Chicanos y beurs: migrancia y de/reterritorialización Silvia Nagy Zekmi State University of New York at Albany Existen muchas fronteras. Demasiadas. Guillermo Gómez Peña Entre tu pueblo y el mío hay un punto y una raya. La raya dice no hay paso, el punto, vías cerradas y así, entre todos los pueblos raya y punto, punto y raya. Con tantas rayas y puntos el mapa es un telegrama. Caminando por el mundo se ven ríos y montañas, se ven selvas y desiertos, pero no puntos ni rayas. porque estas cosas no existen, sino que fueron trazadas para que mi hambre y la tuya estén siempre separadas. Arribal Nazoa - Juan C. Núnez: Punto y raya (canción) Hoy todas las culturas son de frontera. Néstor García Canclini: Culturas híbridas. 1. Migración: exilio, diáspora, desplazamiento Los fenómenos migratorios pueden ser de carácter individual o colectivo que tienden a ser consecuencias de diversas condiciones humanas que tienen un aspecto en común: La deterritorialización. Aunque el desplazamiento de humanos hoy ha llegado a extremos jamás vistos, el fenómeno no es nada nuevo. Todorov reconstruye la genealogía del exiliado en La conquista de América: Es el exiliado que mejor encarna hoy en día, desviándolo de sus sentido original, el ideal de Hugo de San Víctor, que éste formulaba de la manera siguiente en el siglo 1 XII: 'El hombre que encuentra que su patria es dulce no es más que un tierno principiante; aquel para quien cada suelo es como el suyo propio ya es fuerte, pero sólo es perfecto aquel para quien el mundo entero es como un país extranjero' (yo, que soy búlgaro que vive en Francia, tomo esta cita de Edward Said, palestino que vive en los Estados Unidos, el cual a su vez había encontrado en Erich Auerbach, alemán, exiliado en Turquía (259). Entre las razones de la migración (exilio, diáspora, desplazamiento) Abril Trigo menciona "el desarrollo socioeconómico desigual entre zonas geográficas interrelacionadas mediante complejos regímenes de expulsión y de atracción." (273) Cabe añadir que este desarrollo desigual ha sido consecuencia (relativamente) directa de la colonización europea. Si lo examinamos desde la perspectiva postcolonial,1 es decir, lo que los autores comunmente tildados como postcoloniales dicen sobre la cuestión de la migrancia y la identidad migratoria, veremos que indican el colonialismo y la globalización como raíces de la migración. Varios autores escribieron sobre sus experiencias como seres migrantes, entre ellos Salman Rushdie en Imaginary Homelands donde se posiciona como un indio musulmán que emigró a Inglaterra y pese al escándalo que provocó Los versos satánicos, sigue considerándose musulmán aunque no es creyente. En varios de sus escritos asume una posición occidental que enfatiza el individualismo y la excepcionalidad ? as the greatest and most heroic of values? (Rushdie 425). Rushdie concluye que su migración es un hecho fundamental en la formación de su identidad fronteriza2 que le permite circular en términos culturales, aunque no físicos3 entre el Este y el Oeste. Spivak también discute su propia identidad que se construye de varios elementos Guillermo Gómez Peña es uno de los que relacionan la cuestión de la identidad fronteriza con lo postcolonial y a la vez conecta ambas nociones con su labor artística. ? In my art I explore the labyrinths of identity, the intersections of language and the precipices of nationality? comenta en ? Colonial Dream and Postcolonial Nightmares? (80). 1 Otro autor que discute a profundis las indentidades híbridas, (o simultáneas con la expresión de Spivak) la suya incluida como caso contradictorio del Este/Oeste, es el escritor libanés, Amin Maalouf en su ensayo, Les identités meurtrières, particularmente en el capítulo ? Apprivoiser la panthère.? 2 El fatwa (religious decree) pronunciado por el Ayatollah Khomeini en 1989 contra Rushdie lo acusa de haber cometido apostacia en su libro, Los versos satánicos. La consecuencia del fatwa es que la vida de Rushdie estaba (y sigue estando) en peligro. 