Activité-Paranormale Quetzalcoatl ó Kukulcan Quetzalcoatl ó Kukulcan ó Tezcatlipoca: En primer lugar hay que aclarar que en la mitología maya hay varios dioses, cada uno con distintos poderes y roles dentro de ella. Pero lo más importante es que para los mayas, los dioses, o al menos algunos de ellos, eran deidades múltiples, es decir, podían desdoblarse en dos o más dioses. También según la época maya de que se hable, encontraremos dioses cuyo nombre, rol o preponderancia ha cambiado. Todo eso hace que el entramado celestial de deidades mayas, así como las relaciones de esas deidades entre ellas y con los propios mayas, sea muy difícil de seguir. Y si a eso le sumamos que muchos de los códices mayas fueron quemados por la iglesia, entramos en un terreno cubierto por una espesa niebla que incluso hoy muchos investigadores siguen tratando de sacar a la luz. Y para saber con certeza cuál era el rol de cada uno de esos dioses hay que pasar muchas horas leyendo material de distintas fuentes para tratar de sacar conclusiones, y a la vez, esperar que nuevos descubrimientos arrojen más luz sobre los datos actuales. Además, en las pocas cosas que se salvaron de la quema y que sobreviven hasta hoy, los mayas no dejaron aclaraciones sobre a quién se refieren en cada uno de sus textos, cosas tales como“obsérvese que a este dios le cambiamos el nombre en tal año” no existen, lo que dificulta aún más la tarea. Quetzalcoatl y Tezcatlipoca: Básicamente podríamos decir que Quetzalcoatl fue el dios más importante para los mayas. Su nombre significa “Serpiente emplumada”, y era el dios creador del universo. Pero no termina allí la cosa, sino que empieza; puesto que este dios tenía una contrapartida: el dios Tezcatlipoca, cuyo nombre significa “Humo de su espejo”, y era el dios destructor del universo. Estos dioses eran rivales y combatían por imponerse uno sobre el otro en el cielo de los dioses. Algunos investigadores aseveran que eran dioses diferentes y otros que eran hermanos gemelos y opuestos entre sí. Yo no estoy tan de acuerdo con ninguno de ellos. Me parece que si tenemos en cuenta la cosmovisión de los mayas, en la que el bien y el mal son en realidad la misma cosa, de la misma manera que la luz y la oscuridad son parte de un mismo día, entonces, podría ser que en realidad estos dioses no son diferentes, uno malo y el otro bueno, ni tampoco hermanos gemelos que luchan todo el tiempo, sino que son el mismo dios cumpliendo roles diferentes, y por esa razón recibe nombres diferentes de acuerdo al rol que desempeña en cada momento. Para los mayas los dioses podían desdoblarse y podían ser malos o buenos según la ocasión. O mejor dicho, ¡los dioses podían ser malos y buenos al mismo tiempo y en un mismo acto! Pues para ellos el bien y el mal eran necesarios ambos, y no puede existir el mal sin el bien, y viceversa. Es más, yo diría que en su cosmovisión, los mayas pensaban que ni el mal era tan “malo”, ni el bien tan “bueno”, sino que eran la misma cosa. Para ellos no puede existir la luz sin la oscuridad, y Quetzalcoatl podía comportarse de manera bondadosa en muchas ocasiones, creando el universo y el hombre, pero también podía decidir un día destruir lo que él mismo había creado. Es el mismo caso que nosotros decidamos ponerle un segundo nombre a nuestro dios a partir del día que decidió enviarnos el diluvio, por ejemplo, para diferenciar los momentos en que actuó de una forma o de otra. En síntesis, este es el dios mitológico maya, creador del universo y a la vez su destructor, bueno y malo a la vez: Quetzalcoatl. Pero existen otros Quetzalcoalt. Otro tipos de Quetzalcoatl: http://activite-paranormale.net/ 1/3 © Activité-Paranormale 2009-2016 Activité-Paranormale Por otro lado también existieron hombres reales, o seres, a quienes los mayas les atribuyeron el nombre de Quetzalcoatl, ya sea por ser hombres sabios o grandes líderes o porque trajeron nuevos conocimientos y formas de organización a su civilización. Para entender mejor este tipo Quetzalcoatl quizá nos ayude verlos como si fueran los profetas de muchas de las religiones actuales, como la cristiana, judía o musulmana. Pues este sería el caso que más se ajustaría a la definición de este tipo hombres con rango de dioses, pero sin serlo. No eran considerados plenamente dioses, sino que estaban en el límite, por decirlo de alguna manera. Digamos que esta especie de profetas eran representantes de su dios en la tierra, pero de ninguna forma eran el dios que representaban. Igualmente, después de que este tipo de hombres hubieran muerto (como el caso de Ce Acatl Topiltzin), o partido para nunca más volver (como Kukulcan), los mayas los siguieron venerando y construyendo templos en su honor. Quetzalcoatl, el Rey: Los mayas creían que había ciertas personas que eran una suerte de representantes