Boletín • N° 6 Rosellón, en 1974. Firmada la paz en el Tratado de Basilea, obtuvo el grado de capitán. Al iniciar la guerra contra la ocupación francesa, en 1808, ostentaba el grado de teniente coronel y fue destinado a defender la ciudad de Zaragoza, luego de ascenderle al grado de coronel. Allí combatió a órdenes del general Palafox, resultando herido de gravedad. Luego de levantado el sitio de Zaragoza fue destinado a Valencia a órdenes del general Black, reputado como gran estratega. Recibió el mando de una fuerza de 4000 efectivos, pero la suerte de las armas les fue adversa y fueron obligados a rendirse ante las fuerzas del general Succhet, el 9 de enero de 1812. Prisionero en la ciudad de Dijon, fue recluido en un castillo del que logró fugar y llegar a Cádiz en junio de 1824. En 1815, don Fernando VII premió a La Mar por sus servicios, ascendiéndole a brigadier y nombrándolo Caballero de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo cuya finalidad era la de recompensar y distinguir a oficiales y suboficiales por su constancia en el servicio y conducta intachable. En 1825, fue transferido a Lima con el cargo de Subinspector General del Virreinato y Gobernador de la Plaza de Callao. Luego de una larga y abnegada resistencia, carente de medios para soportar el asedio de las fuerzas patriotas, firmó la capitulación del Callao el 19 de septiembre de 1821, cuyos fuertes pasaron a poder de los patriotas. Renunció, entonces, al grado y las condecoraciones que el monarca le había otorgado y se incorporó a las fuerzas patriotas, con el grado de general de división, el 26 de octubre. Vicente Rocafuerte dijo de él: “Para los veteranos de la independencia, para los que aman a su patria; la sostienen con valor, y la reaniman con sus virtudes, el General La Mar es uno de los más grandes y afamados campeones de la Independencia, su alma noble, grande y generosa, se elevó a la región del heroísmo, y como celestial visión se penetró del eterno principio de que sin virtud no hay verdadera gloria”32. 32. ROCAFUERTE, Vicente, El Gran Mariscal La Mar, p.37. • 2013 81