3 2 dependiendo desde la posición ideológica que se plantea: ? es profesora estadounidense, exiliada de clase media bengalí o una mujer del tercer Mundo? (Spivak 67-94). Detrás de todo exilio, toda migrancia está la idea de la casa, el origen, de donde se parte, lo que es imposible de encontrar. Como Martin Heidegger en su ? Retorno al país natal,? sobre la poesía de Hölderlin, arguye que no hay casa primaria, somos todos transeúntes. La casa primaria seria un lugar donde uno puede encontrarse, ? return to selfhood? por medio del encuentro dialógico en un idioma que exprese la esencia de su ego. De manera, que para Hedegger el desplazamiento no es posible, o bien, el desplazamiento continuo es la única posibilidad para concebir la existencia. Mientras Heidegger propone la idea de la casa en términos psicológicos, podemos articular la idea de la casa en términos geográficos y concluir que en este sentido la casa puede ser un lugar tanto definido como indefinido, en caso estar constituida por signos híbridos e incluso contradictorios. (Paralelamente estoy hablando de la casa física en un sentido, y la articulación de la idea de la casa - origen- en otro sentido.) El desplazamiento del individuo (o grupo) es más obvio en lugares fronterizos donde la identidad (íntimamente ligada al origen) tanto individual como colectiva es altamente problemática. Dos lugares de esta índole serían el suroeste de los Estados Unidos y Francia. (La definición geográfica no es muy importante, en realidad, por ser imprecisa.) Los chicanos, descendientes de mexicanos que viven en los Estados Unidos y los beurs, descendientes de norafricanos que viven en Francia forman las dos entidades culturales que intento investigar sin crear un nexo directo, sin embargo, entre cultura y espacio porque esto manifestaría el esencialismo que estoy tratando de evitar . Lawrence Grossberg opina que la noción de ? culture? s equation with location or space? debe desafiarse. ? Challenging culture? s equation with a location of an identity may enable us to think about the possibilities of politics which recognizes the positivity or singularity of the other.? (169). 2. Chicanos, pachucos, y la frontera 3 Then said Gregorio Cortez with his pistol in his hand Ah, so many mounted rangers just to take one Maxican. Roberto Fontanarrosa: Inodoro Pereyra Ballad of Gregorio Cortez Los chicanos4, similarmente a los beurs que trataré más adelante, son descendientes de inmigrantes que viven en una cruce cultural. No aceptados del todo por la sociedad estadounidense y rechazados (tildados ? pochos? )5 por México la crisis de identidad se ha convertido para ellos una permanente manera de ser. Una de las manifestaciones más elocuentes de la búsqueda de una salida es la creación del pachuco que (con su vestimenta, lengua, etc.) intenta personificar la diferencia de ambos medios culturales a los cuales no pertenece. El primer Tino Villanueva aseveró (en 1984) que el término chicano ha sido utilizado de manera peyorativa. Sin embargo, algunos críticos señalan que conforme transcurre el tiempo el término cobra paulatinamente un sentido más positivo, debido a que los mismos chicanos se apropiaron de esta denominación para describirse, ez vez de ? hispanic? o otras designaciones anglo-americanos. 4 ? Pocho? es el título de una obra importante de José Antonio Villarreal que fue uno de los primeros escritores en representar los conflictos cultrales de los chicanos. 5 4 capítulo del Laberinto de la soledad de Octavio Paz es uno de los ejemplos más elocuentes de la incomprensión de las motivaciones del pachuco. Zootsuit (1988) de Mario Valdez, en cambio, es una obra seminal de la literatura chicana que explora los conflictos de la identidad en función de un acontecimiento limitado cuya compleja problemática histórica y cuyas dimensiones étnicas, nacionales y sociales son abordadas mediante la dramatización escenificada del "caso Reyna" y los Zootsuit riots de 1942 y 1943 en la ciudad de Los Angeles. Aunque la deterritorialización de los chicanos no aconteció sólo por actos de guerra (tratado Guadalupe Hidalgo, 1849), aunque su migración hacia el norte ha sido parcialmente voluntario, su condición se define por la desterritorialización cultural. El término se origina de Kafka: Towards a Minor Literature de Gilles Deleuze y Felix Guattari como característica clave de la literatura "menor". La definición de la literatura menor para estos autores no se basa en la lengua, en la cual la