de Quetzalcoatl sobre la tierra, ése es el caso de Ce Acatl Topiltzin, que era hijo de un rey y cuya madre murió al darlo a luz. Vivió entre los años 843 y el 895 D.C. y también fue llamado Quetzalcoatl. Evidentemente fue un gran líder, pues su nombre es mencionado en algunos grabados bajorrelieve. Kukulcan: Para mí el más misterioso y enigmático de todos los Quetzalcoatl, pues era un hombre que apareció un día proveniente del poniente, a través del mar. Cada equinoccio se lo puede ver bajando del cielo y metiéndose en el inframundo a lo largo de las escaleras de su templo, en la ciudad maya de Chichén Itzá (México). Este fenómeno se da durante los equinoccios, cada 21 de marzo y cada 22 de septiembre, gracias a un efecto con las sombras que producen las escaleras de su pirámide. Según cuenta la leyenda vivió con los mayas entre los años 945 y 999 D.C. o hacia finales del siglo XV, o sea en el período post clásico de la civilización, luego de que los mayas hubieran abandonado sus ciudades y las hubieran vuelto a fundar. No se sabe bien si llegó antes, durante, o después de que los mayas ya estaban instalados otra vez en el área, en lo que podríamos llamar la segunda fundación de su cultura. Tampoco sabemos de dónde vino exactamente. No era un hombre común como los que los mayas estaban acostumbrados a ver, sino que era blanco, casi rubio, de ojos claros, alto y con barba; además tenía la cabeza como aplastada o alargada. A raíz de esto algunos especulan que podría haber sido un extraterrestre que vino a hacer contacto con la civilización maya y a enseñarles cosas nuevas. Dicen que fue él quien les brindó nuevos los conocimientos tecnológicos sobre astronomía, metalurgia, orfebrería, etc, y que los introdujo en el campo de la mente y sus percepciones. También se sabe que este hombre dejó sus enseñanzas en códices orales llamados Huehuetlahtolli, y que en esos códices estaban sus enseñanzas morales y religiosas, que ayudó a la expansión y el crecimiento del imperio. Los cierto es que Kukulcan llegó a la península a través del mar hacia finales del siglo XV, o antes, pasó un tiempo en esa zona, dio sus enseñanzas a los mayas –posiblemente haya fundado también esa 2º cultura maya– y después se fue hacia Champotón, desde donde partió para siempre, nadie sabe hacia dónde. En ese último lugar donde estuvo, también los mayas erigieron otro templo en su honor, cerca del mar. Lo que marca la importancia que tenía para los mayas. Ellos siempre estaban esperando que regresara. Otros prefieren pensar que este hombre era un vikingo que de alguna manera vino en barco por el mar y que, aprovechándose de su aspecto, y de que los mayas lo consideraron como si fuera un representante de su dios, se convirtió en su líder, extendió el imperio, dejó sus enseñanzas y luego desapareció, así como si nada, hundiéndose otra vez en el mar por el que había venido. Ahora bien, si quisiéramos determinar su origen a partir de la descripción que di más arriba para saber si en realidad era extraterrestre, vikingo o maya puro, hay que saber que la descripción dada –extraída de los relatos que los españoles escribieron sobre lo que habían oído de los mayas– no es un buen punto de partida, pues está completamente influenciada por nuestra mentalidad “blanca”. Lo mismo pasa con esta otra descripción que encontré en el Códice Florentino. La siguiente descripción proviene también de una indagación oral efectuada a los propios mayas. En este caso por parte del monje franciscano Bernardino de Sahagún, entre los años 1540 y 1585 D.C. En el Códice Florentino puede leerse: “…Quetzalcoatl estaba lleno de verrugas, con las cuencas hundidas y la cara hinchada, de aspecto desagradable que no se atrevía a presentarse ante sus súbditos, a pesar de ser un buen soberano, y con este motivo Coyotlinahuatl pudo engañarlo con el pretexto de maquillarlo…” De acuerdo a algunos gravados, algunos dicen que no es una barba lo que se ve en los dibujos, sino que Kukulcan usaba una especie de máscara o casco. Lo cierto es que debió ser muy feo, lo suficiente como para tener vergüenza de que lo vieran, cubrirse la cara o maquillarse. Como sea que haya sido, este hombre, antes de marcharse, les prometió a los mayas que algún día volvería con ellos, y los mayas siempre quedaron a la espera de que algún día regresara. Y esa es la raíz de la creencia, por parte de los mayas, de que los hombres blancos que llegaron después desde España eran enviados por este Kukalcan o Quetzalcoatl. La historia que siguió a la venida de los españoles ya la conocemos. http://activite-paranormale.net/ 2/3 © Activité-Paranormale 2009-2016 Activité-Paranormale Source www.2012profeciasmayas.com.ar Mitología - 30 décembre 2011 - 2012 Profecias Mayas - CC-BY http://activite-paranormale.net/ 3/3 © Activité-Paranormale 2009-2016