159794 SERIE LA PANDILLA DE LA ARDILLA El misterio del timbre BEGOÑA ORO Nora, Aitor, Irene, Ismael y yo, Rasi, vivimos muchas aventuras. ¡Diviértete con nosotros! 4 EL MISTERIO DEL TIMBRE LA PANDILLA DE LA ARDILLA Primeros lectores La pandilla de la ardilla está viviendo en su colegio un misterio de lo más misterioso: alguien se dedica a tocar el timbre que anuncia el final de las clases ¡a todas horas! ¿Será un fantasma? ¿Un niño travieso? ¿Algún profesor con ganas de irse a casa? Begoña Oro Ilustraciones de Dani Montero Primera edición: mayo de 2015 Edición ejecutiva: Gabriel Brandariz Coordinación editorial: Paloma Muiña Coordinación gráfica: Lara Peces © del texto: Begoña Oro Pradera, 2015 © de las ilustraciones: Dani Montero, 2015 © Ediciones SM, 2015 Impresores, 2 Parque Empresarial Prado del Espino 28660 Boadilla del Monte (Madrid) www.grupo-sm.com ATENCIÓN AL CLIENTE Tel.: 902 121 323 / 912 080 403 e-mail: [email protected] Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra solo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra. A Nacho Martín y Beatriz Rubio, que abren puertas, tocan timbres, reparten sonrisas y bufandas y dan esplendor al colegio Montecanal. ¡Hola! Soy Elisa. Y os presento a... PANDILLA DE LA ARDI LLA LA NORA Nora es tímida. Le encantan la naturaleza, las cosas bonitas, los cuentos de su abuela y los libros. AITOR A Aitor también le gustan los libros, la música... y es un aventurero. A veces saca versos de dentro del sombrero. Y es que Aitor es nervioso y medio poeta. IRENE Irene es tan nerviosa como Aitor... o más. Irene es tan «más» que le encantan las sumas, el fútbol y la velocidad. Pero hasta una deportista veloz necesita calma de vez en cuando. ISMAEL Ismael es experto en mantener la calma, comer piruletas, pintar ¡y hacer amigos! ¡Ah! A veces (muchas veces) se olvida de cosas. RASI ¿Y yo? ¿Nadie lar va a hab de mí? Elisa hacía muchas cosas importantes en el colegio: Abría y cerraba las puertas. Se encargaba de que todo estuviera en orden. Arreglaba lo que se estropeaba. Y una de sus misiones más importantes era... ¡anunciar el recreo! 8 Bueno, y el fin del recreo. ¡Y el final de las clases! Y el principio. Para bien o para mal, Elisa era la que tocaba el timbre del colegio. 10 A veces, Elisa dejaba que fuera algún alumno el que lo hiciera sonar. –Dale, Nora –dijo Elisa–. Ya es hora de volver a clase. Nora apretó el interruptor y el timbre sonó por todo el colegio. Nora se sintió importante y feliz. Además, justo tocaba clase de Naturales. –¡Adiós, Rasi! –se despidieron Nora y el resto de miembros de la pandilla de la ardilla–. Te vemos otra vez a la salida de clase. ¡En cuanto suene el timbre! 12 Pero esa clase fue especialmente corta. –¿Ya? –preguntó Diego, el profesor, al oír el timbre que anunciaba el fin de las clases–. ¡Pero si aún es pronto! 14 Oír el timbre y recoger las cosas era todo uno. Ya estaban listos para salir cuando Elisa asomó la cabeza por la puerta. –¡Yo no he sido! –dijo a todo correr–. ¡El timbre ha sonado solo! ¡Voy a avisar al resto! ¡Adiós!