obra en cuestión había sido escrita, sino que se construye a partir de la inclusión de tal obra en los cánones establecidos en "lenguas mayores." La teoría de la literatura "menor" ha sido refutada por los críticos, Renato Rosaldo,6 entre otros. Rosaldo, por su parte va más lejos que Deleuze y Guattari. Para él no sólo cuenta el hecho que los textos de ? literaturas menores? se vayan creando, sino examina la manera en que estos textos construyen las identidades y cómo las identidades, a su vez, construyen los textos. En su libro Cultura y verdad, analiza tres momentos, a través de tres textos, de tres épocas distintas viendo la manera en que los textos van cambiando la construcción del chicano. Así acuña el término de "identidades de frontera" para comprender la multiplicidad de identidades que un chicano construye en los contextos multiculturales actuales. Gloria Anzaldúa avanza en el análisis de las posibles dimensiones de la frontera, destacando la condición misma del pueblo chicano que incorpora identidades fronterizas incluyendo lo(la) mexicano(a), lo indio(a), y lo(la) anglosajón(a). La mujer fronteriza vive en los umbrales, en los intersticios, en los márgenes; su conciencia es una conciencia fronteriza. Según Anzaldúa la cultura fronteriza es producida por quienes cruzan los límites de la normalidad, y estos límites pueden ser nacionales, étnicos, de raza o de género. La publicación de Borderlands/La frontera: The New Mestiza (1987), un texto multicultural que manifiesta todos los signos de la transculturación, se considera importante, porque el lector se expone a las experiencias de chicanas en un medio Más adelante trataré la reacción también crítica de los teoristas que trabajan en el area de la literatura beur sobre el asunto de la ? literatura menor.? 6 5 cultural alienante. Señala Jane Hedley acerca de la lectura del texto de Anzaldúa: ? In reading her text, we are forced to confront the difficulty of bridging differences of language, cultural background and class location that divide us from one another? (37). El ? mestizaje espiritual? es la solución que Anzaldúa propone para conciliar las diferentes texturas de la multiculturalidad ? My spirituality I call spiritual mestizaje, so I think my philosophy is like philosophical mestizaje where I take from all different cultures-for instance, from the cultures of Latin America, the people of color and also the Europeans? (238). La hibridez cultural y lingüística se manifiesta en la mayoría de los escritos chicanos, asimismo en las obras de Anzaldúa. Elizabeth Jones comenta sobre sus peculiaridades lingüísticas: ? Anzaldúa uses a unique blend of eight languages, two variations of English and six of Spanish. In many ways, by writing in ? Spanglish,? 7 she creates a daunting task for the non-bilingual reader to decipher the full meaning of the text.? (www) La ironía fundamental intencionada, sin duda, por Anzaldúa se manifiesta en las dificultades (? frustraciones?) del lector monolingüe, la inaccesibilidad cultural que es precisamente uno de los problemas fundamentales de los chicanos, que ahora se hace experimentar por el lector (monolingue/monocultural). El híbrido de los dos idiomas amplia el campo semántico y cultural del enunciado, de manera que el conocimiento de uno de los idiomas (culturas) no resultará en la comprensión del texto. El hibridismo lingüístico equivale el hibridismo cultural (o étnico como lo dice Anzaldúa, cf. # 7) Como Anzaldúa, (y Saldívar, cf. más adelante), Norma Alarcón también utiliza la construcción de una ? conciencia mestiza? para explicar la reapropiación de la figura icónica de la Malintzín. Alarcón describe la manera en la cual las chicanas recuentan la historia (de la Malintzín) para confrontar ideologías previamente construidas (como el de ? los hijos de la chingada? de Octavio Paz). Prestándose la frase de Chela Sandoval,8 Alarcón explica que insertando ? una El uso del Spanglish es fundamental para Anzaldúa, para que ella pueda articular su posición desde este ? tercer espacio? ella iguala la identidad étnica y lingüística: ? Ethnic identity is twin skin to linguistic identity. Until I can take pride in my language, I cannot take pride in myself. Until I can accept as legitimate Chicano Texas, Spanish, Tex-Mex, and all the other languages I speak I cannot accept the legitimacy of myself. Until I am free to write bilingually and to switch codes without always having to translate, while I still have to speak English or Spanish when I would rather speak Spanglish, and as long as I have to accommodate the English speakers rather then having them accommodate me, my tongue will be illegitimate? (207). 