumar a los seis meses del alta hospitalaria. Grado de satisfacción: porcentaje de sujetos de la muestra que se muestran satisfechos con la atención recibida. Nivel de eficacia: diferencias significativas en la potencia de las distintas intervenciones integradas en el protocolo para conseguir la abstinencia a los 6 meses. Nivel de influencia de los factores: diferencias significativas en el grado en que los factores estudiados pueden estar relacionados con el éxito de la variable resultado. 5. CRONOGRAMA FEBRERO 1ª reunión de trabajo: elaboración protocolo y planificación actividades MARZO ABRIL MAYO JUNIO BIBLIOGRAFÍA 1 Ley 42/2010 de medidas sanitarias frente al tabaquismo y reguladora de la venta, el suministro, el consumo y la publicidad de los productos del tabaco. 2 Oficina Regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud. Conferencia sobre la reglamentación de los productos de tratamiento de la dependencia del tabaco. Conclusiones. HelsinKi, 19 de octubre de 1999. 3 Fiore MC, Bailey WC, Cohen SJ. Treating Tobacco use and Dependence. Clinical Practice Guideline. Rockville, US Department of Health and Human Services, Public Health Service. June 2000: 98-99. 4 Roig Cutillas, EP. Roig Cutillas, E. Sabater Puig, T. Borràs Cabacés, M. Sesmilo Garcia, R. Salmons Aleu, V. Albeldo Navarro. Servei de Drogodependències. Hospital Universitari Sant Joan de Reus. (Tarragona) Protocolo de intervención en pacientes fumadores hospitalizados. Prevención del Tabaquismo, vol. 3 nº 3, Septiembre 2001. 5 Rigotti NA, Arnsten JH, McKool KM. Smoking by patients in a smoke-free hospital: prevalence, predictors, and implications. Prev Med. 2000;31 (2Pt 1): 159-66. 6 Rigotti NA, Munafo MR, Stead LF. Intervenciones para el abandono del hábito de fumar en pacientes hospitalizados. En: La Biblioteca Cochrane Plus, 2008 Número 4. Oxford: Update Software Ltd. Disponible en: http://www.update-software.com. 7 Simon JA, Carmody TP, Hudes ES, Snyder E, Murray J. Intensive smoking cessation counseling versus minimal counseling among hospitalized smokers treated with transdermal nicotine replacement: a randomized trial. Am J Med. 2003; 114:555-62.[Medline] 8 García Rueda M. Abordaje del Tabaquismo en situaciones especiales. Abordaje del Tabaquismo. Manual SEPAR de Procedimientos. 2007 ANEXOS Ver HOJA DE RECLAMACIÓN O DENUNCIA