7 Sandoval también habla de una ? conciencia nómada? frase que viene de la pluma de Rosi Braidotti originalmente definida de la siguiente manera: ? explore and legitimate political agency, while taking as historical evidence the decline of metaphysically fixed, steady identities? (Braidotti 8 6 subjetividad táctica? el recuento puede dar por resultado un imaginario nuevo, deconstruyendo la oposición Malintzín/ Guadalupe en la conciencia mexicana. El resultado es una imagen híbrida de las figuras femeninas fundamentales en la conciencia fronteriza. En cuanto al hibridismo, Homi Bhabha sugiere que todas las manifestaciones y sistemas culturales se articulan a partir de lo que él llama ? el tercer espacio de la enunciación? (37). De modo que la identidad cultural siempre emerge desde este espacio ambivalente y contradictorio que según Bhabha nos ayudará a eliminar el exotismo cultural y reconocer el poder que yace en el hibridismo que opera en la diferencia cultural. Este espacio ? in-between? es donde se pude ubicar el significado de la cultura. Mucho críticos aprovechan este ? tercer espacio? o ? in-between-ness? para deconstruir las nociones prescritas de cultura. José David Saldívar se sirve del vocablo utilizado por Renato Rosaldo, ? cultural in-between-ness? para avanzar la idea del ? borderland cultures? que por definición es híbrida. En este espacio heterogéneo los chicanos (y no sólo ellos) pueden recuperar la agencia y poner de manifiesto sus propias versiones de la/su historia, literatura, arte, etc. reconociendo la importancia de la memoria compartida con México y la influencia continua de la cultura estadounidense. ? Mexican identity (or better said, the many Mexican identities) can no longer be explained without the experience of ? the other side,? and vice versa? (Gómez-Peña, ? Danger Zone? 178). Varios críticos (Saldívar, Rosaldo, Gómez Peña) teorizan sobre la zona fronteriza como un lugar de ? cultural visibility and cultural invisibility.? (? Danger Zone? 176) Sin embargo, Saldívar admite que en ? our global Borderlands composed of historically connected postcolonial spaces? ( 153) es difícil teorizar sobre la existencia e identidad fronteriza, porque la teoría hoy día no se concibe a parir de una ? distancia crítica,? sino desde un espacio híbrido e ? in-between.? 3. Deterritorialización en Europa: Los beur. L? identité n? est pas donnée un fois pour toutes, elle se construit et se transforme tout au long de l? existence. 5). En Methodology of the Oppressed Sandoval habla tanto de ? womanism? como de ? nomadic consciousness.? Todas estas formas de conciencia se caracterizan por tener identidades múltiples, experiencias de marginalización y resistencia a la dominación cultural transnacional. 7 Amin Maalouf: Les identités meutrières. En Europa, particularmente en Francia, los beurs enfrentan condiciones similares a los chicanos, la deterritorialización y el hibridismo cultural que se manifiestan en la narrativa beur que se evoluciona en torno a la exploración de la incertidumbre originado del transplante cultural, según los críticos (Hargreaves, Bonn, Déjeux). Los autores (Belghoul, Houari, Begag, Sebbar) utilizan estrategias literarias muy similares a los autores chicanos para crear modalidades de la mencionada ? escritura de resistencia? (Harlow). La cuestión fundamental aquí también es la reescritura subalterna de la historia, o sea, el tratamiento narrativo de las estrategias particulares de resistencia. La deterritorialización de inmigrantes (y de los de segunda generación) viene acompañado del "dépaysement," de la defamiliarización, una especie de alienación, porque no pertenecen del todo a ninguna de las culturas, ni a la de su origen, ni a la de su lugar de residencia. Julia Kristeva toca este punto en su libro, Étrangers a nous-mêmes, pero ella, muy sui generis, depolitiza esta problemática, introduciendo la noción de "citoyen-individu": Y es tal vez a partir de la subversión de este individualismo moderno, a partir del momento en que el ciudadano-individuo deja de considerarse unido y glorioso y descubre sus incoherencias y sus abismos - sus "extranjerías", en suma - cuando la cuestión se plantea de nuevo: sin de la acogida del extranjero en el interior de un sistema que lo anula para dar paso a la cohabitación de los extranjeros que todos reconocemos ser. (Trad. Xavier Gispert 11) Julia Kristeva, además de confiar en la ética del "citoyen-individu", intenta incluir a todos los extranjeros, exiliados o no, bajo la misma idea de la "cohabitación."9 Este tipo de exotismo elitista es refutado por Samia Mehrez, porque "anubla la lucha verdadera contra el exilio y el nomadismo, la cual, aunque deterritorialice el dominante, procura adquirir y legitimizar un territorio para sí mismo.? (27) La inmigración maghrebina en Francia comenzó al final de la Segunda Guerra Mundial, De acuerdo a Abdelmalek Sayad, la situación del inmigrante norafricano en Francia es una reproducción de la condición colonial, especialmente en vista de la relación entre los inmigrantes y la sociedad francesa, donde las comunidades "coexisten", pero "no cohabitan". (209) 9 8 causada por el boom económico. Pese a que muchos de estos inmigrantes venían con la esperanza de volver a su país, muchos se iban quedando. Los hijos beur, como frecuentemente se refiere a ellos, tanto por la sociedad dominante como por ellos mismos,10 no conocen otro país más que Francia. El país de sus padres es un país mítico, construido en la mente de los hijos beur a partir de los cuentos de los padres y familiares. Consecuentemente, un rasgo sobresaliente de este grupo es la alienación, por vivir en un espacio ambiguo que contiene signos contradictorios de ambas culturas. Aunque el beur vaya al país de origen de sus padres, se le pone la estigma de no ser ? auténtico.? En Francia los llaman "les sales Arabes" (árabes sucios) y en el Maghreb los llaman "les Arabes de la France" (los árabes de Francia). (Mehrez 29) La historia de los de la segunda generación es muy distinta a la de sus padres, quienes tienen una identidad definida, aunque esta identidad esté en conflicto con la sociedad dominante. En cambio, para la segunda generación se presenta la situación irónica, que teniendo dos herencias culturales, su identidad es híbrida; los códigos sociales determinados por la religión musulmana con los cuales se manejan los de la primera generación de inmigrantes, difieren enormemente de los de Francia, en cuyo medio cultural (la escuela, la media de masas, particularmente la televisión) creció la segunda generación, que vive en una continua ruptura cultural. Esto explica su rechazo hacia ambas culturas y su esfuerzo de encontrar algo "auténtico" que los pueda definir. Para concluir esta parte, mencionaría que no sólo los chicanos critican la propuesta de Deleuze and Guattari sobre ? literaturas menores,? sino que Samia Mehrez en su artículo sobre literatura beur critica este concepto y arguye por la necesidad de la reterritorialización en la ? literatura menor? postcolonial: ? Our critical investigation should never stop at ? deterritorialización,? because postcolonial ? minor? literature, rather than glorifying exile, seeks to acquire and legitimate territory? y al mismo tiempo, ? deterritorializes the dominant? (27-28.) Anne Donnadey va más allá en sugerir que Deleuze and Guattari cree que los escritores deben crear su propio espacio de diferencia en medio de su lengua y cultura. ? The difference in power position between such a situation and that of exiles or inmigrants, especially the Beurs in France, En este sentido, la expresión beur se parece un poco al vocablo chicano, término que se usaba por la sociedad dominante, como despectivo, para señalar a los mexico-americanos, hasta que, durante los años 60, los chicanos se apoderaron del mismo, y lo usan con orgullo. Este fenómeno, la subversión de la opresión verbal ocurre con la palabra beur. 10 9 is too easily erased by Deleuze and Guattari and Kristeva11.? (269) 4. Reterritorialización por medio de la literatura. De acuerdo a Alec G. Hargreaves, los beur representan una generación caracterizada por la inseguridad y por una continua crisis de identidad. Una de las motivaciones de la escritura beur es resolver estos problemas: "the exploration of that uncertainity is the central dynamic which informs most Beur writing." (661) Debo añadir que, en el artículo de Hargreaves, pese a que es indudablemente informativo, su posición paternalista plantea un problema. En una proposición homogeneizante y esencialista comenta sobre la situación económica de los beurs y las consecuencias de esta situación en las posibilidades de su desarrollo intelectual: "their material deprivation slow[s] their progress through the French educational system, and has sometimes provoked serious behavioral problems." Hargreaves no parece notar el papel (fundamental) del racismo que desgarra esta generación, y menciona a dos autores educados (Nacer Kettan, y Azouz Begag), como algo extraordinario. Este crítico caracteriza a Leïla Houari, hija de inmigrantes marroquíes en la Bélgica, como histérica que sufre de "full-blown identity crisis, nervous breakdowns and suicide attempts" y aparte de este hecho no comenta sobre ninguna novela suya, Zeïda de nulle part (1985), Quand tu verras la mer (1988). Ya el título (Zeida de ninguna parte) es revelador de la idea central de esta novela. La protagonista beur, por no encajarse bien en Europa y por ser víctima de racismo se embarca en un viaje al país de sus padres (Marruecos), pero vuelve, porque allá tampoco es capaz de adaptarse, por las restricciones del poder patriarcal incontestado. Los cuentos reunidos en el tomo Quand tu verras la mer manifiestan la dualidad, o más bien ambigüedad de valores y el conflicto continuo, que frecuentemente se encuentra en los escritos beur por razones arriba detalladas. Los cuentos representan la "double rupture fondatrice" (Bonn 101); por un lado, con la identidad de la cultura de "origen" (de los padres, en realidad) y por el otro, con la cultura del lugar de residencia. Donnadey se refiere a la posición apolítica de Kristeva que la crítica delínea en Étrangers a nous-mêmes. 11 10 Varias novelas escritas por autores beur se tratan de la infancia y representan las tensiones culturales entre la casa y la escuela, los dos espacios decisivos en la formación de un individuo, pero que en caso de los beurs representan dos espacios culturalmente contradictorios. Los años formativos de una niña sirve como tema para Georgette! de Farida Belghoul.12 La narradora es esta niña de origen berebere13 quien vive con sus padres y hermanos en París. Con sensibilidad profunda, la autora representa la crisis en la vida de esta niña de siete años quien está aprendiendo a escribir en la escuela. Como lo señala Mireille Rosello, "l'enfant se trouve confrontée à toutes sortes de discours qui tiennent a lui imposer une identité complexe et problematique." (35) Pero los discursos más importantes son el del padre y el de la maestra, situados en los dos polos ideológicos opuestos. Además de la problemática lingüística y la complejidad étnica del Maghreb (siendo la niña berebere y no árabe), se presenta la contradicción entre la cultura oral, la de las raíces, la de los padres; y la escritura que abre puertas, pero también las cierra, porque las coordenadas culturales que rigen el mundo de los padres estará fuera de alcance de la niña para siempre. La crisis de identidad se convierte en un modus vivendi en la cruce de culturas, en un medio donde la multiculturalidad no es una posibilidad, porque se la rechaza por la intransigencia de la cultura de origen (maghrebino) y por la intolerancia cultural y racial del lugar de residencia (Francia), parece ser el motivo principal en las novelas de Leila Sebbar. Los protagonistas (jóvenes, en su mayoría) responden a esta crisis, fugándose, corriendo, escapándose, buscando obsesivamente un modelo que incluya y corresponda a la hibridez cultural y lingüística que los caracteriza. En Le Chinois vert de L? Afrique cada una de las siete unidades (no hay capítulos indicados) se inicia por un pequeño pasaje epigráfico, que comienza con la misma palabra: "Il court." De esta manera crea Hasta la publicación de Georgette!, su primera novela, Belghoul se conocía en Francia como activista o como cineasta, directora de la película Le départ du père. (Rosello 35) Es interesante 12 notar, que varias autoras del Maghreb se han hecho conocidas cultivando otras formas de arte. Entre ellas Assia Djebar, quien ha hecho varias películas y Djura, la cantante berebrere, quien forma parte del grupo musical Djhurdjura de sumo éxito, y publicó dos novelas, ambas autobiográficas, La Voile de silence en 1990, y La Saison des narcisses en 1993. Los berebere (que incluye una serie de grupos minoritarios no-árabes) se encuentran en todos los países norafricanos y se consideran descendientes de los habitantes anteriores a la invasión árabe. 13 11 Sebbar para sus protagonistas el "tercer espacio" (Bhabha 36) donde los representantes del "otro" puedan dialogar con los de "nosotros" occidental, para afirmar su presencia como ciudadanos en país de sus ex-colonizadores. (Orlando 19) Este "tercer espacio" es un exilio de todas las culturas y lugares, se encuentra fuera de la familia (que impone la moral musulmana, la(s) lengua(s) norafricana(s)) y fuera de la sociedad francesa (que impone su racismo y su mentalidad colonialista) es el único, que brinda la posibilidad de articular identidades lejos de la intrusión de ambas culturas, que (pese a lo que diga Kristeva) no pueden conciliarse o coexistir armónicamente en una persona. Los protagonistas de Sebbar no pueden ingresar en la sociedad francesa de hoy, ni pueden (re)encontrar los signos de un origen perdido. (Vergano 224). Para Sebbar la escritura es, en efecto, una forma de reterritorialización. Michel Laronde cita en su artículo a Sebbar quien dice que su propósito es dar a los niños de inmigrantes (sus protagonistas) ? un territorio en la literatura.? (Laronde 88). Aplicando una textualidad híbrida (métissé, de acuerdo a Donnadey) Sebbar intenta la reterritorialización, pero no a un nivel nacionalista (como muchos otros lo proponen), sino creando ? comunidades imaginarias? (Anderson) que, a diferencia de los nacionalistas, no basan su ideología en un pasado mítico común. En una entrevista con Monique Hugon Sebbar dice que lo que pretende es escribir sobre la realidad francesa que no es del todo francesa y a la vez dar un espacio legítimo a los árabes en la literatura francesa. (37). Los territorios desde un lado de la frontera en el imaginario postcolonial ofrecen la seguridad de lo homogéneo, pero como Said comenta: ? can also become prisions and are often defended beyond reason or necessity? (365). Experimentar una identidad constantemente desafiada en la intersección de historias y memorias (individuales y colectivas), vivir simultáneamente en el interior y en el exterior requiere del/la que vive en una realidad fronteriza la revisión y reexaminación de esa identidad y tomar parte en una discusión continua que se articula en base de herencias históricas esporádicas y el presente heterogéneo. (Chambers 6) Las culturas híbridas, como lo señala García Canclini, son consecuencias de la des- y reestructuración económica, los nuevos patrones globales de producción, distribución, consumo y comunicación, además de los procesos de migración que producen nuevas configuraciones sociales. Obras citadas: Alarcón, Norma. "Conjugating Subjects: The Heteroglossia of Essence and Resistance.? Alfred Arteaga, ed..An Other Tongue: Nation and Ethnicity in the Linguistic Borderlands. Durham: 12 Duke University Press, 1994. Anzaldúa, Gloria. Borderlands/La frontera: The New Mestiza. San Francisco: Aunt Lute, 1987. - - -. ? How to Tame a Wild Tongue? Russel Ferguson, Martha Grever, Trinh Minh-ha, Cornell West, eds. Out There: Marginalization and Contemporary Cultures. Cambridge, MA: MIT Pr13ss, 1990: 205-214. Belghoul, Farida. Georgette! Paris: Barrault, 1986. Bhabha, Homi. The Location of Culture. London: Routlegde, 1994. Bonn, Charles. "Romans féminins de l'immigration d'origine maghébine." Nouvelles écritures féminines 118 (1994): 98-107. Braidotti, Rosi. Nomadic Subjects: Embodiment and Sexual Difference in Contemporary Feminist Theory. New York: Columbia University Press, 1994. Chambers, Iain. Migrancy, Culture, Identity. London: Routledge, 1994. Deleuze, Gille, Felix Guattari. Kafka, Towards a Minor Literature. Donnadey, Anne. ? Cultural Métissage and the Play of Identity in Leila Sebbar? s Sherazade Trilogy.? Elazar Barkan adn Marie-Denise Shelton, eds. Boders, Exiles, Diasporas. Stanford, CA: Stanford University Press, 1998: 257-273. García Canclini, Néstor. Culturas híbridas: Estrategias para entrar y salir de la modernidad. México: Grijalbo. 1989. Gómez-Peña, Guillermo. "Danger Zone: Cultural Relations between Chicanos and Mexicans at the End of the Century." The New World Border. San Francisco: City Lights, 1996: 169-178. - - -. ? Colonial Dreams/Postcolonial Nightmares.? The New World Border. San Francisco: City Lights, 1996: 80-110. Grossberg, Lawrence. ? The Space of Cultre, the Power of Space.? Iain Chambers, Lidia Curti, eds. The Post-Colonial Question. London: Routledge, 1996: 169-188. Hargreaves, Alec G. "Beur Fiction: Voices from the Immigrant Community in France." The French Review 62 4 (1989): 661-68. Hedley, Jane. ? Nepantilist Poetics: Narrative and Cultural Identity in the Mixed Language Writings of Irena Klepfisz and Gloria Anzaldúa? , en Narrative 4: 1 (1996): 36-54. Heidegger, Martin.(Heimkunft/An die Verwandten) [1944] Saggi sulla poesia di Hölderlin. Milano: Adelphi, 1981: 10-31. 13 Houari, Leïla. Zeida de nulle part. Paris: L'Harmattan, 1985. - - -. Quand tu verras la mer. Paris: L'Harmattan, 1988. Hugon, Monique. ? Leila Sebbar ou l? éxile productif.? (Interview.) Notre librairie 84 1986: 32-37. Jones, Elizabeth. ? Voices from the Gaps: Gloria Anzaldúa.? Internet: http://voices.cla.umn.edu/authors/gloriaanzaldua.html August 10, 2001. Kaminsky, Amy: Reading the Body-Politics: Feminist Criticism and Latin American Women Writers. Mineeapolis: Minnesota UP, 1993. Kristeva, Julia. Étrangers a nous-mêmes. Paris: Fayard, 1988. Laronde, Michel. ? Leila Sebbar et le roman ? croisé? : Histoire, memoire, identité.? CELFAN Review 7,6. 1988: 6-13. Maalouf, Amin. Les identités meurtrières. Paris: Grasset, 1998. Mehrez, Samia."Azouz Begag: Un di zafas di bidoufile (un des enfants de bidonville) or The Beur Writer: A Question of Territory, " in Exile and Nomadism, eds., Françoise Lionnet & Ronnie Scharfman, Yale French Studies, 1993. Orlando, Valérie. "A la recherche 'du devenir femme' dans le Troisième Espace de Culture: Shérazade, 17 ans, brune, frisée, les yeux verts de Leila Sebbar." Women in French Studies 2 (1994): 19-31. Paz, Octavio. El laberinto de la soledad. México: FCE, 1954. Rosaldo, Renato. ? Ideology, Place, and People without Culture.? Cultural Anthropology 3,1. 1988: 77-87. - - -. Cultura y verdad. Nueva propuesta de análisis social. México, Grijalbo/CNCA, 1991. Rosello, Mireille. "Georgette! de Farida Belghoul: Télévision et départenance." L'esprit créateur. XXXIII 2 (1993): 35-46. Rushdie, Salman. The Satanic Verses. New York: Viking, 1989. - - -. Imaginary Homelands. Essays and Criticism, 1981-1991. New York: Penguin USA, 1992. Said, Edward. ? Reflection on Exile.? Russel Ferguson, Martha Grever, Trinh Minh-ha, Cornell West, eds. Out There: Marginalization and Contemporary Cultures. Cambridge, MA: MIT Press, 1990: 357-63. Saldívar, José David. "Cultural Theory in the U.S.-Mexico Borderlands." Border Matters: Remapping American Cultural Studies. Berkeley: University of California Press, . Sandoval, Chela. Methodology of the Oppressed. Minneapolis: University of Minnesota Press, 2000. 14 Sayad, Abdelmalek. La Double Absence : des illusions de l'émigréé aux souffrances de l'immigré. Paris: Seuil, 1999. Sebbar, Leila. Le chinois vert de l'Afrique. Paris: Stock, 1984. Spivak, Gayatri Chakravorty. ? Postmarked Cacutta, India.? The Post-Colonial Critic. London: Routledge, 1990. Todorov, Tzvetan. La conquista de América. El problema del Otro. [1982] México: Siglo XXI, 1989. Trigo, Abril. "Migrancia: memoria: modernidá." Mabel Moraña, ed. Nuevas perspectivas desde/sobre América Latina. Santiago: Cuarto Propio, 2000: 273-291. Valdez, Luis. Zoot Suit and Other Plays. Houston: Arte Público P, 1992 Vergano, Elisabeth Lucie. Poétique, politique et culture dans les romans de Leila Sebbar. Dissertación. Ann Arbor: UMI, 1991. Villanueva, Tino. Shaking off the Dark. Tempe, AZ: Bilingual Review Press, 1984. Villarreal, José Antonio. Pocho. New York: Doubleday, 1959 15